ALIMENTO DIARIO Y MATUTINO (Martes)

hgo

2
5 Septiembre 2001
3.029
1
ALIMENTO DIARIO Y MATUTINO (Martes)
Hechos de los apóstoles
Semana 22 --- Pablo va a Roma
Martes --- Leer con oración: Hch 9:30b; 11:25-26; 13:1-2; 18:22; Gá 1:1
“Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia, revelar a su Hijo en mí, para que yo le predicase entre los gentiles, no consulté en seguida con carne y sangre” (Gá 1:15-16)
NEGAR LA VIDA NATURAL PARA SER USADO POR DIOS
Pablo necesitó pasar por un período de disciplina para no vivir más de acuerdo a su constitución natural. De Jerusalén los hermanos lo enviaron de regreso a Tarso, donde permaneció hasta que Bernabé lo llevó a Antioquía (Hch 9:30b; 11:25-26). No sabemos con certeza, por cuánto tiempo permaneció en Tarso, pero fue un largo período en el cual ciertamente aprendió muchas lecciones, especialmente de negarse a sí mismo y perder la vida del alma. Cuando fue con Bernabé a Antioquia, sirvió a la iglesia como profeta y maestro, viviendo en contacto con Dios en oración (13:1-2a).
Cuando los cinco profetas y maestros de la iglesia en Antioquía oraban, el Espíritu Santo les dijo: “Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado” (v. 2b). Como vimos la semana anterior, el Señor lo llevó a pasar por muchos sufrimientos en el primer viaje, para que experimentase de manera más intensa la muerte y resurrección de Cristo. Por tanto, al salir para trabajar en varias ciudades, muchas tribulaciones le sobrevinieron. Fue en esa época en que las iglesias de la región de Galacia fueron levantadas. Con esa experiencia aprendemos que no podemos, de ninguna manera, introducir cosas naturales en la obra de Dios. Cuando salimos, somos enviados por el Señor y no podemos actuar por nuestra propia cuenta, sino por el Espíritu. Cuando ellos comenzaron a dejar de vivir por su constitución natural, Dios comenzó a usarlos.
En su segundo viaje, Pablo seguía totalmente al Espíritu, no teniendo ningún plan propio, sino que dependía de la orientación del Espíritu Santo que interiormente lo dirigía y exteriormente le daba poder. También introdujo a las iglesias al Espíritu, por eso fue muy bendecido, tanto en lo que respecta a las iglesias, como en relación a su propia persona. La lección que podemos aprender aquí es que necesitamos estar en el Espíritu.
En el tercer viaje, Pablo aparentemente tomó decisiones por su propia cuenta, y no siguió estrictamente al Espíritu Santo. Debemos aprender a seguir al Espíritu de vida que nos guía interiormente y tener el poder del Espíritu exteriormente, para llevar a cabo la obra del Señor. No debemos ser negligentes en cuanto al Espíritu de vida en nuestro interior y pensar que sólo el Espíritu exterior es suficiente para hacer la obra, porque el evangelio del reino que predicamos está totalmente relacionado con la vida y el crecimiento en vida. Por eso, después de recibir la redención judicial, necesitamos avanzar a la salvación orgánica, para vivir a Cristo constantemente, con el fin de que Dios opere en nosotros la obra transformadora del Espíritu por medio de un proceso metabólico, donde nuestras células viejas son sustituidas por las células nuevas, divinas. Esa fue la razón de la victoria de Pablo en su segundo viaje.
Cuando estaba en Corinto, Pablo escribió a los gálatas y les dijo que no llegó a ser apóstol de parte de hombres, sino por Jesucristo y por Dios el padre (Gá 1:1). Cuando Dios reveló a Su Hijo en él, no consultó con carne y sangre, ni subió a Jerusalén a los que ya eran apóstoles antes de él (vs. 16-17). Pablo no fue enviado por Jerusalén, sino por el Espíritu Santo. En su segundo viaje, siguió estrictamente la dirección del Espíritu, por eso en ese viaje tuvo éxito; él estaba totalmente en el Espíritu.
Punto Clave: El evangelio orgánico necesita ser vivido
Pregunta: De entre los dos últimos viajes de Pablo, ¿Cuál de ellos tiene el mejor principio para ser seguido?
Dong Yu Lan
Derechos reservados a: Editora “Arvore da Vida”
--------------------------------
SEMANA 3 — DÍA 2 46
Alimento matutino
Ef. 1:22-23 …La iglesia, la cual es Su Cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo. 4:4 Un Cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación.
Ap. 21:2-3 Y vi la santa ciudad, la Nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios … He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él fijará Su tabernáculo con ellos; y ellos serán Sus pueblos, y Dios mismo estará con ellos y será su Dios.
El Cuerpo es el significado intrínseco de la iglesia. Si el Cuerpo no existiera, la iglesia no tendría razón de ser. La iglesia no tiene sentido sin el Cuerpo. Pero, aleluya, ¡tenemos el Cuerpo! Sin el Cuerpo, la iglesia no tiene sentido, pero con el Cuerpo, tenemos el significado intrínseco de la iglesia.
¿Cuál es la diferencia entre la iglesia y el Cuerpo? Necesitamos ver que la iglesia de Dios es la estructura y el Cuerpo de Cristo, es el organismo. Podemos usar como ejemplo el manzano. El árbol es la estructura, y las manzanas son la esencia orgánica de este árbol… La iglesia es la estructura, como el manzano, y el Cuerpo de Cristo, es la esencia orgánica de la iglesia, así como las manzanas son la esencia orgánica del manzano. Estos dos son uno. La iglesia es la estructura requerida para la existencia del Cuerpo, mientras que el Cuerpo de Cristo es el contenido orgánico y, como tal, es lo que satisface a las personas. (El resultado de la dispensación de la Trinidad procesada y la transmisión del Cristo que lo transciende todo, págs. 97-98)
Lectura para hoy
Nosotros estamos en la iglesia; esto es un hecho. Pero, ¿Dónde está la realidad del Cuerpo de Cristo? Tenemos la expresión el Cuerpo de Cristo y tenemos la doctrina del Cuerpo de Cristo, pero ¿donde está la práctica y la realidad del Cuerpo de Cristo?
Todos necesitamos considerar este asunto. Tenemos la terminología y la doctrina, pero en la práctica, no tenemos la realidad. El propósito de la compenetración es introducirnos a todos nosotros en la realidad del Cuerpo de Cristo. Yo valoro mucho las iglesias locales, al igual que ustedes. Pero valoro las iglesias locales por causa de un propósito. Las iglesias locales son el procedimiento que nos introduce en el Cuerpo de Cristo. Las iglesias son el Cuerpo, pero es posible que las iglesias no tengan la realidad del Cuerpo de Cristo. Por tanto, necesitamos estar en las iglesias locales para poder ser introducidos en la realidad del Cuerpo de Cristo.
La única iglesia es expresada en forma de iglesias locales por razones físicas. Nosotros los creyentes estamos esparcidos por toda esta tierra… Es necesario que estemos separados por localidades. Pero no podemos olvidarnos de que las iglesias son el Cuerpo de Cristo. Efesios 4 dice que hay un solo Cuerpo (v. 4). Pablo dijo que aunque somos muchos, somos un solo pan y un solo Cuerpo (1 Co. 10:17) … En Apocalipsis 1 el Señor nos muestra siete candeleros, que son los símbolos de las siete iglesias.
Finalmente, el libro de Apocalipsis tiene una consumación. En esta consumación los siete candeleros desaparecen. En el primer capítulo vemos los siete candeleros. Pero en los últimos dos capítulos vemos solamente una ciudad. Finalmente, las iglesias locales dejarán de ser. Sólo el Cuerpo permanecerá… para siempre, y este Cuerpo es el tabernáculo, la morada de Dios en esta tierra, la novia del Cordero (21:2-3). Todos tenemos que ver esto.
Por consiguiente, debemos prestar mucha más atención al Cuerpo de Cristo que a las iglesias locales. No quiero decir que anulo la enseñanza acerca de las iglesias locales. Todavía es necesaria. Como seres humanos, tenemos una estructura externa, nuestro cuerpo. Pero un cuerpo por sí solo es un cadáver. El cuerpo físico requiere una vida interior. Hoy el caso es el mismo en la iglesia. Por un lado, tiene una estructura externa, un cuerpo, pero ésta no es la naturaleza, la esencia ni el elemento de la iglesia. Efesios 4 nos dice que la iglesia es el Cuerpo y que dentro de esta iglesia está el Espíritu, el Señor y el Padre (vs. 4-6). El Padre es el origen, el Señor es el elemento, y el Espíritu es la esencia del Cuerpo. Estas cuatro entidades constituyen un solo edificio. (Puntos prácticos en cuanto a la compenetración, págs. 10, 22-24)
Lectura adicional: El resultado de la dispensación de la Trinidad procesada y la transmisión del Cristo que lo transciende todo, cap. 6; Puntos prácticos en cuanto a la compenetración, cap. 3
Witness Lee
Derechos reservados a: Living Stream Ministry
¡Jesús es el Señor!