Re: ¿LAs mujeres tienen derecho biblicamente de predicar en la congregacione?
Según dicen los que saben sobre la biblia y su interpretación sugieren que se debe de tomar como base (cuando se refiere a mandatos o normas o dogmas de comportamiento social, no espirírtuales) el entorno o contexto hístorico en que se fija el mandamiento, norma o dogma.
Corinto era una ciudad griega y por ende sus habitantes tenían una fijación desmedida por la busqueda del placer y de la sabiduría, se caracterizaban por hedinistas, o amantes del placer y la comida, los habitantes de crinto pretendían ser muy sabios por lo que se fascinaban en filosofar.
Hay que recordar que en la ciudad griega de corinto, existian como en todas las metropolis de aquella época un templo pagano, de grandes dimensiones arquitectonicas y con muchos adeptos, el templo que existía en corinto estaba dedicada a la diosa afrodita, donde se celebraban ritos dedicados a ella que incluían las relaciones sexuales. Por ser una diosa la predominante en el el cultos de los ciudadanos de corinto, las que dirigian en el culto eran las mujeres, las mujeres eran las sacerdotisas. El hombre en el plano religioso en corinto estaba relegado a un segundo lugar, lo que después más adelante afectaría el culto de los cristianos en corinto.
Por eso para interpretar los versículos en los que el apóstol pablo ordenaba a las mujeres a callar hay que hacerlo tomando en cuenta la situación de corinto en aquella época, la mayoria de mujeres de corinto, eran mujeres insujetas, no respetaban a sus maridos, contendían en el templo con ellos, alterando esto el orden en el servicio a Dios, y provocando esto que los invonversos o los indoctos juzgaran a los cristianos de corinto y que creyeran en el evangelio.
Es indiscutible que la mujer en este tiempo ejerce un liderazgo importante en la iglesía, tiene la capacidad y el apoyo de parte de Dios para ministrar en la iglesia y andar en obediencia a la vez a sus esposos, Jesús vino a romper con el error en el que muchos hombres no solo en este tiempo sino a través de los tiempos ha visto el rol de la mujer en la iglesia.
Ya que algunos han puesto practicamente al apósto pablo como el " padre y precursor del machismo y la tergiversación del rol de la mujer en la iglesia" les dejo algo que encontre en la red sobre el apóstol pablo un apóstol que se caracterizo por tener muchas colaboradoras al igual que nuestro señor.
Bendiciones.
La ciudad de Corinto las mujeres se habían convertido en un problema debido a la inmadurez con que habían asumido la conversión al cristianismo
El apóstol Pablo fue un hombre de visión, un buen maestro, un gran organizador, un teólogo excelente, un predicador excelente y un judío receptivo. A pesar de ser liberal, era judío de sus tiempos, acostumbrado a ver a las mujeres en su hogar atendiendo a su marido e hijos, cumpliendo con sus deberes caseros. Tal actitud era asunto social y cultural, no religioso.
Este pensamiento se refleja en algunos pasajes bíblicos, los cuales no deben tomarse ni interpretarse aisladamente. Además estos pasajes deben verse a la luz de lo que estaba sucediendo en las congregaciones de la iglesia primitiva para poder entender bien la razón por la cual Pablo, por ejemplo, reprendía a las mujeres que hablaban en la iglesia de Corinto.
Por otro lado se puede ver el gran cariño que Pablo tenía por las mujeres que conoció y que le ayudaron. Las llama por nombres y les envía saludos en sus cartas. Las recuerda con afecto porque le ayudaron, lo apoyaron y colaboraron con él en su trabajo misionero. Veamos algunas de estas mujeres.
I. CLAUDIA
Una de las mujeres que Pablo menciona en sus epístolas es Claudia (2 Ti. 4:21) que vivía en Roma. Probablemente era parte de la casa del emperador Claudio, pariente o esclava. Puede haber sido la esposa de Pudente y la madre de Lino mencionada también en 2 Ti. 4:21. La familia de Claudia formaba parte de los amigos que ayudaban a Pablo mientras estaba preso en Roma.
II. CLOE
I Corintios 1:11 “Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas.”
No se sabe con seguridad si Cloé era cristiana o no, pero los esclavos de esta mujer informaron a Pablo de las contiendas que había en Corinto. El que Pablo le haya hecho caso indica que la palabra y la persona de esta mujer tenían validez. En cierta manera, esta mujer le estaba ayudando a Pablo a ver algunos de los problemas de la iglesia para que el apóstol pudiera dar alguna información.
III. DAMARIS
Una de las mujeres de las cuales poco se sabe es Damaris. Ella fue una de las personas que se convirtieron por la predicación de Pablo en Atenas. No se sabe por qué estaba esta mujer en el Aerópago escuchando a Pablo, ya que a ninguna mujer de buena familia se le permitía estar presente allí. La Biblia tampoco indica su posición social. Aunque no sabemos mucho de esta mujer, sin duda ayudó a Pablo.
IV. EUNICE Y LOIDA
2 Timoteo 1:5 “...trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.”
Dos mujeres muy conocidas son Eunice y Loida. Eunice era una mujer judía casada con un gentil. Vivían en Listra. Tuvieron un hijo, Timoteo. Eunice y su madre Loida instruyeron a Timoteo en las Sagradas Escrituras. Es muy probable que Eunice se convirtió al cristianismo cuando Pablo visitó a Listra por primera vez.
Ya era cristiana Eunice cuando Pablo llegó a Listra por segunda vez. Estas mujeres ayudaron a Pablo y a Silas en su segundo viaje misionero. Pablo llegó a considerar a Timoteo como su hijo.
V. EVODIA Y SINTIQUE
Otras dos mujeres que combatieron juntamente con Pablo en el evangelio fueron Evodia y Síntique. Quizás estas dos mujeres estuvieron entre los primeros miembros de la congregación de Filipos. Ya que colaboraron con Pablo, tal vez eran diaconisas. Sin embargo, estas dos mujeres tuvieron un conflicto entre sí a tal punto que Pablo tuvo que rogarle que fueran de lun mismo sentir en el Señor.
Filipenses 4:2 “Ruego a Evodia y a Síntique, que sean de un mismo sentir en el Señor.”
VI. LIDIA
Pasando junto al río, Pablo encontró a algunas mujeres sentadas a la orilla haciendo oraciones. Entre aquellas mujeres estaba Lidia, vendedora de púrpura de la ciudad de Tiatira.
Hechos 16:14 “Entonces una mujer llamada Lidia, vendedora de púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, estaba oyendo; y el Señor abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía.”
Pablo se sentó y les habló. Así Lidia se convirtió y fue bautizada junto con toda su familia. Aquella no era una situación comprometedora ya que todas eran mujeres y ella no estaba en una sinagoga. ¿Por qué se detuvo el apóstol entonces? No sabemos en realidad, pero sí sabemos que la iglesia en Filipos llegó a ser una de las más firmes y más generosas que Pablo fundó. No cabe duda que Lidia tuvo mucho que ver con el desarrollo y el crecimiento de la obra en ese lugar.
Lidia era una mujer de negocios y tenía experiencia en cómo organizar, manejar y dirigir los negocios en el mundo comercial. Estos dones seguramente le sirvieron para ayudar a la iglesia en Filipos.
Uno de los dones que Lidia ofreció a Pablo fue su hospitalidad. Inmediatamente después de que fue bautizada, Lidia invitó a Pablo y a sus compañeros a entrar a su casa y descansar. Igualmente, después de haber salido Pablo y Silas de la cárcel donde habían sido puestos presos por haber sanado a una muchacha que tenía espíritu de adivinación, pasaron a la casa de Lidia donde los hermanos los consolaron.
VII. MARIA
Romanos 16:6 “Saludad a María, la cual ha trabajado mucho entre vosotros.”
El nombre de María aparece casi al principio de la lista, y Pablo agrega una palabra después de su nombre diciendo: “la cual ha trabajado mucho entre vosotros.”. Tal parece que esta mujer de nombre María era alguien que Pablo amaba en el Señor y era una obrera de gran estimación dentro de la comunidad romana.
VIII. NINFAS
Ninfas es otra mujer que a su manera ayudó a Pablo. Esta mujer pertenecía a la pequeña comunidad cristiana en Laodicea. Ella había prestado su casa para ser el lugar de reunión de aquella iglesia.
Colosenses 4:15 “Saludad a los hermanos que están en Laodicea, y a Ninfas y a la iglesia que está en su casa.”
IX. PERSIDA
Romanos 16:12 “Saludad a Trifena y a Trifosa, las cuales trabajan en el Señor. Saludad a la amada Pérsida, la cual ha trabajado mucho en el Señor.”
Ella era una mujer que Pablo amaba y respetaba por haber trabajado mucho en el Señor. No sabemos cuál era su ministerio, pero sí sabemos, por lo que dice el apóstol, que su obra fue de bendición.
X. FEBE
Otra de las mujeres que ayudaron a Pablo fue Febe, diaconisa de la iglesia en Cencrea, el puerto de Corinto.
Romanos 16:1 “Os recomiendo además nuestra hermana Febe, la cual es diaconisa de la liglesia en Cencrea.” Pablo recomienda a los hermanos en Roma que reciban a Febe “como es digno de los santos que la ayuden en lo que se le ofrezca ya que ella, no tan solo ha ayudado a muchos sino a Pablo mismo. (Ro. 16:2).
XI. PRISCILA
Quizás la mujer más conocida de las que ayudaron a Pablo fue Prisca o Priscila, la esposa de Aquila. Ella juntamente con su esposo fueron colaboradores de pablo. Habían vivido en Roma, pero habían sido expulsados con los demás judíos. Se fueron a vivir a Corinto donde conocieron al apóstol Pablo. El oficio de Priscila y Aquila era igual que el de Pablo: hacedores de tiendas (Hechos 18:3); trabajaron juntos, y juntos también establecieron la congregación de cristianos en aquella ciudad. Más tarde Aquila y Priscila acompañaron a Pablo en su viaje a Efeso donde permanecieron mientras Pablo fue a Jerusalén. Priscila era una maestra excepcional, inteligente y sabia. Era madura en su fe
Fue en Efeso conde después de haber escuchado a Apolos, un “varón elocuente”, poderoso en las Escrituras (Hechos 18:24), Priscila y Aquila lo tomaron aparte y se enseñaron más exactamente el camino de Dios. (Hechos 18:26)
La iglesia en Efeso se reunía en la casa de Priscila. Parece que después del alboroto en Efeso ella y su esposo regresaron a Roma, pero nuevamente regresaron a Efeso.
De las seis citas bíblicas donde aparecen los nombres de Priscila y Aquila viene antes el de Aquila, cuatro veces, lo cual indica el lugar prominente que tenía Priscila para Pablo.
XII. TRIFENA Y TRIFOSA
Otras dos mujeres que menciona Pablo en sus epístolas son Trifena y Trifosa. Ambas eran miembros de la comunidad cristiana en Roma y eran grandemente respetadas por su contribución a la obra del Señor. En Romanos 16:12 Pablo muestra su aprecio por ellas al saludarlas por su nombre.
Romanos 16:12 “Saludad a Trifena y a Trifosa, las cuales trabajan en el Señor. Saludad a la amada Pérsida, la cual ha trabajado mucho en el Señor.”
En su epístola a los Romanos, Pablo menciona a otras mujeres más: Junias, la madre de Rufo, Julia y la hermana de Nereo. (Ro. 16:7, 13, 15), pero solo aparecen sus nombres y nada más. Alguna influencia y bendición recibió Pablo de todas ellas, y por eso las recuerda en su epístola.
Las mujeres en alguna u otra forma fueron parte de la vida del apóstol Pablo antes y después de su conversión a Cristo Jesús. Una de las principales indicaciones del lugar prominente de la mujer en la iglesia primitiva es el hecho de que Saulo (el nombre de Pablo antes de su conversión) había pedido permiso a la sinagoga en Damasco para llevar presos a Jerusalén todo hombre o mujeres que hubieran estado bajo el dominio de sus maridos; no hubiera sido necesario mencionar a las mujeres separadamente de los hombres, mucho menos hubiera sido necesario perseguirlas. Con el hecho de hacer presos a los hombres hubiera sido suficiente. El libro de Hechos no 8:3; 92 y 22:4 nos informan que Saulo arrastraba tanto a hombres como a mujeres a la cárcel.
Vemos que había mujeres piadosas y de distinción, con influencias políticas y con dinero, y muchas otras con toda solicitud escudriñando cada día las escrituras (Hechos 17:11).
Para Pablo la mujer era su colaboradora en todo sentido.
Amén.