La noche del 15 (reposo anual), la del 16 (reposo semanal) y la del 17 (primer día de la semana).
Y el 17 resucita antes del amanecer.
Entra el 10 de Nisán, un primer día de la semana y es crucificado el 14 de Nisán, el quinto día de la semana.
De todas maneras la Iglesia primitiva estableció el ayuno ritual en los siglos II–III, y hacia fines del siglo IV Jerusalén instituyó el rito detallado de la Pasión que Egeria describe.
En Occidente, el rito romano se documenta desde el siglo VII en adelante. Estas fuentes históricas (Didajé, Traditio Apostolica, Peregrinatio Aetheriae de Egeria, sacramentarios latinos, etc.) nos permiten reconstruir cómo la Iglesia antigua conmemoraba, desde los primeros tiempos posibles, la muerte de Cristo de forma litúrgica, estructurando el Viernes Santo con ayuno, lectura de la Pasión y veneración de la Cruz.