Mitras
Mitras, el dios de la luz celestial, es una personificación del sol. Casi junto con el cristianismo llegó al imperio romano, donde ambas se dispersaron ampliamente. El punto de partida del mitraismo en el poniente fue Sicilia, la provincia natal de Pablo, donde el mitraismo ya casi 100 años antes de Pablo, había ingresado
Para su nacimiento lo habrían adorado algunos pastores. Posteriormente ascendió al cielo donde fue entronizado por el dios sol, es decir partícipe de su omnipotencia y finalmente parte de una trinidad. Se creía que alguna vez iba a regresar, para resucitar a los muertos.
Mitras fue intermediario entre el cielo y la tierra, dios y el hombre, Dios hecho hombre, salvador universal, redentor. Él fue la “roca”. También el gallo y la llave ya fueron símbolos del dios sol. El día santo fue el domingo (Sunday, o Sonntag), el dies soli. El primer día de la semana, como el “día del Señor” también celebrado por los cristianos.
Recién en el año 353 la iglesia estableció como día del nacimiento de Cristo el 25 de Diciembre, el día del cumpleaños de Mitra, el invencible dios del sol, esto para desplazarlo de la conciencia popular. En las primeras horas de la madrugada del día 25 efectuaban una procesión llevando consigo la estatua de un niño como símbolo del recién nacido dios sol de la virgen Dea Caelestis, cantado. “La Virgen ha dado a luz, la luz está en aumento”. Donde Lucas un ángel dice: “Hoy les ha nacido el salvador”.
La religión mitraica fue una organización estrictamente jerárquica. El líder recibía el nombre pater patrum, padre de padres, como el sumo sacerdote del culta a Attis y el papa en Roma.
El culto a Mitras conocía siete sacramentos: Bautismo, confirmación, comunión, que consistía de pan y agua o una mezcla de agua y vino, reefectuaba como en el cristianismo, para recordar la última cena del maestro y los suyos. Las hostias estaban provistas con una cruz. La misa se celebraba todos los días.
Los mitraícos se basan en unas revelaciones; un juicio final; No creían en la inmortalidad del alma, si no en la resurrección de la carne.
La similitud entre el cristianismo y el mitraismo es innegable. Es posible que aún en la actualidad, el cristianismo no sea más que un mitraismo levemente transformado.
Fuente: Traducción no oficial de un extracto de “Nuevamente cantó el Gallo” de Karlheinz Deschner
Objetos de culto usado en la iglesia católica
Los cristianos y en especial los católicos, lo que adoran realmente es el Sol
Mitras, el dios de la luz celestial, es una personificación del sol. Casi junto con el cristianismo llegó al imperio romano, donde ambas se dispersaron ampliamente. El punto de partida del mitraismo en el poniente fue Sicilia, la provincia natal de Pablo, donde el mitraismo ya casi 100 años antes de Pablo, había ingresado
Para su nacimiento lo habrían adorado algunos pastores. Posteriormente ascendió al cielo donde fue entronizado por el dios sol, es decir partícipe de su omnipotencia y finalmente parte de una trinidad. Se creía que alguna vez iba a regresar, para resucitar a los muertos.
Mitras fue intermediario entre el cielo y la tierra, dios y el hombre, Dios hecho hombre, salvador universal, redentor. Él fue la “roca”. También el gallo y la llave ya fueron símbolos del dios sol. El día santo fue el domingo (Sunday, o Sonntag), el dies soli. El primer día de la semana, como el “día del Señor” también celebrado por los cristianos.
Recién en el año 353 la iglesia estableció como día del nacimiento de Cristo el 25 de Diciembre, el día del cumpleaños de Mitra, el invencible dios del sol, esto para desplazarlo de la conciencia popular. En las primeras horas de la madrugada del día 25 efectuaban una procesión llevando consigo la estatua de un niño como símbolo del recién nacido dios sol de la virgen Dea Caelestis, cantado. “La Virgen ha dado a luz, la luz está en aumento”. Donde Lucas un ángel dice: “Hoy les ha nacido el salvador”.
La religión mitraica fue una organización estrictamente jerárquica. El líder recibía el nombre pater patrum, padre de padres, como el sumo sacerdote del culta a Attis y el papa en Roma.
El culto a Mitras conocía siete sacramentos: Bautismo, confirmación, comunión, que consistía de pan y agua o una mezcla de agua y vino, reefectuaba como en el cristianismo, para recordar la última cena del maestro y los suyos. Las hostias estaban provistas con una cruz. La misa se celebraba todos los días.
Los mitraícos se basan en unas revelaciones; un juicio final; No creían en la inmortalidad del alma, si no en la resurrección de la carne.
La similitud entre el cristianismo y el mitraismo es innegable. Es posible que aún en la actualidad, el cristianismo no sea más que un mitraismo levemente transformado.
Fuente: Traducción no oficial de un extracto de “Nuevamente cantó el Gallo” de Karlheinz Deschner
Objetos de culto usado en la iglesia católica



Los cristianos y en especial los católicos, lo que adoran realmente es el Sol