¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Dante

2
30 Noviembre 2000
267
1
54
Os comparto una carta escrita recientemente a un testigo que me escribía preguntandome, cómo es posible me hubiese apartado de la "verdad".


Hola Apolos, con este escrito pretendo explicarte cómo es posible que un testigo que ama a Jehová pudo apartarse de la Organización Watchtower. Puedo recordar el contenido de mis oraciones en las cuales daba gracias a Jehová por haberme permitido estar en la única religión verdadera, por poder ser su testigo y poder dirigirme a Él con la confianza de que me iba a escuchar las peticiones de mi corazón. Entre ellas, estaba el poder servir de misionero pasando por la escuela de Galaad.

Como ya has podido leer mi biografía de www.geocities.com/dmora4 trataré de centrarme en el periodo durante el cual las dudas empezaron a florecer. Pero, ¿es malo tener dudas? Creo no equivocarme si indico que la totalidad de los testigos de Jehová tienen dudas, pues entiendo es normal el que uno en su interior pueda discrepar o no estar de acuerdo con ciertas cosas. Pero estas, se suelen guardar en un cajón para que no molesten. Se suele tener temor de plantearlas con toda libertad, pues ¿qué pensarán de mi, si es el caso de que sirvo como anciano, siervo ministerial, precursor, .... o testigo por muchos años? Lo que los demás piensan de nosotros es importante. Cuesta muchos años de servicio llegar a un puesto de responsabilidad. El expresar con toda honestidad un duda, puede tener consecuencias, pues no está bien visto el tenerlas. Más adelante, te digo por qué digo esto.

¿Cómo es posible que uno pueda dejar de creer que uno está en la religión verdadera cuando es el caso de que ha tenido pleno convencimiento por 12 años, llegando a entregar su vida a esta creencia? Es un proceso, de la misma forma que es un proceso el llegar a creer tal cosa. Las circunstancias que a uno le rodean tiene parte importante en esto. Durante muchos años creo hubiera dado igual lo que me hubiesen mostrado, aunque yo dijera que estaría dispuesto a reconocer mi error, yo sabía que esa era la verdad, así que aunque me mostraran cosas a las cuales yo no supiera responder, o no entendiera, o incluso en mi interior yo no estuviera de acuerdo, yo jamás dejaría de ser testigo. Recuerdo el tiempo durante el cual no se podía hacer la prestación social en sustitución del servicio militar, había jóvenes que no entendía las razones bíblicas para no efectuarlo, pero si la Organización decía eso equivaldría a ser parte de este mundo, eso era suficiente para someterse, aunque uno en su interior no entendiera cómo el ayudar a ancianos fuera malo. Yo deseaba ir a la cárcel por esta causa. Las circunstancias me permitían ser feliz dentro de aquella nube, al grado de que lloraba de emoción cuando escuchaba a un miembro del cuerpo gobernante en una asamblea de distrito. La que llegó a ser mi esposa sentía igual que yo, pues le hicimos un voto a Jehová de que si Él disponía de las circunstancias, nosotros iríamos a donde Él dispusiera.....

Apolos, si Dios no edifica la casa de nada vale lo que uno pueda hacer o decir. A Jesús no escucharon muchos, aunque sus argumentos tendrían que entrar hasta lo más hondo, ¿cómo es posible hubiera personas que no le aceptasen, e incluso lo matasen? ¿verdad que no se entiende? Del mismo modo, yo no entendía cómo todo el mundo no se hacía testigo de Jehová. La predicación me convencía más de que tenía la verdad, pues nadie me mostraba cosas que me hicieran plantearme seriamente si estaba en el lugar equivocado. Esto es mucho más profundo y complejo de lo que uno puede imaginar. Desde fuera de la Organización, uno se lleva muchas sorpresas, y se da cuenta que uno veía al mundo por un cristal defectuosamente graduado. He podido conocer de cerca de personas de otros grupos religiosos, que a mi juicio creen disparates, pero que están terriblemente felices y convencidos de que están en la única verdad, la cual tienen miedo de perder, pues creen que Satanás se valdrá de personas bien intencionadas para confundirlas. Es tremendo la gran cantidad de similitudes que existen en tantos grupos, a mi juicio, no sanos, los argumentos son idénticos. Un testigo no tiene alcance a conocer esto, pues no puede acercarse muy de cerca de otros grupos.

Creo no equivocarme que cuando estás leyendo esto, lo haces con cierto temor, a que puedas leer algo que te impacte de verdad. Algo que pueda crear una seria duda en tu vida como testigo de Jehová. Yo me sentiría así, si yo fuera el testigo. Ese temor, paraliza, y no permite ser objetivo, aunque tu desees serlo. En ciertos momentos en los cuales yo creía poder llegar a tener dudas, quizás al leer algún comentario bíblico, o hablar con un evangélico, yo sentía la necesidad de recordar las razones por las cuales yo creía estaba en la verdad, valla que algún ‘detalle’ me hiciera dudar. La cosa es mucho más compleja cuando añadimos el factor emocional. Lo emocional empaña nuestra visión, queramos o no queramos, esto ocurre no solo en el ámbito espiritual. Si a un hijo de le muestra que su madre no es quien el cree, existen factores emocionales que le impiden ver la realidad. Igual con los testigos o otras personas de otras religiones, llegan a ver y a sentir a su Organización como a una madre, algo que dificulta que los argumentos que muestran con toda claridad un error, puedan ser reconocidos abiertamente. Existe mucho miedo a perder esa seguridad que uno siente tener bajo el abrazo de esa madre. Ese miedo paraliza. No te permite ver. Existen mecanismos mentales que nos impiden ver todo aquello que de forma inconsciente hemos programado para rechazarlos. Aceptamos solo aquello que concuerda con nuestra forma de ver las cosas, rechazamos automáticamente todo aquello que va en contra de nuestro creer o pensar. Por otro lado, existe un mecanismo de protección mental mediante el cual, cuando nuestro subconsciente cree no vamos a poder asimilar cierta realidad, este se encarga de que pase desapercibida para nuestro entendimiento. Es demostrado que una de las causas que produce la ansiedad y las depresiones es cuando nuestro subconsciente no quiere que aceptemos cierta realidad en nuestras vidas, esto trae a nuestra vida una lucha que no nos deja respirar, no nos deja vivir.

Suelo recordar las ocasiones en las cuales las personas en la predicación me decían que yo estaba en una secta y que me había lavado el cerebro. Yo trataba de hacerles ver que era totalmente libre de estar allí o de no estarlo, de creer lo que creía o de no creerlo. Años después me llevé una terrible sorpresa. Recuerda, el gran problema que existe de personas que están en grupos sectarios, es que nunca se plantean la posibilidad de poder estarlo. Esto hace imposible que uno pueda empezar el proceso que le permita darse cuenta. Repito, este tema es mucha más complejo de lo yo sepa expresar. Existen ataduras espirituales. Al margen de todo lo que he expresado, si el Espíritu Santo no abre ojos, de nada sirve lo que uno pueda decir o hacer, esto es lo más importante de todo. Pero, claro, uno siempre mira a los demás como los equivocados, los que necesitan ayuda, los que están ciegos –y pensamos lo están porque quieren , porque la verdad es cristalina como el agua, por lo que de seguro un problema existirá en sus corazones-. Esta forma de pensar es la primera barrera que impide que nosotros mismos podamos ver con esa claridad que afirmamos otros se niegan a ver.

Cuando un testigo va predicando de casa en casa, va para transmitir un mensaje de salvación, uno no va para escuchar lo que los demás nos tengan que decir. Uno suele ‘escuchar’ mientras piensa qué es lo que le va a continuar diciendo para seguir con el hilo que uno pretende llevar. No considero eso sea escuchar, en todo caso, oir. La organización capacita para que dando igual lo que una persona pueda decir, usemos esa información para llevarla a nuestro terreno. Eso no es escuchar. Quizás te ocurra esto mismo al leer esta información, a medida que lees, puedes estar pensando en lo que me dirás para llevarme a la Organización, y no tanto para tratar de entender todo lo que te estoy exponiendo y cómo esta información te pueda ayudar. Indico que esto te pueda estar pasando, pues de ser yo testigo creo eso mismo me pasaría a mí mismo.

Esta forma de decir que uno es libre, de creer que realmente uno lo es, pero los hechos mostrar algo diferente, no es exclusivo de personas dentro de los testigos de Jehová, pues se da igualmente en infinidad de agrupaciones, religiosas o no.

Bueno, trataré de explicarte ahora, teniendo presente todo lo anterior, cómo fue que llegué a dejar de ser testigo de Jehová. Aunque la atalaya exprese que los dejan de ser testigos lo hacen por cosas triviales, o por motivaciones no correctas, permíteme que este no fue mi caso, del mismo modo que no lo es para muchos ex testigos de Jehová. Hice entrega de una renuncia de 25 folios, la cual de escribirla ahora, llevaría una cantidad muy superior de hojas. No me fui, y no vuelo, por cualquier cosa, esto lo puedes tener presente. Ahora bien, permíteme te pregunte, ¿por qué razones tú dejarías de ser testigo? ¿qué tendrías que ver o descubrir para dar ese gran paso? Y de ser así, ¿qué harías con tu vida? ¿qué harías con tu relación con Jehová Dios? Muchos testigos se agarran a la Organización como a un clavo ardiendo, creyendo que fuera, solo existe un abismo sin fin, en el cual el Diablo será amor sobre sus vidas. Con esta perspectiva, es hasta entendible que se cierren a ver lo que la realidad pone de manifiesto.

Como te he indicado antes, mi salida formó parte de un proceso. Empezó cuando nos fueron rodeando una serie de circunstancias las cuales poco a poco iban haciendo que aquella verdad perfecta, fuera apareciendo poco a poco algo injusta. No, no hablo de problemas de carácter de personas, pues este es un problema que surge en todo organismo humano, sino más bien me refiero a normas organizacionales. Un hermano, al cual quiero mucho, empezó a entrar en depresiones, llegando un día a cometer un pecado. Ese mismo día nos confesó que algo malo había hecho, pero que quería confesarlo a los ancianos y solicitar ayuda. Mi esposa y yo le indicamos que no se preocupase, que Jehová es misericordioso y que de seguro si el confesaba su pecado, no sería expulsado, sino que recibiría la ayuda que el solicitaba. A los pocos días, nos indicó que no entendía nada, pero que el comité judicial había decidido expulsarlo, como muestra de amor, y que en la próxima reunión sería anunciado su expulsión. Aquello cayó como un jarrón de agua fría sobre nuestras cabezas, pues pudimos ver como se quedó absolutamente solo sin que nadie le ayudase a salir de su depresión, así como tampoco se le ayudaría con sus dudas. Por su esposa supimos de que su estado era en verdad malo y que consideraba necesitaba ayuda. Continuó asistiendo a las reuniones, y a los tres meses, solicitó su restauración. Le fue denegada. Acudí a un anciano indicando que ese hermano necesitaba ayuda emocional, pues estaba dentro de una gran depresión. El anciano me indicó que esto no era viable. Le pregunté que me pasaría si yo decidía ayudar a esta persona, me advirtió de las consecuencias, sería expulsado también. Esta situación hay que vivirla, hay que conocer, ver y escuchar a los que formaron parte de ella, para poder entender que estaba fuera completamente del amor de Jesús según los evangelios. Sin embargo, aquello, no dejaría de ser la verdad, porque yo no entendiera todo aquello y me pareciese completamente injusto. A su mujer también se le aisló, pues ella siempre estaba con su esposo expulsado y sus dos hijos pequeños. Aquello había que vivirlo. Creó una lucha entre mi conciencia, respecto a lo que me dictaba era mi deber como persona, mi deber como cristiano. El hecho de que uno diga que actué por amor no hace que esto sea amoroso y bueno. Muchas personas indicando hacen las cosas por amor, llegan a hacer verdaderas barbaridades. La organización no diferencia entre distintas personas y situaciones, es tajante en cuanto al trato con expulsados, ya sea que estos sean abuelos, personas enfermas, etc .... quedan terriblemente aislados .... sé de algunos que han llegado al suicidio .... esto lo tienes que vivir ... desgraciadamente para poder asimilar algo.

Diversas enfermedades de mis hijas, con 5 y 3 años hicieron que durmiéramos los cuatro juntos en varios hospitales, haciendo pruebas y pruebas, ellas tenían el sistema nervioso descontrolado. No todo el mundo que tiene hijos, entiende a los que tienen hijos. Pues hay niños hiper-nerviosos que llegan a destrozar a sus padres en todos los sentidos, y nos falta de disciplina, tal y como un observador pudiera fácilmente gratuitamente opinar. Durante 6 años hemos estado asistiendo a las reuniones y predicando de casa con nuestra hijas en este estado. No te puedes hacer una idea de lo que esto produjo en nosotros, de verdad que no. Fue cruel el tener a nuestras hijas pequeñas con su estado nervioso, durante largas horas de atalaya, tratando estuvieran quietas como si de adultos se tratase. Lo intentamos todo. Al final, los cuatro quedamos hechos polvo. Desde que empezaba la reunión solo deseábamos terminasen pues las horas las pasábamos disciplinando a nuestras hijas para que estas estuvieran quietas. Esta situación por 5 años, es muy difícil de explicar, muy difícil de explicar. Para mí sí fue comprensible mi esposa y yo cayésemos en una profunda depresión.

Durante nuestra estancia en los hospitales, llegamos a conocer a personas que había pasado muchos años sufriendo con sus hijos con cáncer y otras terribles enfermedades. Aquello, hizo que nos planteásemos cómo era posible nuestro Dios de Amor fuese a destruirlas por el simple hecho de no haber escuchado a un testigo de Jehová en su puerta. ¿qué abarcaba tener la oportunidad? ¿Saber que los testigos existen? ¿Haber escuchado un ¡buenos días! –lea esta revista-? Escuchando en los medios de comunicación de que existen miles de sectas con linda apariencia ¿hasta qué grado se le puede condenar a una persona que rehusa escuchar a un testigo por temor a ser atrapado en una secta? ¿Qué había de las personas que no había tenido oportunidad de escuchar el mensaje? ¿Qué hay de las monjas a las cuales se les mueren cientos de niños en sus brazos? ..... etc, sí, las preguntas vinieron solas.

¿Qué hacer en medio de todo esto? Acudir a los ancianos, eso fue lo que hicimos. Pedimos ayuda, pues estábamos embotados y agotados. Estábamos hechos polvo. Les plantee algunas dudas, como es el caso de que no entendía cómo era posible se dijera que el fin no venía pues cada años miles de personas eran salvas al hacerse testigos, cosa que no hubiera pasado si Armagedón hubiera acontecido. Le dije que por esa regla de tres, Armagedón no vendría nunca, pues cada años aumenta, en lugar de disminuir, el número de personas que se hacen testigos. Pero, ¿qué hay de los que no han tenido oportunidad? Un anciano me dijo que Jehová sería un chapuzero si se salvaran, pues ¿para qué tanto predicar entonces? Yo no podía asumir mi querido Dios Jehová fuera así.... Las semanas pasaron, y los ancianos, a los cuales quiero, no nos daban la ayuda que había suplicado.

Decidí escribir a la propia Organización, a la cual amaba, como hijo a una madre. La carta la puedes leer en mi biografía de www.geocities.com/dmora4 . Tenía dudas, pero no intención de dejar de ser testigo, solo queríamos dejar por tres meses de tanta actividad. Normalmente la Organización suele responder rápido, quizás en dos semanas. Pero no recibíamos respuesta. Compartimos la carta con nuestras familias testigos, varios ancianos. Dijeron que si dejábamos de ir a las reuniones, aunque fuera por tres meses y durante ese tiempo venía Armagedón, seríamos condenados. Aquello solo hizo que las dudas fueran a peor. Durante esta espera, un día decidí romper con la prohibición de leer web apóstatas e imprimí una biografía de Raymond Franz. Si yo estaba en la verdad no tenía que temer, eso pensé. El temor existe cuando uno tiene miedo a no pasar la prueba. Llevé a mi casa la biografía, mi esposa se enfadó conmigo, pero la curiosidad le puedo y terminó leyéndola. Lo que leíamos nos impactó mucho, pues esperábamos leer a alguien que odiaba a la Organización y que solo mostraría rencor hacia ella, pues estuvo 60 años en los testigos, 9 de ellos como miembro del cuerpo gobernante. Nos encontramos a un hombre que había entregado toda su vida a la Organización, pero que se encontró en medio de una crisis de conciencia. Solo hablaba bien, de los que por tantos años habían sido sus hermanos. Él decía que amaba a Jehová. Aquello nos chocó mucho. Aunque no fue algo decisivo, solo formaba parte de una situación que se iba complicando por segundos.

Después de leer aquello, decidimos buscar en Internet más información, y nos fuimos encontrando con muchas cosas que desconocíamos que nos parecían muy fuertes. Conocimos a ex testigos que amaban a Jehová y que sabían por lo que estábamos pasando. Nos dieron mucho consuelo y ánimo. Nos dijeron que no corriéramos, que fuésemos despacio, pero que no permitiéramos nuestra libertad fuera coartada. Sobre todo, nos dijeron, depositar toda vuestra confianza en Jehová, no dejéis de orarle. .... El leer el libro “crisis de conciencia” y en “Busca de la Libertad cristiana” ambos por Raymond Franz, fueron decisivos para nuestras vidas.

Me dispuse a escribir a la Organización, en este caso para realizar unas 20 preguntas sobre la sangre. Unos años atrás, nuestra hija con 4 años tuvo un accidente de coche, y teníamos claro que nunca le pondríamos sangre, aunque nos dijesen fuera necesario para salvar su vida. Ahora, nos encontramos con preguntas que no sabíamos responder y que ponían de manifiesto que era una postura contradictoria, pues por ejemplo un testigo puede recibir en un transplante de hígado más cantidad de sangre de otra personas que mediante una transfusión, o que los testigos hemofílicos pueden vivir gracias a que personas no testigos donan su sangre y esta es usada para beneficio de los testigos.... Al poco tiempo nos llamó el siervo de circuito indicando que había recibido notificación de la Sucursal para visitarnos. ..... Esta clase de cartas no son respondidas por escrito, sino, haz la prueba. No lo son porque son preguntas que no se responden.

Para colmo, durante este tiempo, vimos en un programa de televisión a los representantes de la Sucursal mentir descaradamente. Este programa lo grabamos. Mi esposa llamó por teléfono al día siguiente, preguntando cómo era posible hermanos perdieran trabajos por no mentir, o incluso dispuestos a morir, y ahora ellos mentían. El hermano indicó que había que guardar la imagen. Te puedes imaginar el efecto que añadió.

La visita del siervo de circuito la adelantamos nosotros, pues no podíamos esperar ya más tiempo, y nos entristeció de verdad es el ver que no vino realmente a responder a nuestra preguntas, sino más bien a ver qué habíamos leído y si reconocíamos al esclavo fiel y discreto como el único instrumento que Dios usaba. Esto nos pareció muy, muy fuerte después de toda una vida en el caso de mi esposa con 28 años, entregada a la obra. Era muy fuerte. Les indicamos que habíamos leído el libro crisis, y que queríamos saber si era todo verdad lo que allí se demostraba. Allí había una reproducción de cartas del cuerpo gobernante con su firma las cuales demostraba que habían aprobado sobornos al estado militar de México. Ellos se limitaron a decir que era mentira. Yo les rogué que no nos dejaran ir si eso era mentira, que nos demostrasen que así era. Cuatro años después , espero esas pruebas.

Fe ciega, no por favor. Literalmente he pasado miles de horas indicando a las personas de que Dios no aprueba el tener una fe ciega a ningún hombre, que todos somos responsables por lo que sabemos, por lo que me nos era imposible seguir siendo testigos de una Organización que no era lo que nosotros habíamos creído por tantos años. El superintendente nos preguntó ¿A dónde iréis ahora? Nosotros dijimos, no, no es a dónde, sino más bien, ¿a quién?, Iremos a Jesús. Aquello solo fue el comienzo. Empecé a investigar en serio, y me encontré que fechas como 1914, estaban erradas, y me encontré con muchisimos testigos a los cuales les había pasado lo mismo.

Nos queríamos morir. Mi esposa se tomó un bote de pastillas. Mis hijas allí estaban en medio. Me enfadé mucho con Jehová. Era por amor a Él que no podía seguir siendo testigo, y por preguntar, por querer saber, por ser honesto y decir lo que había en mi corazón, todos mis amigos y familiares testigos, entre los que están mi madre y hermana, nos enterraron vivos de un día para otro. Hicieron tal y como dice el Ministerio de Agosto del 2002. Cumplieron totalmente con lo allí escrito. Mis hijas son testigos de ello. Nunca han querido saber por qué dejamos de ser testigos. Tienen terrible miedo pues saben de primera mano que nunca fuimos testigos de etiqueta. Algo muy gordo hemos tenido que ver para tomar tal decisión. Creen seremos condenados pero no se atrevan a ayudarnos, pues la Organización dice que esto es pecar seriamente contra Jehová. El dolor y sufrimiento que acarrea las normas organizacionales respecto al trato a desasociados -no inactivos que muchos no dicen lo que piensan por temor a las consecuencias- no son descriptibles. Personas enfermas, ancianos, ... etc son cruelmente aislados de todo lo que era su apoyo emocional. Algunos vuelven porque no pueden soportar este aislamiento. Cuando quieras consideramos la base bíblica para este trato. Aunque si lo dice la atalaya, es suficiente. Es igual que brindar, no se hace, porque la atalaya dice que no se puede. Cuando la atalaya diga que sí entonces se podrá, tal y como ha pasado con infinidad de cosas. Muchas personas murieron cuando la atalaya –nunca la Biblia- prohibía los transplantes de órganos. Nunca se les ha pedido perdón a esos padres que dejaron morir a sus hijos innecesariamente. Y lo fuerte también es que personas fueron expulsadas por creer lo que ahora cree la Organización, solo que recibieron luz antes que ella, ahora se les trata como personas que han cometido adulterio, o sea, se les trata como muertos en vida, y sin quieren volver a ser testigos, han de arrepentirse, pero ¿de qué? ¿cuándo pecaron contra Jehová? ¿No fue el caso de que obedecieron a Dios antes que a los hombres?

Esto es solo una introducción. Cuando quieras continúo indicando cómo es posible que personas que dicen amar a Jehová y a su Palabra pueden llegara dejar de ser testigos. ¿Qué ocurre después? ¿A dónde ir? ¿Qué creer? Son preguntas que te puedo responder. Ahora soy muy feliz con mi familia, pues en los brazos de amor de Jesús podemos descansar. Él vino a nuestra vidas, y en Él somos llenos de su inmenso amor.

 
Me alegra que hayas encontrado la Verdad que es en Jesucristo "Jesus le dijo:Yo soy el camino la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mi" (Juan 14:6)
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Shalom hermanos.

Coincido con el comentario anterior, es mejor alejarse de sectas..que siguen sobre todo arrianismo!!! eso es demasiado bravo ..para alguien que busca el camino del Señor!!

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Shalom.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Shalom hermanos.

Si la religion fuera una lucha de box, los Tesigos de Jehova no pelean limpio, (comprender la metafora porfavor, no es en sentido de burla alguna) ya que ellos poseen una biblia adulterada, mal, mal, mal muy mal, pero la verdad es SOLO 1, ...estar en Cristo ahora y siempre (claro con Jehová)

Ora mucho y con fe hermano para que nuestro Padre te guie el camino a encontrar el verdadero pueblo suyo. ;) ...con buena onda me despido.

Shalom.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

gracias por tu aporte ,y que Dios te permita ayudar a otros

solo te pregunto crees que Jesus es Dios todopoderoso, o un angel

si lo crees cuando y como llego a ti

voy a poner tu escrito en el epigrafe de apolos para que no diga que no lo vio

bendiciones en Jesus
 
ESCRIBE Y DEJARAS DE CREER EN DIOS

ESCRIBE Y DEJARAS DE CREER EN DIOS

Os comparto una carta escrita recientemente a un testigo que me escribía preguntandome, cómo es posible me hubiese apartado de la "verdad".


Hola Apolos, con este escrito pretendo explicarte cómo es posible que un testigo que ama a Jehová pudo apartarse de la Organización Watchtower. Puedo recordar el contenido de mis oraciones en las cuales daba gracias a Jehová por haberme permitido estar en la única religión verdadera, por poder ser su testigo y poder dirigirme a Él con la confianza de que me iba a escuchar las peticiones de mi corazón. Entre ellas, estaba el poder servir de misionero pasando por la escuela de Galaad.

Como ya has podido leer mi biografía de www.geocities.com/dmora4 trataré de centrarme en el periodo durante el cual las dudas empezaron a florecer. Pero, ¿es malo tener dudas? Creo no equivocarme si indico que la totalidad de los testigos de Jehová tienen dudas, pues entiendo es normal el que uno en su interior pueda discrepar o no estar de acuerdo con ciertas cosas. Pero estas, se suelen guardar en un cajón para que no molesten. Se suele tener temor de plantearlas con toda libertad, pues ¿qué pensarán de mi, si es el caso de que sirvo como anciano, siervo ministerial, precursor, .... o testigo por muchos años? Lo que los demás piensan de nosotros es importante. Cuesta muchos años de servicio llegar a un puesto de responsabilidad. El expresar con toda honestidad un duda, puede tener consecuencias, pues no está bien visto el tenerlas. Más adelante, te digo por qué digo esto.

¿Cómo es posible que uno pueda dejar de creer que uno está en la religión verdadera cuando es el caso de que ha tenido pleno convencimiento por 12 años, llegando a entregar su vida a esta creencia? Es un proceso, de la misma forma que es un proceso el llegar a creer tal cosa. Las circunstancias que a uno le rodean tiene parte importante en esto. Durante muchos años creo hubiera dado igual lo que me hubiesen mostrado, aunque yo dijera que estaría dispuesto a reconocer mi error, yo sabía que esa era la verdad, así que aunque me mostraran cosas a las cuales yo no supiera responder, o no entendiera, o incluso en mi interior yo no estuviera de acuerdo, yo jamás dejaría de ser testigo. Recuerdo el tiempo durante el cual no se podía hacer la prestación social en sustitución del servicio militar, había jóvenes que no entendía las razones bíblicas para no efectuarlo, pero si la Organización decía eso equivaldría a ser parte de este mundo, eso era suficiente para someterse, aunque uno en su interior no entendiera cómo el ayudar a ancianos fuera malo. Yo deseaba ir a la cárcel por esta causa. Las circunstancias me permitían ser feliz dentro de aquella nube, al grado de que lloraba de emoción cuando escuchaba a un miembro del cuerpo gobernante en una asamblea de distrito. La que llegó a ser mi esposa sentía igual que yo, pues le hicimos un voto a Jehová de que si Él disponía de las circunstancias, nosotros iríamos a donde Él dispusiera.....

Apolos, si Dios no edifica la casa de nada vale lo que uno pueda hacer o decir. A Jesús no escucharon muchos, aunque sus argumentos tendrían que entrar hasta lo más hondo, ¿cómo es posible hubiera personas que no le aceptasen, e incluso lo matasen? ¿verdad que no se entiende? Del mismo modo, yo no entendía cómo todo el mundo no se hacía testigo de Jehová. La predicación me convencía más de que tenía la verdad, pues nadie me mostraba cosas que me hicieran plantearme seriamente si estaba en el lugar equivocado. Esto es mucho más profundo y complejo de lo que uno puede imaginar. Desde fuera de la Organización, uno se lleva muchas sorpresas, y se da cuenta que uno veía al mundo por un cristal defectuosamente graduado. He podido conocer de cerca de personas de otros grupos religiosos, que a mi juicio creen disparates, pero que están terriblemente felices y convencidos de que están en la única verdad, la cual tienen miedo de perder, pues creen que Satanás se valdrá de personas bien intencionadas para confundirlas. Es tremendo la gran cantidad de similitudes que existen en tantos grupos, a mi juicio, no sanos, los argumentos son idénticos. Un testigo no tiene alcance a conocer esto, pues no puede acercarse muy de cerca de otros grupos.

Creo no equivocarme que cuando estás leyendo esto, lo haces con cierto temor, a que puedas leer algo que te impacte de verdad. Algo que pueda crear una seria duda en tu vida como testigo de Jehová. Yo me sentiría así, si yo fuera el testigo. Ese temor, paraliza, y no permite ser objetivo, aunque tu desees serlo. En ciertos momentos en los cuales yo creía poder llegar a tener dudas, quizás al leer algún comentario bíblico, o hablar con un evangélico, yo sentía la necesidad de recordar las razones por las cuales yo creía estaba en la verdad, valla que algún ‘detalle’ me hiciera dudar. La cosa es mucho más compleja cuando añadimos el factor emocional. Lo emocional empaña nuestra visión, queramos o no queramos, esto ocurre no solo en el ámbito espiritual. Si a un hijo de le muestra que su madre no es quien el cree, existen factores emocionales que le impiden ver la realidad. Igual con los testigos o otras personas de otras religiones, llegan a ver y a sentir a su Organización como a una madre, algo que dificulta que los argumentos que muestran con toda claridad un error, puedan ser reconocidos abiertamente. Existe mucho miedo a perder esa seguridad que uno siente tener bajo el abrazo de esa madre. Ese miedo paraliza. No te permite ver. Existen mecanismos mentales que nos impiden ver todo aquello que de forma inconsciente hemos programado para rechazarlos. Aceptamos solo aquello que concuerda con nuestra forma de ver las cosas, rechazamos automáticamente todo aquello que va en contra de nuestro creer o pensar. Por otro lado, existe un mecanismo de protección mental mediante el cual, cuando nuestro subconsciente cree no vamos a poder asimilar cierta realidad, este se encarga de que pase desapercibida para nuestro entendimiento. Es demostrado que una de las causas que produce la ansiedad y las depresiones es cuando nuestro subconsciente no quiere que aceptemos cierta realidad en nuestras vidas, esto trae a nuestra vida una lucha que no nos deja respirar, no nos deja vivir.

Suelo recordar las ocasiones en las cuales las personas en la predicación me decían que yo estaba en una secta y que me había lavado el cerebro. Yo trataba de hacerles ver que era totalmente libre de estar allí o de no estarlo, de creer lo que creía o de no creerlo. Años después me llevé una terrible sorpresa. Recuerda, el gran problema que existe de personas que están en grupos sectarios, es que nunca se plantean la posibilidad de poder estarlo. Esto hace imposible que uno pueda empezar el proceso que le permita darse cuenta. Repito, este tema es mucha más complejo de lo yo sepa expresar. Existen ataduras espirituales. Al margen de todo lo que he expresado, si el Espíritu Santo no abre ojos, de nada sirve lo que uno pueda decir o hacer, esto es lo más importante de todo. Pero, claro, uno siempre mira a los demás como los equivocados, los que necesitan ayuda, los que están ciegos –y pensamos lo están porque quieren , porque la verdad es cristalina como el agua, por lo que de seguro un problema existirá en sus corazones-. Esta forma de pensar es la primera barrera que impide que nosotros mismos podamos ver con esa claridad que afirmamos otros se niegan a ver.

Cuando un testigo va predicando de casa en casa, va para transmitir un mensaje de salvación, uno no va para escuchar lo que los demás nos tengan que decir. Uno suele ‘escuchar’ mientras piensa qué es lo que le va a continuar diciendo para seguir con el hilo que uno pretende llevar. No considero eso sea escuchar, en todo caso, oir. La organización capacita para que dando igual lo que una persona pueda decir, usemos esa información para llevarla a nuestro terreno. Eso no es escuchar. Quizás te ocurra esto mismo al leer esta información, a medida que lees, puedes estar pensando en lo que me dirás para llevarme a la Organización, y no tanto para tratar de entender todo lo que te estoy exponiendo y cómo esta información te pueda ayudar. Indico que esto te pueda estar pasando, pues de ser yo testigo creo eso mismo me pasaría a mí mismo.

Esta forma de decir que uno es libre, de creer que realmente uno lo es, pero los hechos mostrar algo diferente, no es exclusivo de personas dentro de los testigos de Jehová, pues se da igualmente en infinidad de agrupaciones, religiosas o no.

Bueno, trataré de explicarte ahora, teniendo presente todo lo anterior, cómo fue que llegué a dejar de ser testigo de Jehová. Aunque la atalaya exprese que los dejan de ser testigos lo hacen por cosas triviales, o por motivaciones no correctas, permíteme que este no fue mi caso, del mismo modo que no lo es para muchos ex testigos de Jehová. Hice entrega de una renuncia de 25 folios, la cual de escribirla ahora, llevaría una cantidad muy superior de hojas. No me fui, y no vuelo, por cualquier cosa, esto lo puedes tener presente. Ahora bien, permíteme te pregunte, ¿por qué razones tú dejarías de ser testigo? ¿qué tendrías que ver o descubrir para dar ese gran paso? Y de ser así, ¿qué harías con tu vida? ¿qué harías con tu relación con Jehová Dios? Muchos testigos se agarran a la Organización como a un clavo ardiendo, creyendo que fuera, solo existe un abismo sin fin, en el cual el Diablo será amor sobre sus vidas. Con esta perspectiva, es hasta entendible que se cierren a ver lo que la realidad pone de manifiesto.

Como te he indicado antes, mi salida formó parte de un proceso. Empezó cuando nos fueron rodeando una serie de circunstancias las cuales poco a poco iban haciendo que aquella verdad perfecta, fuera apareciendo poco a poco algo injusta. No, no hablo de problemas de carácter de personas, pues este es un problema que surge en todo organismo humano, sino más bien me refiero a normas organizacionales. Un hermano, al cual quiero mucho, empezó a entrar en depresiones, llegando un día a cometer un pecado. Ese mismo día nos confesó que algo malo había hecho, pero que quería confesarlo a los ancianos y solicitar ayuda. Mi esposa y yo le indicamos que no se preocupase, que Jehová es misericordioso y que de seguro si el confesaba su pecado, no sería expulsado, sino que recibiría la ayuda que el solicitaba. A los pocos días, nos indicó que no entendía nada, pero que el comité judicial había decidido expulsarlo, como muestra de amor, y que en la próxima reunión sería anunciado su expulsión. Aquello cayó como un jarrón de agua fría sobre nuestras cabezas, pues pudimos ver como se quedó absolutamente solo sin que nadie le ayudase a salir de su depresión, así como tampoco se le ayudaría con sus dudas. Por su esposa supimos de que su estado era en verdad malo y que consideraba necesitaba ayuda. Continuó asistiendo a las reuniones, y a los tres meses, solicitó su restauración. Le fue denegada. Acudí a un anciano indicando que ese hermano necesitaba ayuda emocional, pues estaba dentro de una gran depresión. El anciano me indicó que esto no era viable. Le pregunté que me pasaría si yo decidía ayudar a esta persona, me advirtió de las consecuencias, sería expulsado también. Esta situación hay que vivirla, hay que conocer, ver y escuchar a los que formaron parte de ella, para poder entender que estaba fuera completamente del amor de Jesús según los evangelios. Sin embargo, aquello, no dejaría de ser la verdad, porque yo no entendiera todo aquello y me pareciese completamente injusto. A su mujer también se le aisló, pues ella siempre estaba con su esposo expulsado y sus dos hijos pequeños. Aquello había que vivirlo. Creó una lucha entre mi conciencia, respecto a lo que me dictaba era mi deber como persona, mi deber como cristiano. El hecho de que uno diga que actué por amor no hace que esto sea amoroso y bueno. Muchas personas indicando hacen las cosas por amor, llegan a hacer verdaderas barbaridades. La organización no diferencia entre distintas personas y situaciones, es tajante en cuanto al trato con expulsados, ya sea que estos sean abuelos, personas enfermas, etc .... quedan terriblemente aislados .... sé de algunos que han llegado al suicidio .... esto lo tienes que vivir ... desgraciadamente para poder asimilar algo.

Diversas enfermedades de mis hijas, con 5 y 3 años hicieron que durmiéramos los cuatro juntos en varios hospitales, haciendo pruebas y pruebas, ellas tenían el sistema nervioso descontrolado. No todo el mundo que tiene hijos, entiende a los que tienen hijos. Pues hay niños hiper-nerviosos que llegan a destrozar a sus padres en todos los sentidos, y nos falta de disciplina, tal y como un observador pudiera fácilmente gratuitamente opinar. Durante 6 años hemos estado asistiendo a las reuniones y predicando de casa con nuestra hijas en este estado. No te puedes hacer una idea de lo que esto produjo en nosotros, de verdad que no. Fue cruel el tener a nuestras hijas pequeñas con su estado nervioso, durante largas horas de atalaya, tratando estuvieran quietas como si de adultos se tratase. Lo intentamos todo. Al final, los cuatro quedamos hechos polvo. Desde que empezaba la reunión solo deseábamos terminasen pues las horas las pasábamos disciplinando a nuestras hijas para que estas estuvieran quietas. Esta situación por 5 años, es muy difícil de explicar, muy difícil de explicar. Para mí sí fue comprensible mi esposa y yo cayésemos en una profunda depresión.

Durante nuestra estancia en los hospitales, llegamos a conocer a personas que había pasado muchos años sufriendo con sus hijos con cáncer y otras terribles enfermedades. Aquello, hizo que nos planteásemos cómo era posible nuestro Dios de Amor fuese a destruirlas por el simple hecho de no haber escuchado a un testigo de Jehová en su puerta. ¿qué abarcaba tener la oportunidad? ¿Saber que los testigos existen? ¿Haber escuchado un ¡buenos días! –lea esta revista-? Escuchando en los medios de comunicación de que existen miles de sectas con linda apariencia ¿hasta qué grado se le puede condenar a una persona que rehusa escuchar a un testigo por temor a ser atrapado en una secta? ¿Qué había de las personas que no había tenido oportunidad de escuchar el mensaje? ¿Qué hay de las monjas a las cuales se les mueren cientos de niños en sus brazos? ..... etc, sí, las preguntas vinieron solas.

¿Qué hacer en medio de todo esto? Acudir a los ancianos, eso fue lo que hicimos. Pedimos ayuda, pues estábamos embotados y agotados. Estábamos hechos polvo. Les plantee algunas dudas, como es el caso de que no entendía cómo era posible se dijera que el fin no venía pues cada años miles de personas eran salvas al hacerse testigos, cosa que no hubiera pasado si Armagedón hubiera acontecido. Le dije que por esa regla de tres, Armagedón no vendría nunca, pues cada años aumenta, en lugar de disminuir, el número de personas que se hacen testigos. Pero, ¿qué hay de los que no han tenido oportunidad? Un anciano me dijo que Jehová sería un chapuzero si se salvaran, pues ¿para qué tanto predicar entonces? Yo no podía asumir mi querido Dios Jehová fuera así.... Las semanas pasaron, y los ancianos, a los cuales quiero, no nos daban la ayuda que había suplicado.

Decidí escribir a la propia Organización, a la cual amaba, como hijo a una madre. La carta la puedes leer en mi biografía de www.geocities.com/dmora4 . Tenía dudas, pero no intención de dejar de ser testigo, solo queríamos dejar por tres meses de tanta actividad. Normalmente la Organización suele responder rápido, quizás en dos semanas. Pero no recibíamos respuesta. Compartimos la carta con nuestras familias testigos, varios ancianos. Dijeron que si dejábamos de ir a las reuniones, aunque fuera por tres meses y durante ese tiempo venía Armagedón, seríamos condenados. Aquello solo hizo que las dudas fueran a peor. Durante esta espera, un día decidí romper con la prohibición de leer web apóstatas e imprimí una biografía de Raymond Franz. Si yo estaba en la verdad no tenía que temer, eso pensé. El temor existe cuando uno tiene miedo a no pasar la prueba. Llevé a mi casa la biografía, mi esposa se enfadó conmigo, pero la curiosidad le puedo y terminó leyéndola. Lo que leíamos nos impactó mucho, pues esperábamos leer a alguien que odiaba a la Organización y que solo mostraría rencor hacia ella, pues estuvo 60 años en los testigos, 9 de ellos como miembro del cuerpo gobernante. Nos encontramos a un hombre que había entregado toda su vida a la Organización, pero que se encontró en medio de una crisis de conciencia. Solo hablaba bien, de los que por tantos años habían sido sus hermanos. Él decía que amaba a Jehová. Aquello nos chocó mucho. Aunque no fue algo decisivo, solo formaba parte de una situación que se iba complicando por segundos.

Después de leer aquello, decidimos buscar en Internet más información, y nos fuimos encontrando con muchas cosas que desconocíamos que nos parecían muy fuertes. Conocimos a ex testigos que amaban a Jehová y que sabían por lo que estábamos pasando. Nos dieron mucho consuelo y ánimo. Nos dijeron que no corriéramos, que fuésemos despacio, pero que no permitiéramos nuestra libertad fuera coartada. Sobre todo, nos dijeron, depositar toda vuestra confianza en Jehová, no dejéis de orarle. .... El leer el libro “crisis de conciencia” y en “Busca de la Libertad cristiana” ambos por Raymond Franz, fueron decisivos para nuestras vidas.

Me dispuse a escribir a la Organización, en este caso para realizar unas 20 preguntas sobre la sangre. Unos años atrás, nuestra hija con 4 años tuvo un accidente de coche, y teníamos claro que nunca le pondríamos sangre, aunque nos dijesen fuera necesario para salvar su vida. Ahora, nos encontramos con preguntas que no sabíamos responder y que ponían de manifiesto que era una postura contradictoria, pues por ejemplo un testigo puede recibir en un transplante de hígado más cantidad de sangre de otra personas que mediante una transfusión, o que los testigos hemofílicos pueden vivir gracias a que personas no testigos donan su sangre y esta es usada para beneficio de los testigos.... Al poco tiempo nos llamó el siervo de circuito indicando que había recibido notificación de la Sucursal para visitarnos. ..... Esta clase de cartas no son respondidas por escrito, sino, haz la prueba. No lo son porque son preguntas que no se responden.

Para colmo, durante este tiempo, vimos en un programa de televisión a los representantes de la Sucursal mentir descaradamente. Este programa lo grabamos. Mi esposa llamó por teléfono al día siguiente, preguntando cómo era posible hermanos perdieran trabajos por no mentir, o incluso dispuestos a morir, y ahora ellos mentían. El hermano indicó que había que guardar la imagen. Te puedes imaginar el efecto que añadió.

La visita del siervo de circuito la adelantamos nosotros, pues no podíamos esperar ya más tiempo, y nos entristeció de verdad es el ver que no vino realmente a responder a nuestra preguntas, sino más bien a ver qué habíamos leído y si reconocíamos al esclavo fiel y discreto como el único instrumento que Dios usaba. Esto nos pareció muy, muy fuerte después de toda una vida en el caso de mi esposa con 28 años, entregada a la obra. Era muy fuerte. Les indicamos que habíamos leído el libro crisis, y que queríamos saber si era todo verdad lo que allí se demostraba. Allí había una reproducción de cartas del cuerpo gobernante con su firma las cuales demostraba que habían aprobado sobornos al estado militar de México. Ellos se limitaron a decir que era mentira. Yo les rogué que no nos dejaran ir si eso era mentira, que nos demostrasen que así era. Cuatro años después , espero esas pruebas.

Fe ciega, no por favor. Literalmente he pasado miles de horas indicando a las personas de que Dios no aprueba el tener una fe ciega a ningún hombre, que todos somos responsables por lo que sabemos, por lo que me nos era imposible seguir siendo testigos de una Organización que no era lo que nosotros habíamos creído por tantos años. El superintendente nos preguntó ¿A dónde iréis ahora? Nosotros dijimos, no, no es a dónde, sino más bien, ¿a quién?, Iremos a Jesús. Aquello solo fue el comienzo. Empecé a investigar en serio, y me encontré que fechas como 1914, estaban erradas, y me encontré con muchisimos testigos a los cuales les había pasado lo mismo.

Nos queríamos morir. Mi esposa se tomó un bote de pastillas. Mis hijas allí estaban en medio. Me enfadé mucho con Jehová. Era por amor a Él que no podía seguir siendo testigo, y por preguntar, por querer saber, por ser honesto y decir lo que había en mi corazón, todos mis amigos y familiares testigos, entre los que están mi madre y hermana, nos enterraron vivos de un día para otro. Hicieron tal y como dice el Ministerio de Agosto del 2002. Cumplieron totalmente con lo allí escrito. Mis hijas son testigos de ello. Nunca han querido saber por qué dejamos de ser testigos. Tienen terrible miedo pues saben de primera mano que nunca fuimos testigos de etiqueta. Algo muy gordo hemos tenido que ver para tomar tal decisión. Creen seremos condenados pero no se atrevan a ayudarnos, pues la Organización dice que esto es pecar seriamente contra Jehová. El dolor y sufrimiento que acarrea las normas organizacionales respecto al trato a desasociados -no inactivos que muchos no dicen lo que piensan por temor a las consecuencias- no son descriptibles. Personas enfermas, ancianos, ... etc son cruelmente aislados de todo lo que era su apoyo emocional. Algunos vuelven porque no pueden soportar este aislamiento. Cuando quieras consideramos la base bíblica para este trato. Aunque si lo dice la atalaya, es suficiente. Es igual que brindar, no se hace, porque la atalaya dice que no se puede. Cuando la atalaya diga que sí entonces se podrá, tal y como ha pasado con infinidad de cosas. Muchas personas murieron cuando la atalaya –nunca la Biblia- prohibía los transplantes de órganos. Nunca se les ha pedido perdón a esos padres que dejaron morir a sus hijos innecesariamente. Y lo fuerte también es que personas fueron expulsadas por creer lo que ahora cree la Organización, solo que recibieron luz antes que ella, ahora se les trata como personas que han cometido adulterio, o sea, se les trata como muertos en vida, y sin quieren volver a ser testigos, han de arrepentirse, pero ¿de qué? ¿cuándo pecaron contra Jehová? ¿No fue el caso de que obedecieron a Dios antes que a los hombres?

Esto es solo una introducción. Cuando quieras continúo indicando cómo es posible que personas que dicen amar a Jehová y a su Palabra pueden llegara dejar de ser testigos. ¿Qué ocurre después? ¿A dónde ir? ¿Qué creer? Son preguntas que te puedo responder. Ahora soy muy feliz con mi familia, pues en los brazos de amor de Jesús podemos descansar. Él vino a nuestra vidas, y en Él somos llenos de su inmenso amor.

 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Que bueno es leer tu testimonio nuevamente mi estimado Dante.

Despues de casi un año de ausencia en el foro ya estoy de regreso.

Dios te bendice mi hermano
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Ten fé en Cristo, hermano Dante y estarás firme para el SEÑOR.

Me gustaria encontrar un epígrafe de un valiente que diga: Porque deje de ser Adventista, Mormón, Satanista, Cátolico o Islamico.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

eh?

LA misericordia es una de las principales caracteristicas de Dios, segun veo en la comunidad de testigos no se practiba mucho... lastima,
No puedo opinar si era falla solo de esa comunidad o de la creencia entera, pues nunca he sido testigo de jehova.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Ojala se le habran los ojos a TODITOS los testigos de jehova (y dejen el error) para seguir sólo el camino a Cristo, el ÚNICO ..quien nos conduce y lleva a la Gloria.

Shalom Adonai.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Ojala se le habran los ojos a TODITOS los testigos de jehova (y dejen el error) para seguir sólo el camino a Cristo, el ÚNICO ..quien nos conduce y lleva a la Gloria.

Shalom Adonai.

Este es uno de los deseos de mi corazón.

Fijate Dante que tengo dos compañeros de trabajo testigos de Jehová, y un amigo (ex-amigo si ya lo espanté).

Y cada vez que veo lo reprimidos que viven, y sin la esperanza en el Señor Jesucristo, siento algo feo en el corazón.

En realidad es hacia las sectas de los testigos y los mormones. Puede ser repulsión a esas personas que niegan con tanto afán a nuestro Señor.

Pero no es repulsión hacia mis compañeros y amigo sino que es como algo de cólera de que aparte de que son engañados sean reprimidos de tal forma. Tal vez algo de compasión y deseo de querer verlos fuera de ahi.

En realidad es repulsión hacia los que por medio de la Watchtower los mantienen en ese estado.

No me gusta sentir estos sentimientos :(

Hasta compré un mi librito acerca de como evangelizarlos aún utilizando su propia versión de la biblia. También me da algo de miedito de solamente ponerlos nerviosos e inseguros. Aunque también es cierto que nuestra arma más poderosa es la oración.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Este es uno de los deseos de mi corazón.

Fijate Dante que tengo dos compañeros de trabajo testigos de Jehová, y un amigo (ex-amigo si ya lo espanté).

Y cada vez que veo lo reprimidos que viven, y sin la esperanza en el Señor Jesucristo, siento algo feo en el corazón.

En realidad es hacia las sectas de los testigos y los mormones. Puede ser repulsión a esas personas que niegan con tanto afán a nuestro Señor.

Pero no es repulsión hacia mis compañeros y amigo sino que es como algo de cólera de que aparte de que son engañados sean reprimidos de tal forma. Tal vez algo de compasión y deseo de querer verlos fuera de ahi.

En realidad es repulsión hacia los que por medio de la Watchtower los mantienen en ese estado.

No me gusta sentir estos sentimientos :(

Hasta compré un mi librito acerca de como evangelizarlos aún utilizando su propia versión de la biblia. También me da algo de miedito de solamente ponerlos nerviosos e inseguros. Aunque también es cierto que nuestra arma más poderosa es la oración.


Es cierto hermanita..con respecto a ambas sectas, ..pero no te pases con tenerles repulsión ..jajaja ...de hecho..no hay duda..con respecto al tremendo afan de satanas ..para querer poseer la mayor cantidad de almas..dentro de esas comunidades creadas..por el mismo.

Nosotros estamos llamados..a pormedio de nuestras oraciones ...que Dios pueda iluminar a algunos lideres dentro de esas sectas ...para de algún modo liberar a toda esa cantidad de almas que tienen dentro de esas congregaciones, que sinceramente ..creen estar siguiendo a nuestro amado Jehová del modo correcto ...debemso de orar mucho...y en las oportunidades que se tenga con ellos, el hacerles entender que SOLO CRISTO SALVA, no hay mas.

Testificar es lo que como Cristianos debemos hacer, pues la Biblia dice...que debemos hacer discípulos suyos!

Shalom hermanita!
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Es cierto hermanita..con respecto a ambas sectas, ..pero no te pases con tenerles repulsión ..jajaja ...de hecho..no hay duda..con respecto al tremendo afan de satanas ..para querer poseer la mayor cantidad de almas..dentro de esas comunidades creadas..por el mismo.

Nosotros estamos llamados..a pormedio de nuestras oraciones ...que Dios pueda iluminar a algunos lideres dentro de esas sectas ...para de algún modo liberar a toda esa cantidad de almas que tienen dentro de esas congregaciones, que sinceramente ..creen estar siguiendo a nuestro amado Jehová del modo correcto ...debemso de orar mucho...y en las oportunidades que se tenga con ellos, el hacerles entender que SOLO CRISTO SALVA, no hay mas.

Testificar es lo que como Cristianos debemos hacer, pues la Biblia dice...que debemos hacer discípulos suyos!

Shalom hermanita!

Gracias Roc por tu respuesta.

Tenés razón con lo que decís respecto a que nuestra principal arma es la oración. Porque también con mis propias fuerzas podría actuar erroneamente. Soy muy impulsiva.

Voy a encauzar estos sentimientos en la oración por estos mis amigos, que me duele que anden engañados y reprimidos.

Y voy a leer mi librito porque ni siquiera he empezado a leerlo.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Que un testigo d J. se conviera a Cristo, es casi tan difícil como para un judio aceptar a Jesús, pero afortunadamente, de vez en cuando algunos reconocen a Cristo como su Dios y Salvador y se salvan.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?


Esta profetizado...ademas estos arrianos...son dificiles de hablar...siempre creen ser poseedores de la verdad!!!

En fin...aunque hay algunos que abren su corazõn a Cristo!!
(para El no hay imposibles)

Shalom.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

Dante, la página en GEOCITIES no existe. ¿Dónde la podemos encontrar? ¿Has leido los libros de CARRERA, un español que abandonó la secta?
Saludos,
Armando Ortega.
 
Re: ¿Por qué dejé de ser testigo de Jehová?

alguno de ustedes puede traer informacion sobre RAYMON FRANK

este viejo estuvo 60 años con los testigos , pertenecio a los 12 princilales de la torre que te te vigila

se canso un dia de tanta basura y se fue, creo que tiene un libro

bendiciones a los enemigos de esta falsa doctrina