La salvación se pierde??



Dios no es un “caballero” que espera a que el hombre le dé permiso. La Biblia enseña que Él es soberano absoluto: hace lo que quiere, cuando quiere y con quien quiere. No depende del libre albedrío humano, sino que los hombres dependen de Su voluntad.

• “Nuestro Dios está en los cielos; todo lo que quiso ha hecho” (Salmo 115:3).

• “Él hace según su voluntad en el ejército del cielo y en los habitantes de la tierra; y no hay quien detenga su mano” (Daniel 4:35).

• “Tendré misericordia del que yo tenga misericordia” (Romanos 9:15).

• “Como los repartimientos de las aguas, así está el corazón del rey en la mano de Jehová; a todo lo que quiere lo inclina” (Proverbios 21:1).

El hombre no pone condiciones a Dios, sino que Dios dispone el destino del hombre.


 


RESPECTO A LA LEY DEL ESPÍRITU DE VIDA QUE OPERA EN LOS REDIMIDOS.

Quienes han sido regenerados, ahora tienen dos naturalezas la antigua y la nueva naturaleza, y ese es precisamente el tema que el apóstol Pablo expone en Rom 7:15 al 25, donde se describe la lucha que experimenta todo regenerado, lucha que se da entre la antigua y la nueva naturaleza. A esto mismo se refiere Pablo en Gálatas 5:17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre si, para que no hagais lo que quisiereis

Por algún sabio propósito, Dios no ha removido la antigua naturaleza, pero lo que sí ha hecho, es poner en operación, la ley del Espiritu de vida en Cristo Jesús ( Rom 8:2-3), esta ley que opera en todo regenerado, anula el poder del pecado, de la misma manera que las leyes aerodinámicas contrarrestan la atracción de la ley de gravedad; Que maravilloso es ver como un Boing de decenas de toneladas de peso, se eleva como una pluma, a miles de metros de altura, y esto debido a que leyes aerodinámicas, dejan sin efecto la atracción de la ley de gravedad. Y de la misma manera la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús, desarticula el poder de la antigua naturaleza que impulsa a pecar.

El poder de la ley del Espíritu de vida, se va perfeccionando en la medida que vamos aprendiendo a confiar plenamente en el poder del Espíritu Santo, rindiéndonos completamente a Cristo, es decir la plena libertad es consecuencia de hacernos esclavos de Cristo.

!Solo a Dios sea la Gloria!!!.



 


PARA LOS ESCOGIDOS, LA OMNIPOTENCIA DE DIOS PESA INFINITAMENTE MÁS QUE CUALQUIER IMPOSIBILIDAD O LIMITACIÓN.

Rom 4:18-24; Él creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia.
4:19 Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara.
4:20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios,
4:21 plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido;
4:22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia.
4:23 Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada,
4:24 sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro,

Respecto a Abraha, está escrito que él creyó en esperanza contra esperanza, es decir su realidad era totalmente contraria a la promesa que tenía. de parte de Dios, de que sería padre de multitud, pues tenía casi 100 años, estaba lleno de achaques producto de la edad, además se dice que su cuerpo estaba como muerto. No tenía nada a favor que alentara la más mínima esperanza, de que alguien en tal condición pudiera alcanzar una promesa tal como ser padre de multitud: Pero Abraham no se debilitó en su fe al considerar todo lo que tenía en contra, PORQUE DEL OTRO LADO DE LA BALANZA ESTABA LA OMNIPOTENCIA DE DIOS QUE PESABA INFINITAMENTE MAS QUE TODAS ESAS CONTRARIEDADES JUNTAS.
En cuanto a esta revelación bíblica, hay algunas consideraciones que creo nos serán de gran consuelo:

1) La fe de Abraham no era algo humano sino un don de Dios, notemos que se compara ese tipo de fe que tuvo Abraham, con la fe necesaria para creer en la resurrección de nuestro Señor Jesucristo (Rom 4:24).

2) El caso de Abraham, y en el caso de todo aquel que ha creído en la obra consumada por Cristo en su muerte y resurrección, tal fe, es el ejercicio de una capacidad, para poder tener certeza y convicción de cosas que se esperan pero que no se pueden ver. Y tal capacidad es dada por Dios a todos aquellos que Él escoge y atrae para salvación ( Salmo 65:4).

3) El ejercicio de esta capacidad para poder tener certeza y convicción de cosas que se esperan y no se pueden ver, nos tiene que llevar a poder tener al igual que Abraham, esperanza contra esperanza. Es decir podemos al igual que Abraham descansar en la poderosa verdad de que la omnipotencia de Dios pesa más que cualquier adversidad o limitación que tengamos.

Todo esto nos tiene que llevar a concentrarnos en Dios, y en sus atributos, descansando en su promesa que nos dice que a los que le aman todas las cosas les ayudan a bien ( Rom 8:28). Y en cuanto a esto es importante en estos tiempos, estar alerta a muchas falsas enseñanzas de falsos maestros, que cuando hablan de fe, llevan a quienes los oyen, a centrarse en sí mismos, y su supuesto "potencial humano", lo cual constituye el núcleo de la hechicería de este mundo. Esto explica porque dentro de estas falsas enseñanzas ocupa un lugar tan importante, la visualización, el decreto y la confesión positiva. Lo que produce ese tipo de mensajes en los redimidos es desesperación, y esto debido a que por ser nuevas criaturas en Cristo, solo funcionan correctamente, cuando ejercen esa capacidad que les permite creer en esperanza contra esperanza, CENTRÁNDOSE EN DIOS Y EN SUS PROPÓSITOS SOBERANOS y no en sí mismos.

¡Solo a Dios sea la Gloria!!!.