Paula difarea desde que la conozco ...ya hace mucho ... está cautiva de una de las mas fatales doctrinas de demonios de esta era mala.
Todo lo demás es consecuencia de la maldad de aquel gobernante... y hay que hablar de ello. Hay que hablar de los frutos del finado Hugo Chavez: 280.000 muertos y una Venezuela sumida en el caos, la miseria, el pillaje y la injusticia... y que se agrava cada día. Esa es la herencia de sus pervertidos mamporreros actuales, herederos idólatras de un régimen moribundo y fanático (políticamente, el comunismo; espiritualmente, Satanás) que han transformado un antaño país modelo y deseable en un verdadero vertedero moral y social. En la ruina de toda una generación.
Hay que hablar de ello.
Amor,
Ibero
Es tu opinión (expresada con palabras PEOR que TORPES), parcial y partidista, CONTRARIA A LA VOLUNTAD DEL SEÑOR, y además OFF-TOPIC, que INFRINGE la norma nº 11 del foro.
El TÍTULO de éste TEMA ya está concluido; pero puedes ABRIR OTRO para seguir "expresándote"...
Que EL SEÑOR te Bendiga. AMÉN.
Tienes de cátara lo que yo de monaguillo. ¿Por qué ensucias el nombre de los cátaros y su sufrimiento? ¿No te da real vergüenza?
Amor,
Ibero
Tienes de cátara lo que yo de monaguillo. ¿Por qué ensucias el nombre de los cátaros y su sufrimiento? ¿No te da real vergüenza?
Amor,
Ibero
[/QUOTE]¿Sabes cuales eran las creencias de los Cátaros? Eran bastante herejes:
Cátaros->Creencias:
[QUOTE]La creencia cátara tenía sus raíces religiosas en formas estrictas del gnosticismo y el maniqueísmo. En consecuencia, su teología era dualista radical, basada en la creencia de que el universo estaba compuesto por dos mundos en absoluto conflicto, uno espiritual creado por Dios y otro material forjado por Satán.
Los cátaros creían que el mundo físico había sido creado por Satán, a semejanza de los gnósticos que hablaban del Demiurgo. Sin embargo, los gnósticos del siglo I no identificaban al Demiurgo con el Diablo, probablemente porque el concepto del Diablo no era popular en aquella época, en tanto que se fue haciendo más y más popular durante la Edad Media.
Según la comprensión cátara, el Reino de Dios no es de este mundo. Dios creó cielos y almas. El Diablo creó el mundo material, las guerras y la Iglesia Católica. Ésta, con su realidad terrena y la difusión de la fe en la Encarnación de Cristo, era según los cátaros una herramienta de corrupción.
Para los cátaros, los hombres son una realidad transitoria, una “vestidura” de la simiente angélica. Afirmaban que el pecado se produjo en el cielo y que se ha perpetuado en la carne. La doctrina católica tradicional, en cambio, considera que aquél vino dado por la carne y contagia en el presente al hombre interior, al espíritu, que estaría en un estado de caída como consecuencia del pecado original. Para los católicos, la fe en Dios redime, mientras que para los cátaros exigía un conocimiento (gnosis) del estado anterior del espíritu para purgar su existencia mundana. No existía para el catarismo aceptación de lo dado, de la materia, considerada un sofisma tenebroso que obstaculizaba la salvación.
Los cátaros también creían en la reencarnación. Las almas se reencarnarían hasta que fuesen capaces de un autoconocimiento que les llevaría a la visión de la divinidad y así poder escapar del mundo material y elevarse al paraíso inmaterial. La forma de escapar del ciclo era vivir una vida ascética, sin ser corrompido por el mundo. Aquellos que seguían estas normas eran conocidos como Perfectos. Los Perfectos se consideraban herederos de los apóstoles, con facultades para anular los pecados y los vínculos con el mundo material de las personas.
Negaban el bautismo por la implicación del agua, elemento material y por tanto impuro, y por ser una institución de Juan Bautista y no de Cristo. También se oponían radicalmente al matrimonio con fines de procreación, ya que consideraban un error traer un alma pura al mundo material y aprisionarla en un cuerpo. Rechazaban comer alimentos procedentes de la generación, como los huevos, la carne y la leche (sí el pescado, ya que entonces era considerado un "fruto" espontáneo del mar).
Siguiendo estos preceptos, los cátaros practicaban una vida de férreo ascetismo, estricta castidad y vegetarianismo. Interpretaban la virginidad como la abstención de todo aquello capaz de “terrenalizar” el elemento espiritual.
Otra creencia cátara opuesta a la doctrina católica era su afirmación de que Jesús no se encarnó, sino que fue una aparición que se manifestó para mostrar el camino a Dios. Creían que no era posible que un Dios bueno se hubiese encarnado en forma material, ya que todos los objetos materiales estaban contaminados por el pecado. Esta creencia específica se denominaba docetismo. Más aún, creían que el Dios Yahvé descrito en el Antiguo Testamento era realmente el Diablo, ya que había creado el mundo y debido también a sus cualidades («celoso», «vengativo», «de sangre») y a sus actividades como «Dios de la Guerra». Los cátaros negaban por ello la veracidad del Antiguo Testamento.
El consolamentum era el único sacramento de la fe cátara, con excepción de una suerte de Eucaristía simbólica, el Melioramentum, sin transubstanciación (si Cristo era una entidad exclusivamente espiritual, no encarnada, el pan no podía convertirse en el cuerpo de Cristo).
Los cátaros también consideraban que los juramentos eran un pecado, puesto que ligaban a las personas con el mundo material.
¿Sabes cuales eran las creencias de los Cátaros? Eran bastante herejes:
Cátaros->Creencias:
La creencia cátara tenía sus raíces religiosas en formas estrictas del gnosticismo y el maniqueísmo. En consecuencia, su teología era dualista radical, basada en la creencia de que el universo estaba compuesto por dos mundos en absoluto conflicto, uno espiritual creado por Dios y otro material forjado por Satán.
Los cátaros creían que el mundo físico había sido creado por Satán, a semejanza de los gnósticos que hablaban del Demiurgo. Sin embargo, los gnósticos del siglo I no identificaban al Demiurgo con el Diablo, probablemente porque el concepto del Diablo no era popular en aquella época, en tanto que se fue haciendo más y más popular durante la Edad Media.
Según la comprensión cátara, el Reino de Dios no es de este mundo. Dios creó cielos y almas. El Diablo creó el mundo material, las guerras y la Iglesia Católica. Ésta, con su realidad terrena y la difusión de la fe en la Encarnación de Cristo, era según los cátaros una herramienta de corrupción.
Para los cátaros, los hombres son una realidad transitoria, una “vestidura” de la simiente angélica. Afirmaban que el pecado se produjo en el cielo y que se ha perpetuado en la carne. La doctrina católica tradicional, en cambio, considera que aquél vino dado por la carne y contagia en el presente al hombre interior, al espíritu, que estaría en un estado de caída como consecuencia del pecado original. Para los católicos, la fe en Dios redime, mientras que para los cátaros exigía un conocimiento (gnosis) del estado anterior del espíritu para purgar su existencia mundana. No existía para el catarismo aceptación de lo dado, de la materia, considerada un sofisma tenebroso que obstaculizaba la salvación.
Los cátaros también creían en la reencarnación. Las almas se reencarnarían hasta que fuesen capaces de un autoconocimiento que les llevaría a la visión de la divinidad y así poder escapar del mundo material y elevarse al paraíso inmaterial. La forma de escapar del ciclo era vivir una vida ascética, sin ser corrompido por el mundo. Aquellos que seguían estas normas eran conocidos como Perfectos. Los Perfectos se consideraban herederos de los apóstoles, con facultades para anular los pecados y los vínculos con el mundo material de las personas.
Negaban el bautismo por la implicación del agua, elemento material y por tanto impuro, y por ser una institución de Juan Bautista y no de Cristo. También se oponían radicalmente al matrimonio con fines de procreación, ya que consideraban un error traer un alma pura al mundo material y aprisionarla en un cuerpo. Rechazaban comer alimentos procedentes de la generación, como los huevos, la carne y la leche (sí el pescado, ya que entonces era considerado un "fruto" espontáneo del mar).
Siguiendo estos preceptos, los cátaros practicaban una vida de férreo ascetismo, estricta castidad y vegetarianismo. Interpretaban la virginidad como la abstención de todo aquello capaz de “terrenalizar” el elemento espiritual.
Otra creencia cátara opuesta a la doctrina católica era su afirmación de que Jesús no se encarnó, sino que fue una aparición que se manifestó para mostrar el camino a Dios. Creían que no era posible que un Dios bueno se hubiese encarnado en forma material, ya que todos los objetos materiales estaban contaminados por el pecado. Esta creencia específica se denominaba docetismo. Más aún, creían que el Dios Yahvé descrito en el Antiguo Testamento era realmente el Diablo, ya que había creado el mundo y debido también a sus cualidades («celoso», «vengativo», «de sangre») y a sus actividades como «Dios de la Guerra». Los cátaros negaban por ello la veracidad del Antiguo Testamento.
El consolamentum era el único sacramento de la fe cátara, con excepción de una suerte de Eucaristía simbólica, el Melioramentum, sin transubstanciación (si Cristo era una entidad exclusivamente espiritual, no encarnada, el pan no podía convertirse en el cuerpo de Cristo).
Los cátaros también consideraban que los juramentos eran un pecado, puesto que ligaban a las personas con el mundo material.
Te recomiendo no creerte mucho de cómo uno de los bandos (normalmente el que ha masacrado al otro) escribe la historia y las creencias de sus "enemigos". Los cátaros están en la tradición de los valdenses, albiguenses, etc... Es en relación con estos y adláteres que hago referencia a un cátaro.
Amor,
Ibero
Hablas de tí, ACUSADOR...¿Amor?
Que EL SEÑOR tenga PIEDAD. AMÉN.
Que el Señor tenga piedad de todos, querida, pero tú ensucias su nombre porque eres de las que queman a los cátaros y pobres de espíritu.
Amor,
Ibero
¿Ensuciar?
Ésa es TU labor de ACUSADOR...
¿Amor?
Que EL SEÑOR tenga PIEDAD. AMÉN.
[/QUOTE]Te lo REPITO Juancho:
GRANDE fue la IGNORANCIA, la CEGUERA y la MALDAD de los que los ASESINARON con tales TESTIMONIOS, y GRANDE la IGNORANCIA, la CEGUERA, y la MALDAD, de los que los justifican. Pero GRACIAS A DIOS POR SU JUSTICIA. GLORIA A ÉL. AMÉN.
¿Piedad? ¿Crees que el Amor no enfrenta y que ante el Amor puedes salirte con la tuya? ¿Qué sabes tú de la piedad defendiendo a un régimen como el de Hugo Chavez, un blasfemo y un hombre entregado a sí mismo y a las fuerzas del mal que ha llevado a su país al borde de una guerra civil, al odio entre hermanos, al despojo y la injusticia, a un defensor a ultranza del terrorismo islámico y otra suerte de terrorismos?
Piedad fue la que tuvo Dios de enviarle un cáncer para ver si se arrepentía... y ojalá lo hiciera a tiempo.
Piedad... dice.
Amor,
Ibero
Sé, que tus INJURIAS y ACUSACIONES, PARCIALES, PARTIDISTAS, y TUS FALSOS TESTIMONIOS, NO SON DE DIOS, y bla bla bla...