la iglesia en las casas...

Re: la iglesia en las casas...

Tobi dijo:
Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos, y testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada: Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey.
(1 Pedro 5:1-3)

Mas claro...
___________________________________________

AMEN!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Daniela :)
 
Creo en el sacerdocio del Cuerpo=en el cuerpo no todos son "OJO".

Creo en el sacerdocio del Cuerpo=en el cuerpo no todos son "OJO".

Hola Danielita19
El Señor te bendiga.
Tal vez podrías leer mi segundo aporte.
La misma metáfora de la Iglesia=Cuerpo, nos indica que existe un orden posicional jerárquico. En mucho de lo que dices y aportas podemos acordar, sin embargo en lo concerniente a la autoridad y el órden jerárquico impuesto por el Señor a Su Iglesia no puedo hacerlo.
Lamento mucho que haya quienes abusan de su autoridad y posiciòn en el Cuerpo de Cristo para fines mezquinos, carnales y diabólicos; el mismo Señor ha dicho que Él, personalmente, se encargará de ellos. No obstante, la infidelidad de todos ellos no hará impracticable la Verdad de Dios en Su Obra.
Desde hace muchos siglos hubo y seguirá habiendo quienes pretendan hacer un "cuerpo de Cristo nuevo y diferente". Un cuerpo que no exija obediencia ni sometimiento a nadie, que desconozca y rechace el órden instituido por Dios para Su Iglesia. En fin, el tema es largo. Argumentos para que haya debate sobre éste tópico sobran.
Espero que sirva de algo este sencillo aporte.

El Señor bendiga a Su Santa Iglesia, Columna y Baluarte de la Verdad.
NitoAvellaneda
 
Re: la iglesia en las casas...

Danielita, aqui tambien estamos reuniendonos en casas, de la misma forma que el que tiene algo que aportar a la congregacion lo puede aportar, no hay una persona que dirija, todos aportan segun el espiritu da, se exorta a todos a que participen no importa el grado de crecimiento espiritual ya que el objetivo es que todos lleguemos a la estatura del varon perfecto.
de esta forma se da oportunidad a que no haya una division de el que sabe mas que otro ya que Dios quiere que todos tengamos crecimiento.
14.26 ¿Qué hay pues, hermanos? Cuando os juntáis, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación; hágase todo para edificación.
Bendiciones para ti danielita y para la iglesia de su casa.
 
Re: la iglesia en las casas...

juan_herrera dijo:
Estimado Toby,

Lamentablemente no la tengo, me ubiqué debido a que en el cuerpo del artículo aparece el "Capítulo 6", por lo que inferí que disponía del resto. En todo caso gracias, el fragmento está muy bueno.

Jj

Es una lastima que no se tenga el articulo completo.....esta bien interesante.

Respecto a Danielita......le participo en mi caso soy Agnostico y no pertenescoa niguna agrupacion religiosa porque no conincido con ninguna, sin embargo, la idea de practicar en casa una religion sin estar dentro de una congregacion o religión en particular, puede desviar el entendimiento sobre Dios.

Debe tener cuidado en que sin querer esté formando una nueva secta religiosa con interpretaciones erroneas del tema, le aconsejo que se acerque a la congregacion que mas se identifique con usted o sino....entonces.....mentengase al margen........pero no trate de llevar la religion en su casa....eso la puede inducir a un lamentable error
 
Re: la iglesia en las casas...

Hermana que bueno haber encontrado esta página yo soy cubano y les dio mis bendiciones en Cristo Jesús, pertenezco a una iglesia que tiene todas las características descritas por Frank en su libro o bastantes parecidas, quizas somos los únicos en Cuba que nos reuinimos de esta manera, si sabíamos a través de hermanos como David O´Conor que se reunen alrededor del mundo personas como nosotros pero nunca he tenido el gusto de conversar con ninguno estoy a la disposición de hacerlo, los quiero mucho en el Señor.
 
Re: la iglesia en las casas...

Hermana nosotros tenemos el libro de Frank completo intentaré escanear para poder enviarlo al foro.
 
Re: la iglesia en las casas...

:sazul:holaaaa!,hace una semana que conoci esta pagina, soy cristiana, tengo 19 años y estoy viviendo en Uruguay, desde hace muy poco tiempo, me encantaria poder hablar con hermanos del Señor, yo me congrego con hermanos en casas, no pertenezco a una iglesia con denominacion, practico la vida cristiana de la manera en que la iglesia primitiva lo hacia, de una manera muy sencilla y donde cada hermano, tiene la libertad de poder compartir en una reunion lo que el Señor haya puesto en su corazon, desde una cancion, una palabra, una oracion, o simplemente un testimonio... esto edifica a la iglesia, y es solamente el Espiritu Santo quien dirije la reunion, ya que de este modo, no hay una jerarquia ubicada por hombres, es Cristo quien da la autoridad ante los hermanos que participan, segun los dones que El pone en cada hermano ademas, El es nuestro buen pastor y todas estas cosas que comparti pueden ser sometidas a prueba por las Sagradas Escrituras... Dios no quiere una iglesia dividida... por doctrinas...o por diferencias tales como... si se debe o no levantar las manos al alabar...etc, El anhela que seamos uno en El, y principalemente que permanezcamos en Cristo... juntos, la unica division que existia en las iglesias neo-testamentarias, era las localidades... (a las cuales Pablo se dirige en las cartas).
Me gustaria poder compartir con ustedes sus experiencias, y con esto no estoy dividiendome de hermanos que se reunen en iglesias "institucionales"... creo que la comunion permanece ya que hemos creido en Jesus... y somos hijos suyos, hermanos... pero es bueno poder compartir distintas experiencias y enterarnos de las distintas maneras en que Jesucristo se esta moviendo en su iglesia... bendiciones para todos!


Dios te bendiga.

Veo que estas muy entusiasmada reuniendote en grupo con tus familiares y amigos, eso es de beneficio orar y estudiar la biblia en grupo en las casas y no veo ningun pecado en esto.

Mas el enemigo busca a quien deborar, y pertenecer a un grupo Institucional da la certeza de tener una doctrina clara y precisa que es como la brujula que da la dirección. El plan del enemigo es este, reunirse en casa y que cada casa tenga su interpretación como sucede en los grupos grandes. Y que en una casa piensen distintos a la casa de enseguida y dividir mas.

No hay pecado en reunirse en grupo, mas es peligroso decir; "De hoy en adelante no voy a ningun lugar, y me pongo en mi casa solo y quienes quieran acompañarme que lo hagan, porque Pablo asi lo hacia". Mas Pablo era quien visitaba las iglesias para instruilos en Cristo, no los dejo con un antiguo testamento y sus cartas y no se paro mas por ahi.

Espero que me entiendas.
 
A Danielita:

A Danielita:

Soy uruguayo y uno de los miembros màs antiguos en este Foro. Mi hija menor el pròximo octubre cumplirà si Dios quiere 19 años.
Vivimos en Ciudad de la Costa (Lomas de Solymar) Depto. de Canelones.
Recièn estoy copiando tus mensajes para leerlos luego y contestarte mañana.
Esto es apenas mi saludo de bienvenida.
Dios te bendiga.
Ricardo.
 
Re: la iglesia en las casas...

El liderazgo en la iglesia y el liderazgo de Cristo

Juntando todo lo dicho anteriormente, los líderes de la iglesia del Nuevo Testamento eran simplemente hermanos, hombres de la familia local, maduros y servidores fidedignos de Cristo; cristianos normales y corrientes que eran responsables por el rebaño, pastoreándolo en medio de las pruebas y bendiciones diarias. En esencia, los líderes de la iglesia local representaban el Liderazgo de Cristo en la asamblea.

A la vista de esto, es mi oración que el Señor haga pedazos la idea no bíblica del sistema de clero profesional que ha sido responsable de transformar las cosas preciosas del Señor en sistemas de rangos jerárquicos, programas dirigidos, e instituciones orientadas hacia sí mismas. Nuevamente, la Biblia no sabe nada de una clase separada de líderes ordenados (clero) quienes gobiernan sobre una clase inferior de creyentes (laicos). Al respecto, Jon Zens sagazmente arguye:

"La distinción Católico Romana de 'clérigo - laico', pervive, aunque de forma diferente, en el Protestantismo. Esta distinción no escritural ha hecho, y hace, un daño indecible... si somos sensibles a la Escritura, debemos desterrar para siempre de nuestro vocabulario la distinción común de 'clero' ('pastor') y 'laico' (el resto de la iglesia). Esa distinción perpetúa una falsedad atroz, pero desgraciadamente refleja fielmente lo que es nuestro pensamiento y practica." (¿Qué es un Ministro? --Principles for the Recovery of N. T. Church Ministry," Searching Together, Vol. 11:3).

En efecto, el sistema moderno de pastor del Protestantismo es un artefacto religioso que ha permitido que los miembros de la iglesia caigan en el mal hábito de ser un mero auditorio debido a su fuerte confianza puesta en un solo líder. Esta estructura, no bíblica, de clero dominante ha convertido a la iglesia en el lugar donde los cristianos observan a los profesionales cómo ejecutan y desarrollan sus programas religiosos. Ha transformado la asamblea en un centro para el "pulpitismo" profesional que es apoyado por los espectadores laicos. En suma, el concepto del liderazgo del clero en la iglesia invariablemente aplasta la vida del Cuerpo. Christian Smith señala este punto bellamente:

"La profesión del clero es fundamentalmente autofrustrante. Su propósito constatable está en nutrir y hacer madurar espiritualmente a la iglesia, una meta valiosa. En la actualidad, sin embargo, lo que logra es lo opuesto produciendo una dependencia permanente de los laicos hacia el clero. El clero llega a ser para sus congregaciones como padres cuyos niños nunca crecen, como médicos cuyos pacientes nunca llegan a sanar, como profesores cuyos estudiantes nunca se gradúan. La existencia de un ministro profesional a tiempo completo pone demasiado fácil a los miembros de iglesia el no tomar responsabilidades en la vida de la iglesia. ¿Y, por qué habrían de hacerlo? Ese es el trabajo del pastor (así piensan). Pero el resultado es que los laicos quedan en un estado de dependencia pasiva. Imagine, sin embargo, una iglesia cuyo pastor se marcha y no pueden hallar un reemplazo. Eventualmente, los miembros de esa iglesia, de manera ideal, tendrían que conseguir levantarse de sus asientos, juntarse, y decidir quienes enseñarían, quienes aconsejarían, quienes resolverían las disputas, quienes visitarían a los enfermos, quienes dirigirían la adoración, y así sucesivamente. Con una pizca de perspicacia se darían cuenta de que la Biblia pide al Cuerpo, como una unidad, que hagan estas cosas juntos, incitándose cada uno a considerar qué dones tiene para contribuir, qué papel podría desempeñar para la edificación del Cuerpo... cuando nos volvemos a la Palabra de Dios y la leemos nuevamente, vemos que la profesión del clero es el resultado de nuestra historia y cultura humanas y no la voluntad de Dios para la iglesia. Es sencillamente imposible construir una justificación Bíblicamente defendible para la institución del clero como nosotros la conocemos." ("iglesia Sin Clero," Voces en el Desierto, Nov./Dic. '88).

En el análisis final, el asunto del liderazgo en la iglesia local se reduce realmente a una cuestión central: el Liderazgo de Cristo. Descansa sobre la espinosa pregunta: ¿quien será la Cabeza, Cristo o nosotros? La cuestión apremiante puede resumirse de este modo: ¿Continuaremos apoyando un sistema (clero/laicos) y un oficio (pastor único) ausente en el Nuevo Testamento, o dejaremos de lado humildemente nuestras ideas humanas sobre el liderazgo en favor del modelo bíblico?

Lo que se ha dicho en este capítulo sin ninguna duda hará levantar las cejas de los que leen sus Biblias con las gafas oscuras del clericalismo moderno. Confío que he hablado con caridad, pero las limitaciones que se imponen sobre la comunidad de creyentes por el moderno sistema clerical es asunto solemne y constituye un escándalo no pequeño en el reino de Dios. No espero una reacción temeraria ni una aprobación descuidada a lo que he dicho. En cambio, desafío a mis lectores a que se acerquen cuidadosamente y, en oración, consideren este asunto sacando su propias conclusiones al respecto.

Que comencemos a recuperar y guardar el lugar único del Señor como Cabeza soberana en Su iglesia, y que Él libere a Su querido sacerdocio (de todos los creyentes) de las cadenas que lo han atado.

CAPÍTULO 6

LA DIRECCIÓN DE LA IGLESIA LOCAL

¿Cómo eran dirigidas?

En el último capítulo, descubrimos que la noción moderna del "pastor," que es la forma aceptada de liderazgo en la mayoría de las iglesias evangélicas, es totalmente extraña en el Nuevo Testamento. Según los datos bíblicos, los líderes de la iglesia primitiva eran sencillamente hombres locales que cuidaban de la asamblea. Dios les dio la tarea de pastorear y vigilar el rebaño. La Biblia llama a estos hombres ancianos, supervisores (obispos), y pastores.

Aunque es cierto que la Biblia no promueve ninguna otra forma de liderazgo que una forma compartida, la mera presencia de una pluralidad de ancianos no asegura que una iglesia sea saludable. Pero si los ancianos no dirigen en la manera que prescribió Cristo, su efecto puede ser más dañino para la asamblea que el de un solo líder (así, en vez de haber un tirano espiritual en una iglesia, habrá varios). Por esta razón es crucial la pregunta de cómo debe ser la dirección en la iglesia.

En contraposición al concepto moderno, nunca se vio a los ancianos del Nuevo Testamento siendo las figuras prominentes en la iglesia. Por consiguiente, hay una curiosa falta de prioridad hacia el liderazgo en las epístolas del Nuevo Testamento. Por ejemplo, las cartas de Pablo a las iglesias no se dirigen nunca a los líderes de las iglesias, sino a las mismas iglesias (note que en Filipenses 1:1 el liderazgo se menciona de paso, y sólo después de dirigirse a la iglesia):

Filp 1:1 Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús; a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, con los obispos y diáconos.

Esta detalle es bastante significativo, por lo vigorosamente que contradice la popular creencia evangélica sobre la superioridad del pastor y de su personal; creencia que está indiscutiblemente en desacuerdo con la enseñanza bíblica. Además, todo el asunto del liderazgo tiene mucha menos relevancia en el Nuevo Testamento que la que se le da en la mayoría de los círculos cristianos modernos. La fuerza principal en las Sagradas Escrituras se centra en el funcionamiento de la iglesia, en vez de en cómo opera su dirección.

Autoridad jerárquica posicional y espiritual

La Biblia pone mucho énfasis en el hecho de que el liderazgo en el reino de Dios es drásticamente diferente del liderazgo en ambos mundos, el Gentil y el judío. A diferencia de la idea gentil de autoridad, la orientación cristiana del liderazgo no vincula la autoridad con el poder inherente a un rango o a unas estructuras jerárquicas. Los líderes del Nuevo Testamento no mandaban sobre los santos mediante una jerarquía establecida y una cadena de mando como hacían los líderes en el mundo gentil. (Mat. 20:25-28):

Mat 20:25 Entonces Jesús los llamó y les dijo: --Sabéis que los gobernantes de los gentiles se enseñorean sobre ellos, y los que son grandes ejercen autoridad sobre ellos.

Mat 20:26 Entre vosotros no será así. Más bien, cualquiera que anhele ser grande entre vosotros será vuestro servidor;

Mat 20:27 y el que anhele ser el primero entre vosotros, será vuestro siervo.

Mat 20:28 De la misma manera, el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.

Además, a diferencia de la noción judía de autoridad, la orientación cristiana de liderazgo no vincula la autoridad con la ordenación externa, oficio, posición, título, o protocolo. Por tanto, los líderes en la iglesia primitiva no mandaban por apelación a una autoridad externa, basada en un título o posición, que asumieron sobre sí mismos, como hicieron los líderes en el mundo judío. (Mat. 23:1-12):

Mat 23:1 Entonces habló Jesús a la multitud y a sus discípulos,

Mat 23:2 diciendo: "Los escribas y los fariseos están sentados en la cátedra de Moisés.

Mat 23:3 Así que, todo lo que os digan hacedlo y guardadlo; pero no hagáis según sus obras, porque ellos dicen y no hacen.

Mat 23:4 Atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos mismos no las quieren mover ni aun con el dedo.

Mat 23:5 Más bien, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Ellos ensanchan sus filacterias y alargan los flecos de sus mantos.

Mat 23:6 Aman los primeros asientos en los banquetes y las primeras sillas en las sinagogas,

Mat 23:7 las salutaciones en las plazas y el ser llamados por los hombres: Rabí, Rabí.

Mat 23:8 "Pero vosotros, no seáis llamados Rabí; porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.

Mat 23:9 Y no llaméis a nadie vuestro Padre en la tierra, porque vuestro Padre que está en los cielos es uno solo.

Mat 23:10 Ni os llaméis Guía, porque vuestro Guía es uno solo, el Cristo.

Mat 23:11 Pero el que es mayor entre vosotros será vuestro siervo;

Mat 23:12 porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.

Por contra, la orientación cristiana del liderazgo vincula la autoridad espiritual con el servicio y la madurez espiritual. Está basada en el modelo de siervo – dirigente que era tema común en la enseñanza de nuestro Salvador; un modelo que milita contra los venenos de la sumisión forzada, la estructura del autoritarismo patriarcal, y las relaciones jerárquicas (Mat. 23:11, Mar. 10:42-45, Luc. 22:26-27):

Mat 23:11 Pero el que es mayor entre vosotros será vuestro siervo.

Mar 10:42 Pero Jesús los llamó y les dijo: --Sabéis que los que son tenidos por príncipes de los gentiles se enseñorean de ellos, y sus grandes ejercen autoridad sobre ellos.

Mar 10:43 Pero no es así entre vosotros. Más bien, cualquiera que anhele hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,

Mar 10:44 y cualquiera que anhele ser el primero entre vosotros será siervo de todos.

Mar 10:45 Porque el Hijo del Hombre tampoco vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.

Luc 22:26 Pero entre vosotros no será así. Más bien, el que entre vosotros sea el importante, sea como el más nuevo; y el que es dirigente, como el que sirve.

Luc 22:27 Porque, ¿cuál es el más importante: el que se sienta a la mesa, o el que sirve? ¿No es el que se sienta a la mesa? Sin embargo, yo estoy en medio de vosotros como el que sirve.

En este contexto, el modelo cristiano de liderazgo sirvió como salvaguarda al liderazgo vivo y real de Cristo y es un freno al autoritarismo, al formalismo, y al clericalismo. El brote de la vara de Aarón es una bella ilustración que revela que la base de la autoridad espiritual descansa en la manifestación de vida de la resurrección mediante el servicio espiritual, en vez de en una supuesta posición (Núm. 17:1-12):

Núm 17:1 Entonces Jehovah habló a Moisés diciendo:

Núm 17:2 "Habla a los hijos de Israel y toma doce varas, una vara por cada casa paterna, de todos sus dirigentes de casas paternas. Escribe el nombre de cada uno en su vara,

Núm 17:3 y en la vara que corresponde a Leví escribe el nombre de Aarón; pues habrá una vara para cada jefe de su casa paterna.

Núm 17:4 Pondrás estas varas en el tabernáculo de reunión, delante del testimonio, donde yo me encontraré con vosotros.

Núm 17:5 Y sucederá que florecerá la vara del hombre que yo escoja. Así quitaré de sobre mí las quejas de los hijos de Israel con que murmuran contra vosotros."

Núm 17:6 Moisés habló a los hijos de Israel, y todos sus dirigentes le dieron varas, una vara por cada dirigente de cada casa paterna, doce varas en total. Y la vara de Aarón estaba entre sus varas.

Núm 17:7 Luego Moisés puso las varas delante de Jehovah en el tabernáculo de reunión.

Núm 17:8 Y sucedió que al día siguiente Moisés entró en el tabernáculo de reunión y vio que la vara de Aarón, de la casa de Leví, había brotado, echado botones, dado flores y producido almendras maduras.

Núm 17:9 Entonces Moisés llevó de delante de Jehovah todas las varas a los hijos de Israel. Ellos las vieron y tomaron cada uno su vara.

Núm 17:10 Entonces Jehovah dijo a Moisés: "Vuelve a poner la vara de Aarón delante del testimonio, para que sea guardada como señal para los rebeldes. Así harás cesar sus quejas contra mí, para que ellos no mueran."

Núm 17:11 Moisés hizo como le mandó Jehovah; así lo hizo.

Núm 17:12 Entonces los hijos de Israel hablaron a Moisés diciendo: "¡He aquí que perecemos! ¡Estamos perdidos! ¡Todos nosotros estamos perdidos!

Los líderes de la iglesia primitiva lideraban con el ejemplo, no mediante coerción o manipulación. El respeto que recibían de la congregación estaba en proporción directa a su servicio sacrificial (1 Cor. 16:10 -11,15-18, Filp. 2:29-30, 1 Tes. 5:12-13, 1 Tim. 5:17):

1Cor 16:10 Si llega Timoteo, mirad que esté con vosotros sin temor; porque él trabaja en la obra del Señor, igual que yo.

1Cor 16:11 Por tanto, nadie le tenga en poco; más bien, encaminadlo en paz para que venga a mí, porque le espero con los hermanos.

1Cor 16:15 Hermanos, sabéis que la casa de Estéfanas es las primicias de Acaya y que se han dedicado al servicio de los santos; os ruego

1Cor 16:16 que vosotros os sujetéis a los tales y a todos los que colaboran y trabajan arduamente.

1Cor 16:17 Me alegro de la venida de Estéfanas, Fortunato y Acaico, porque éstos suplieron lo que me faltaba de vuestra parte;

1Cor 16:18 porque tranquilizaron mi espíritu y el vuestro. Reconoced, pues, a los tales.

Fil 2:29 Recibidle, pues, en el Señor con todo gozo y tened en alta estima a hombres como él;

Fil 2:30 porque a causa de la obra de Cristo estuvo cercano a la muerte, arriesgando su vida para completar lo que faltaba en vuestro servicio a mi favor.

1Tes 5:12 Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que entre vosotros trabajan, que os presiden en el Señor y que os dan instrucción.

1Tes 5:13 Tenedlos en alta estima con amor a causa de su obra. Vivid en paz los unos con los otros.

1Tim 5:17 Los ancianos que dirigen bien sean tenidos por dignos de doble honor, especialmente los que trabajan arduamente en la palabra y en la enseñanza.

Su autoridad se basaba en su condición espiritual interior y en su servicio externo, en lugar de en una posición sacerdotal que les era conferida exteriormente. La función principal de los ancianos era dirigir y enseñar al rebaño a afianzarse y a obedecer a su Cabeza Pensante. En palabras de Pedro (1 Pe. 5:3):

1 Pe 5:3 No como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cargo, sino como ejemplos para el rebaño.

Un ejemplo que infiere dos cosas:

1- Actividad por parte de los ancianos (siendo ellos ejemplo) y 2- Libertad para permitir que los otros hermanos puedan ser activos también (para que otros sigan su ejemplo). Por lo tanto, si un anciano espera que otros ganaran a los perdidos, a él incumbía ser modelo de ganador de almas ante la asamblea. ¿Por qué? Porque dirigía mediante el ejemplo. Por consiguiente, la idea que sostiene que los pastores no ganan almas porque "los pastores no engendran ovejas, sino que las ovejas son quienes engendran ovejas" es un ejemplo clásico de cómo se violenta y destroza la enseñanza de la Sagrada Escritura. Si forzamos la metáfora de la relación pastor – oveja más allá de su significado intencional, no solamente son los pastores incapaces de criar ovejas, ¡además las venden, las matan, y se las comen! Desgraciadamente, muchos "pastores" modernos son culpables de esto mismo. En lugar de alimentar a las ovejas, se alimentan con ellas (Eze. 34:1-10):

Eze 34:1 Entonces vino a mí la palabra de Jehovah, diciendo:

Eze 34:2 "Oh hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel. Profetiza y di a los pastores que así ha dicho el Señor Jehovah: '¡Ay de los pastores de Israel que se apacientan a sí mismos! ¿Acaso los pastores no deben apacentar a las ovejas?

Eze 34:3 Pero vosotros os coméis a las mejores de ellas y os vestís con la lana. Degolláis a la oveja engordada, y no apacentáis al rebaño.

Eze 34:4 No fortalecéis a las ovejas débiles ni curáis a las enfermas. No habéis vendado a la perniquebrada, ni habéis hecho volver a la descarriada, ni habéis buscado a la perdida. Más bien, las habéis dominado con dureza y con violencia.

Eze 34:5 Ellas se han dispersado por falta de pastor, y están expuestas a ser devoradas por todas las fieras del campo. Han sido dispersadas;

Eze 34:6 mis ovejas han andado descarriadas en todos los montes y sobre toda colina alta. Mis ovejas han sido dispersadas por toda la faz de la tierra, y no ha habido quien se preocupe de ellas ni quien las busque.'

Eze 34:7 Por eso, oh pastores, oíd la palabra de Jehovah:

Eze 34:8 "¡Vivo yo, dice el Señor Jehovah, que por cuanto mis ovejas fueron expuestas a ser robadas o a ser devoradas por las fieras del campo, por no tener pastor, y mis pastores no se preocuparon por mis ovejas, sino que los pastores se apacentaron a sí mismos y no apacentaron a mis ovejas;

Eze 34:9 por eso, oh pastores, oíd la palabra de Jehovah.

Eze 34:10 Así ha dicho el Señor Jehovah: ¡He aquí yo estoy contra los pastores, y demandaré mis ovejas de sus manos!

Haré que dejen de apacentar a las ovejas, y ellos dejarán de apacentarse a sí mismos. Libraré a mis ovejas de sus bocas, y no les servirán más de comida."

Además, así como los ancianos estaban frente a la asamblea como modelos de servicio y vida espiritual, de esa misma manera alentaban a los hermanos a vivir y servir (1 Tes. 5:12-15):

1Tes 5:12 Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que entre vosotros trabajan, que os presiden en el Señor y que os dan instrucción.

1Tes 5:13 Tenedlos en alta estima con amor a causa de su obra. Vivid en paz los unos con los otros.

1Tes 5:14 Hermanos, también os exhortamos a que amonestéis a los desordenados, a que alentéis a los de poco ánimo, a que deis apoyo a los débiles, y a que tengáis paciencia hacia todos.

1Tes 5:15 Mirad que nadie devuelva a otro mal por mal; en cambio, procurad siempre lo bueno los unos para los otros y para con todos.

Alentaban a los maestros a enseñar, a los predicadores a predicar, a los profetas a profetizar, al exhortador para exhortar, etc., tanto dentro como fuera de las reuniones de iglesia. Recuerde que en las reuniones de la iglesia primitiva se le permitía a cada miembro (hombre o mujer) servir según sus dones, en lugar de engendrar pasividad y muerte espiritual entre la congregación mientras un hombre daba un sermón de 45 minutos. Sencillamente, el liderazgo en el Nuevo Testamento no era una obligación servil ni una necesidad desagradable. En cambio, era un recurso valioso marcado por la humildad, la relación, el servicio, y el ejemplo piadosos.

Un paradigma prestado sobre el liderazgo

Trágicamente, el modelo moderno que a menudo se emplea para el liderazgo de la iglesia está sacado del mundo de las empresas. El paradigma que se utiliza es un paradigma administrativo donde el factor, preconizado por un líder de iglesia, es definir una meta y un gráfico según un programa estratégico para alcanzar esa meta. De esta manera, la iglesia ha sido atrapada por la corriente organizativa de la cultura empresarial americana. Como resultado, los cristianos han bautizado los modelos seculares de liderazgo y los han aceptado como Bíblicamente válidos. ¡Nuestra idea moderna sobre la dirección de la iglesia está culturalmente prisionera del espíritu de este tiempo!

En vista de que el gran peso de la enseñanza bíblica sobre el liderazgo se ha perdido en las ideas predominantes de nuestra cultura, necesitamos volvernos al terreno bíblico. Nos haría bien recordar que la metáfora principal que la Biblia hace sobre la iglesia no es de una organización, sino de un organismo. Por consiguiente, la metáfora de la empresa es una metáfora deformada. Como hemos dicho en un capítulo anterior, la metáfora principal para la iglesia es la de una familia viva. Por esta razón, el modelo bíblico para el liderazgo cristianos es el de un padre y una madre espirituales (1 Tes. 2:6-12):

1Tes 2:6 Tampoco buscamos gloria de parte de los hombres, ni de vosotros, ni de otros; aunque podríamos haberos sido carga como apóstoles de Cristo.

1Tes 2:7 Más bien, entre vosotros fuimos tiernos, como la nodriza que cría y cuida a sus propios hijos.

1Tes 2:8 Tanto es nuestro cariño para

vosotros que nos parecía bien entregaros no sólo el evangelio de Dios sino también nuestras propias vidas, porque habéis llegado a sernos muy amados.

1Tes 2:9 Porque os acordáis, hermanos, de nuestro arduo trabajo y fatiga; que trabajando de día y de noche para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios.

1Tes 2:10 Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente actuamos entre vosotros los creyentes.

1Tes 2:11 En esto, sabéis que fuimos para cada uno de vosotros como el padre para sus propios hijos: Os exhortábamos, os animábamos

1Tes 2:12 y os insistíamos en que anduvieseis como es digno de Dios, que os llama a su propio reino y gloria.

Sin embargo, incluso la imagen paternal del liderazgo puede llegar a torcerse y convertirse en prosa fría si no la miramos contra el telón de fondo del sacerdocio universal de todos los creyentes y de nuestra relación primaria de unos con otros como hermanos y hermanas (Mat. 23:8):

Mat 23:8 Pero vosotros, no seáis llamados Rabí; porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.

Dicho sencillamente, los líderes de la iglesia del Nuevo Testamento lideraban de una manera no jerárquica, no aristocrática, no autoritaria, no institucional, y no clerical. Además, el liderazgo que se puede ver en el Nuevo Testamento es primariamente de servicio, y más importante, de relación.

Por eso, llevar la dirección de la iglesia local para que funcione según los mismos principios de un ejecutivo de una corporación empresarial o de un aristócrata en un sistema de castas imperiales nunca fue el pensamiento del Señor. Por esto los autores del Nuevo Testamento nunca utilizaron metáforas jerárquicas o aristocráticas para describir la dirección de la iglesia. Más bien los líderes de la iglesia del Nuevo Testamento son descritos como siervos y como niños, en vez de como señores y amos (Luc. 22:25-26):

Luc 22:25 Entonces él les dijo: --Los reyes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que tienen autoridad sobre ellas son llamados bienhechores.

Luc 22:26 Pero entre vosotros no será así. Más bien, el que entre vosotros sea el importante, sea como el más nuevo; y el que es dirigente, como el que sirve.


Aunque este tipo de pensamiento entra en conflicto directo con las ideas populares de hoy sobre la autoridad, encaja perfectamente con la enseñanza bíblica del reino de Dios, la esfera en que los débiles son fuertes, los pobres son ricos, los humildes son enaltecidos, y los últimos son los primeros.

Recapacitando sobre nuestra noción de autoridad

La razón principal por la cual nuestras ideas sobre el liderazgo de la iglesia se han desviado tanto de las enseñanzas bíblicas se puede rastrear en nuestra tendencia a proyectar sobre los escritores bíblicos nuestras ideas políticas americanas acerca de la autoridad, la posición, y los cargos y volverlos a leer en el texto del Nuevo Testamento. Cuando leemos términos como "pastor," "obispo," y "anciano" en el Nuevo Testamento, tendemos a pensar en ellos desde el punto de vista de funcionarios ejecutivos como "Presidente" y "Senador." De esta manera, consideramos a los ancianos, pastores, y obispos como construcciones sociológicas (cargos). Les vemos como puestos o cargos que poseen una realidad independiente de las personas que los ocupan. Por tanto, asimilamos a los funcionarios de la iglesia con una autoridad incuestionable sobre todos los demás creyentes en la asamblea, simplemente porque "tienen un cargo".

Sin embargo la noción del liderazgo en el Nuevo Testamento es notablemente diferente. No hay garantía bíblica para la idea de que el liderazgo de la iglesia es oficial, ni para la idea de que algunos creyentes tienen autoridad sobre otros creyentes. La única autoridad que existe en la iglesia es Cristo mismo. Los humanos no tienen ninguna autoridad en sí mismos. La autoridad divina solamente reside en la Cabeza. Por lo tanto, la autoridad en el Nuevo Testamento es representativa. Esto significa que aunque los creyentes puedan representar y expresar la autoridad divina, ellos nunca asumen tal autoridad.

La tarea del liderazgo bíblico es simplemente descubrir, ser expresión y modelo según la voluntad de la Cabeza. En la medida en que un miembro del Cuerpo refleja la Mente de la Cabeza, en ese grado representa la autoridad divina. Y en el grado en que un miembro es modelo de la voluntad de Dios, en ese grado él dirige. En relación a esto, el liderazgo según la Biblia está orientado al servicio; los líderes son los que sobresalen en el servicio y en el ministerio. Esto les habilita para modelar y diseñar cómo debe funcionar la iglesia. Por eso no es sorprendente que el Apóstol Pablo jamás escogiera ninguna de las más de 40 palabras más comunes en griego para decir "oficial" y "autoridad", cuando trata sobre el liderazgo cristiano. La realidad sorprendente es que la palabra favorita de Pablo para definir el liderazgo bíblico es lo opuesto a lo que las mentes naturales sospecharían: es diakonos, que significa "un siervo".

Sobre el hermoso pasaje de Marcos 10:42-43:

Mar 10:42 Pero Jesús los llamó y les dijo: --Sabéis que los que son tenidos por príncipes de los gentiles se enseñorean de ellos, y sus grandes ejercen autoridad sobre ellos.

Mar 10:43 Pero no es así entre vosotros. Más bien, cualquiera que anhele hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor.

Al respecto Ray Stedman comenta:

"La autoridad entre los cristianos no se deriva de la misma fuente que la autoridad mundana, ni esta se ha de ejercer de la misma manera. El punto de vista del mundo sobre la autoridad pone a los hombres unos sobre los otros, como en una estructura militar de mando, una jerarquía ejecutiva de una empresa, o un sistema gubernamental ...Impulsados por la competitividad causada por la caída, y en vista de la rebeldía y crueldad de la naturaleza humana pecadora, el mundo no podría funcionar sin el uso de estructuras organizadas que tomen y hagan ejecutar ciertas decisiones. Pero como Jesús cuidadosamente declaró, '...esto no será así entre vosotros.' Los discípulos mantienen siempre una relación los unos con los otros diferente de como es entre los mundanos. Los cristianos son hermanos y hermanas, hijos de un Padre, y miembros unos de los otros. Jesús lo dijo claramente en Mateo 23:8:

Mat 23:8 Pero vosotros, no seáis llamados Rabí; porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.

A lo largo de veinte siglos la iglesia ha ignorado virtualmente estas palabras. Probablemente con la mejor de las intenciones, ha pedido repetidamente prestadas todas las estructuras de autoridad del mundo, cambiando los nombres de reyes, generales, capitanes, presidentes, gobernadores, secretarios, directores, y jefes por los de papas, patriarcas, obispos, mayordomos, diáconos, pastores, y ancianos, y va alegremente a su aire, enseñoreándose sobre los hermanos y destruyendo así el modelo de servicio que nuestro Señor intentó... En alguna parte, seguramente, las palabras de Jesús, '...así no será entre vosotros,' debe tener algún efecto. Aunque en la mayoría de las iglesias hoy se le ha dado una impensable aceptación a la idea de que el pastor es la voz final en autoridad, tanto en doctrina como en práctica, y que él es el oficial ejecutivo de la iglesia con respecto a la administración. Pero seguramente, si un papa sobre toda la iglesia es malo, un papa sobre cada iglesia no es mejor." ("A Pastor's Authority," Discovery Paper #3500, Discovery Publishing).

No olvidemos el hecho que los ancianos del Nuevo Testamento eran siervos del Dueño, el Señor Jesús, quien era el único que poseía los derechos sobre la iglesia. Así, a lo largo de todo el Nuevo Testamento, jamás hay una sola referencia a ningún líder de la iglesia como "la cabeza" de una iglesia. Tal titulo se reserva exclusivamente para el Señor Jesús. Puesto que los ancianos de las asambleas primitivas no consideraban la iglesia como de su propiedad, no impusieron sus planes mediante fuerza, ni se empecinaron exigiendo a los demás una sumisión insensata apelando a "su posición". En otras palabras, los ancianos de la iglesia primitiva no funcionaban como una oligarquía (el gobierno absoluto de unos cuantos) o una dictadura (el gobierno absoluto de una persona).

Por la misma razón las asambleas primitivas no funcionaban como una democracia moderna. En el Nuevo Testamento nunca se presentan los asuntos de la iglesia siendo resueltos mediante la regla de la mayoría. Aunque nosotros podemos pensar que nuestro sistema democrático americano se basa en la teología bíblica, no encontramos un solo ejemplo en todo el Nuevo Testamento en donde se tomen decisiones levantando las manos.

("Meditando sobre los odres de vino" por Frank A. Viola.)

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Someteos unos a otros en el temor de Dios. (Efesios 5:21)



Porque si la oración de uno o dos tiene tanta fuerza, ¡¡cuánto más la del obispo JUNTAMENTE CON TODA LA IGLESIA!! (Ignacio a los Efesios V-II)



VI-Y cuanto unos ve más callado a su obispo, mayor reverencia ha de tributársele. Porque a todo el que envía el Padre de familias a su propia administración, no de otra manera hemos de recibirle que al mismo que le envía. Luego cosa evidente es que hemos de mirar al obispo como al Señor mismo.

2- Ahora bien , por lo que a vosotros toca, Onésimo levanta al cielo, con sus alabanzas, vuestra disciplina en Dios, y me cuenta cómo todos vivís conforme a la verdad, y que entre vosotros no anida herejía alguna. ES MÁS, PUESTO CASO QUE JESUCRISTO OS HABLA EN VERDAD, A NADIE MÁS TENEIS INTERÉS EN ESCUCHAR.




Ignacio a los Magnesios:

III-I- Mas también a vosotros os conviene no abusar de la poca edad de vuestro obispo, sino, mirando en él la virtud de Dios Padre, tributarle toda reverencia. Así he sabido que vuestros santos ancianos no tratan de burlar su juvenil condición, que salta a los ojos, sino que, como prudentes en Dios, le son obedientes o, por mejor decir, NO A ÉL, SINO AL PADRE DE JESUCRISTO, QUE ES EL OBISPO O INSPECTOR DE TODOS.



Ignacio a los Tralianos:

VII.I- ¡¡ Alerta pues contra los tales (los herejes) !! Y así será a condición de que no os engriais y os mantengáis inseparables de Jesucristo Dios, de vuestro obispo y de las ordenaciones de los Apóstoles.



Ya tenemos pues el sentido de mantenerse obedientes al obispo y a los diaconos y ancianos: LA HEREJIA !!!!



No se trata pues de una obediencia ciega y de un poder jerárquico, sino que Dios, habiendo repartido Sus dones, da un discernimiento especial sobre los obispos, ancianos y diaconos para apacentar la grey y dirigirla A SALVO DE HEREJÍAS.




Ignacio a los Filadelfos:

IX- Acordaos en vuestras oraciones de la Iglesia de Siria, que tiene ahora, en lugar de mí, POR PASTOR A DIOS. SOLO JESUCRISTO y vuestra caridad harán CON ELLA OFICIO DE OBISPO .




En Ignacio a los Filadelfios, también vemos el sentido del obispo, que es para que las ovejas le sigan y se aparten de las malas hierbas de la herejía.


estoy de acuerdo , es un sistema falso que heredamos de roma , donde un solo hombre habla y controla a los demas que tambien tienen el mismo espiritu que el