Me considero católico y evangélico a la vez
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Conversatio: Yo nací como católico, me bautizaron cuando niño, cosa de la que no me acuerdo. Cuando estaba aun niño, toda mi familia experimentó una conversión a Cristo en una iglesia evangélica, y comenzamos a asistir. Ahí me crié y crecí... Aprendí y experimenté buena parte de lo mejor de mi relación con Dios... Allí aprendí, también, algo de lo peor, como por ejemplo a odiar a los católicos y todo lo que fuese católico.
Demócrito: Una cosa es enseñar a odiar y otra enseñar a discernir. Lo primero no es cristiano, lo segundo, sí.
Conversatio: Me enseñaron, implícitamente, que todos los católicos están perdidos y que la Iglesia Católica era la Gran Ramera del Apocalipsis... Hasta ahí todo iba bien.... hasta que comencé a leer.
Demócrito: Quienes se salvan y quienes se pierden sólo lo sabe Dios. En la otra vida seguro que nos llevaremos “todos” muchas sorpresas. Dios no ve las apariencias, sino lo profundo de nuestras conciencias.
Conversatio: He tenido la oportunidad (yo creo que Dios lo puso) de tener acceso a la lectura... Hay algo que impactó mi vida y me cambió para siempre, algo que ni siquiera pensé que existía. No se bien como llamarlo... Su nombre tal vez sea espiritualidad contemplativa... En un tiempo comenzaron a caer en mis manos libros de escritores católicos acerca de la oración, la vida profunda y la espiritualidad contemplativa...
Demócrito: Yo soy protestante y leo y valoro muchísimo la espiritualidad contemplativa de muchos católicos cuando no se desvían de las Escrituras. Y también conozco protestantes profundamente contemplativos.
Conversatio: Siento que Dios puso algo místico y contemplativo dentro de mi... En las iglesias evangélicas cualquier alusión a este tipo de espiritualidad es mirado poco menos como esoterismo...
Demócrito: La mística y la contemplación es mirada con desconfianza no sólo por los protestantes, sino por los mismos católicos. San Juan de la Cruz estuvo a un paso de caer en las manos de la Inquisición y tardaron más de un siglo en canonizarlo y varios en nombrarlo Doctor de la Iglesia. Murió en Úbeda en 1591. En 1726 fue canonizado y en 1926 proclamado Doctor de la Iglesia. O sea, tardaron 135 años en canonizarlo y 335 años en nombrarlo Doctor de la Iglesia. Compáralo, por ejemplo, con Escrivá de Balaguer.
Es cierto que dentro del protestantismo existe bastante desconfianza hacia la mística y la contemplación más por los excesos y las falsificaciones de ambas que por ellas mismas. San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús son valorados por autores protestantes como Samuel Vila como cristianos evangélicos, aunque nunca llegaran a romper con la iglesia católica. Y nuestro pastor los considera como auténticos reformadores, aunque limitados por el contexto histórico y eclesial en que vivían.
Conversatio: Las primeras veces me sentía temeroso y avergonzado que supieran donde me estaba metiendo. Ahora sé que hay muchísimos casos como el mío...
Demócrito: El mío, por ejemplo. Je, je...
Conversatio: Ahora mismo estoy leyendo un libro que bien podría ser mi biografía... se llama Evangelical on the Canterbury Trial de un autor evangélico que explica porque muchos evangélicos son atraídos por las iglesias litúrgicas...
Demócrito: No conozco ese libro. Yo también echo de menos una liturgia sencilla y con base bíblica, sin los inciensos y la parafernalia católica. No sólo la echo de menos, sino que la defiendo y creo que sería posible dentro del protestantismo.
Conversatio: No sostengo ninguna doctrina católica cuestionable: Infalibilidad papal, Inmaculada concepción de María, Intercesión de los santos, Eficacia salvadora de los sacramentos, etc., etc... Pero espiritual y litúrgicamente soy mucho más católico que evangélico... Debo darle gracias a Dios por el legado de hombres que (me) habrieron la brecha para mostranos un camino de intimidad con él, gran parte de ellos católicos: Juan de la Cruz, Teresa de Avila, Thomas Merton, Henri Nouwen, Piet van Breemen, Brennan Manning, Jean vanier, etc, etc... por citar algunos…
Demócrito: Lo importante es que seas fiel a Dios y a tu conciencia y que el Espíritu Santo te conceda el don del discernimiento. No se puede ir contra lo esencial de uno mismo sin destruir la obra de Dios en nosotros.
Conversatio: Me he dado cuenta que hay mucho desconocimiento en el mundo evangélico acerca de este aspecto del catolicismo, que es un legado rico de fe y experiencia cristiana.
Demócrito: Depende en qué iglesias o denominaciones. El protestantismo es muy diverso. Ese desconocimiento también se da también dentro del mismo catolicismo. Hay católicos que se creen que Santa Teresa de Jesús “era una monja que levitaba”. Y hay excesos deplorables, como el caso de Vassula y otros.
Conversatio: Creo que he llegado a ser protestante doctrinalmente, pero católico litúrgica y espiritualmente... A esta combinación es a la que me refería... Presiento que somos muchos...
Demócrito: En este foro al menos somos dos, sólo que matizando por mi parte lo de la liturgia, pues no me gusta el barroquismo litúrgico católico: el oro, las vestiduras complicadas, los gorros de formas raras, el incienso me produce disnea, etc.
Sé fiel a tu conciencia. Dios nos habla también a través de ella.
Tu hermano en Cristo.
