Re: LA INEXISTENCIA DE LA TRINIDAD
Aletinos dijo:
Muy bien Ibero. Lo único que puedo decir es que tu postura es muy enredada. de pronto hablas como trinitario (como lo muestran algunos de tus párrafos anteriores), pero te consideras fuertmente antitrinitario.
El sentimiento es correcto.
Tu postura la capto así.
El Espíritu Santo no es Dios (en el sentido trinitario), pero Sí es Dios (en el sentido no trinitario)
Perfecto
porque es más que Dios (no sé en que sentido) pero es menos que Dios.
La Deidad (Dios) no es equivalente o igual matemáticamente a Espíritu Santo, que es lo que pretende el concepto "trinidad". La Deidad es una, es lo que conocemos por "Dios", y sin duda es "más" que el Espíritu Santo porque el "engendrador" del Espíritu Santo es Dios-Padre.
El Espíritu Santo, sin embargo, no es más ni es menos que la Deidad, ni más ni menos que Dios.
Sin embargo, la Deidad sí que es más que el Espíritu Santo. La Deidad está incompleta, por decisión del Padre, si falta el Hijo o el Espíritu Santo, o evidentemente si falta el Padre, engendrador de la Deidad.
La Deidad ha decidido habitar en toda plenitud en el Hijo, cosa que no se dice del Espíritu Santo.
Sin embargo, el Espíritu Santo es el Espíritu de Cristo y el Espíritu del Padre.
(Para volverse locos, ¿verdad?)
¿Qué es la Deidad? La Deidad es la muestra palpable de que Dios-Padre ha decidido "engendrar" de Sí Mismo, "engendrar" al Espíritu Santo (proviene del Padre, según las palabras de Jesús), y "engendrar" al Hijo (quien asimismo proviene del Padre). Hijo y Espíritu Santo nada hacen ni dicen de sí mismos, sino que hablan lo que oyen de Dios-Padre, a quien nadie ha visto jamás. El Hijo se reconoce "menor" que el Padre. Y el Espíritu sólo dice y hace lo que oye del Hijo, y éste lo que oye del Padre. La Deidad es eterna.
Hay diferencias en los "elementos" de la Deidad. Iguales, mas no iguales.
El Hijo tuvo que aprender el significado de la obediencia al Padre al tomar forma de siervo y habitar entre nosotros, y el Espíritu y el Padre aparentemente no tuvieron que aprender esa obediencia.
Sin embargo, se afirma en Romanos que el Espíritu es el Hijo y el Espíritu es el Padre.
Con lo cual volvemos al principio de todo este asunto, que es la imposibilidad de definir en perfección y plenitud qué es la Deidad, del mismo modo que no podemos comprender y asimilar el concepto de eternidad o que la Deidad no tenga padre, madre ni genealogía.
No es eterno (en el sentido que los trinitarios afirman) pero como es engendrado por Dios (la Biblia no lo dice) entonces sí eterno (no en el sentido trinitario), etc, etc.
En fin, muy enredado.
Para la mente natural no sólo es enredado, sino imposible de abarcar. Mis intervenciones al respecto pretenden demostrar este hecho, y por tanto afirmar que el concepto pagano "trinidad" no es inspirado por el Espíritu Santo, sino un producto de la mente humana.
Los apóstoles y Jesús, sabiendo de la Deidad mucho más que los que acuñaron el término "trinidad", jamás intentaron definirla numerológicamente.
Un saludo