Re: Musica Cristiana (Evangelica y Catolica)
La oración que Cristo nos enseñó, es la más sublime y núcleo de toda la Escritura. En ninguna otra parte en las Sagradas Letras podemos leer que Dios nos enseñe a orar, en ninguna, sólo lo hace en la fórmula del Padre nuestro. ¡Los cristianos podemos presumir que el Señor nos ha enseñado a orar! y es menester hacer uso aisduo de este recurso.
En ella se nos pide santificar el nombre de Dios, pedir el reino, pedir que se haga la voluntad del Padre en nosotros, hacer el mea culpa -no sólo con Dios sino con los hermanos con quienes tenemos diferencias-... en toda esta bella oración se piensa en Iglesia, en comunidad, se piensa en el prójimo, es una oración fruto de la obra misionera de la Iglesia.
Pareciera que se van tras composiciones de artistas contemporáneos, tras la novedad, tras la beldad de una composición músical, pero no oran lo que Cristo enseñó, o inclusive lo que ordenó orar de una forma humilde pero eclesial, una oración que debería ser su pan de cada día.
Un concierto multitudinario ofrecido en la Arena Monterrey, por cantantes famosos, los evangélicos asisten inclusive pagando una cantidad considerable comparado con el salario mínimo nacional.
Discúlpenme por señalarles eso, pero, ¿no que Cristo está en todas partes? ¿porqué pagan por ir a adorar a Dios frente a un concertista?... son cosas que me hacen pensar, y pues bueno, qué quieren que les diga.
La oración que Cristo nos enseñó, es la más sublime y núcleo de toda la Escritura. En ninguna otra parte en las Sagradas Letras podemos leer que Dios nos enseñe a orar, en ninguna, sólo lo hace en la fórmula del Padre nuestro. ¡Los cristianos podemos presumir que el Señor nos ha enseñado a orar! y es menester hacer uso aisduo de este recurso.
En ella se nos pide santificar el nombre de Dios, pedir el reino, pedir que se haga la voluntad del Padre en nosotros, hacer el mea culpa -no sólo con Dios sino con los hermanos con quienes tenemos diferencias-... en toda esta bella oración se piensa en Iglesia, en comunidad, se piensa en el prójimo, es una oración fruto de la obra misionera de la Iglesia.
Pareciera que se van tras composiciones de artistas contemporáneos, tras la novedad, tras la beldad de una composición músical, pero no oran lo que Cristo enseñó, o inclusive lo que ordenó orar de una forma humilde pero eclesial, una oración que debería ser su pan de cada día.
Un concierto multitudinario ofrecido en la Arena Monterrey, por cantantes famosos, los evangélicos asisten inclusive pagando una cantidad considerable comparado con el salario mínimo nacional.
Discúlpenme por señalarles eso, pero, ¿no que Cristo está en todas partes? ¿porqué pagan por ir a adorar a Dios frente a un concertista?... son cosas que me hacen pensar, y pues bueno, qué quieren que les diga.
ios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y, después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡oh piadosa! ¡oh dulce Virgen María!
