El amor que adquirimos de Dios, no es solo para los buenos sino también para los malos, el amor de Dios es Espíritu y el ser humano carece de ese Espíritu de amor.
El amor del hombre se limita a sus seres queridos más cercanos como ser, padre, madre, hijos, pero incluso entre ellos hay desavenencias y contiendas a veces muy fuerte, hay muchos ejemplos en toda la biblia, y en nuestra propia vida, lo que demuestra que nuestro amor es muy limitado y condicionado.
En cambio, el amor que procede de Dios, no está condicionado, - una persona mala se auto destruye por su propia maldad, pero, si decide dejar su mala conducta y ser una persona de bien, se salvará si sigue los mandamientos del Evangelio
La siguiente lectura es una enseñanza al respecto
Mateo 5: 43 - 48
43 «Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo.
44 Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persigan,
45 para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos.
46 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa vais a tener? ¿No hacen eso mismo también los publicanos?
47 Y si no saludáis más que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de particular? ¿No hacen eso mismo también los gentiles?
48 Vosotros, pues, sed perfectos como es perfecto vuestro Padre celestial.
El amor del hombre se limita a sus seres queridos más cercanos como ser, padre, madre, hijos, pero incluso entre ellos hay desavenencias y contiendas a veces muy fuerte, hay muchos ejemplos en toda la biblia, y en nuestra propia vida, lo que demuestra que nuestro amor es muy limitado y condicionado.
En cambio, el amor que procede de Dios, no está condicionado, - una persona mala se auto destruye por su propia maldad, pero, si decide dejar su mala conducta y ser una persona de bien, se salvará si sigue los mandamientos del Evangelio
La siguiente lectura es una enseñanza al respecto
Mateo 5: 43 - 48
43 «Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo.
44 Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persigan,
45 para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos.
46 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa vais a tener? ¿No hacen eso mismo también los publicanos?
47 Y si no saludáis más que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de particular? ¿No hacen eso mismo también los gentiles?
48 Vosotros, pues, sed perfectos como es perfecto vuestro Padre celestial.