¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Oscar Capi

¡Shalom!
17 Noviembre 2005
1.871
29
www.cielosnuevosytierranueva.org
Este estudio está dirigido a creyentes que les gusta pensar.



UNA BREVE INTRODUCCIÓN:

Antes de comenzar con este estudio, debo advertirle que si usted ha decidido salirse de aquel sistema fariséico babilónico (vaya nombrecito, ¿no?), que se autodenomina "iglesia" y además..."cristiana" (pero que por supuesto NO lo és), va a ser objeto de algunas consecuencias:

-Lo van a llamar hereje, pagano, rebelde, murmurador, hasta dirán que se ha alejado de Dios.
-Le van a dejar de hablar, aún muchos de los que consideraba sus amigos, y en el peor de los casos, aún muchos de sus seres amados más cercanos. Pues a muchos les habrán ya dado la orden de no hablarle a rebeldes como usted, para no “contaminarse.”
-Lo van a amenazar con palabras como: “Ten cuidado, que te están predicando otro evangelio, no seas hallado en pecado, luchando contra el mismo Dios, y te vayas al infierno.”
-Lo verán como bicho raro, “pobrecillo”, endemoniado, peor que a los inmundos incrédulos mundanos, y todo porque ha traicionado al sistema y a sus líderes, por tanto será considerado “traidor.”
-Van a tener cuidado de no acercársele, pues ya están bajo advertencia de que está leprosos o que puede que un día de estos la tierra se abra y le trague. Así que buen cuidado tendrán de guardar su distancia de usted, no sea que los agarre desprevenidos y se los lleve de pilón.
-Van a venir a su mente pensamientos de condenación, de duda y de temor, pues las potestades que gobiernan aquel sistema, no lo dejarán salirse así como así.
-Se va a sentir tristes, decepcionado, vacío, solo. Como que algo le hace falta. La costumbre y la tradición al sistema se convertirán en su enemigo. Las rutinas, el bullicio, los eventos, las festividades, le harán mucha falta.

Recordemos estas palabras del Señor:
"Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán.” (Jn.15:18)

Así que si está sufriendo alguna de estas consecuencias (o todas), quiero darle unas palabras de ánimo y de aliento. No se preocupe, que son los síntomas de que su decisión está causando revuelta a alguien. Son los síntomas de que está saliéndose del sistema, para venir a la luz admirable de Cristo.
El Señor sacudirá de nuestra vida todo aquello que es movible, para que quede lo inconmovible. Solo él es inconmovible, y por eso sentimos todo eso. ¡La victoria es nuestra!

Vamos a comenzar a conocer al Señor de una manera sencilla, sin complicaciones, en total libertad, y sobre todo, con total paz. Sin condenaciones, sin maldiciones ni amenazas de los líderes de este sistema. Sabiéndonos amados, arrepentidos, perdonados, redimidos, justificados, lavados en la sangre preciosa de nuestro Señor Jesucristo, por tanto aceptos ante nuestro Padre celestial.

El evangelio de terror, sometimiento al hombre, y de condenación, será reemplazado por el Evangelio viviente, ¡Cristo vino a dar libertad a los cautivos!




Comencemos pues......

“...no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”

1) A los cristianos del primer siglo se les conocía con varios nombres:
-“Nazarenos”
-“Cristianos”
-“El Camino”, ó “los del Camino”

2) En Antioquia fue en donde por primera vez se les llamó “cristianos” (Hch. 11:26). Y resulta muy interesante ver que la gente les llamó cristianos, ellos no se llamaron a si mismos cristianos, simplemente lo eran.
"Entonces viendo el denuedo de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con Jesús.” (Hch.4:13)

3) Y les llamaron así, no por adularlos, sino porque como dice aquí, veían sus vidas y les incomodaban. “¡Estos que trastornan el mundo entero!” –decían. Pues ellos trastornaban su entorno, lo transformaban, y esto a la gente no les gustaba, les incomodaba su presencia, no les convenía.

4) Hoy hay muchos congregantes que dicen de si mismos: “soy de la religión cristiana.” Y hay muchas congregaciones que se auto denominan cristianas, pero que se ponen un “apellido.” (leer 1 Co. 1:12-13) ¿Es que ahora incomodamos a la gente por nuestra vida, o por todas las tonterías que hacemos? ¿Nos llaman locos por causa del Señor e ir contra cultura, o por todas las locuras y boberías que hacemos?

5) En Hechos 9:2; 19:9, 19:23, 22:4; 24:22; encontramos algunas referencias de que a los cristianos también se les reconocía como: “el Camino.”

6) Los cristianos del primer siglo comenzaron a usar algunos emblemas distintivos, para identificarse ente si.



7) En estos pasajes aparece la palabra “Camino” escrita con “C” mayúscula, lo cual nos indica que no se trata solamente de algún “camino” (por ejem. el camino a Belén), sino que se hace referencia directa a los discípulos de Cristo, a la iglesia, quienes comenzaron a ser señalados y perseguidos por el simple hecho de ser discípulos de Cristo.

8) Incluso los fariseos de ese tiempo les consideraban herejes, como lo leemos en Hechos 24:14, en donde Lucas dice:
“...ni te pueden probar las cosas de que ahora me acusan. 14Pero esto te confieso, que según el Camino, que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas.”

9) ¿Y por qué se les conocía como “El Camino”? El Señor Jesucristo dijo de si mismo: “Yo soy el camino....., la verdad y la vida.” Así que a los discípulos de Cristo (el Camino), en forma burlona, se les identificaba como “El Camino,” ó “los del Camino.”

10) Los fariseos, no sólo los consideraban herejes, sino que también los maldecían... como lo leemos en Hch. 19:9
"Pero endureciéndose algunos <fariseos> y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, se apartó Pablo de ellos y separó a los discípulos...”

11) Esto llama la atención, porque esto último no ha cambiado, si uno se considera parte del Camino (la iglesia del Señor), los fariseos modernos nos seguirán llamando herejes y aún maldiciéndonos, por eso el Señor nos lo advirtió desde siempre:
“Estas cosas os he hablado, para que no tengáis tropiezo. 2Os expulsarán de las sinagogas; y aún viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios. 3Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mí. 4Mas os he dicho estas cosas, para que cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho.” (Jn.16:1)


12) Los cierto es que los cristianos del primer siglo no solo fueron llamados herejes ni malditos por los fariseos, sino que también comenzaron a ser perseguidos por su fe en Jesucristo, vivían bajo una persecución y tribulación terribles. Se reunían en donde podían hacerlo, lo hacían en catacumbas, a las afueras de la ciudad, en el desierto, y en el mejor de los casos, los muy privilegiados, se reunían en casas. Normalmente los que se reunían en casas era porque muchos ciudadanos romanos se habían convertido y hospedaban a los hermanos en sus casas. Esto era así hasta que eran descubiertos y tenían que huir de su propia casa.

13) Eran perseguidos y apresados cuando confesaban su fe (nótese que no hemos dicho “su denominación”), eran llevados al Coliseo romano como “atracción” pública, en donde eran devorados por los leones, para beneplácito y satisfacción de su hambre y sed de morbo y sangre de los espectadores. Se les vestía con pieles de animales y se les arrojaba a jaulas en donde eran devorados por perros salvajes hambrientos. Eran degollados por gladiadores inmisericordemente, y sus cuerpos eran arrojados a las jaulas, como comida de los leones y las hienas. Se les ataba a unas estacas, o eran clavados a ellas y puestos en las calles, o dentro del Coliseo, y después se les untaba brea a sus cuerpos desnudos, y se les prendía lumbre, así eran como antorchas humanas que servían para alumbrar las calles o la arena del Coliseo romano. Y todo esto fue una “atracción” del Circo romano, durante años.

14) Los que libraban esta clase de muerte, eran perseguidos, humillados, violados, vejados, calumniados, despojados de todos sus bienes, mutilados, encarcelados, en donde se contagiaban de enfermedades mortales, o en donde morían de hambre y de sed. Ahí en las cárceles y catacumbas es donde se “reunían” para alabar a Dios. Ellos no tenían el concepto de “congregación” y de “congregarse” que nosotros tenemos. Para ellos el hecho de ser cristiano, no era asistir todos los domingos al templo a la reunión dominical, para cantar, aplaudir, y escuchar el sermón del pastor, durante el par de horas que dura la reunión.

15) Para ellos, el hecho de que la gente les llamara cristianos, era sinónimo y aviso de echarse a cuestas la pena de muerte. Por eso no es de extrañarnos que en Hechos 1:8, y en Apocalipsis 1:1 (como ejemplos), el Señor los llame “testigos” o “siervos” (la palabra griega original es “martus”, que significa “mártires”). Un mártir del Señor, es aquel que tiene una mentalidad de mártir, y está conciente que por el hecho de ser cristiano, su vida será martirizada. Este es un mensaje que encontramos en el Nuevo Testamento, por no decir...una promesa.

16) Esto “choca” contra esa idea que muchos “cristianos” tienen hoy en día, en donde se les predica y ha enseñado una vida cristiana color de rosa, llena de prosperidad (principalmente económica), y libre de problemas y sufrimientos. Aquel evangelio del “pare de sufrir” tiene mucho éxito hoy en día, y por lo tanto, muchos adeptos.
"Porque va a llegar el tiempo en que la gente no soportará la sana enseñanza; más bien, según sus propios caprichos, se buscarán un montón de maestros que solo les enseñen lo que les guste y ellos quieran oír. 4Darán la espalda a la verdad y harán caso a toda clase de cuentos. 5Pero tú conserva siempre el buen juicio, soporta los sufrimientos y tribulaciones, dedícate a anunciar con tu vida el evangelio, cumple bien con tu trabajo.” (2 Timoteo 4:3 “Biblia amplificada”)

17) Debemos tratar de imaginarnos esta clase de vida a la que ellos tenían que enfrentarse cada día, y lo que ellos entendían por congregarse, para poder comprender las palabras del apóstol Pablo, que encontramos en Hebreos 10:25:
"...no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”


18) Hemos dicho en otros estudios, que se han sacado muchas enseñanzas basadas en la palabra escrita y en el “aquí lo dice”. Esto ha provocado que estas enseñanzas erróneas se estén predicando desde los púlpitos como doctrinas bíblicas absolutas, pero que no por ello signifique que sean enseñanzas basadas en la verdad.

19) También hemos dicho que hay muchos pasajes de la Biblia que son muy escuetos y no están traducidos en la mejor forma posible. Y aunque esto debemos tomarlo con mucha madurez, no por ello deja de ser algo que debemos saber y considerar.

20) Lo peligroso de esto, es cuando se saca una enseñanza de un pasaje mal traducido, porque entonces esa enseñanza pudiera ser errónea, o estar fuera de todo contexto. Una característica de muchos grupos sectarios, es que precisamente usan los “aquí dice” para tergiversarlos y usarlos a su propia conveniencia, y con un fin en común...el engaño.

21) Hemos dicho también (y esto es sumamente importante que lo grabemos en nuestra mente, y que lo tengamos siempre presente), que todo mensaje bíblico debe conducirnos a Cristo, quien es el camino, la verdad y la vida; y que nada ni nadie puede llevarnos al Padre, si no es a través del camino (Cristo).

22) Dentro de estas enseñanzas fuera de todo contexto bíblico, hoy en día se está predicando mucho (además de otros temas), sobre el hecho de congregarse y no dejar de hacerlo. E inmediatamente se cita el “aquí lo dice” de Hebreos 10:25. Así que es muy importante que, como cristianos, entendamos todo el contexto de estas palabras del Apóstol Pablo.

23) Como dijimos en el punto 8, debemos entender la clase de vida que nuestros hermanos del primer siglo vivían, para poder entender este pasaje de Hebreos 10:25. Ellos no podían darse el privilegio que ahora nosotros podemos darnos, de reunirnos todos los domingos (o en algunos casos, casi todos los días de la semana) en un lugar al que llamamos templo o iglesia, en ciertos horarios y en plena libertad. Como dijimos, ellos no tenían el concepto que nosotros tenemos ahora acerca de “congregarse”.

24) ¿Cuál es la idea que un creyente moderno tiene acerca del templo y de congregarse? Aunque se nos ha dicho la verdad de que nosotros somos templo del Espíritu Santo de Dios, lo cierto es que esto lo negamos al seguir creyendo que el templo es un edificio de piedra de cuatro paredes, y que congregarse significa reunirse dentro de ese edificio.

25) Seguimos llamando a un edificio “casa de Dios”, y lo grave de todo es que no solo es de dicho, sino de hecho. Pareciera que Dios está sentado en su iglesia-casa, esperando a que sus hijos vayan a verlo. ¿O no es lo que decimos muchas veces cuando oramos: “Señor, tu estabas ya aquí esperándonos con anhelo”?

26) Esta es una de las enseñanzas que más réditos le ha dado al sistema. Le ha generado mucha ganancia al lograr una membresía numerosa. Una congregación que no dependa del Señor, sino que se le ha enseñado y llevado a depender de la membresía del sistema. En donde hay muchas enseñanzas basadas en la doctrina del “Sí, pero.......” ó “La Biblia dice esto, pero......”

Algunos ejemplos de estas doctrinas:
-“Si, el Señor es mi pastor y nada me faltara, pero...... yo necesito un pastor humano”
-“Si, yo sé que no debo poner mi mirada en el hombre, pero.....”
-“Si, yo sé que la iglesia de Cristo no tiene denominación, pero.... mi iglesia se llama...”
-“Si, la salvación no es por obras, pero.....tengo que.....”
-“Si, Cristo pagó por mi en la cruz todos mis pecados, pero......esto que acabo de hacer....”
-“Si, su misericordia la renueva cada mañana, pero..... necesito portarme bien para que....”
-“Si, yo sé que Dios me ama incondicionalmente, pero..... tengo que hacer esto para que él no se decepcione de mi...”
-“Si, yo sé que por la misericordia de Dios no he sido consumido, pero..... necesito obedecer a sus autoridades delegadas para que no me pase lo que le pasó a Nadab y a Abiú.”
-“Si, yo sé que su gracia y su misericordia están sobre mi, pero..... yo necesito.... (y ponga usted aquí, todo lo que siente que necesita hacer)”
-“Si, yo sé que el Señor me bendice en su infinito amor, pero..... tengo que diezmar puntualmente para que él me siga bendiciendo.”
-“Si, yo sé que Dios es mi proveedor de todas las cosas y que lo hace por su infinito amor y misericordia, pero.... en la medida que yo diezme más y le dé más y más, él me proveerá más y más a mi.”
-“Si, yo sé que Dios es mi cobertura, pero.... necesito la cobertura de la iglesia”
-“Si, yo sé que Dios me ama y que bajo sus alas estoy seguro, pero..... necesito que el pastor me dé cobertura, para que yo y mi familia estemos seguros.”
-“Si, yo sé que Cristo ya venció al diablo en la cruz del calvario, pero..... (y aquí podemos presentar una laaaaarga lista de extras, escoja el nombre que más le guste...hay para escoger....: ¿guerra espiritual?, ¿coberturas?, ¿liberación?, ¿sanidad energética?)
-“Si, yo sé que el Señor Jesús consumó todo en la cruz, pero..... yo necesito hacer......”
-“Si, yo sé que Dios me ve redimido con la sangre de su Hijo, pero..... hoy si me porté bien y obedecí a mis autoridades.”
-“Si, yo sé que yo soy templo del Espíritu Santo, y que Dios está conmigo en todas partes, pero.....tengo que ir todos los domingos a la casa de Dios, para no dejer de congregarme como algunos tienen por costumbre.”
-“Si, yo sé que Dios me dice que clame a él y que él me responderá y que me enseñará cosas que yo no conozco, pero.... necesito que el pastor ore por mi, porque él está más cerca de Dios y a él Dios si lo oye.”
-“Si, yo sé que Dios dice que primero es mi familia, pero.... yo necesito sacrificar a mi familia si no... no soy digno de él.”
-“Si, yo sé que predicar el evangelio es un asunto de predicar con mi vida misma, pero.... yo necesito hablar, hablar, hablar a todo el mundo que Dios los ama”
-“Si..., yo sé que Dios es el que prepara los corazones y el que hace todas las cosas, pero.....si no lo hago yo, ¿entonces quién lo hará?”
-“SI..., yo sé que Dios no quiere sacrificios, no quiere holocaustos..., pero.... yo tengo que sacrificarme yéndome de misionero al Amazonas”
-“Si..., yo sé que Dios no busca templos lujosos, pero.... mi templo tiene los mejores acabados de todo el país...¡Ninguno como mi templo!”
-“Si.. yo sé que debo tratar por igual a mis consiervos, no debo hacer distinciones, pero.... ¿cómo voy a dejar que el hermano fulano se duerma en el suelo? Si él está acostumbrado a dormir en hoteles 5 estrellas.”
¿Y qué pasa cuando viene el hermano sutano, que viene de la misión en Oaxaca? “Bueno...él duerme en el suelo, ¡porque ya está acostumbrado a dormir en el suelo!”
-“Si..., yo sé que un siervo de Dios debe ser humilde y que su vida es una vida de servicio, pero.... ¡un siervo de Dios debe vivir como el príncipe que es! ¿Cómo voy a andar a pie? ¿Cómo voy a predicar el evangelio?, necesito mi camioneta “Navigator”
-El mes que entra se hará la campaña evangelística en África, el Espíritu Santo prepara los corazones, pero..... necesitamos dos millones de dólares para realizar la campaña y pagarle a los evangelistas famosos!”
-"Si, nosotros somos el templo del Espíritu Santo, pero.....nos cuesta 40 millones de pesos construir el Auditorio para la iglesia.”

¿Es que acaso no hemos escuchado palabras como estas?



27) Para un cristiano de este tiempo, “congregarse” básicamente significa “ser miembro de una congregación x”. Es decir, tiene más el sentido de “membresía“ de alguna congregación específica, que el de pertenecer a la iglesia universal de Cristo. Tiene más sentido doctrinal, que de la fe en Jesucristo. Se ha convertido en un mandamiento más, entre muchos otros. Si una persona asiste a todos y cada uno de las reuniones y eventos que se llevan a cabo en esa congregación, entonces se está cumpliendo cabalmente con el mandamiento de congregarse.

28) En este sentido de “membresía”, imaginémonos a un hermano del primer siglo, que era llevado de una prisión a la jaula en donde estaban otros hermanos ya por echarlos a la Arena del Coliseo romano para ser devorados por los leones, y entonces los hermanos de la jaula le dicen: “¡¿Qué haces aquí?!!, ...¡si tú no eres de esta congregación!” Suena totalmente ridículo, ¿verdad? ¿Y qué es lo que hacemos hoy en día?

29) Hemos dicho también en otros de nuestros estudios, que este sistema religioso denominacional (llámese como se llame), busca acaparar las vidas de sus congregantes, para poder exprimirlos como buen parásito, que vive a expensas de sus proveedores. El sistema les dará un curso intensivo, pero basado en la mentira. Aunque.....
“....siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad.” (2 Tim. 3:7) Tremendas palabras, dignas de considerarse.

30) Enseñanzas como esta (respecto a no dejar de congregarse), se están usando para propiciar el crecimiento del sistema (llámese membresía). Es sorprendente la cantidad de personas que se congregan en obediencia a esta enseñanza- mandamiento basada en el “tener que congregarse” y en el “no dejar de congregarse”, para poder obtener y no perder los “beneficios” de lo que se conoce como <cobertura de la iglesia>.

31) Como decimos, el hecho de congregarse se ha convertido en un mandamiento más, entre muchos otros mandamientos más, inventados por el hombre, y que se deben cumplir al pie de la letra. Pero es trágico ver como estos mandamientos conllevan su culpa y su castigo respectivo, para todo aquel miembro que no los cumpla.

32) Lo grave de todo, es cuando un miembro se cree que el hecho de dejar de congregarse es equivalente a estar “separado de Dios.” Entonces la culpa y el castigo surten efecto. Ahora resulta que el no congregarse es sinónimo de estar separado de Dios. Pensemos en esto por un momento. El sistema busca ocupar el lugar que solo Dios debe tener en su iglesia.

33) No existe la iglesia sin Aquel que es su fundamento (Cristo), ¿y ahora resulta que si uno deja de ir a la iglesia, no es cristiano? ¿No hemos entendido que nosotros somos la iglesia?, ¿así que cómo está eso de que si dejamos de ir (congregarnos) a la iglesia, dejamos de ser cristianos?

34) Por eso es mucho muy importante que comprendamos de una vez por todas, a qué se refiere Pablo cuando dice:
25no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”

a) En primer lugar, notemos que Pablo aquí se incluye....dice “no dejando de congregarnos” y no dice “no dejes de congregarte.” Pablo no está usando la pistola para disparar a los demás. Él se incluye en estas palabras.
b) Hoy, la gran mayoría que predica esta enseñanza se excluye y señala a los demás, diciendo que han perdido la cobertura de la iglesia o del pastor, y que se han alejado del Señor. ¿Quiénes somos nosotros para atrevernos a hacer tal aseveración?.

c) En segundo lugar, en todo el capítulo 10 de Hebreos, el Apóstol Pablo está hablando de Cristo como ese camino del que hemos estado hablando. Los versículos 16 al 18 enfatizan este mensaje:
"Este es el pacto que haré con ellos
Después de aquellos días, dice el Señor:
Pondré mis leyes en sus corazones,
Y en sus mentes las escribiré,17añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.
18Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado
.”

d) En otras palabras, lo que Pablo está exaltando es el pacto que tenemos con Dios, el Padre, por medio del sacrificio de Cristo, el camino.

e) Pero de pronto leemos estas palabras del versículo 25:
25no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”

f) ¿Qué tiene que ver aquí el hecho de “congregarse”, con todo el contexto del capítulo 10? ¿Nos damos cuenta? De hecho desde el capítulo 8, Pablo ya nos habla de ese nuevo pacto. Así que algo no estamos entendiendo, o hemos cambiado el sentido de este pasaje.


35) Es muy interesante ver en el griego original, que la palabra que usa Pablo y traducida aquí como “congregarnos”, esta es la palabra griega “episunagoge” , y que viene de la raíz griega “episunago”, que básicamente quiere decir: “salirse” o “abandonar.”

36) Así que si tomamos en cuenta sobre lo que Pablo está hablando, aquí la invitación a los hermanos es a: “no salirse”...ó a “no abandonar”......¿Qué? ¿Qué no debían abandonar, o de dónde no debían salirse?, ¿de la congregación? Por favor entendamos el énfasis del mensaje de Pablo en su carta, habla del pacto, y no de la congregación solamente.

37) En pocas y sencillas palabras, lo que aquí Pablo les está diciendo y animando a los hermanos, es a no salirse de ese nuevo pacto como muchos lo hacían. Es decir, a no abandonar el camino, que es Jesucristo, sino a seguir adelante. ¿Podemos comprender? Y verdad que esto toma la correcta interpretación, y está en contexto con el mensaje de Pablo.

38) Por eso si seguimos leyendo los capítulos 11 y 12 (de Hebreos), en un solo contexto de su carta, nos daremos cuenta de lo que Pablo está enseñándoles, y que no sólo enfatiza en el hecho e importancia de congregarse, sino en el hecho e importancia de vivir por la fe, de proseguir a la meta puestos nuestros ojos en Jesús, el autor y consumador de nuestra fe.

39) Ahora, ya desde esta perspectiva, leamos este pasaje desde el versículo 19, y no sólo el versículo 25:
"Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, 20por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne, 21y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, 22acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. 23Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. 24Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; 25no dejando de congregarnos, (no saliéndonos del camino) como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos (animándonos a seguir adelante); y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.”

40) Al entender el mensaje central, el hecho de congregarse tomará su perspectiva correcta. No es el hecho de congregarse por congregarse, sino de poder reunirse con los hermanos (cuando se puede) porque no se ha salido ni abandonado el Camino.

41) En dado caso sería tan “grave” dejar de congregarse, como algunos lo acostumbran, como también el hecho de congregarse por costumbre, como algunos lo acostumbran. ¿Qué condena merecen los que dejan de congregarse?, según el sistema. ¿Y qué condena merecerán los que se congregan por costumbre?

42) Nuestros hermanos del primer siglo de la historia no se congregaban por costumbre, ni para cumplir con el mandamiento del sistema de no dejar de congregarse, ni para escuchar el sermón del pastor, ni para alabar a Dios durante el tiempo que debe durar la alabanza. Sino que lo hacían, como leemos aquí: “23Mantengámonos firmes, sin fluctuar, en nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Para estimularnos al amor y a las buenas obras, y exhortarnos.”

43) Sabían que su vida dependía de un hilo, que era probable que no habría un día de mañana, así que mientras eso sucedía, alababan a Dios en cada paso de su vida, y estuvieran en donde estuvieran. Ellos no esperaban el domingo para congregarse, así que si podían reunirse con los demás en alguna oportunidad, no era para cumplir con el requisito o el mandamiento del sistema, sino porque habían decidido no salirse del camino (Cristo), y querían permanecer cada segundo de su vida en él. Sus vidas dependían de su permanencia en el Camino, ¿podemos comprender?

44) ¿Qué sentido tiene congregarse y no dejar de hacerlo, si se ha abandonado el camino? Trágicamente muchos siguen al sistema y a sus líderes y sus enseñanzas, y cumplen cabalmente sus mandamientos, aunque en realidad se han salido del Camino.

45) Ellos podían “congregarse” en donde podían. Aún no existía en ese tiempo el denominacionalismo. Se reunían e donde hubiera un grupo de creyentes que caminaran por el Camino, para exortarse, para darse ánimo para seguir adelante. ¿Qué es lo que hacemos hoy en día?, ¿pelear nuestra denominación, y condenar, maldecir y expulsar a los que no “se apellidan” como nosotros? ¿Expulsarlos de nuestra congregación cuando nos enteramos que tienen problemas, porque los que tienen problemas, no son nuestros hermanos, sino que son anatemas?

46) La Biblia no habla de ninguna maldición por dejar de congregarse, y violar el mandamiento del hombre por no congregarse. La “maldición” (por así llamarle) que nos echamos a cuestas solitos, es por romper el pacto y salirnos del Camino. Nos conviene andar en el Camino.


47) Por otra parte, por supuesto que hay una bendición tremenda cuando uno puede congregarse con los hermanos. Dice el Salmo 133... ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! Y sobre todo, cuando la reunión no solo es estar los hermanos juntos, sino también en un mismo sentir (armonía) y en un mismo espíritu. Sin embargo, primero debemos comprender este principio de caminar en el Camino, para después poder disfrutar el poder congregarnos de esa manera.

48) Nuestros hermanos del primer siglo se reunían en un mismo sentir, en un mismo espíritu, compartían el pan, sus testimonios, se exhortaban, se animaban, se ayudaban, se amaban. Quien presidía la reunión era el Espíritu Santo personalmente, ministrando a todos, según la necesidad de cada uno. Ellos sabían que era una tremenda bendición poder reunirse, así que si se podían reunir, se reunían porque sabían el porque lo hacían.

49) No hay congregación (reunión) sin Aquél que es el centro, el anhelo, la motivación, el propósito, la meta, la vida de la reunión. Pero tristemente, ¿cuantas veces no nos reunimos solo por ser miembros de una congregación, y para no dejar de congregarnos?

50) La iglesia somos nosotros. Eres tu, soy yo, es él, y cuando dos o tres se reúnen en el nombre poderoso de nuestro Señor Jesucristo, ya hay reunión. Y esto es en donde quiera que ande la iglesia, en la calle, en la casa, en el trabajo, en el parque, en el sitio en donde se encuentre.

51) "Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en el Señor.” (1 Co. 16:19) Tomando este pasaje como ejemplo, ¿En dónde se reunía principalmente la iglesia del primer siglo? Es tiempo de romper el estereotipo de iglesia-casa que tenemos bien arraigado en nuestra mente, para volvernos a ser esa casa-iglesia primitiva, en donde el Espíritu Santo añadía (y añade) a los que son parte de su iglesia, y no seguir llevando miembros a que obtengan la membresía del sistema.

52) Aunque es tema de otro estudio, debemos saber que esta “membresía” de este sistema babilónico, tiene mucho que ver con la llamada “marca de la Bestia”, de Apocalipsis 13. Así que bien vale la pena considerar lo que aquí estamos diciendo.

53) Dios busca que su iglesia sea esa portadora de luz en medio de un mundo que está sumergido en tinieblas, para que la multiforme sabiduría de Dios sea dada a conocer por medio de la iglesia. Y no para que se encierre en un sistema congregacional sectario, metido en cuatro paredes, y en donde la “multiforme sabiduría” de los hombres la dominen, y la mantengan esclavizada.

54) Es tiempo de cambiar nuestro entendimiento, es tiempo de vivir con la libertad con que Cristo nos ha hecho libres. De vivir sin condenación, sin cargar con las maldiciones con las que nos maldijo aquel sistema. Por eso el Señor nos dijo que nosotros haríamos cosas aún mayores a las que él mismo hizo. Pero no en el sentido que hemos entendido de hacer cosas “espectaculares” (como normalmente nos gustan), sino que las podemos hacer, ¡porque todo ha sido consumado ya! ¡Ahora podemos vivir en esa libertad, ahora podemos vivir sabiéndonos amados, perdonados, redimidos, justificados, aceptos delante del Padre!

55) Nuestro caminar debe ser en plena y absoluta libertad, disfrutando de cada día de nuestra vida. Reconociendo nuestra dependencia absoluta de nuestro Dios, eso es caminar por el Camino, eso es ser parte del Camino, eso es alabanza y adoración en espíritu y en verdad.

56) Así que llegó la hora de decidirnos, congregarnos para no dejar de congregarnos y ser hallados fieles al sistema, o caminar en el Camino y no salirnos de él, para ser hallados fieles por el Padre, porque... “sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”


¡Que Dios nos siga bendiciendo!



:hola2:
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

muy buen estudio..el unico defecto es que es muy largo....
las denominaciones religiosas toman generalmente los textos que les convienen y las versiones biblicas que les conviene de la traduccion,
estas organizaciones normalmente SE SALTAN TODOS LOS INDICADORES a saber:de TIEMPO....DE LUGARES....DE PERSONAS...DE BATALLAS....ETC...
Y generalmente tienden a MUNDALIZAR los hechos y mandarlos incluso al siglo 21 cual julio verne
saludos
alicantino
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

alicantino dijo:
muy buen estudio..el unico defecto es que es muy largo....
las denominaciones religiosas toman generalmente los textos que les convienen y las versiones biblicas que les conviene de la traduccion,
estas organizaciones normalmente SE SALTAN TODOS LOS INDICADORES a saber:de TIEMPO....DE LUGARES....DE PERSONAS...DE BATALLAS....ETC...
Y generalmente tienden a MUNDALIZAR los hechos y mandarlos incluso al siglo 21 cual julio verne
saludos
alicantino


Gracias por tu comentario.

Tal vez debí escribir al principio: "Este estudio está dirigido a creyentes que les gusta pensar...Y LEER" (jejeje)


:hola2:
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Oscar Capi dijo:
Gracias por tu comentario.

Tal vez debí escribir al principio: "Este estudio está dirigido a creyentes que les gusta pensar...Y LEER" (jejeje)


:hola2:

La verdad es que podias haber dicho lo mismo sintetizandolo mas.

Mira te pongo unos enlaces que abri por tener la misma inquietud que tu. Igual te interesa echarles un vistazo.

http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?t=22220

http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?t=21967

Bendiciones y ¡Gloria a Cristo!
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Miniyo dijo:
La verdad es que podias haber dicho lo mismo sintetizandolo mas.

Mira te pongo unos enlaces que abri por tener la misma inquietud que tu. Igual te interesa echarles un vistazo.

http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?t=22220

http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?t=21967

Bendiciones y ¡Gloria a Cristo!


Ok Miniyo, gracias por tu opinión.

Creo que soy muy "rollero", así que perdona por no haber sintetizado más mi estudio. Es mi estilo personal, echar rollo.


y Si, creo que si tenemos "la misma inquietud", así que finalmente (tu brevemente, y yo con mis rollos) el fin es el mismo, que creo es lo importante.



Dios te bendice!
:hola2:
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Tal vez sería importante decirles, amados lectores, que este estudio lo escribí y lo he compartido a nivel casa-iglesia, en donde lo hemos desarrollado en varias semanas (una reunión por semana, y sin límite de tiempo), por eso está escrito en puntos.

Es decir, no solo es para leerlo aquí en el foro, sino que si gustan lo pueden copiar, escribir, corregir y aumentar (lo que el Espíritu Santo ponga en sus corazones), y así compartirlo con otros. Les aseguro que al irlo desarrollando, saldrán opiniones que serán de mucha bendición a sus vidas, y porque no decirlo....de mucha liberación. Es un estudio para interactuarlo, no solo para leerlo como merolicos. Cada punto puede debetirse por todos los que quieran opinar.

Dios les bendice!
:hola2:
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Oscar Capi dijo:
Ok Miniyo, gracias por tu opinión.

Creo que soy muy "rollero", así que perdona por no haber sintetizado más mi estudio. Es mi estilo personal, echar rollo.


y Si, creo que si tenemos "la misma inquietud", así que finalmente (tu brevemente, y yo con mis rollos) el fin es el mismo, que creo es lo importante.



Dios te bendice!
:hola2:

No lo tomes como un menosprecio es que si lo haces mas facil la gente lo termina de leer, que es de lo que se trata, que entiendan lo que les quieres comunicar. Perdona si te moleste, a veces para decir lo que pienso lo suelto como me viene.

Bendiciones
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbran?

Miniyo dijo:
No lo tomes como un menosprecio es que si lo haces mas facil la gente lo termina de leer, que es de lo que se trata, que entiendan lo que les quieres comunicar. Perdona si te moleste, a veces para decir lo que pienso lo suelto como me viene.

Bendiciones


No, no le tomo como menosprecio. En serio.
Al contrario, gracias por tu comentario. Te reitero, creo que el fin es lo importante, y en eso coincido contigo.

A Dios sea toda la gloria!!!

:hola2:
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbra

Mano ya vi (x lo q he leído) q t d igual lo q los demas dicen...pero d todas formas t lo digo: Q laaaaaaaaaaargo esta esto. Si quieres comunicar mejor debes sintetizar las ideas y no perderte. Llevar un hilo conductor y sintetizar es importante, si no, tus mensajes serán un fiasco. Por ejemplo si hubieses iniciado por el 34 inciso C, tu mensaje hubiera llegado directo y sin ruidos en la comunicación.
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbra

Muchas gracias por este estudio Oscar , estas en lo cierto y espero que ha muchos se les habra los ojos cuando lean este trabajo y dejen de ser marionetas de este sistema de control y manipulacion en que se han convertido la mayoria de las iglesias.dtb
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbra

Salud Oscar:

Muy buen mensaje a pesar de su longitud. Con decirte que lo leí todo, cosa que generalmente nunca hago con las esquelas largas. Te animo a seguir escribiendo cosas del mismo talante.

Gracia y paz.
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbra

He visto a muchos hermanos congregarse por costumbre; es decir, ir por el hecho de sólo ir... y salen igual que como entraron... tengo una sobrina católica que me dice que dejar de ir a la iglesia es pecado... ?????... bueno cada quien como su "costumbre" le dicte.

Por otra lado anhelo poder congregarme más tiempo del que tengo, pero curiosamente cuando por alguna razón no puedo congregarme y ando sin congregarme, es cuando siento que soy más sensible a las enseñanzas de la Palabra.

Considero que el pastor es un guía, pero el crecimiento espiritual es individual.


Voy a releer el mensaje...


Gracias, por su tiempo para brindar el estudio.

Saludos en Cristo!
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbra

Este estudio está dirigido a creyentes que les gusta pensar.



UNA BREVE INTRODUCCIÓN:

Antes de comenzar con este estudio, debo advertirle que si usted ha decidido salirse de aquel sistema fariséico babilónico (vaya nombrecito, ¿no?), que se autodenomina "iglesia" y además..."cristiana" (pero que por supuesto NO lo és), va a ser objeto de algunas consecuencias:

-Lo van a llamar hereje, pagano, rebelde, murmurador, hasta dirán que se ha alejado de Dios.
-Le van a dejar de hablar, aún muchos de los que consideraba sus amigos, y en el peor de los casos, aún muchos de sus seres amados más cercanos. Pues a muchos les habrán ya dado la orden de no hablarle a rebeldes como usted, para no “contaminarse.”
-Lo van a amenazar con palabras como: “Ten cuidado, que te están predicando otro evangelio, no seas hallado en pecado, luchando contra el mismo Dios, y te vayas al infierno.”
-Lo verán como bicho raro, “pobrecillo”, endemoniado, peor que a los inmundos incrédulos mundanos, y todo porque ha traicionado al sistema y a sus líderes, por tanto será considerado “traidor.”
-Van a tener cuidado de no acercársele, pues ya están bajo advertencia de que está leprosos o que puede que un día de estos la tierra se abra y le trague. Así que buen cuidado tendrán de guardar su distancia de usted, no sea que los agarre desprevenidos y se los lleve de pilón.
-Van a venir a su mente pensamientos de condenación, de duda y de temor, pues las potestades que gobiernan aquel sistema, no lo dejarán salirse así como así.
-Se va a sentir tristes, decepcionado, vacío, solo. Como que algo le hace falta. La costumbre y la tradición al sistema se convertirán en su enemigo. Las rutinas, el bullicio, los eventos, las festividades, le harán mucha falta.

Recordemos estas palabras del Señor:
"Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán.” (Jn.15:18)

Así que si está sufriendo alguna de estas consecuencias (o todas), quiero darle unas palabras de ánimo y de aliento. No se preocupe, que son los síntomas de que su decisión está causando revuelta a alguien. Son los síntomas de que está saliéndose del sistema, para venir a la luz admirable de Cristo.
El Señor sacudirá de nuestra vida todo aquello que es movible, para que quede lo inconmovible. Solo él es inconmovible, y por eso sentimos todo eso. ¡La victoria es nuestra!

Vamos a comenzar a conocer al Señor de una manera sencilla, sin complicaciones, en total libertad, y sobre todo, con total paz. Sin condenaciones, sin maldiciones ni amenazas de los líderes de este sistema. Sabiéndonos amados, arrepentidos, perdonados, redimidos, justificados, lavados en la sangre preciosa de nuestro Señor Jesucristo, por tanto aceptos ante nuestro Padre celestial.

El evangelio de terror, sometimiento al hombre, y de condenación, será reemplazado por el Evangelio viviente, ¡Cristo vino a dar libertad a los cautivos!




Comencemos pues......

“...no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”

1) A los cristianos del primer siglo se les conocía con varios nombres:
-“Nazarenos”
-“Cristianos”
-“El Camino”, ó “los del Camino”

2) En Antioquia fue en donde por primera vez se les llamó “cristianos” (Hch. 11:26). Y resulta muy interesante ver que la gente les llamó cristianos, ellos no se llamaron a si mismos cristianos, simplemente lo eran.
"Entonces viendo el denuedo de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con Jesús.” (Hch.4:13)

3) Y les llamaron así, no por adularlos, sino porque como dice aquí, veían sus vidas y les incomodaban. “¡Estos que trastornan el mundo entero!” –decían. Pues ellos trastornaban su entorno, lo transformaban, y esto a la gente no les gustaba, les incomodaba su presencia, no les convenía.

4) Hoy hay muchos congregantes que dicen de si mismos: “soy de la religión cristiana.” Y hay muchas congregaciones que se auto denominan cristianas, pero que se ponen un “apellido.” (leer 1 Co. 1:12-13) ¿Es que ahora incomodamos a la gente por nuestra vida, o por todas las tonterías que hacemos? ¿Nos llaman locos por causa del Señor e ir contra cultura, o por todas las locuras y boberías que hacemos?

5) En Hechos 9:2; 19:9, 19:23, 22:4; 24:22; encontramos algunas referencias de que a los cristianos también se les reconocía como: “el Camino.”

6) Los cristianos del primer siglo comenzaron a usar algunos emblemas distintivos, para identificarse ente si.



7) En estos pasajes aparece la palabra “Camino” escrita con “C” mayúscula, lo cual nos indica que no se trata solamente de algún “camino” (por ejem. el camino a Belén), sino que se hace referencia directa a los discípulos de Cristo, a la iglesia, quienes comenzaron a ser señalados y perseguidos por el simple hecho de ser discípulos de Cristo.

8) Incluso los fariseos de ese tiempo les consideraban herejes, como lo leemos en Hechos 24:14, en donde Lucas dice:
“...ni te pueden probar las cosas de que ahora me acusan. 14Pero esto te confieso, que según el Camino, que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas.”

9) ¿Y por qué se les conocía como “El Camino”? El Señor Jesucristo dijo de si mismo: “Yo soy el camino....., la verdad y la vida.” Así que a los discípulos de Cristo (el Camino), en forma burlona, se les identificaba como “El Camino,” ó “los del Camino.”

10) Los fariseos, no sólo los consideraban herejes, sino que también los maldecían... como lo leemos en Hch. 19:9
"Pero endureciéndose algunos <fariseos> y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, se apartó Pablo de ellos y separó a los discípulos...”

11) Esto llama la atención, porque esto último no ha cambiado, si uno se considera parte del Camino (la iglesia del Señor), los fariseos modernos nos seguirán llamando herejes y aún maldiciéndonos, por eso el Señor nos lo advirtió desde siempre:
“Estas cosas os he hablado, para que no tengáis tropiezo. 2Os expulsarán de las sinagogas; y aún viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios. 3Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mí. 4Mas os he dicho estas cosas, para que cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho.” (Jn.16:1)


12) Los cierto es que los cristianos del primer siglo no solo fueron llamados herejes ni malditos por los fariseos, sino que también comenzaron a ser perseguidos por su fe en Jesucristo, vivían bajo una persecución y tribulación terribles. Se reunían en donde podían hacerlo, lo hacían en catacumbas, a las afueras de la ciudad, en el desierto, y en el mejor de los casos, los muy privilegiados, se reunían en casas. Normalmente los que se reunían en casas era porque muchos ciudadanos romanos se habían convertido y hospedaban a los hermanos en sus casas. Esto era así hasta que eran descubiertos y tenían que huir de su propia casa.

13) Eran perseguidos y apresados cuando confesaban su fe (nótese que no hemos dicho “su denominación”), eran llevados al Coliseo romano como “atracción” pública, en donde eran devorados por los leones, para beneplácito y satisfacción de su hambre y sed de morbo y sangre de los espectadores. Se les vestía con pieles de animales y se les arrojaba a jaulas en donde eran devorados por perros salvajes hambrientos. Eran degollados por gladiadores inmisericordemente, y sus cuerpos eran arrojados a las jaulas, como comida de los leones y las hienas. Se les ataba a unas estacas, o eran clavados a ellas y puestos en las calles, o dentro del Coliseo, y después se les untaba brea a sus cuerpos desnudos, y se les prendía lumbre, así eran como antorchas humanas que servían para alumbrar las calles o la arena del Coliseo romano. Y todo esto fue una “atracción” del Circo romano, durante años.

14) Los que libraban esta clase de muerte, eran perseguidos, humillados, violados, vejados, calumniados, despojados de todos sus bienes, mutilados, encarcelados, en donde se contagiaban de enfermedades mortales, o en donde morían de hambre y de sed. Ahí en las cárceles y catacumbas es donde se “reunían” para alabar a Dios. Ellos no tenían el concepto de “congregación” y de “congregarse” que nosotros tenemos. Para ellos el hecho de ser cristiano, no era asistir todos los domingos al templo a la reunión dominical, para cantar, aplaudir, y escuchar el sermón del pastor, durante el par de horas que dura la reunión.

15) Para ellos, el hecho de que la gente les llamara cristianos, era sinónimo y aviso de echarse a cuestas la pena de muerte. Por eso no es de extrañarnos que en Hechos 1:8, y en Apocalipsis 1:1 (como ejemplos), el Señor los llame “testigos” o “siervos” (la palabra griega original es “martus”, que significa “mártires”). Un mártir del Señor, es aquel que tiene una mentalidad de mártir, y está conciente que por el hecho de ser cristiano, su vida será martirizada. Este es un mensaje que encontramos en el Nuevo Testamento, por no decir...una promesa.

16) Esto “choca” contra esa idea que muchos “cristianos” tienen hoy en día, en donde se les predica y ha enseñado una vida cristiana color de rosa, llena de prosperidad (principalmente económica), y libre de problemas y sufrimientos. Aquel evangelio del “pare de sufrir” tiene mucho éxito hoy en día, y por lo tanto, muchos adeptos.
"Porque va a llegar el tiempo en que la gente no soportará la sana enseñanza; más bien, según sus propios caprichos, se buscarán un montón de maestros que solo les enseñen lo que les guste y ellos quieran oír. 4Darán la espalda a la verdad y harán caso a toda clase de cuentos. 5Pero tú conserva siempre el buen juicio, soporta los sufrimientos y tribulaciones, dedícate a anunciar con tu vida el evangelio, cumple bien con tu trabajo.” (2 Timoteo 4:3 “Biblia amplificada”)

17) Debemos tratar de imaginarnos esta clase de vida a la que ellos tenían que enfrentarse cada día, y lo que ellos entendían por congregarse, para poder comprender las palabras del apóstol Pablo, que encontramos en Hebreos 10:25:
"...no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”


18) Hemos dicho en otros estudios, que se han sacado muchas enseñanzas basadas en la palabra escrita y en el “aquí lo dice”. Esto ha provocado que estas enseñanzas erróneas se estén predicando desde los púlpitos como doctrinas bíblicas absolutas, pero que no por ello signifique que sean enseñanzas basadas en la verdad.

19) También hemos dicho que hay muchos pasajes de la Biblia que son muy escuetos y no están traducidos en la mejor forma posible. Y aunque esto debemos tomarlo con mucha madurez, no por ello deja de ser algo que debemos saber y considerar.

20) Lo peligroso de esto, es cuando se saca una enseñanza de un pasaje mal traducido, porque entonces esa enseñanza pudiera ser errónea, o estar fuera de todo contexto. Una característica de muchos grupos sectarios, es que precisamente usan los “aquí dice” para tergiversarlos y usarlos a su propia conveniencia, y con un fin en común...el engaño.

21) Hemos dicho también (y esto es sumamente importante que lo grabemos en nuestra mente, y que lo tengamos siempre presente), que todo mensaje bíblico debe conducirnos a Cristo, quien es el camino, la verdad y la vida; y que nada ni nadie puede llevarnos al Padre, si no es a través del camino (Cristo).

22) Dentro de estas enseñanzas fuera de todo contexto bíblico, hoy en día se está predicando mucho (además de otros temas), sobre el hecho de congregarse y no dejar de hacerlo. E inmediatamente se cita el “aquí lo dice” de Hebreos 10:25. Así que es muy importante que, como cristianos, entendamos todo el contexto de estas palabras del Apóstol Pablo.

23) Como dijimos en el punto 8, debemos entender la clase de vida que nuestros hermanos del primer siglo vivían, para poder entender este pasaje de Hebreos 10:25. Ellos no podían darse el privilegio que ahora nosotros podemos darnos, de reunirnos todos los domingos (o en algunos casos, casi todos los días de la semana) en un lugar al que llamamos templo o iglesia, en ciertos horarios y en plena libertad. Como dijimos, ellos no tenían el concepto que nosotros tenemos ahora acerca de “congregarse”.

24) ¿Cuál es la idea que un creyente moderno tiene acerca del templo y de congregarse? Aunque se nos ha dicho la verdad de que nosotros somos templo del Espíritu Santo de Dios, lo cierto es que esto lo negamos al seguir creyendo que el templo es un edificio de piedra de cuatro paredes, y que congregarse significa reunirse dentro de ese edificio.

25) Seguimos llamando a un edificio “casa de Dios”, y lo grave de todo es que no solo es de dicho, sino de hecho. Pareciera que Dios está sentado en su iglesia-casa, esperando a que sus hijos vayan a verlo. ¿O no es lo que decimos muchas veces cuando oramos: “Señor, tu estabas ya aquí esperándonos con anhelo”?

26) Esta es una de las enseñanzas que más réditos le ha dado al sistema. Le ha generado mucha ganancia al lograr una membresía numerosa. Una congregación que no dependa del Señor, sino que se le ha enseñado y llevado a depender de la membresía del sistema. En donde hay muchas enseñanzas basadas en la doctrina del “Sí, pero.......” ó “La Biblia dice esto, pero......”

Algunos ejemplos de estas doctrinas:
-“Si, el Señor es mi pastor y nada me faltara, pero...... yo necesito un pastor humano”
-“Si, yo sé que no debo poner mi mirada en el hombre, pero.....”
-“Si, yo sé que la iglesia de Cristo no tiene denominación, pero.... mi iglesia se llama...”
-“Si, la salvación no es por obras, pero.....tengo que.....”
-“Si, Cristo pagó por mi en la cruz todos mis pecados, pero......esto que acabo de hacer....”
-“Si, su misericordia la renueva cada mañana, pero..... necesito portarme bien para que....”
-“Si, yo sé que Dios me ama incondicionalmente, pero..... tengo que hacer esto para que él no se decepcione de mi...”
-“Si, yo sé que por la misericordia de Dios no he sido consumido, pero..... necesito obedecer a sus autoridades delegadas para que no me pase lo que le pasó a Nadab y a Abiú.”
-“Si, yo sé que su gracia y su misericordia están sobre mi, pero..... yo necesito.... (y ponga usted aquí, todo lo que siente que necesita hacer)”
-“Si, yo sé que el Señor me bendice en su infinito amor, pero..... tengo que diezmar puntualmente para que él me siga bendiciendo.”
-“Si, yo sé que Dios es mi proveedor de todas las cosas y que lo hace por su infinito amor y misericordia, pero.... en la medida que yo diezme más y le dé más y más, él me proveerá más y más a mi.”
-“Si, yo sé que Dios es mi cobertura, pero.... necesito la cobertura de la iglesia”
-“Si, yo sé que Dios me ama y que bajo sus alas estoy seguro, pero..... necesito que el pastor me dé cobertura, para que yo y mi familia estemos seguros.”
-“Si, yo sé que Cristo ya venció al diablo en la cruz del calvario, pero..... (y aquí podemos presentar una laaaaarga lista de extras, escoja el nombre que más le guste...hay para escoger....: ¿guerra espiritual?, ¿coberturas?, ¿liberación?, ¿sanidad energética?)
-“Si, yo sé que el Señor Jesús consumó todo en la cruz, pero..... yo necesito hacer......”
-“Si, yo sé que Dios me ve redimido con la sangre de su Hijo, pero..... hoy si me porté bien y obedecí a mis autoridades.”
-“Si, yo sé que yo soy templo del Espíritu Santo, y que Dios está conmigo en todas partes, pero.....tengo que ir todos los domingos a la casa de Dios, para no dejer de congregarme como algunos tienen por costumbre.”
-“Si, yo sé que Dios me dice que clame a él y que él me responderá y que me enseñará cosas que yo no conozco, pero.... necesito que el pastor ore por mi, porque él está más cerca de Dios y a él Dios si lo oye.”
-“Si, yo sé que Dios dice que primero es mi familia, pero.... yo necesito sacrificar a mi familia si no... no soy digno de él.”
-“Si, yo sé que predicar el evangelio es un asunto de predicar con mi vida misma, pero.... yo necesito hablar, hablar, hablar a todo el mundo que Dios los ama”
-“Si..., yo sé que Dios es el que prepara los corazones y el que hace todas las cosas, pero.....si no lo hago yo, ¿entonces quién lo hará?”
-“SI..., yo sé que Dios no quiere sacrificios, no quiere holocaustos..., pero.... yo tengo que sacrificarme yéndome de misionero al Amazonas”
-“Si..., yo sé que Dios no busca templos lujosos, pero.... mi templo tiene los mejores acabados de todo el país...¡Ninguno como mi templo!”
-“Si.. yo sé que debo tratar por igual a mis consiervos, no debo hacer distinciones, pero.... ¿cómo voy a dejar que el hermano fulano se duerma en el suelo? Si él está acostumbrado a dormir en hoteles 5 estrellas.”
¿Y qué pasa cuando viene el hermano sutano, que viene de la misión en Oaxaca? “Bueno...él duerme en el suelo, ¡porque ya está acostumbrado a dormir en el suelo!”
-“Si..., yo sé que un siervo de Dios debe ser humilde y que su vida es una vida de servicio, pero.... ¡un siervo de Dios debe vivir como el príncipe que es! ¿Cómo voy a andar a pie? ¿Cómo voy a predicar el evangelio?, necesito mi camioneta “Navigator”
-El mes que entra se hará la campaña evangelística en África, el Espíritu Santo prepara los corazones, pero..... necesitamos dos millones de dólares para realizar la campaña y pagarle a los evangelistas famosos!”
-"Si, nosotros somos el templo del Espíritu Santo, pero.....nos cuesta 40 millones de pesos construir el Auditorio para la iglesia.”

¿Es que acaso no hemos escuchado palabras como estas?



27) Para un cristiano de este tiempo, “congregarse” básicamente significa “ser miembro de una congregación x”. Es decir, tiene más el sentido de “membresía“ de alguna congregación específica, que el de pertenecer a la iglesia universal de Cristo. Tiene más sentido doctrinal, que de la fe en Jesucristo. Se ha convertido en un mandamiento más, entre muchos otros. Si una persona asiste a todos y cada uno de las reuniones y eventos que se llevan a cabo en esa congregación, entonces se está cumpliendo cabalmente con el mandamiento de congregarse.

28) En este sentido de “membresía”, imaginémonos a un hermano del primer siglo, que era llevado de una prisión a la jaula en donde estaban otros hermanos ya por echarlos a la Arena del Coliseo romano para ser devorados por los leones, y entonces los hermanos de la jaula le dicen: “¡¿Qué haces aquí?!!, ...¡si tú no eres de esta congregación!” Suena totalmente ridículo, ¿verdad? ¿Y qué es lo que hacemos hoy en día?

29) Hemos dicho también en otros de nuestros estudios, que este sistema religioso denominacional (llámese como se llame), busca acaparar las vidas de sus congregantes, para poder exprimirlos como buen parásito, que vive a expensas de sus proveedores. El sistema les dará un curso intensivo, pero basado en la mentira. Aunque.....
“....siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad.” (2 Tim. 3:7) Tremendas palabras, dignas de considerarse.

30) Enseñanzas como esta (respecto a no dejar de congregarse), se están usando para propiciar el crecimiento del sistema (llámese membresía). Es sorprendente la cantidad de personas que se congregan en obediencia a esta enseñanza- mandamiento basada en el “tener que congregarse” y en el “no dejar de congregarse”, para poder obtener y no perder los “beneficios” de lo que se conoce como <cobertura de la iglesia>.

31) Como decimos, el hecho de congregarse se ha convertido en un mandamiento más, entre muchos otros mandamientos más, inventados por el hombre, y que se deben cumplir al pie de la letra. Pero es trágico ver como estos mandamientos conllevan su culpa y su castigo respectivo, para todo aquel miembro que no los cumpla.

32) Lo grave de todo, es cuando un miembro se cree que el hecho de dejar de congregarse es equivalente a estar “separado de Dios.” Entonces la culpa y el castigo surten efecto. Ahora resulta que el no congregarse es sinónimo de estar separado de Dios. Pensemos en esto por un momento. El sistema busca ocupar el lugar que solo Dios debe tener en su iglesia.

33) No existe la iglesia sin Aquel que es su fundamento (Cristo), ¿y ahora resulta que si uno deja de ir a la iglesia, no es cristiano? ¿No hemos entendido que nosotros somos la iglesia?, ¿así que cómo está eso de que si dejamos de ir (congregarnos) a la iglesia, dejamos de ser cristianos?

34) Por eso es mucho muy importante que comprendamos de una vez por todas, a qué se refiere Pablo cuando dice:
25no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”

a) En primer lugar, notemos que Pablo aquí se incluye....dice “no dejando de congregarnos” y no dice “no dejes de congregarte.” Pablo no está usando la pistola para disparar a los demás. Él se incluye en estas palabras.
b) Hoy, la gran mayoría que predica esta enseñanza se excluye y señala a los demás, diciendo que han perdido la cobertura de la iglesia o del pastor, y que se han alejado del Señor. ¿Quiénes somos nosotros para atrevernos a hacer tal aseveración?.

c) En segundo lugar, en todo el capítulo 10 de Hebreos, el Apóstol Pablo está hablando de Cristo como ese camino del que hemos estado hablando. Los versículos 16 al 18 enfatizan este mensaje:
"Este es el pacto que haré con ellos
Después de aquellos días, dice el Señor:
Pondré mis leyes en sus corazones,
Y en sus mentes las escribiré,17añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.
18Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado
.”

d) En otras palabras, lo que Pablo está exaltando es el pacto que tenemos con Dios, el Padre, por medio del sacrificio de Cristo, el camino.

e) Pero de pronto leemos estas palabras del versículo 25:
25no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.”

f) ¿Qué tiene que ver aquí el hecho de “congregarse”, con todo el contexto del capítulo 10? ¿Nos damos cuenta? De hecho desde el capítulo 8, Pablo ya nos habla de ese nuevo pacto. Así que algo no estamos entendiendo, o hemos cambiado el sentido de este pasaje.


35) Es muy interesante ver en el griego original, que la palabra que usa Pablo y traducida aquí como “congregarnos”, esta es la palabra griega “episunagoge” , y que viene de la raíz griega “episunago”, que básicamente quiere decir: “salirse” o “abandonar.”

36) Así que si tomamos en cuenta sobre lo que Pablo está hablando, aquí la invitación a los hermanos es a: “no salirse”...ó a “no abandonar”......¿Qué? ¿Qué no debían abandonar, o de dónde no debían salirse?, ¿de la congregación? Por favor entendamos el énfasis del mensaje de Pablo en su carta, habla del pacto, y no de la congregación solamente.

37) En pocas y sencillas palabras, lo que aquí Pablo les está diciendo y animando a los hermanos, es a no salirse de ese nuevo pacto como muchos lo hacían. Es decir, a no abandonar el camino, que es Jesucristo, sino a seguir adelante. ¿Podemos comprender? Y verdad que esto toma la correcta interpretación, y está en contexto con el mensaje de Pablo.

38) Por eso si seguimos leyendo los capítulos 11 y 12 (de Hebreos), en un solo contexto de su carta, nos daremos cuenta de lo que Pablo está enseñándoles, y que no sólo enfatiza en el hecho e importancia de congregarse, sino en el hecho e importancia de vivir por la fe, de proseguir a la meta puestos nuestros ojos en Jesús, el autor y consumador de nuestra fe.

39) Ahora, ya desde esta perspectiva, leamos este pasaje desde el versículo 19, y no sólo el versículo 25:
"Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, 20por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne, 21y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, 22acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. 23Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. 24Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; 25no dejando de congregarnos, (no saliéndonos del camino) como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos (animándonos a seguir adelante); y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.”

40) Al entender el mensaje central, el hecho de congregarse tomará su perspectiva correcta. No es el hecho de congregarse por congregarse, sino de poder reunirse con los hermanos (cuando se puede) porque no se ha salido ni abandonado el Camino.

41) En dado caso sería tan “grave” dejar de congregarse, como algunos lo acostumbran, como también el hecho de congregarse por costumbre, como algunos lo acostumbran. ¿Qué condena merecen los que dejan de congregarse?, según el sistema. ¿Y qué condena merecerán los que se congregan por costumbre?

42) Nuestros hermanos del primer siglo de la historia no se congregaban por costumbre, ni para cumplir con el mandamiento del sistema de no dejar de congregarse, ni para escuchar el sermón del pastor, ni para alabar a Dios durante el tiempo que debe durar la alabanza. Sino que lo hacían, como leemos aquí: “23Mantengámonos firmes, sin fluctuar, en nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Para estimularnos al amor y a las buenas obras, y exhortarnos.”

43) Sabían que su vida dependía de un hilo, que era probable que no habría un día de mañana, así que mientras eso sucedía, alababan a Dios en cada paso de su vida, y estuvieran en donde estuvieran. Ellos no esperaban el domingo para congregarse, así que si podían reunirse con los demás en alguna oportunidad, no era para cumplir con el requisito o el mandamiento del sistema, sino porque habían decidido no salirse del camino (Cristo), y querían permanecer cada segundo de su vida en él. Sus vidas dependían de su permanencia en el Camino, ¿podemos comprender?

44) ¿Qué sentido tiene congregarse y no dejar de hacerlo, si se ha abandonado el camino? Trágicamente muchos siguen al sistema y a sus líderes y sus enseñanzas, y cumplen cabalmente sus mandamientos, aunque en realidad se han salido del Camino.

45) Ellos podían “congregarse” en donde podían. Aún no existía en ese tiempo el denominacionalismo. Se reunían e donde hubiera un grupo de creyentes que caminaran por el Camino, para exortarse, para darse ánimo para seguir adelante. ¿Qué es lo que hacemos hoy en día?, ¿pelear nuestra denominación, y condenar, maldecir y expulsar a los que no “se apellidan” como nosotros? ¿Expulsarlos de nuestra congregación cuando nos enteramos que tienen problemas, porque los que tienen problemas, no son nuestros hermanos, sino que son anatemas?

46) La Biblia no habla de ninguna maldición por dejar de congregarse, y violar el mandamiento del hombre por no congregarse. La “maldición” (por así llamarle) que nos echamos a cuestas solitos, es por romper el pacto y salirnos del Camino. Nos conviene andar en el Camino.


47) Por otra parte, por supuesto que hay una bendición tremenda cuando uno puede congregarse con los hermanos. Dice el Salmo 133... ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! Y sobre todo, cuando la reunión no solo es estar los hermanos juntos, sino también en un mismo sentir (armonía) y en un mismo espíritu. Sin embargo, primero debemos comprender este principio de caminar en el Camino, para después poder disfrutar el poder congregarnos de esa manera.

48) Nuestros hermanos del primer siglo se reunían en un mismo sentir, en un mismo espíritu, compartían el pan, sus testimonios, se exhortaban, se animaban, se ayudaban, se amaban. Quien presidía la reunión era el Espíritu Santo personalmente, ministrando a todos, según la necesidad de cada uno. Ellos sabían que era una tremenda bendición poder reunirse, así que si se podían reunir, se reunían porque sabían el porque lo hacían.

49) No hay congregación (reunión) sin Aquél que es el centro, el anhelo, la motivación, el propósito, la meta, la vida de la reunión. Pero tristemente, ¿cuantas veces no nos reunimos solo por ser miembros de una congregación, y para no dejar de congregarnos?

50) La iglesia somos nosotros. Eres tu, soy yo, es él, y cuando dos o tres se reúnen en el nombre poderoso de nuestro Señor Jesucristo, ya hay reunión. Y esto es en donde quiera que ande la iglesia, en la calle, en la casa, en el trabajo, en el parque, en el sitio en donde se encuentre.

51) "Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en el Señor.” (1 Co. 16:19) Tomando este pasaje como ejemplo, ¿En dónde se reunía principalmente la iglesia del primer siglo? Es tiempo de romper el estereotipo de iglesia-casa que tenemos bien arraigado en nuestra mente, para volvernos a ser esa casa-iglesia primitiva, en donde el Espíritu Santo añadía (y añade) a los que son parte de su iglesia, y no seguir llevando miembros a que obtengan la membresía del sistema.

52) Aunque es tema de otro estudio, debemos saber que esta “membresía” de este sistema babilónico, tiene mucho que ver con la llamada “marca de la Bestia”, de Apocalipsis 13. Así que bien vale la pena considerar lo que aquí estamos diciendo.

53) Dios busca que su iglesia sea esa portadora de luz en medio de un mundo que está sumergido en tinieblas, para que la multiforme sabiduría de Dios sea dada a conocer por medio de la iglesia. Y no para que se encierre en un sistema congregacional sectario, metido en cuatro paredes, y en donde la “multiforme sabiduría” de los hombres la dominen, y la mantengan esclavizada.

54) Es tiempo de cambiar nuestro entendimiento, es tiempo de vivir con la libertad con que Cristo nos ha hecho libres. De vivir sin condenación, sin cargar con las maldiciones con las que nos maldijo aquel sistema. Por eso el Señor nos dijo que nosotros haríamos cosas aún mayores a las que él mismo hizo. Pero no en el sentido que hemos entendido de hacer cosas “espectaculares” (como normalmente nos gustan), sino que las podemos hacer, ¡porque todo ha sido consumado ya! ¡Ahora podemos vivir en esa libertad, ahora podemos vivir sabiéndonos amados, perdonados, redimidos, justificados, aceptos delante del Padre!

55) Nuestro caminar debe ser en plena y absoluta libertad, disfrutando de cada día de nuestra vida. Reconociendo nuestra dependencia absoluta de nuestro Dios, eso es caminar por el Camino, eso es ser parte del Camino, eso es alabanza y adoración en espíritu y en verdad.

56) Así que llegó la hora de decidirnos, congregarnos para no dejar de congregarnos y ser hallados fieles al sistema, o caminar en el Camino y no salirnos de él, para ser hallados fieles por el Padre, porque... “sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”


¡Que Dios nos siga bendiciendo!



:hola2:


demasiado extenso, la gente se aburre!
 
Re: ¿No dejar de congregarse..., o congregarse por costumbre, como algunos acostumbra

Estimado Oscar muy buen estudio, la gloria sea a Dios que te ilumina a traves de su Espiritu Santo, es su poder, es su inspircion. Me llama la atencion que hermanos se quejen de lo largo del escrito... que nos queda si leemos salmos 119? a no es demasiaaado largo este David se extendio muchoooo hubiera escrito salmos 119:169 al 176 y listo para nada sintetico este David.hermanos si entran es para leer, si no tienen tiempo hagan como yo, guardan la pagina y luego la leen con tiempo. La paz del Señor este con ustedes.