La Eucaristía romanista a la luz de las Escrituras
El autor de la Carta a los hebreos en el Cap. 13:9─15 leemos:
En realidad este es un golpe fatal a la dichosa transubstanciación inventada por Tomas de Aquino.
Sigamos con detalle aquello que he remarcado en negrita:
A.- Las viandas que nunca aprovecharon… ¿A que viandas se puede referir el autor de Hebreos? Es evidente que se refiere a los que no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo. Los sacerdotes que servían al Tabernáculo o en el Templo de Jerusalén tenían derecho a consumir una parte de las reses sacrificadas en el mismo, con una excepción. La de aquellos animales que eran ofrecidos en holocausto a Dios que eran quemados en su totalidad.
B.- De lo que no hay duda es que, en estas palabras, se refiere a la celebración del Yom Kippur (Día de la Expiación)
Esta era una de las celebraciones más importante del judaísmo hasta la venida del Mesías (A partir de entonces, con la destrucción del Templo de Jerusalén que eliminó tanto el “lugar Santo” como el “santísimo” donde estaba el Arca de la Alianza, ya no les ha sido posible realizar el sacrificio del Yom Kippur.
C.- Veamos las características de la tal celebración.
Una vez purificado el Sumo Sacerdote, que lo era fundamentalmente para esta celebración, tomaba dos machos cabrios sin mancha y los sorteaba: Uno para Dios y el otro para “Azael”. El primero era sacrificado en el Altar que había en el Lugar Santo y con su sangre el Sumo Sacerdote entraba en el Santísimo solo en aquella ocasión y aspersionaba con la sangre derramada en el altar todo el Lugar Santísimo y el Arca de la Alianza. De esta manera se renovaba el Pacto que Israel acepto en el Sinaí conforme a la propuesta de Dios.
Seguidamente salía de aquel lugar y colocaba ambas manos sobre la cabeza del macho cabrío que le toco en suerte ser “para Azael” y le transmitía mediante oración sus pecados y los de todo el pueblo. Seguidamente era llevado a un despeñadero y era arrojado al vacío donde moría indefectiblemente para ser seguidamente quemado en su totalidad. (quemado fuera del campamento)
D.- Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta.
Lo bueno del caso es que nadie puede comer del cuerpo de este sacrificio. “del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo” (Heb. 13:10)
E.- Entonces ¿cual deben ser la característica de la Eucaristía cristiana, la cual fue practicada entre los primeros creyentes? También lo describe el autor de la carta en 13:13 y 14.
Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio; porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir. Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.
El sacrificio es de alabanza y fruto de labios que confiesan su nombre. Es decir EUCARISTÍA.
Ahora veamos la practica romanista.
Afirman que “su” eucaristía es el sacrificio “incruento” del cuerpo de Cristo mediante la transubstanciación del pan y del vino.
¿Dónde lo realizan? Sobre un altar, El de Cristo fue fuera del Templo, en el calvario. Se ofreció en Holocausto a Dios por lo cual ni los sacerdotes ni nadie tiene derecho de comer de tal sacrificio. Y menos aún beber su sangre (esto era, y es, abominación para los judíos. Y también fue prohibido a los creyentes gentiles que aceptaban a Cristo como Señor y Salvador (Hechos 15:29)
Aquellos que deseen saber a quien copió la Institución religiosa que se hace llamar católica y apostólica, no tiene que hacer otra cosa que averiguar que enseñaba el paganismo sobre los sacrificios que ofrecían a sus dioses. Y qué, con una de las partes del animal sacrificado. Evidente una parte era para el sacerdote y el Templo donde era sacrificado. La otra para los fieles que lo habían ofrecido y que, cuando se lo comían que era lo que realmente comían. Es exacto a lo que enseña y practica el romanismo.
Como veis, sigue funcionando aquello de:
Lo que esta Escrito, créelo; lo que no lo esta, ni lo mires.
El autor de la Carta a los hebreos en el Cap. 13:9─15 leemos:
No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas. Tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo. Porque los cuerpos de aquellos animales cuya sangre a causa del pecado es introducida en el santuario por el sumo sacerdote, son quemados fuera del campamento. Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta. Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio; porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir. Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.
En realidad este es un golpe fatal a la dichosa transubstanciación inventada por Tomas de Aquino.
Sigamos con detalle aquello que he remarcado en negrita:
A.- Las viandas que nunca aprovecharon… ¿A que viandas se puede referir el autor de Hebreos? Es evidente que se refiere a los que no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo. Los sacerdotes que servían al Tabernáculo o en el Templo de Jerusalén tenían derecho a consumir una parte de las reses sacrificadas en el mismo, con una excepción. La de aquellos animales que eran ofrecidos en holocausto a Dios que eran quemados en su totalidad.
B.- De lo que no hay duda es que, en estas palabras, se refiere a la celebración del Yom Kippur (Día de la Expiación)
Esta era una de las celebraciones más importante del judaísmo hasta la venida del Mesías (A partir de entonces, con la destrucción del Templo de Jerusalén que eliminó tanto el “lugar Santo” como el “santísimo” donde estaba el Arca de la Alianza, ya no les ha sido posible realizar el sacrificio del Yom Kippur.
C.- Veamos las características de la tal celebración.
Una vez purificado el Sumo Sacerdote, que lo era fundamentalmente para esta celebración, tomaba dos machos cabrios sin mancha y los sorteaba: Uno para Dios y el otro para “Azael”. El primero era sacrificado en el Altar que había en el Lugar Santo y con su sangre el Sumo Sacerdote entraba en el Santísimo solo en aquella ocasión y aspersionaba con la sangre derramada en el altar todo el Lugar Santísimo y el Arca de la Alianza. De esta manera se renovaba el Pacto que Israel acepto en el Sinaí conforme a la propuesta de Dios.
Seguidamente salía de aquel lugar y colocaba ambas manos sobre la cabeza del macho cabrío que le toco en suerte ser “para Azael” y le transmitía mediante oración sus pecados y los de todo el pueblo. Seguidamente era llevado a un despeñadero y era arrojado al vacío donde moría indefectiblemente para ser seguidamente quemado en su totalidad. (quemado fuera del campamento)
D.- Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta.
Lo bueno del caso es que nadie puede comer del cuerpo de este sacrificio. “del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo” (Heb. 13:10)
E.- Entonces ¿cual deben ser la característica de la Eucaristía cristiana, la cual fue practicada entre los primeros creyentes? También lo describe el autor de la carta en 13:13 y 14.
Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio; porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir. Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.
El sacrificio es de alabanza y fruto de labios que confiesan su nombre. Es decir EUCARISTÍA.
Ahora veamos la practica romanista.
Afirman que “su” eucaristía es el sacrificio “incruento” del cuerpo de Cristo mediante la transubstanciación del pan y del vino.
¿Dónde lo realizan? Sobre un altar, El de Cristo fue fuera del Templo, en el calvario. Se ofreció en Holocausto a Dios por lo cual ni los sacerdotes ni nadie tiene derecho de comer de tal sacrificio. Y menos aún beber su sangre (esto era, y es, abominación para los judíos. Y también fue prohibido a los creyentes gentiles que aceptaban a Cristo como Señor y Salvador (Hechos 15:29)
De aquí, que, Jesús en la celebración de la Pascua con sus discípulos que fue cuando instituyó la Eucaristía, en ninguno de los tres evangelio se les olvida a los que los escribieron las últimas palabras de Jesús: “No beberé más del fruto de la vid…”“que os abstengáis de lo sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; de las cuales cosas si os guardareis, bien haréis”.
Aquellos que deseen saber a quien copió la Institución religiosa que se hace llamar católica y apostólica, no tiene que hacer otra cosa que averiguar que enseñaba el paganismo sobre los sacrificios que ofrecían a sus dioses. Y qué, con una de las partes del animal sacrificado. Evidente una parte era para el sacerdote y el Templo donde era sacrificado. La otra para los fieles que lo habían ofrecido y que, cuando se lo comían que era lo que realmente comían. Es exacto a lo que enseña y practica el romanismo.
Como veis, sigue funcionando aquello de:
Lo que esta Escrito, créelo; lo que no lo esta, ni lo mires.