Creencias Adventistas

Re: Creencias Adventistas

De que manera explican sus cosas porque veo que al menos las preguntas que llegan no son de tontos porque hemos leído una cantidad de información sea escritas en libros o en internet sobre la manera que hacen en sus templos porque vemos que muchos tiene el conocimiento que el adquirir una propiedad no es facíl porque tiene que ver si la persona se la vende o que si la persona es anciana no la quiere la dan pero en el caso de ustedes se a comprobado que le han quitado casas y propiedades a familias que es lo único que tiene.
 
Re: Creencias Adventistas

De que manera explican sus cosas porque veo que al menos las preguntas que llegan no son de tontos porque hemos leído una cantidad de información sea escritas en libros o en internet sobre la manera que hacen en sus templos porque vemos que muchos tiene el conocimiento que el adquirir una propiedad no es facíl porque tiene que ver si la persona se la vende o que si la persona es anciana no la quiere la dan pero en el caso de ustedes se a comprobado que le han quitado casas y propiedades a familias que es lo único que tiene.

¿Dónde?, ¿cuándo? Lom que si he visto es que personas adventistas han donado voluntariamente uno que otro inmuble, y sus hamiliares no-adventistas las quieren para sí, pero de allí a que se le niegue una casa a los hijos es MENTIRA.
 
Re: Creencias Adventistas

Exactamente, comparen y juzguen por ustedes mismos. Así como yo lo hice, Y VEAN CUAL FUE EL RESULTADO:

Un Testimonio Personal:

Desde mi niñez, siempre consideré a los adventistas como el "legítimo pueblo de Dios". Fui educado en lo que podríamos llamar el adventismo tradicional, con Ellen White jugando un papel estelar en nuestras creencias. Sus escritos nos daban esa sensación de seguridad de tener "la verdad presente", y de pertenecer a la "iglesia remanente", con un "claro panorama" de los "eventos finales" de la historia.

Esto nos hacía sentir en franca ventaja frente a las otras denominaciones religiosas. Éramos los escogidos, con la llamada "mensajera del Señor" señalándonos el camino a través de sus libros, los cuales, abarcando una amplia gama de temas, contribuyen a conformar lo que llaman el "mensaje adventista".

Nunca albergué la más mínima duda sobre el legado profético de la Sra. White ni sobre la doctrina de la iglesia en sentido general. Si en mis habituales estudios aparecía algo que no entendía, trataba de racionalizarlo y buscar alguna explicación al respecto, pero manteniendo una fe absoluta en lo que se me había enseñado, ya que en mi fuero interno no había la menor posibilidad de que estuviéramos equivocados. Para mí, esto era totalmente imposible.

Entonces sólo era cuestión de tiempo para que, llegado el momento, comenzaran a desencadenarse los angustiosos acontecimientos finales que todo adventista espera como preámbulo del final feliz que describe Ellen White en sus escritos. El mundo entero se uniría en contra nuestra para perseguirnos encarnizadamente, especialmente los católicos y el "protestantismo apóstata"; todos capitaneados por el sumo pontífice de Roma y los Estados Unidos; dejando a un lado así los intereses económicos, y las creencias religiosas tan opuestas que sustentan. Todo eso, con la finalidad de obligarnos a "guardar el domingo" como observación religiosa, en lugar del sábado, so pena de muerte.

Este escenario, considerado quizás improbable desde el punto de vista humano, tendría un cumplimiento segurísimo en mi opinión, ya que así lo establecía nuestra elaborada y detallada interpretación profética que, al encajar perfectamente con todas esas fechas que manejábamos, y además estar refrendada por nuestra "mensajera del Señor" en sus "testimonios", hacía que se descartara de plano toda equivocación al respecto. Pero el futuro me reservaba una gran sorpresa.

A finales de Dic./2001, buscando en Internet temas religiosos, encontré el site www.ellenwhite.org, en el cual se atacaba la legitimidad del don profético de la Sra. White, y la doctrina adventista en general. Mi primera reacción fue de indignación, y luego de consultar con algunos hermanos, decidimos que íbamos a enfrentar de manera conjunta a esos señores. Finalmente, la desidia, el desinterés, y el temor se hicieron presentes, y tuve que emprender el camino en forma solitaria.

Lo primero que hice fue verificar el tipo de personas que realizaban estos ataques. Allí encontré gentes con muchas raíces en la iglesia. Había adventistas de tercera y cuarta generación, así como laicos y ministros con muy buena reputación. Eso me preocupó, porque yo esperaba encontrar detrás de todo esto a los "temibles jesuitas católicos".

Algo muy grande tiene que haber ocurrido, razoné en mi interior, para que estos hermanos y pastores dieran un viraje tan drástico en contra del "pueblo de Dios" y su "profetisa".

Comencé a estudiar profundamente el material presentado en esa página, con el fin de refutarlo, pero realmente me encontré en un callejón sin salida. No encontraba explicación adecuada a todo lo que se planteaba allí. Mi confusión aumentaba cada día más. El fantasma de "la mentira White", comenzó a rondar en mi cabeza. Tuve acceso a los testimonios de ex-adventistas que relataban sus experiencias y exponían sus frustraciones y su desengaño al comprobar la falsedad de todo el asunto.

Un hermano y amigo me recomendó consultar la página del Centro White en español, (centrowhite.uapar.edu); para colmo de males, allí encontré la declaración oficial de esa institución en defensa de las acusaciones de plagio a la Sra. White, y la consideré inaceptable. Poco a poco, fueron encajando todas las piezas del rompecabezas, y compungido, alcancé a ver claramente el complejo diseño de todo el sistema de engaño. Lo imposible se hizo realidad ante mis propios ojos. Ellen White era un fraude, y la alta dirigencia siempre lo había sabido, aún desde el mismo inicio de la "obra adventista". Pero todo esto se había ocultado magistralmente a la hermandad, y los disidentes neutralizados; de tal manera que en mi caso, me enteré fortuitamente de ello, luego de casi 40 años.

Deprimido y amargado, consulté al Señor en oración, y repentinamente llegó a mi mente un pensamiento: "volver a la Biblia, sin opiniones preconcebidas". Entonces medité en lo que pasaría si comenzaba a re-estudiar las Escrituras, partiendo de cero; es decir, dejando de lado completamente todo lo que se me había enseñado. A partir de ahí, estoy viendo claramente el sentido llano y simple de la Palabra de Dios. He podido comprobar que no es cierto que un puñado de teólogos adventistas sean los únicos capaces de interpretarla correctamente, con el agravante de que nunca se ponen de acuerdo entre ellos mismos. La Biblia es un tesoro abierto para todo el mundo; basta con que dejemos al Señor hablarnos a través de ella, y no tratar de imponerle nuestra perspectiva.....

BILLY VICENTE
 
Re: Creencias Adventistas

La verdad que muchos de los adventistas en Estados Unidos han fallado haciendo perversiones horribles con personas inocentes pero en algunas partes del mundo se oyen noticias que han quitado algunos inmubles.
 
Re: Creencias Adventistas

La verdad que muchos de los adventistas en Estados Unidos han fallado haciendo perversiones horribles con personas inocentes pero en algunas partes del mundo se oyen noticias que han quitado algunos inmubles.

"Se oyen, se dicen". ¡Cómo les gusta un chisme, un rumor! No somos perfectos, pero revisa las cárceles de Estados Unidos y el mundo y dime, ¡cuántosd adventistas hay en comparación con la grancantidad de católicos?
 
Re: Creencias Adventistas

"Se oyen, se dicen". ¡Cómo les gusta un chisme, un rumor! No somos perfectos, pero revisa las cárceles de Estados Unidos y el mundo y dime, ¡cuántosd adventistas hay en comparación con la grancantidad de católicos?

Bueno, pero si acaso tu conoces el dato, pues !ofrecelo al foro!!!!!..
A ver, lo estamos esperando......

Y ya que estas en esa onda, tambien nos dices cuantos adventistas hay en comparacion con la secta "mita en aaron"....
Tambien, nos dices cuantos adventistas hay en comparacion con los "budistas"....
A ver, lo estamos esperando......
 
Re: Creencias Adventistas

Estuve investigando un poco sobre la religion adventista que en verdad desconocia, con mucho del material que me brindaron en el foro, aqui se me recomendo leer los escritos de ellen white, pero sin ofender a nadie, si me pasara tiempo leyendo escritos de todas las personas que dicen ser profetas me pasaria toda la vida haciendolo.


Por eso mi pregunta es en concreto que le hace creer que los escritos vienen de dios? que dicen que no este en los evangelios?, en mi opinion ahi esta todo lo que hay que saber, ¡que diferencia hay entre los escrioos de ella y unos que inventara yo diciendo que son inspirados por dios?

gracias
 
Re: Creencias Adventistas

Bueno, "sabonge", pues veamos lo que nos dicen, estos ex-seguidores de la farsante ellen white:

1) "Habiendo crecido en un hogar Adventista del Séptimo Día de segunda generación, y habiendo sido educado en escuelas adventistas por dieciséis años, había sido completamente adoctrinado en la vida y las enseñanzas de la profetisa adventista, Ellen G. White. Cuando mis maestros me presentaron sus visiones y me describieron las milagrosas circunstancias de su vida, quedé atemorizado. Al leer la historia de su vida, me convencí de que esta damita ciertamente debió haber sido profeta de Dios.

De lo que no me daba cuenta es de que sólo se me estaba diciendo parte de la historia. Trozos críticos de la historia de su vida habían sido "blanqueados" por seguidores bien intencionados. Los hechos históricos que estos bien intencionados seguidores habían decidido excluir de sus relatos históricos no encajaban bien en la imagen de ella que ellos estaban tratando de pintar como la profetisa de la iglesia remanente del fin del tiempo.

Mi ilusión de Ellen White comenzó a desteñirse y a desmoronarse a finales de 1966. Fue en este tiempo cuando inicié un estudio exhaustivo de Ellen White, comenzando desde los documentos más anteriores que se podían obtener. Después de 33 años en la iglesia Adventista del Séptimo Día, comencé a darme cuenta de que Ellen White tenía otra faceta, una faceta secreta, cuya existencia yo ignoraba por completo.

Por más de 156 años, este lado secreto ha sido mantenido oculto a los ojos del miembro de iglesia promedio.
El propósito de este libro es desprender, como si de pelar una naranja se tratara, el brillante exterior pintado por los historiadores adventistas y echarle un vistazo a la verdadera Ellen White - la Ellen White que sus amigos y asociados conocían. Usted se sorprenderá de ver a la Sra. White fijar fechas para el regreso de Cristo - ¡después del Gran Chasco de 1844! Se sentirá perturbado observando a la Sra. White en visión dejar estupefactos a otros adventistas con la terrible noticia de que la puerta de la salvación para los pecadores se había cerrado para siempre. Contemplará el escandaloso fanatismo que se apoderó de las primeras reuniones en las que la Sra. White profetizó. Verá cómo trataba realmente la Sra. White a la gente.

Se asombrará cuando se entere de cómo las porciones perjudiciales de los escritos de la Sra. White fueron eliminadas silenciosamente y los escritos vueltos a publicar como si aquellas porciones originales jamás hubiesen existido. Verá las citas antes y después de haber sido "blanqueadas", y averiguará quién las quitó, y por qué. Este libro le mostrará cómo los seguidores de Ellen White han estado muy ocupados a través de los años, corrigiendo, alterando, quitando, borrando, y puliendo sus escritos. Echaremos un vistazo a las falsas enseñanzas que desaparecieron de sus escritos, y veremos hasta libros enteros que ya no se publicaron más, y que desaparecieron, como por arte de magia, en las brumas de la historia - ¡como si nunca hubiesen existido!".

Dirk Anderson


2) "Fui Adventista del Séptimo Día de tercera generación. Ellen White era tan parte de mi adiestramiento infantil como la Biblia. Durante mis dieciséis años de educación en escuelas ASD, se me enseñó que los veinte millones de palabras de la Hermana White eran tan inspiradas como la misma Biblia. Se me enseñó que ella era una profeta legítima, tal como lo fueron los profetas bíblicos, y que, por lo tanto, nunca erró ni contradijo la Palabra de Dios. Yo apenas sabía dónde terminaba la Biblia y dónde comenzaban los escritos de Ellen White. Así que, como ministro ordenado de la Iglesia ASD durante diez años, prediqué fielmente los escritos de Ellen White a mis congregaciones. Les enseñé lo que a mí me habían enseñado, sin saber que gran parte de mi teología se basaba en los escritos de ella y era influida por ella.

Después de 32 años de membresía, descubrí que mi salvación no estaba atada a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Acepté la Biblia como la Palabra de Dios inspirada y todo suficiente (2 Timoteo 3:16-17). Al enfocarme en la Palabra de Dios por medio del estudio bíblico inductivo, comencé a ver inconsistencias en lo que había creído. Esas inconsistencias me hicieron preguntarme cómo podría un pastor continuar enseñando a conciencia lo que iba más allá y a menudo contradecía la Escritura. Así que puse fin a mi empleo con la denominación Adventista del Séptimo Día en Julio de 1990 renunciando voluntariamente y devolviendo mis credenciales de ministro. Poco después, solicité que mi membresía fuese eliminada.

Luego, mientras pastoreaba una iglesia cristiana no denominacional, pasé un año examinando las creencias que había sostenido, para establecer si se basaban en la Escritura o en Ellen White. La información que reuní durante esa investigación me obligó a escribir este libro. Crecí a través de ambas experiencias, y jamás he lamentado mi decisión de pasar más allá de los mitos del Adventismo del Séptimo Día".

SIDNEY CLEVELAND

3) "Casi desde la primera vez que oí hablar de ella, al principio de mi adolescencia, me convertí en devoto de Ellen G. White y de sus escritos. Aprendí a escribir a máquina copiando porciones de su libro Messages to Young People [Mensajes para los Jóvenes]. En la escuela superior y en la universidad, a menudo iba de habitación en habitación en el dormitorio, reuniendo citas de Ellen White de los otros estudiantes para usarlas en mi preparación para convertirme en ministro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Fue por aquellos días que concebí la idea de preparar un comentario Adventista compilando, de los escritos de Ellen White, todas las declaraciones pertenecientes a cada libro de la Biblia, cada doctrina, y cada personaje bíblico.

Al comienzo de mi vida ministerial (que se inició en la parte central de California a finales de la década de 1940), compilé dos tomos de biografías bíblicas del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento, incorporando en cada artículo las citas pertinentes encontradas en la obras de Ellen White. Algunas personas prominentes de la iglesia me estimularon en este proyecto, y pensaron que el Ellen G. White Estate podría publicar estas colecciones para que fueran usadas en el club de libros que la iglesia dirigía en esos días. Después de mucho tiempo y mucho intercambio de correspondencia, finalmente me di cuenta de que había sido ingenuo y que el White Estate no tenía la menor intención de colaborar de esta manera con nadie que pareciera estar invadiendo su terreno. De manera bien clara, me hicieron saber que ellos poseían esa "franquicia celestial" y que mirarían con malos ojos a cualquiera que pisara su territorio.

Sin embargo, y de manera independiente, publiqué dos tomos de biografías bíblicas, y un tercer tomo sobre Daniel y el Apocalipsis, todos basados en las obras de Ellen White. Pronto estos libros se vendieron en la mayoría de las librerías Adventistas, y fueron usados en muchas escuelas y universidades de Norte América.

Mientras trabajaba en mi proyectado tomo cuatro (las citas de Ellen White sobre doctrinas bíblicas), por casualidad tropecé con algo interesante en Orlando, Florida, donde yo era pastor de la Kress Memorial Church, llamada así en honor de los doctores Daniel H. y Lauretta E. Kress, renombrados pioneros de la obra médica Adventista. La familia Kress me regaló un antiguo libro de Ellen White, Sketches from the Life of Paul, publicado en 1883, pero que nunca fue reimpreso. Cuando un día le mostré este libro a un miembro de iglesia , me dijo que el problema del libro era que se parecía dermasiado a otro que no había sido escrito por Ellen White, y que nunca había sido reimpreso a causa de la estrecha similitud entre los dos. Siendo de mente inquisitiva, hice un estudio comparativo y descubrí que algunas de las críticas parecían ser ciertas.

Más tarde, después de que fui trasladado a California, los miembros de la familia de Wellesley P. Magan, también de pioneros Adventistas establecidos, fueron miembros de mi congregación. A la muerte de la viuda del padre de Wellesley, Lillian E. Magan, me regalaron un libro de la biblioteca de la familia Magan - Elisha the Prophet [Eliseo el Profeta], escrito por Alfred Edersheim. 3. En la hoja de guarda aparecía la firma de Ellen White. Para entonces, debido a mi constante uso de los libros de Ellen White, me había familiarizado tanto con ellos, que en seguida reconocí la similitud de palabra y de pensamiento al examinar el libro de Edersheim.

Aún más tarde, mientras estudiaba en la Universidad del Sur de California para obtener el grado de Doctor en Filosofía, me sobresalté al tropezarme con una obra de siete tomos sobre la historia del Antiguo Testamento, escrita por el mismo Edersheim. 4. Esta vez encontré, en los tomos uno al cuatro, que los títulos y subtítulos de capítulo, y los encabezados de página de Edersheim, eran paralelos, y muchas veces casi idénticos, a los títulos de capítulo del libro Patriarchs and Prophets (1890) [Patriarcas y Profetas] de Ellen White. Tiempo y estudio mostraron que obviamente la Sra. White había obtenido ayuda liberal de estas obras adicionales de Edersheim. Una investigación ulterior revelaría que Edersheim había escrito también una historia del Nuevo Testamento sobre la vida de Cristo, y que en ésta también había similitudes adicionales con el libro Desire of Ages [El Deseado de Todas las Gentes] de la Sra. White.

Aunque perturbadores, estos hallazgos no eran demasiado inquietantes para mí en ese tiempo, porque el White Estate en Washington siempre parecía tener excusas para los "préstamos" de Ellen White. No fue sino hasta que Bruce Weaver, un joven seminarista en la Universidad Adventista de Andrews en Michigan, descubrió un archivo sin marcar conteniendo mi trabajo y mis comparaciones (material duplicado guardado en la biblioteca del White Estate) que las cosas comenzaron a adquirir el aspecto de un cuento de misterio. El White Estate acusó a Bruce de robar el material de la biblioteca, aunque él sólo lo había copiado y devuelto. Al final, Bruce fue despedido del seminario y del ministerio, pero no antes de que hubiese tomado parte significativa en el drama.

Lo que Bruce encontró en el archivo no fue sólo mi material y las críticas de él, sino también copias de algunas cartas internas del White Estate, escritas por Robert W. Olson y Arthur L. White, que revelaban la preocupación de estos hombres de la oficina de Washington acerca del descubrimiento, por parte de Bruce, del material que yo les había estado enviando como evidencia de que Ellen White había copiado material ajeno. Ambos hombres habían puesto por escrito sus sugerencias para manejar el problema Rea. Años subsiguientes revelaron que ellos habían adoptado el método de Arthur White, que era, en esencia, aplicar tácticas dilatorias y tanta presión y lenguaje de doble sentido como fuera posible.

Olson se dedicó a hacer una campaña verbal en un máximo esfuerzo por suavizar el impacto que mis hallazgos estaban comenzando a tener, porque ya personas de varias regiones de Norte América estaban solicitando la evidencia encontrada durante mis investigaciones. En una presentación que hizo Olson una tarde de enero de 1979 en la Universidad de Loma Linda en California, alguien en el auditorio preguntó acerca de los préstamos, por parte de Ellen White, de fuentes publicadas. La respuesta de Olson fue en el sentido de que nada de eso era verdad, que todos sus escritos eran de ella. Luego, añadió que había algún ministro en California del Sur haciendo olas con alegatos acerca de que ella había tomado material prestado para su libro clave The Desire of Ages, pero que ninguno de esos rumores era cierto.

Decir que me quedé estupefacto después de la reunión es poco. En ese mismo momento, en mi archivo ya tenía varias cartas de ese mismo Olson animándome a continuar enviándole mis comparaciones entre Ellen White y sus contemporáneos. Además, había hablado conmigo personalmente cuando estuvo en California hacía sólo poco tiempo, y me había arrancado la promesa de que no publicaría ningún informe sobre mi trabajo sino hasta que él y el personal directivo del White Estate hubieran tenido tiempo adicional para examinar el material. Yo había accedido a su solicitud, y el hecho del acuerdo había sido registrado en el memorándum interno que él escribió después y que yo tenía en mis archivos.

Así que ahora yo sabía que Robert Olson, o tenía muy mala memoria, o estaba diciendo una mentira blanca. En cualquier caso, era obvio que los del White Estate sabían mucho más de lo que decían.
Los archivos del White Estate se habían referido a un libro escrito por William Hanna, llamado The Life of Christ. 6. Antes de veinticuatro horas después de la reunión de Loma Linda, ya yo había obtenido una copia del libro de Hanna. Desde ese momento en adelante, he aprendido más de lo que jamás quise saber.

Spectrum, un diario publicado independientemente por la Association of Adventist Forums, hizo un relato de los antecedentes de una reunión de comité de Enero de 1980 en Glendale, California. Esta reunión había sido convocada por Neal C. Wilson, presidente de la Conferencia General, a mis instancias de que se considerara el alcance de los hallazgos en relación con la deuda literaria de Ellen White. Dieciocho de los representantes de la iglesia nombrados declararon que lo que mostraba mi investigación era de proporciones alarmantes, pero que el estudio debería continuar con ayuda adicional. 7.
De manera similar, Spectrum informó más tarde de mi expulsión de la iglesia 8 (después de treinta y seis años de servicios) principalmente a causa del revelador artículo iniciado y escrito por el editor religioso John Dart y publicado en Los Angeles Times. 9. Ni uno sólo de los oficiales que me expulsaron había hablado nunca con Dart. Ni uno sólo había visto la investigación en la que se basaba el artículo. El centro mismo de la disputa no era importante para los oficiales de la iglesia. Sólo era necesario que alguien fuera castigado para que otros permanecieran alineados y para que tanto Ellen White como la Iglesia Adventista del Séptimo Día pudieran aparecer inocentes de cualquier delito.

En vista de lo que he observado, experimentado, y aprendido, me ha parecido correcto y necesario registrar para las generaciones futuras los hallazgos de mi estudio actual. Estas generaciones venideras querrán saber la verdad acerca de lo que se ha desenterrado del pasado. Será parte de lo que tendrán en cuenta en su experiencia religiosa y en sus juicios.
A pesar de muchos y buenos consejos en contrario, he elegido el título THE WHITE LIE para mi libro. No aplico el término por separado y solamente a Ellen G. White. Cuando nosotros (cualquiera de nosotros) damos nuestro consentimiento o apoyo para perpetuar un mito (en todo o en parte) acerca de cualquier persona o cosa, nosotros mismos somos, por lo tanto, parte de una mentira blanca. El mensaje de este libro es el de ayudar a revelarnos a todos nosotros que a menudo sostenemos una leyenda.

WALTER REA
 
Re: Creencias Adventistas

Estuve investigando un poco sobre la religion adventista que en verdad desconocia, con mucho del material que me brindaron en el foro, aqui se me recomendo leer los escritos de ellen white, pero sin ofender a nadie, si me pasara tiempo leyendo escritos de todas las personas que dicen ser profetas me pasaria toda la vida haciendolo.


Por eso mi pregunta es en concreto que le hace creer que los escritos vienen de dios? que dicen que no este en los evangelios?, en mi opinion ahi esta todo lo que hay que saber, ¡que diferencia hay entre los escrioos de ella y unos que inventara yo diciendo que son inspirados por dios?

gracias

El hecho es que no lo has hecho, por lo que te desautoriza juzgarlos debidamente. Ese es el gran problema de los detractores de Elena White. Y si leen algo, son extractos fuera de contexto, utilizados por las páginas antiadventista.

"Examinadlo TODO, retende lo bueno", acuérdate.
 
Re: Creencias Adventistas

El hecho es que no lo has hecho, por lo que te desautoriza juzgarlos debidamente. Ese es el gran problema de los detractores de Elena White. Y si leen algo, son extractos fuera de contexto, utilizados por las páginas antiadventista. "Examinadlo TODO, retende lo bueno", acuérdate.

BUENO, PERO TU ERES DESMENTIDO, POR LA EXPERIENCIA QUE NOS NARRAN ESTOS EX-ADVENTISTAS:

1) "Habiendo crecido en un hogar Adventista del Séptimo Día de segunda generación, y habiendo sido educado en escuelas adventistas por dieciséis años, había sido completamente adoctrinado en la vida y las enseñanzas de la profetisa adventista, Ellen G. White. Cuando mis maestros me presentaron sus visiones y me describieron las milagrosas circunstancias de su vida, quedé atemorizado. Al leer la historia de su vida, me convencí de que esta damita ciertamente debió haber sido profeta de Dios.

De lo que no me daba cuenta es de que sólo se me estaba diciendo parte de la historia. Trozos críticos de la historia de su vida habían sido "blanqueados" por seguidores bien intencionados. Los hechos históricos que estos bien intencionados seguidores habían decidido excluir de sus relatos históricos no encajaban bien en la imagen de ella que ellos estaban tratando de pintar como la profetisa de la iglesia remanente del fin del tiempo.

Mi ilusión de Ellen White comenzó a desteñirse y a desmoronarse a finales de 1966. Fue en este tiempo cuando inicié un estudio exhaustivo de Ellen White, comenzando desde los documentos más anteriores que se podían obtener. Después de 33 años en la iglesia Adventista del Séptimo Día, comencé a darme cuenta de que Ellen White tenía otra faceta, una faceta secreta, cuya existencia yo ignoraba por completo.

Por más de 156 años, este lado secreto ha sido mantenido oculto a los ojos del miembro de iglesia promedio.
El propósito de este libro es desprender, como si de pelar una naranja se tratara, el brillante exterior pintado por los historiadores adventistas y echarle un vistazo a la verdadera Ellen White - la Ellen White que sus amigos y asociados conocían. Usted se sorprenderá de ver a la Sra. White fijar fechas para el regreso de Cristo - ¡después del Gran Chasco de 1844! Se sentirá perturbado observando a la Sra. White en visión dejar estupefactos a otros adventistas con la terrible noticia de que la puerta de la salvación para los pecadores se había cerrado para siempre. Contemplará el escandaloso fanatismo que se apoderó de las primeras reuniones en las que la Sra. White profetizó. Verá cómo trataba realmente la Sra. White a la gente.

Se asombrará cuando se entere de cómo las porciones perjudiciales de los escritos de la Sra. White fueron eliminadas silenciosamente y los escritos vueltos a publicar como si aquellas porciones originales jamás hubiesen existido. Verá las citas antes y después de haber sido "blanqueadas", y averiguará quién las quitó, y por qué. Este libro le mostrará cómo los seguidores de Ellen White han estado muy ocupados a través de los años, corrigiendo, alterando, quitando, borrando, y puliendo sus escritos. Echaremos un vistazo a las falsas enseñanzas que desaparecieron de sus escritos, y veremos hasta libros enteros que ya no se publicaron más, y que desaparecieron, como por arte de magia, en las brumas de la historia - ¡como si nunca hubiesen existido!".

Dirk Anderson


2) "Fui Adventista del Séptimo Día de tercera generación. Ellen White era tan parte de mi adiestramiento infantil como la Biblia. Durante mis dieciséis años de educación en escuelas ASD, se me enseñó que los veinte millones de palabras de la Hermana White eran tan inspiradas como la misma Biblia. Se me enseñó que ella era una profeta legítima, tal como lo fueron los profetas bíblicos, y que, por lo tanto, nunca erró ni contradijo la Palabra de Dios. Yo apenas sabía dónde terminaba la Biblia y dónde comenzaban los escritos de Ellen White. Así que, como ministro ordenado de la Iglesia ASD durante diez años, prediqué fielmente los escritos de Ellen White a mis congregaciones. Les enseñé lo que a mí me habían enseñado, sin saber que gran parte de mi teología se basaba en los escritos de ella y era influida por ella.

Después de 32 años de membresía, descubrí que mi salvación no estaba atada a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Acepté la Biblia como la Palabra de Dios inspirada y todo suficiente (2 Timoteo 3:16-17). Al enfocarme en la Palabra de Dios por medio del estudio bíblico inductivo, comencé a ver inconsistencias en lo que había creído. Esas inconsistencias me hicieron preguntarme cómo podría un pastor continuar enseñando a conciencia lo que iba más allá y a menudo contradecía la Escritura. Así que puse fin a mi empleo con la denominación Adventista del Séptimo Día en Julio de 1990 renunciando voluntariamente y devolviendo mis credenciales de ministro. Poco después, solicité que mi membresía fuese eliminada.

Luego, mientras pastoreaba una iglesia cristiana no denominacional, pasé un año examinando las creencias que había sostenido, para establecer si se basaban en la Escritura o en Ellen White. La información que reuní durante esa investigación me obligó a escribir este libro. Crecí a través de ambas experiencias, y jamás he lamentado mi decisión de pasar más allá de los mitos del Adventismo del Séptimo Día".

SIDNEY CLEVELAND

3) "Casi desde la primera vez que oí hablar de ella, al principio de mi adolescencia, me convertí en devoto de Ellen G. White y de sus escritos. Aprendí a escribir a máquina copiando porciones de su libro Messages to Young People [Mensajes para los Jóvenes]. En la escuela superior y en la universidad, a menudo iba de habitación en habitación en el dormitorio, reuniendo citas de Ellen White de los otros estudiantes para usarlas en mi preparación para convertirme en ministro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Fue por aquellos días que concebí la idea de preparar un comentario Adventista compilando, de los escritos de Ellen White, todas las declaraciones pertenecientes a cada libro de la Biblia, cada doctrina, y cada personaje bíblico.

Al comienzo de mi vida ministerial (que se inició en la parte central de California a finales de la década de 1940), compilé dos tomos de biografías bíblicas del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento, incorporando en cada artículo las citas pertinentes encontradas en la obras de Ellen White. Algunas personas prominentes de la iglesia me estimularon en este proyecto, y pensaron que el Ellen G. White Estate podría publicar estas colecciones para que fueran usadas en el club de libros que la iglesia dirigía en esos días. Después de mucho tiempo y mucho intercambio de correspondencia, finalmente me di cuenta de que había sido ingenuo y que el White Estate no tenía la menor intención de colaborar de esta manera con nadie que pareciera estar invadiendo su terreno. De manera bien clara, me hicieron saber que ellos poseían esa "franquicia celestial" y que mirarían con malos ojos a cualquiera que pisara su territorio.

Sin embargo, y de manera independiente, publiqué dos tomos de biografías bíblicas, y un tercer tomo sobre Daniel y el Apocalipsis, todos basados en las obras de Ellen White. Pronto estos libros se vendieron en la mayoría de las librerías Adventistas, y fueron usados en muchas escuelas y universidades de Norte América.

Mientras trabajaba en mi proyectado tomo cuatro (las citas de Ellen White sobre doctrinas bíblicas), por casualidad tropecé con algo interesante en Orlando, Florida, donde yo era pastor de la Kress Memorial Church, llamada así en honor de los doctores Daniel H. y Lauretta E. Kress, renombrados pioneros de la obra médica Adventista. La familia Kress me regaló un antiguo libro de Ellen White, Sketches from the Life of Paul, publicado en 1883, pero que nunca fue reimpreso. Cuando un día le mostré este libro a un miembro de iglesia , me dijo que el problema del libro era que se parecía dermasiado a otro que no había sido escrito por Ellen White, y que nunca había sido reimpreso a causa de la estrecha similitud entre los dos. Siendo de mente inquisitiva, hice un estudio comparativo y descubrí que algunas de las críticas parecían ser ciertas.

Más tarde, después de que fui trasladado a California, los miembros de la familia de Wellesley P. Magan, también de pioneros Adventistas establecidos, fueron miembros de mi congregación. A la muerte de la viuda del padre de Wellesley, Lillian E. Magan, me regalaron un libro de la biblioteca de la familia Magan - Elisha the Prophet [Eliseo el Profeta], escrito por Alfred Edersheim. 3. En la hoja de guarda aparecía la firma de Ellen White. Para entonces, debido a mi constante uso de los libros de Ellen White, me había familiarizado tanto con ellos, que en seguida reconocí la similitud de palabra y de pensamiento al examinar el libro de Edersheim.

Aún más tarde, mientras estudiaba en la Universidad del Sur de California para obtener el grado de Doctor en Filosofía, me sobresalté al tropezarme con una obra de siete tomos sobre la historia del Antiguo Testamento, escrita por el mismo Edersheim. 4. Esta vez encontré, en los tomos uno al cuatro, que los títulos y subtítulos de capítulo, y los encabezados de página de Edersheim, eran paralelos, y muchas veces casi idénticos, a los títulos de capítulo del libro Patriarchs and Prophets (1890) [Patriarcas y Profetas] de Ellen White. Tiempo y estudio mostraron que obviamente la Sra. White había obtenido ayuda liberal de estas obras adicionales de Edersheim. Una investigación ulterior revelaría que Edersheim había escrito también una historia del Nuevo Testamento sobre la vida de Cristo, y que en ésta también había similitudes adicionales con el libro Desire of Ages [El Deseado de Todas las Gentes] de la Sra. White.

Aunque perturbadores, estos hallazgos no eran demasiado inquietantes para mí en ese tiempo, porque el White Estate en Washington siempre parecía tener excusas para los "préstamos" de Ellen White. No fue sino hasta que Bruce Weaver, un joven seminarista en la Universidad Adventista de Andrews en Michigan, descubrió un archivo sin marcar conteniendo mi trabajo y mis comparaciones (material duplicado guardado en la biblioteca del White Estate) que las cosas comenzaron a adquirir el aspecto de un cuento de misterio. El White Estate acusó a Bruce de robar el material de la biblioteca, aunque él sólo lo había copiado y devuelto. Al final, Bruce fue despedido del seminario y del ministerio, pero no antes de que hubiese tomado parte significativa en el drama.

Lo que Bruce encontró en el archivo no fue sólo mi material y las críticas de él, sino también copias de algunas cartas internas del White Estate, escritas por Robert W. Olson y Arthur L. White, que revelaban la preocupación de estos hombres de la oficina de Washington acerca del descubrimiento, por parte de Bruce, del material que yo les había estado enviando como evidencia de que Ellen White había copiado material ajeno. Ambos hombres habían puesto por escrito sus sugerencias para manejar el problema Rea. Años subsiguientes revelaron que ellos habían adoptado el método de Arthur White, que era, en esencia, aplicar tácticas dilatorias y tanta presión y lenguaje de doble sentido como fuera posible.

Olson se dedicó a hacer una campaña verbal en un máximo esfuerzo por suavizar el impacto que mis hallazgos estaban comenzando a tener, porque ya personas de varias regiones de Norte América estaban solicitando la evidencia encontrada durante mis investigaciones. En una presentación que hizo Olson una tarde de enero de 1979 en la Universidad de Loma Linda en California, alguien en el auditorio preguntó acerca de los préstamos, por parte de Ellen White, de fuentes publicadas. La respuesta de Olson fue en el sentido de que nada de eso era verdad, que todos sus escritos eran de ella. Luego, añadió que había algún ministro en California del Sur haciendo olas con alegatos acerca de que ella había tomado material prestado para su libro clave The Desire of Ages, pero que ninguno de esos rumores era cierto.

Decir que me quedé estupefacto después de la reunión es poco. En ese mismo momento, en mi archivo ya tenía varias cartas de ese mismo Olson animándome a continuar enviándole mis comparaciones entre Ellen White y sus contemporáneos. Además, había hablado conmigo personalmente cuando estuvo en California hacía sólo poco tiempo, y me había arrancado la promesa de que no publicaría ningún informe sobre mi trabajo sino hasta que él y el personal directivo del White Estate hubieran tenido tiempo adicional para examinar el material. Yo había accedido a su solicitud, y el hecho del acuerdo había sido registrado en el memorándum interno que él escribió después y que yo tenía en mis archivos.

Así que ahora yo sabía que Robert Olson, o tenía muy mala memoria, o estaba diciendo una mentira blanca. En cualquier caso, era obvio que los del White Estate sabían mucho más de lo que decían.
Los archivos del White Estate se habían referido a un libro escrito por William Hanna, llamado The Life of Christ. 6. Antes de veinticuatro horas después de la reunión de Loma Linda, ya yo había obtenido una copia del libro de Hanna. Desde ese momento en adelante, he aprendido más de lo que jamás quise saber.

Spectrum, un diario publicado independientemente por la Association of Adventist Forums, hizo un relato de los antecedentes de una reunión de comité de Enero de 1980 en Glendale, California. Esta reunión había sido convocada por Neal C. Wilson, presidente de la Conferencia General, a mis instancias de que se considerara el alcance de los hallazgos en relación con la deuda literaria de Ellen White. Dieciocho de los representantes de la iglesia nombrados declararon que lo que mostraba mi investigación era de proporciones alarmantes, pero que el estudio debería continuar con ayuda adicional. 7.
De manera similar, Spectrum informó más tarde de mi expulsión de la iglesia 8 (después de treinta y seis años de servicios) principalmente a causa del revelador artículo iniciado y escrito por el editor religioso John Dart y publicado en Los Angeles Times. 9. Ni uno sólo de los oficiales que me expulsaron había hablado nunca con Dart. Ni uno sólo había visto la investigación en la que se basaba el artículo. El centro mismo de la disputa no era importante para los oficiales de la iglesia. Sólo era necesario que alguien fuera castigado para que otros permanecieran alineados y para que tanto Ellen White como la Iglesia Adventista del Séptimo Día pudieran aparecer inocentes de cualquier delito.

En vista de lo que he observado, experimentado, y aprendido, me ha parecido correcto y necesario registrar para las generaciones futuras los hallazgos de mi estudio actual. Estas generaciones venideras querrán saber la verdad acerca de lo que se ha desenterrado del pasado. Será parte de lo que tendrán en cuenta en su experiencia religiosa y en sus juicios.
A pesar de muchos y buenos consejos en contrario, he elegido el título THE WHITE LIE para mi libro. No aplico el término por separado y solamente a Ellen G. White. Cuando nosotros (cualquiera de nosotros) damos nuestro consentimiento o apoyo para perpetuar un mito (en todo o en parte) acerca de cualquier persona o cosa, nosotros mismos somos, por lo tanto, parte de una mentira blanca. El mensaje de este libro es el de ayudar a revelarnos a todos nosotros que a menudo sostenemos una leyenda.

WALTER REA
 
Re: Creencias Adventistas

Gtrabes:

Te noto sincero en tus escritos. Por eso te invito a investigar ambos bandos.
Puedes ver que algunos de los ex adventistas son unos amargados, que dejaron la IASD por diversas razones. Al leeer sus testimonios vemos que muchos son plagios de otros que tomaron el mismo camino.

Uno de los primeros disidentes de la IASD fue Canright. Era muy altanero, aunque muy inteligente y apto. Pero requería reconocimiento y aplauso. La hermana White lo hospedó ensu casa y lo trató comoa un hijo. Le envió varias cartas amonestándolo, pero alf in decidió dejar la iglesia. Escribió un libro: Por qué dejé el Adventismo. Puedes extrañarte que este libro ha servido para que de él se copien muchísimos de los que dejan la iglesia.

Reconozco y hasta he conocido líderes que han dejado la iglesia porque han analizado sus creencias y llegado a la conclusión que algunos son extrañas. Pero por cada uno de ellos, hay cientos de adventistas que han examinado cada doctrina y han permanecido unidos a la iglesia. En mi caso, llevo más de medio siglo en la iglesia y he revisado, comparado y analizado cada doctrina, al punto que prácticamente las sé de memoria. Cierto que alprincipio algunos temas me parecían oscuros, pero al progresar en el análisis, he visto que todo es verdad.

Hay doctrinas, como la del Santuario y los 2,300 días que realmente son difíciles, pero si se estudian concienzudamente, se tornarán fáciles.

Quiero felicitar a Andrés. Aunque no comulgo con todas sus palabras, ha contribuido presentando en este epígrafe todas las doctrinas adventistas con sus textos que las resepaldan. ¿Por qué no se analizan objetivamente cada una de ellas? Verán que, aunque no esté de acuetrdo con algunas, la verdad es que la mayoría son muy evangélicas y bíblicas.

En fin, amigo, sé sincero y busca la verdad.

Dios te bendiga.
 
Re: Creencias Adventistas

Gtrabes: Te noto sincero en tus escritos. Por eso te invito a investigar ambos bandos.
Puedes ver que algunos de los ex adventistas son unos amargados, que dejaron la IASD por diversas razones. Al leeer sus testimonios vemos que muchos son plagios de otros que tomaron el mismo camino.
Reconozco y hasta he conocido líderes que han dejado la iglesia porque han analizado sus creencias y llegado a la conclusión que algunos son extrañas. Pero por cada uno de ellos, hay cientos de adventistas que han examinado cada doctrina y han permanecido unidos a la iglesia. En mi caso, llevo más de medio siglo en la iglesia y he revisado, comparado y analizado cada doctrina, al punto que prácticamente las sé de memoria. Cierto que alprincipio algunos temas me parecían oscuros, pero al progresar en el análisis, he visto que todo es verdad. Quiero felicitar a Andrés. Aunque no comulgo con todas sus palabras, ha contribuido presentando en este epígrafe todas las doctrinas adventistas con sus textos que las resepaldan. ¿Por qué no se analizan objetivamente cada una de ellas? Verán que, aunque no esté de acuetrdo con algunas, la verdad es que la mayoría son muy evangélicas y bíblicas. En fin, amigo, sé sincero y busca la verdad.

HOLA A TODOS.

Bueno, aqui tenemos al inefable sectario cajiga, tratando de "dorar" la pildora de su secta adventista, y pintandose como una "ovejita" mansa....

Y VEAMOS AQUI UNA MUESTRA, DE QUIEN ES REALMENTE "cajiga":

Estimados hermanos, todo lo mencionado en este epigrafe, comenzo cuando cajiga escribio:

"Hoy recibí una nota por e-mail, de alguien que, leyendo el foro, ha aprendido lo que realmente es la Iglesia Adventista y pronto se bautizará".

Entonces yo, conociendo bien el proceder de los sectareos del adventismo, ya que provengo de las mismas entrañas de esa secta, emplace publicamente a cajiga, para que presentara las pruebas de su afirmacion:

"Bueno, cajiga, no me creo ni una palabrita de eso que usted dice. Presente aqui las pruebas de que esa supuesta persona, simplemente con leer aquí en el foro, decidió unirse al adventismo; y si compruebo que es así, me comprometo a retirarme del foro y no atacar más a la secta adventista"....

Ahora bien, esto desencadeno una serie de contradicciones, en los mensajes de cajiga, las cuales hasta el momento, ese personaje ha rehusado aclarar.
Y por eso he decidido continuar insistiendo en el tema, hasta que se aclare la cuestion.....

Por lo que se ha visto hasta ahora, al parecer yo tengo la razon, y cajiga le hablo una mentirilla total a todo el foro, la cual ha intentado ocultar diciendo otras mentirillas......Y eso ha agravado la cuestion.......

Pero, es a cajiga, a quien le corresponde aclarar el asunto....Espero que lo haga...........

BUENO, cajiga, LO CIERTO ES QUE TENEMOS EN ESTO MUCHO TIEMPO (CREO QUE SON ALREDEDOR DE 2 AÑOS), Y HASTA EL MOMENTO TÙ NO HAS PRESENTADO LAS PRUEBAS QUE TE HE PEDIDO, NI HAS RESPONDIDO REALMENTE A MIS EMPLAZAMIENTOS....TAN SOLO, TÙ TE HAS LIMITADO A HACER LO MISMO QUE AHORA HICISTE, PONER UNOS MENSAJITOS CON EVASIVAS DEL ASUNTO....¿ES ESO RESPONDER, EN VERDAD????...¿ES QUE TÙ TE CREES QUE LOS DEMAS FORISTAS, SOMOS TONTOS?????......

AQUI TODOS HAN VISTO CLARAMENTE, QUE DIJISTE UNA MENTIRILLA TRAS OTRA....Y AUNQUE TE DUELA, YO SEGUIRE INSISTIENDO SOBRE ESTE ASUNTO, HASTA QUE RECONOZCA PUBLICAMENTE, QUE INTENTASTE ENGAÑARNOS CON LA AFIRMACION DE MARRAS QUE TU HICISTE, EN ARAS DE TU ESTIMADA SECTA DEL adventismo........


Originalmente enviado por bvicente18
Estimados hermanos, repasemos de nuevo algunos de los mensajes de cajiga:

Originalmente enviado por Cajiga
"Hoy recibí una nota por e-mail, de alguien que, leyendo el foro, ha aprendido lo que realmente es la Iglesia Adventista y pronto se bautizará".

Originalmente enviado por Cajiga
Lo que dije fue por un email que recibí en el correo de mi casa. Y no es mentira. Como la nota la borré por un problema que tengo con los emails de mi correo, espero que el hermano que me escribió lo haga público en este foro o que me vuelva a escribir autorizándome a publicarlo.

Originalmente enviado por Cajiga
Calma, Billy Vicente, ese amigo es asiduo lector del foro y ya responderá para que usted cumpla su promesa..

Originalmente enviado por Cajiga
Lo que escribí es totalmente verdad. Este hermano me escribió a mi otra dirección y le he hecho llamados a que vuelva a escribirme, ya que borré su email. El problema es que esa otra dirección electrónica es en mi casa de Cidra, Puerto Rico y yo voy allá sólo los fines de semana. Encuentro siempre más de 200 emails. Luego de leer algunos, los borro en bloque. Aquel del hermano que me escribió que lee el foro y mis participaciones le ayudaron a tomar su decisión de unirse a la iglesia adventista, lo borré junto con el resto. Para mayor mal, mi comp. de allá tiene la impresora dañada y no pude copiarlo. Tampoco copié su dirección.

Originalmente enviado por Cajiga
Yo no sé mucho de computadoras. La verdad es que si hubiera sabido, aunque fuera someramente, que esto iba a ser así, hubiera dado un forward antes de borrarlo. En el foro donde este hermano escriibió yo he hecho llamados, pero como no aprendí el nombre, no puedo dirigirme a él directamente. Como él me dijo que leía este foro, le pedí por el foro que me escribiera a mi dirección en San Juan, porque aquí puedo usar mi impresora.

Originalmente enviado por Cajiga
Vicente pone varias de las veces que escribí sobre el hermano que me dio su confesión. Es cierto que originalmente recibí un email de él a mi correo en Cidra, Puerto Rico. Mi llamado fue en el otro foro, aunque él me dijo que fue en Foro Cristiano que leyó mis participaciones, las que lo movieron a tomar la dcicisión de unirse a la Iglesia Adventista. Es cierto que en la pasada participación dije que el hermano me escribió al foro, pero fue a mi correo.

Originalmente enviado por Cajiga
Yo participo en varios foros moderados por adventistas. Sé que en uno hice ese llamado, pero ahora no lo recuerdo.

ENTONCES, HERMANOS, EN ESTAS CONTRADICTORIAS DECLARACIONES, cajiga asegura que le hizo "multiples llamados" a esa supuesta persona, en los foros adventistas, sin embargo, cuando yo le pedì que me dijera los nombres de esos foros, para comprobarlo, luego cajiga dijo "QUE NO RECORDABA LOS NOMBRES DE ESOS FOROS"; LO CUAL RESULTA EXTRAÑO, PORQUE cajiga SÌ RECORDABA QUE SUPUESTAMENTE HIZO DICHOS "LLAMADOS" EN ESOS FOROS ADVENTISTAS, PERO EN POCOS DÌAS "YA HABIA OLVIDADO LOS NOMBRES DE ESOS FOROS".

DE TODAS FORMAS, YO DECIDI DARLE A cajiga EL BENEFICIO DE LA DUDA, Y COMO CONOZCO LOS FOROS ADVENTISTAS DONDE ÈL PARTICIPA, ENTONCES INVESTIGUÈ LOS MENSAJES PUBLICADOS EN ELLOS, Y PARA MI SORPRESA, NO ENCONTRÈ RASTRO ALGUNO DE LOS SUPUESTOS "LLAMADOS" QUE HABÌA HECHO cajiga; INCLUSO, EN ESOS DÌAS cajiga NO HABIA PARTICIPADO EN ESOS FOROS........

POR LO TANTO, ERA MUY EVIDENTE, QUE cajiga HABÌA DICHO OTRA MENTIRILLA MAS, RESPECTO DE ESTE ASUNTO.

Cita:
Originalmente enviado por bvicente18
BUENO, "cajiga", TÙ DEJASTE DE RESPONDER, POR UNA RAZON MUY SIMPLE:
MIENTRAS MAS TRATABAS DE "EXPLICAR", MAS TE ENREDABAS EN TU PROPIA TRETA......LOS MENSAJES TUYOS ESTAN AHI, Y SON EL MEJOR TESTIGO DE LO QUE DIGO......TODOS PUDIERON VER CLARAMENTE, LA FORMA EN QUE TE CONTRADECIAS, CADA VEZ QUE TRATABAS DE "EXPLICAR" ALGO....
 
Re: Creencias Adventistas

Billy:

¿Cree usted quel os foristas son tontos? ¿Cuántas veces y en cuantos posts ha puesto usted ese escrito? Usted, como Adolfo Hitler, piensa que por repetir y repetir una mentira esta se va a convertir en una verdad. Usted bien sabe que se le ha ripostado toda esa maraña de escrtos que usted ha colocado con el úínico motivo de hacerme daño. Pero ya lo conocemos Billy Vicente. Siga como un loco poniendo sus parches que nadie le va a hacer caso al menos que algunos de los de su combo, por hacerle el favor, escriba unas palabras.

Deténgase y piense, ¿qué tiene que ver eso con el tema?
 
Re: Creencias Adventistas

Billy: ¿Cree usted quel os foristas son tontos? ¿Cuántas veces y en cuantos posts ha puesto usted ese escrito? Usted, como Adolfo Hitler, piensa que por repetir y repetir una mentira esta se va a convertir en una verdad. Usted bien sabe que se le ha ripostado toda esa maraña de escrtos que usted ha colocado con el úínico motivo de hacerme daño. Pero ya lo conocemos Billy Vicente. Siga como un loco poniendo sus parches que nadie le va a hacer caso al menos que algunos de los de su combo, por hacerle el favor, escriba unas palabras. Deténgase y piense, ¿qué tiene que ver eso con el tema?

Bueno, cajiga, precisamente eres tu, el que se cree que los demas foristas son tontos......
Yo he puesto las pruebas, de que tu nunca has refutado las cuestiones de tus mentirillas...
Ahora bien, si es como tu dices, entonces te resultaria muy facil desmentirme....
A VER, cajiga, PRESENTATE AQUI A LOS OJOS DE TODOS, LOS MENSAJES DONDE TU ME REFUTAS....
MIENTRAS TANTO, YO SEGUIRE INSISTIENDO EN EL PUNTO DE QUE LE HABLASTE MENTIRAS AL FORO......
Y ESO, SI TIENE QUE VER CON EL TEMA, DEBIDO A QUE TU INTENTAS DESCALIFICAR A LOS EX-adventistas, ECHANDO MANOS DE ARGUMENTOS MENTIROSOS Y MANIPULADORES.......

Hola a todos.

Estimados hermanos, todo lo mencionado en este epigrafe, comenzo cuando cajiga escribio:

"Hoy recibí una nota por e-mail, de alguien que, leyendo el foro, ha aprendido lo que realmente es la Iglesia Adventista y pronto se bautizará".

Entonces yo, conociendo bien el proceder de los sectareos del adventismo, ya que provengo de las mismas entrañas de esa secta, emplace publicamente a cajiga, para que presentara las pruebas de su afirmacion:

"Bueno, cajiga, no me creo ni una palabrita de eso que usted dice. Presente aqui las pruebas de que esa supuesta persona, simplemente con leer aquí en el foro, decidió unirse al adventismo; y si compruebo que es así, me comprometo a retirarme del foro y no atacar más a la secta adventista"....

Ahora bien, esto desencadeno una serie de contradicciones, en los mensajes de cajiga, las cuales hasta el momento, ese personaje ha rehusado aclarar.
Y por eso he decidido continuar insistiendo en el tema, hasta que se aclare la cuestion.....

Por lo que se ha visto hasta ahora, al parecer yo tengo la razon, y cajiga le hablo una mentirilla total a todo el foro, la cual ha intentado ocultar diciendo otras mentirillas......Y eso ha agravado la cuestion.......

Pero, es a cajiga, a quien le corresponde aclarar el asunto....Espero que lo haga...........

BUENO, cajiga, LO CIERTO ES QUE TENEMOS EN ESTO MUCHO TIEMPO (CREO QUE SON ALREDEDOR DE 2 AÑOS), Y HASTA EL MOMENTO TÙ NO HAS PRESENTADO LAS PRUEBAS QUE TE HE PEDIDO, NI HAS RESPONDIDO REALMENTE A MIS EMPLAZAMIENTOS....TAN SOLO, TÙ TE HAS LIMITADO A HACER LO MISMO QUE AHORA HICISTE, PONER UNOS MENSAJITOS CON EVASIVAS DEL ASUNTO....¿ES ESO RESPONDER, EN VERDAD????...¿ES QUE TÙ TE CREES QUE LOS DEMAS FORISTAS, SOMOS TONTOS?????......

AQUI TODOS HAN VISTO CLARAMENTE, QUE DIJISTE UNA MENTIRILLA TRAS OTRA....Y AUNQUE TE DUELA, YO SEGUIRE INSISTIENDO SOBRE ESTE ASUNTO, HASTA QUE RECONOZCA PUBLICAMENTE, QUE INTENTASTE ENGAÑARNOS CON LA AFIRMACION DE MARRAS QUE TU HICISTE, EN ARAS DE TU ESTIMADA SECTA DEL adventismo........


Originalmente enviado por bvicente18
Estimados hermanos, repasemos de nuevo algunos de los mensajes de cajiga:

Originalmente enviado por Cajiga
"Hoy recibí una nota por e-mail, de alguien que, leyendo el foro, ha aprendido lo que realmente es la Iglesia Adventista y pronto se bautizará".

Originalmente enviado por Cajiga
Lo que dije fue por un email que recibí en el correo de mi casa. Y no es mentira. Como la nota la borré por un problema que tengo con los emails de mi correo, espero que el hermano que me escribió lo haga público en este foro o que me vuelva a escribir autorizándome a publicarlo.

Originalmente enviado por Cajiga
Calma, Billy Vicente, ese amigo es asiduo lector del foro y ya responderá para que usted cumpla su promesa..

Originalmente enviado por Cajiga
Lo que escribí es totalmente verdad. Este hermano me escribió a mi otra dirección y le he hecho llamados a que vuelva a escribirme, ya que borré su email. El problema es que esa otra dirección electrónica es en mi casa de Cidra, Puerto Rico y yo voy allá sólo los fines de semana. Encuentro siempre más de 200 emails. Luego de leer algunos, los borro en bloque. Aquel del hermano que me escribió que lee el foro y mis participaciones le ayudaron a tomar su decisión de unirse a la iglesia adventista, lo borré junto con el resto. Para mayor mal, mi comp. de allá tiene la impresora dañada y no pude copiarlo. Tampoco copié su dirección.

Originalmente enviado por Cajiga
Yo no sé mucho de computadoras. La verdad es que si hubiera sabido, aunque fuera someramente, que esto iba a ser así, hubiera dado un forward antes de borrarlo. En el foro donde este hermano escriibió yo he hecho llamados, pero como no aprendí el nombre, no puedo dirigirme a él directamente. Como él me dijo que leía este foro, le pedí por el foro que me escribiera a mi dirección en San Juan, porque aquí puedo usar mi impresora.

Originalmente enviado por Cajiga
Vicente pone varias de las veces que escribí sobre el hermano que me dio su confesión. Es cierto que originalmente recibí un email de él a mi correo en Cidra, Puerto Rico. Mi llamado fue en el otro foro, aunque él me dijo que fue en Foro Cristiano que leyó mis participaciones, las que lo movieron a tomar la dcicisión de unirse a la Iglesia Adventista. Es cierto que en la pasada participación dije que el hermano me escribió al foro, pero fue a mi correo.

Originalmente enviado por Cajiga
Yo participo en varios foros moderados por adventistas. Sé que en uno hice ese llamado, pero ahora no lo recuerdo.

ENTONCES, HERMANOS, EN ESTAS CONTRADICTORIAS DECLARACIONES, cajiga asegura que le hizo "multiples llamados" a esa supuesta persona, en los foros adventistas, sin embargo, cuando yo le pedì que me dijera los nombres de esos foros, para comprobarlo, luego cajiga dijo "QUE NO RECORDABA LOS NOMBRES DE ESOS FOROS"; LO CUAL RESULTA EXTRAÑO, PORQUE cajiga SÌ RECORDABA QUE SUPUESTAMENTE HIZO DICHOS "LLAMADOS" EN ESOS FOROS ADVENTISTAS, PERO EN POCOS DÌAS "YA HABIA OLVIDADO LOS NOMBRES DE ESOS FOROS".

DE TODAS FORMAS, YO DECIDI DARLE A cajiga EL BENEFICIO DE LA DUDA, Y COMO CONOZCO LOS FOROS ADVENTISTAS DONDE ÈL PARTICIPA, ENTONCES INVESTIGUÈ LOS MENSAJES PUBLICADOS EN ELLOS, Y PARA MI SORPRESA, NO ENCONTRÈ RASTRO ALGUNO DE LOS SUPUESTOS "LLAMADOS" QUE HABÌA HECHO cajiga; INCLUSO, EN ESOS DÌAS cajiga NO HABIA PARTICIPADO EN ESOS FOROS........

POR LO TANTO, ERA MUY EVIDENTE, QUE cajiga HABÌA DICHO OTRA MENTIRILLA MAS, RESPECTO DE ESTE ASUNTO.

Cita:
Originalmente enviado por bvicente18
BUENO, "cajiga", TÙ DEJASTE DE RESPONDER, POR UNA RAZON MUY SIMPLE:
MIENTRAS MAS TRATABAS DE "EXPLICAR", MAS TE ENREDABAS EN TU PROPIA TRETA......LOS MENSAJES TUYOS ESTAN AHI, Y SON EL MEJOR TESTIGO DE LO QUE DIGO......TODOS PUDIERON VER CLARAMENTE, LA FORMA EN QUE TE CONTRADECIAS, CADA VEZ QUE TRATABAS DE "EXPLICAR" ALGO....
 
Re: Creencias Adventistas

Estuve investigando un poco sobre la religion adventista que en verdad desconocia, con mucho del material que me brindaron en el foro, aqui se me recomendo leer los escritos de ellen white, pero sin ofender a nadie, si me pasara tiempo leyendo escritos de todas las personas que dicen ser profetas me pasaria toda la vida haciendolo.


Por eso mi pregunta es en concreto que le hace creer que los escritos vienen de dios? que dicen que no este en los evangelios?, en mi opinion ahi esta todo lo que hay que saber, ¡que diferencia hay entre los escrioos de ella y unos que inventara yo diciendo que son inspirados por dios?

gracias

gtrabes...

¿Que tal si primero ves cuales son nuestras creencias y luego te presentamos a Ellen White...?

Te digo esto porque muchos te dirán "la profeta-ramera White dice tal cosa que contradice la biblia, etc" pero no es discordante con nada de la biblia...

¿Sabes porque atacan estos señores a la Iglesia Adventista del 7mo día...? Simple...porque no han podido encontrar errores en sus creencias.

Por eso te invito a simplemente ver las 28 doctrinas de nuestra iglesia...

¿Que te parece...?



Pues aquí van:


Los Adventistas del Séptimo Día aceptan la Biblia como su único credo y mantienen creencias fundamentales como enseñan las Sagradas Escrituras. Estas creencias constituyen la percepción y expresión que la Iglesia sostiene con respecto a las enseñanzas bíblicas.

1. Las Sagradas Escrituras
Las Sagradas Escrituras, el Antiguo y el Nuevo Testamento, son la Palabra de Dios escrita, dada por inspiración divina por intermedio de santos hombres de Dios que hablaron y escribieron al ser movidos por el Espíritu Santo. (II Pedro 1:20 y 21; II Tim. 3:16 y 17; Sal. 119:105; Prov. 30:5 y 6; Isa. 8:20; Juan 10:35; 17:17; I Tes. 2:13; Heb. 4:12).

2. La Trinidad
Hay un sólo Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo, una unidad de tres Personas coeternas. Dios es inmortal, omnipotente, omnisciente, encima de todo, y siempre presente. (Deut. 6:4; 29:29; Mat. 28:19; II Cor. 13:13; Efes. 4:4-6; I Pedro 1:2; I Tim. 1:17; Apoc. 14:6 y 7).

3. Dios Padre
Dios, el Eterno Padre, es el Creador, el Originador, el Mantenedor y el Soberano de toda la creación. Él es justo y santo, compasivo y clemente, tardo en airarse, y grande en constante amor y fidelidad. (Gén. 1:1; Apoc. 4:11; I Cor. 15:28; Juan 3:16; I Juan 4:8; I Tim. 1:17: Éxo. 34:6 y 7; Juan 14:9).

4. Dios Hijo
Dios, el Hijo Eterno, se encarnó en Jesucristo. Por medio de Él se crearon todas las cosas, se reveló el carácter de Dios, se efectuó la salvación de la humanidad y se juzga el mundo. Jesús sufrió y murió en la cruz por nuestros pecados y en nuestro lugar, fue resucitado entre los muertos y ascendió para administrar en el santuario celestial a nuestro favor. Vendrá otra vez para la liberación final de Su pueblo y la restauración de todas las cosas. (Juan 1:1-3 y14; 5:22; Col. 1:15-19; Juan 10:30; 14:9; Rom. 5:18; 6:23; II Cor. 5:17-21; Lucas 1:35; Filip. 2:5-11; I Cor. 15:3 y 4; Heb. 2:9-18; 4:15; 7:25; 8:1 y 2; 9:28; Juan 14:1-3; I Ped. 2:21; Apoc. 22:20). Ver video (Realvideo 3 minutos).

5. Dios Espíritu Santo
Dios, el Espíritu Santo, desempeñó una parte activa con el Padre y el Hijo en la Creación, Encarnación y Redención. Inspiró a los escritores de las Escrituras. Llenó de poder la vida de Cristo. Atrae y convence a los seres humanos; y los que se muestran sensibles, son renovados y transformados por Él, a imagen de Dios. Concede dones espirituales a la Iglesia. (Gén. 1:1 y 2; Lucas 1:35; II Pedro 1:21; Lucas 4:18; Hechos 10:38; II Cor. 3:18; Efes. 4:11 y 12; Atos 1:8; Juan 14:16-18 y 26; 15:26 y 27; 16:7-13; Rom. 1:1-4).

6. Dios es el Creador
Dios es el Creador de todas las cosas y reveló en las Escrituras el relato auténtico de Su actividad creadora. En seis días hizo el Señor los Cielos y la Tierra y todo lo que tiene vida sobre la Tierra, y descansó el séptimo día de esa primera semana. (Gén. 1;2; Éxo. 20:8-11; Sal. 19:1-6; 33:6 y 9; 104; Heb. 11:3; Juan 1:1-3; Col. 1:16 y 17).

7. La Naturaleza del Hombre
El hombre y la mujer fueron formados a imagen de Dios con individualidad y con el poder y la libertad de pensar y actuar. Como han sido creados como seres libres, cada uno es una unidad indivisible de cuerpo, mente y alma, y dependiente de Dios en cuanto a la vida, respiración y todo lo demás. Cuando nuestros primeros padres desobedecieron a Dios, negaron su dependencia de Él y cayeron de sua elevada posición abajo de Dios. La imagen de Dios en ellos, fue desfigurada, se volvieron mortales. Sus descendientes comparten esa naturaleza caída y de sus consecuencias. (Gén. 1:26-28; 2:7; Sal. 8:4-8; Hechos 17:24-28; Gén. 3; Sal. 51:5; Rom. 5:12-17; II Cor. 5:19 y 20).

8. El Gran Conflicto
Toda la humanidad está involucrada en un gran conflicto entre Cristo y Satanás, en cuanto al carácter de Dios, Su Ley y Su soberanía sobre el Universo. Ese conflicto se originó en el Cielo, cuando un ser creado, dotado de libertad de elección, por exaltación propia, se convirtió en Satanás, el adversario de Dios, y condujo la rebelión de una parte de los ángeles. Él introdujo el espíritu de rebelión en este mundo. Observado por toda la Creación, este mundo se convirtió en el palco del conflicto universal, dentro del cual será finalmente reivindicado el Dios de amor. (Apoc. 12:4-9; Isa. 14:12-14; Ezeq. 28:12-18; Gén. 3; Gén. 6-8; II Pedro 3:6; Rom. 1:19-32; 5:19-21; 8:19-22; Heb. 1:4-14; I Cor. 4:9).

9. Vida, Muerte y Ressurrección de Cristo
En la vida de Cristo, de perfecta obediencia a la voluntad de Dios, y en Su sufrimiento, muerte y resurrección, Dios proveyó el único medio de expiación del pecado humano, de modo que los que aceptan esa expiación por fe, puedan tener vida eterna, y toda la Creación comprenda mejor el infinito y santo amor del Creador. (Juan 3:16; Isa. 53; II Cor. 5:14, 15 y 19-21; Rom. 1:4; 3:25; 4:25; 8:3 y 4; Filip. 2:6-11; I Juan 2:2; 4:10; Col. 2:15).

10. La Experiencia de la Salvación
En infinito amor y misericordia, Dios permitió que Cristo se convirtiese en pecado por nosotros, para que en Él fuésemos hechos justicia de Dios. Guiados por el Espíritu Santo reconocemos nuestra pecaminosidad, nos arrepentimos de nuestras transgresiones y tenemos fe en Jesús como Señor y Cristo, como Sustituto y Ejemplo. Esta fe que acepta la salvación, viene del poder de la Palabra y es el don de la gracia de Dios. Por medio de Cristo somos justificados y libertados del dominio del pecado. Por medio del Espíritu, nacemos de nuevo y somos justificados. Permaneciendo en Él, participamos de la naturaleza divina y tenemos la seguridad de la salvación, ahora y en el Juizo. (Sal. 27:1; Isa. 12:2; Jonas 2:9; Juan 3:16; II Cor. 5:17-21; Gál. 1:4; 2:19 y 20; 3:13; 4:4-7; Rom. 3:24-26; 4:25; 5:6-10; 8:1-4, 14, 15, 26 y 27; 10:7; I Cor. 2:5; 15:3 y 4; I Juan 1:9; 2:1 y 2; Efes. 2:5-10; 3:16-19; Gál. 3:26; Juan 3:3-8; Mat. 18:3; I Pedro 1:23; 2:21; Heb. 8:7-12).

11. El crecimiento en Cristo
Por su muerte en la cruz, Jesús triunfó sobre las fuerzas del mal. Él, que durante su ministerio terrenal subyugó los espíritus demoníacos, ha quebrantado su poder y asegurado su condenación final. La victoria de Jesús nos da la victoria sobre las fuerzas del mal que aún tratan de dominarnos, mientras caminamos con él en paz, gozo y en la seguridad de su amor. Ahora, el Espíritu Santo mora en nosotros y nos capacita con poder. Entregados continuamente a Jesús como nuestro Salvador y Señor, somos libres de la carga de nuestras acciones pasadas. Ya no vivimos en las tinieblas, ni en el temor de los poderes malignos, ni en la ignorancia y falta de sentido de nuestro antiguo estilo de vida. En esta nueva libertad en Jesús, somos llamados a crecer a la semejanza de su carácter, manteniendo diariamente comunión con él en oración, alimentándonos de su Palabra, meditando en ella y en su providencia, cantando sus alabanzas, reuniéndonos juntos para adorar, y participando en la misión de la iglesia. Al darnos en amoroso servicio a aquellos que nos rodean y al dar testimonio de su salvación, Cristo, en virtud de su presencia constante con nosotros por medio del Espíritu, transforma cada uno de nuestros momentos y cada una de nuestras tareas en una experiencia espiritual (Sal. 1:1, 2; 23:4; 77:11, 12; Col. 1:13, 14: 2:6, 14, 15; Luc. 10:17-20; Efe. 5:19, 20; 6:12-18; 1 Tes. 5:23; 2 Ped. 2:9; 3:18; 2 Cor. 3:17, 18; Fil. 3:7-14; 1 Tes. 5:16-18; Mat. 20:25-28; Juan 20:21; Gál. 5:22-25; Rom. 8:38, 39; 1 Juan 4:4; Heb. 10:25).

12. La Iglesia
La Iglesia es la comunidad de creyentes que confiesan a Jesucristo como Señor y Salvador. Nos unimos para adorar, para comunión, para instrucción en la Palabra, para celebrar la Cena del Señor, para el servicio a toda la humanidad y para la proclamación mundial del Evangelio. La Iglesia es la Familia de Dios. La Iglesia es el cuerpo de Cristo. (Gén. 12:3; Hechos 7:38; Mat. 21:43; 16:13-20; Juan 20:21 y 22; Hechos 1:8; Rom. 8:15-17; I Cor. 12:13-27; Efes. 1:15 y 23; 2:12; 3:8-11 y 15; 4:11-15).

13. El Remaneciente y su Misión
La Iglesia universal se compone de todos los que verdaderamente creen en Cristo; pero, en los últimos días, un remaneciente ha sido llamado, a fin de guardar los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. Este remaneciente anuncia la llegada de la hora del Juicio, proclama la salvación por medio de Cristo y predice la aproximación de Su segundo advenimiento. (Mar. 16:15; Mat. 28:18-20; 24:14; II Cor. 5:10; Apoc. 12:17; 14:6-12; 18:1-4; Efes. 5:22-27; Apoc. 21:1-14). Son el unico pueblo de Dios y remanente.

14. Unidad en el Cuerpo de Cristo
La Iglesia es un cuerpo con muchos miembros, llamados de toda nación, tribu, lengua y pueblo. Todos somos iguales en Cristo. Mediante la revelación de Jesucristo en las Escrituras, compartimos la misma fe y esperanza y extendemos un solo testimonio para todos. Esta unidad encuentra su fuente en la unidad del Dios triuno, que nos adoptó como Sus hijos. (Sal. 133:1; I Cor. 12:12-14; Hechos 17:26 y 27; II Cor. 5:16 y 17; Gál. 3:27-29; Col. 3:10-15; Efes. 4:1-6; Juan 17:20-23; Santiago 2:2-9; I Juan 5:1).

15. El Bautismo
Por el bautismo confesamos nuestra fe en la muerte y en la resurrección de Jesucristo y testimoniamos nuestra muerte al pecado y nuestro propósito de andar en novedad de vida, siendo aceptados como miembros por Su Iglesia. Y por inmersión en el agua se sigue la instrucción en las Escrituras Sagradas y la aceptación de sus enseñanzas. (Mat. 3:13-16; 28:19 y 20; Hechos 2:38; 16:30-33; 22:16; Rom. 6:1-6; Gál. 3:27; I Cor. 12:13; Col. 2:12 y 13; I Pedro 3:21).

16. La Cena del Señor
La Cena del Señor es una participación en los emblemas del cuerpo y de la sangre de Jesús, como expresión de fe en Él, nuestro Señor y Salvador. La preparación incluye el examen de conciencia, el arrepentimiento y la confesión. El Maestro instituyó la Ceremonia del lavamiento de pies para representar renovada purificación, para expresar la disposición de servir uno al otro en humildad semejante a la de Cristo, y para unir nuestros corazones en amor. (Mat. 26:17-30; I Cor. 11:23-30; 10:16 y 17; Juan 6:48-63; Apoc. 3:20; Juan 13:1-17).

17. Dones y Ministerios Espirituales
Dios concede a todos los miembros de Su Iglesia, en todas las épocas, dones espirituales. Siendo otorgados por la actuación del Espíritu Santo, el cual distribuye a cada miembro como le place, los dones proveen todas las aptitudes y ministerios que la Iglesia necesita para cumplir sus funciones divinamente ordenadas. Algunos miembros son llamados por Dios y dotados por el Espíritu para funciones reconocidas por la Iglesia en ministerios pastorales, evangélicos, apostólicos y de enseñanza. (Rom. 12:4-8; I Cor. 12:9-11, 27 y 28; Efes. 4:8 y 11-16; II Cor. 5:14-21; Hechos 6:1-7; I Tim. 2:1-3; I Pedro 4:10 y 11; Col. 2:19; Mat. 25:31-36).

18. El Don de Profecía
Uno de los dones del Espíritu Santo es la profecía. Este don es una característica de la Iglesia remaneciente y fue manifestado en el ministerio de Ellen G. White. Como la mensajera del Señor, sus escritos son una continua y autorizada fuente de verdad y proporcionan consuelo, orientación, instrucción y corrección a la Iglesia. (Joel 2:28 y 29; Hechos 2:14-21; Heb. 1:1-3; Apoc. 12-17; 19:10).

19. La Ley de Dios
Los grandes principios de la Ley de Dios son incorporados en los Diez Mandamientos y ejemplificados en la vida de Cristo. Expresan el amor, la voluntad y los propósitos de Dios acerca de la conducta y de las relaciones humanas, y son obligatorios a todas las personas, en todas las épocas. Esos preceptos constituyen la base del concierto de Dios con Su pueblo y la norma del juicio de Dios. (Éxo. 20:1-17; Mat. 5:17; Deut. 28:1-14; Sal. 19:7-13; Juan 14:15; Rom. 8:1-4; I Juan 5:3; Mat. 22:36-40; Efes. 2:8).

20. El Sábado
El bondadoso Creador, después de los seis dias de la Creación, descansó el séptimo día e instituyó el Sábado para todas las personas, como recordativo de la Creación. El cuarto mandamiento de la inmutable Ley de Dios requiere la observancia de este sábado del séptimo día como día de descanso, adoración y ministerio, en armonía con la enseñanza y práctica de Jesús, el Señor del Sábado. (Gén. 2:1-3; Éxo. 20:8-11; 31:12-17; Lucas 4:16; Heb. 4:1-11; Deut. 5:12-15; Isa. 56:5 y 6; 58:13 y 14; Lev. 23:32; Mar. 2:27 y 28).

21. Mayordomía
Somos mayordomos de Dios, responsables por el uso apropiado del tiempo y de las oportunidades, capacidades y posesiones, y de las bendiciones de la Tierra y sus recursos que Él colocó bajo nuestro cuidado. Reconocemos el derecho de propiedad de parte de Dios, por medio del fiel servicio a Él y a nuestros semejantes, y devolviendo los diezmos y dando ofrendas para la proclamación de Su Evangelio y para la manutención y el crecimiento de Su iglesia. (Gén. 1:26-28; 2:15; Hageo 1:3-11; Mal. 3:8-12; Mat. 23:23; I Cor. 9:9-14).

22. Conducta Cristiana
Somos llamados para ser un pueblo piadoso, que piensa, siente y actúa de acuerdo con los principios del Cielo. Para que el Espíritu recree en nosotros el carácter de nuestro Señor, solo nos involucramos con aquellas cosas que producirán en nuestra vida, pureza, salud y alegría semejantes a las de Cristo. (I Juan 2:6; Efes. 5:1-13; Rom. 12:1 y 2; I Cor. 6:19 y 20; 10:31; I Tim. 2:9 y 10; Lev. 11:1-47; II Cor. 7:1; I Pedro 3:1-4; II Cor. 10:5; Filip. 4:8).

23. Matrimonio y Familia
El casamiento fue divinamente establecido en el Edén y confirmado por Jesús como unión vitalicia entre un hombre y una mujer, en amoroso compañerismo. Para el cristiano, el compromiso matrimonial es con Dios, y con el cónyuge, y solamente debe ser asumido entre parejas que comparten la misma fe. Referente al divorcio, Jesús enseñó que la persona que se divorcia del cónyuge, a no ser por causa de fornicación, y se casa con otro, comete adulterio. Dios bendice a la familia y quiere que sus miembros se ayuden uno al otro a alcanzar completa madurez. Los padres deben educar sus hijos a amar al Señor y a obedecerle. (Gén. 2:18-25; Deut. 6:5-9; Juan 2:1-11; Efes. 5:21-33; Mat. 5:31 y 32; 19:3-9; Prov. 22:6; Efes. 6:1-4; Mal. 4:5 y 6; Mar. 10:11 y 12; Lucas 16:18; I Cor. 7:10 y 11).

24. El Ministerio de Cristo en el Santuario Celestial
Hay un santuario en el Cielo. En él, Cristo intercede en nuestro favor, haciendo accesibles a los creyentes los beneficios de Su sacrifício expiatorio ofrecido una vez por todas, en la cruz. Él es nuestro gran Sumo Sacerdote y comenzó Su ministerio intercesor en ocasión de Su ascensión. En 1844, a final del período profético de los 2.300 días, inició la segunda y última etapa de Su ministerio expiatorio. El jucio investigador revela a los seres celestiales quien entre los muertos será digno de formar parte en la primera resurrección. También se hace manifesto quien, entre los vivos, está preparado para la traslación a Su reino eterno. La terminación del ministerio de Cristo señalará el fin del tiempo de gracia para los seres humanos, antes del Segundo advenimiento. (Heb. 1:3; 8:1-5; 9:11-28; Dan. 7:9-27; 8:13 y 14; 9:24-27; Núm. 14:34; Ezeq. 4:6; Mal. 3:1; Lev. 16; Apoc. 14:12; 20:12; 22:12).

25. La Segunda Venida de Cristo
La segunda venida de Cristo es la bendita esperanza de la Iglesia. La venida del Salvador será literal, personal, visible y universal. (Tito 2:13; Juan 14:1-3; Hechos 1:9-11; I Tes. 4:16 y 17; I Cor. 15:51-54; II Tes. 2:8; Mat. 24; Mar. 13; Lucas 21; II Tim. 3:1-5; Joel 3:9-16; Heb. 9:28).

26. Muerte y Resurrección
El salario del pecado es la muerte. Pero Dios, el único que es imortal, concederá vida eterna a Sus redimidos. Hasta aquel día, la muerte es un estado inconsciente para todas las personas. (I Tim. 6:15 y 16; Rom. 6:23; I Cor. 15:51-54; Ecles. 9:5 y 6; Sal. 146:4; I Tes. 4:13-17; Rom. 8:35-39; Juan 5:28 y 29; Apoc. 20:1-10; Juan 5:24).

27. El Milenio y el Fin del Pecado
El milenio es el reinado de mil años de Cristo con Sus santos, en el Cielo, entre la primera y la segunda resurrección. Durante este tiempo serán juzgados los impíos muertos. Al fin de ese período, Cristo con Sus Santos y la Ciudad Santa descenderán del Cielo a la Tierra. Los impíos muertos serán entonces resucitados y, con Satanás y sus ángeles, cercarán la ciudad; pero el fuego de Dios los consumirá y purificará la Tierra. El Universo quedará eternamente libre del pecado y de los pecadores. (Apoc. 20; Zac. 14:1-4; Mal. 4:1; Jer. 4:23-26; I Cor. 6; II Pedro 2:4; Ezeq. 28:18; II Tes. 1:7-9; Apoc. 19:17, 18 y 21).

28. La Nueva Tierra
En la Nueva Tierra, en que habita la justicia, Dios proveerá un hogar eterno para los remidos y un ambiente perfecto para vida, amor, alegría y aprendizaje eternos, en Su presencia. (II Pedro 3:13; Gén. 17:1-8; Isa. 35; 65:17-25; Mat. 5:5; Apoc. 21:1-7; 22:1-5; 11:15).
 
Re: Creencias Adventistas

gtrabes...¿Que tal si primero ves cuales son nuestras creencias y luego te presentamos a Ellen White...?. Te digo esto porque muchos te dirán "la profeta-ramera White dice tal cosa que contradice la biblia, etc" pero no es discordante con nada de la biblia...¿Sabes porque atacan estos señores a la Iglesia Adventista del 7mo día...? Simple...porque no han podido encontrar errores en sus creencias. Por eso te invito a simplemente ver las 28 doctrinas de nuestra iglesia...

Bueno, supuesto "humillado", lo que tu intentas "venderle" a ese forista, no tiene validez alguna, simplemente porque las tales "28 doctrinas" de tu secta, son la "cortinita de humo" que ella utiliza para hacer proselitismo, y luego saca "debajo de la manga", doctrinas mentirosas tales como la supuesta "ley dominical mundial", y como la llamada "reforma pro-salud".....

Y hablando de esa tal "reforma pro-salud", doctrina mentirosa que enseña tu secta, te reto a demostrale al foro, donde la Biblia habla de un tal "evangelio de la salud" o "reforma pro-salud" para los cristianos.....

Y TAMBIEN, NOS DEMUESTRAS SOLO CON LA BIBLIA, ESTO:

-Que: "El Evangelio incluye la reforma pro-salud".....Y eso implicaria, que rechazar esa "reforma pro-salud", sea equivalente a rechazar el evangelio de Cristo........

- QUE Esa "reforma pro-salud", SEA PARTE del "mensaje del tercer angel" Y POR LO TANTO, SEA PARTE DEL "ultimo mensaje de amonestacion a este mundo".....LO CUAL TAMBIEN IMPLICARIA QUE rechazar esa "reforma pro-salud", sea equivalente a rechazar el "ultimo mensaje de amonestacion a este mundo", que Dios le envia antes de Cristo venir........

(TODO ESO, LO ENSENA COMO DOCTRINA, LA SECTA adventista).....
 
Re: Creencias Adventistas

El hecho es que no lo has hecho, por lo que te desautoriza juzgarlos debidamente. Ese es el gran problema de los detractores de Elena White. Y si leen algo, son extractos fuera de contexto, utilizados por las páginas antiadventista.

"Examinadlo TODO, retende lo bueno", acuérdate.
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Re: Creencias Adventistas

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Re: Creencias Adventistas

Bueno, supuesto "humillado", lo que tu intentas "venderle" a ese forista, no tiene validez alguna, simplemente porque las tales "28 doctrinas" de tu secta, son la "cortinita de humo" que ella utiliza para hacer proselitismo, y luego saca "debajo de la manga", doctrinas mentirosas tales como la supuesta "ley dominical mundial", y como la llamada "reforma pro-salud".....

Y hablando de esa tal "reforma pro-salud", doctrina mentirosa que enseña tu secta, te reto a demostrale al foro, donde la Biblia habla de un tal "evangelio de la salud" o "reforma pro-salud" para los cristianos.....

Y TAMBIEN, NOS DEMUESTRAS SOLO CON LA BIBLIA, ESTO:

-Que: "El Evangelio incluye la reforma pro-salud".....Y eso implicaria, que rechazar esa "reforma pro-salud", sea equivalente a rechazar el evangelio de Cristo........

- QUE Esa "reforma pro-salud", SEA PARTE del "mensaje del tercer angel" Y POR LO TANTO, SEA PARTE DEL "ultimo mensaje de amonestacion a este mundo".....LO CUAL TAMBIEN IMPLICARIA QUE rechazar esa "reforma pro-salud", sea equivalente a rechazar el "ultimo mensaje de amonestacion a este mundo", que Dios le envia antes de Cristo venir........

(TODO ESO, LO ENSENA COMO DOCTRINA, LA SECTA adventista).....

BVICENTE18...

Si crees estar en la verdad...

¿Porque no atacas las doctrinas...?

Simple y sencillo... Porque estan TOTALMENTE basadas en las santas escrituras...

Eso es lo que te molesta, te molesta tanto que necesitas buscar un hueco para atacar... tu odio es inmenso BVICENTE18 tanto así que no te deja ver la verdad... ¿Porque no te unes al estudio...?