Lo que he venido sosteniendo desde hace tiempo:
Un poco de historia sobre Khuzar el reino de los jázaros o khazarians:
Si esto resulta ser cierto, todos los cristianos que veneran a Israel y le justifican todos sus desmadres han cometido idolatria durante mucho tiempo. Porque han estado idolatrando a un falso dios, un pueblo de madera que ni ve ni oye ni siente, porque simplemente no es el legitimo.
El funcionario de la Autoridad Palestina, Mohammad Shtayyeh explicó esta semana en un discurso a los miembros del partido Fatah cómo cree que debe presentarse la narrativa contra Israel.
Pidió a los presentes que concibieran la conciencia pública de manera que se aclarara la diferencia entre el pueblo judío y el Estado de Israel.
“Para luchar contra la narrativa, hay que entender que, claramente, los hebreos, los judíos y los israelíes no son lo mismo”, dijo Shtayyeh en un vídeo traducido por Mechon Mamre.
Basa sus explicaciones en varios comentarios islámicos sobre la Biblia. “Israel es Jacob. Los hijos de Israel, son los hijos de Jacob; 1300 años separan a sus hijos del profeta Moisés, lo que hace que los israelitas y los judíos sean dos entidades diferentes”.
Shtayyeh añadió que “la pregunta clave es quiénes son los judíos de hoy. La respuesta es clara, los judíos de hoy son judíos de Khuzar que se unieron al judaísmo en el siglo VI”.
Autoridad Palestina: No hay relación entre Israel y los judíos
“Para luchar contra la narrativa, hay que entender que, claramente, los hebreos, los judíos y los israelíes no son lo mismo”.israelnoticias.com
Un poco de historia sobre Khuzar el reino de los jázaros o khazarians:
El reino de Khuzar
El origen de los kázaros es aún hoy objeto de debate. Para unos se trata de una tribu ugro-finesa, emparentada con los búlgaros, los ávaros y los magiares; para otros, de un pueblo turco. Tras la r…
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Si esto resulta ser cierto, todos los cristianos que veneran a Israel y le justifican todos sus desmadres han cometido idolatria durante mucho tiempo. Porque han estado idolatrando a un falso dios, un pueblo de madera que ni ve ni oye ni siente, porque simplemente no es el legitimo.