¿¿ Sabìas que el diablo la figura a la que tanto temen y a la que tanto mencionan fue destruido hace ya 2000 años ??
La religión hoy día desparrama porque no entiende que el hombre fuerte fue Satanás, pero el más fuerte es Jesucristo, el que lo venció y le quito sus armas (el pecado y la ley). Con razón el profeta dijo en aquel día (en la cruz) matará a la serpiente antigua (Is 27: 1-3), es decir, el hombre más fuerte mataría al hombre fuerte. También dice que lo pondría sobre la tierra a los ojos de todos y que para siempre dejaría de ser (Ez 28:17-19), eso fue en la cruz, un acto que se conoce en toda la tierra y donde el Señor destruyó, mato a Satanás.
El mismo Dios puso enemistad entre la simiente de Satanás y la suya (Gen 3:15), dijo que la simiente del Señor le heriría en la cabeza y la de Satanás en el calcañar, por eso cuando Cristo murió mató a Satanás y la herencia de Satanás quedó en nuestra carne.
Jesús les dijo que él veía caer a Satanás como un rayo, se refería en la cruz, (Lc 10:17-20) y también dijo ahora (hace 2000 años en la cruz) el príncipe de este mundo será echado fuera. El sabía que al morir en la cruz destruiría para siempre al diablo.
Una vez lo mató, destruyó ese reino y nos trasladó a su reino (Col 1:13). Es evidente, Dios se puso un cuerpo para destruir con su muerte, al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo (Hebreos 2:14-15), y también triunfo y exhibió públicamente a los principados y potestades (Col 2:15-17).
Apreciado hermano, Jesucristo mató al diablo, por lo tanto el diablo ya no existe.
La religión hoy día desparrama porque no entiende que el hombre fuerte fue Satanás, pero el más fuerte es Jesucristo, el que lo venció y le quito sus armas (el pecado y la ley). Con razón el profeta dijo en aquel día (en la cruz) matará a la serpiente antigua (Is 27: 1-3), es decir, el hombre más fuerte mataría al hombre fuerte. También dice que lo pondría sobre la tierra a los ojos de todos y que para siempre dejaría de ser (Ez 28:17-19), eso fue en la cruz, un acto que se conoce en toda la tierra y donde el Señor destruyó, mato a Satanás.
El mismo Dios puso enemistad entre la simiente de Satanás y la suya (Gen 3:15), dijo que la simiente del Señor le heriría en la cabeza y la de Satanás en el calcañar, por eso cuando Cristo murió mató a Satanás y la herencia de Satanás quedó en nuestra carne.
Jesús les dijo que él veía caer a Satanás como un rayo, se refería en la cruz, (Lc 10:17-20) y también dijo ahora (hace 2000 años en la cruz) el príncipe de este mundo será echado fuera. El sabía que al morir en la cruz destruiría para siempre al diablo.
Una vez lo mató, destruyó ese reino y nos trasladó a su reino (Col 1:13). Es evidente, Dios se puso un cuerpo para destruir con su muerte, al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo (Hebreos 2:14-15), y también triunfo y exhibió públicamente a los principados y potestades (Col 2:15-17).
Apreciado hermano, Jesucristo mató al diablo, por lo tanto el diablo ya no existe.