PONER FIN A LA MALDAD
Dios pondrá fin a la maldad eliminando la causa. La Biblia identifica esa causa al decir: “El mundo entero yace en el poder del inicuo” (1 Juan 5:19). El “inicuo” es Satanás, el mismo a quien Jesús llamó “el gobernante de este mundo” (Juan 12:31). La influencia del Diablo es la raíz de los problemas que afectan a la humanidad. ¿Qué hará Dios al respecto?
Pronto, Jehová usará a su Hijo para destruir “al que tiene el medio para causar la muerte, es decir, al Diablo” (Hebreos 2:14; 1 Juan 3:8). De hecho, la Biblia muestra que el Diablo sabe que le queda “un corto espacio de tiempo” para ser destruido (Revelación 12:12). Dios también destruirá a las personas malas (Salmo 37:9; Proverbios 2:22).
CONVERTIR LA TIERRA EN UN PARAÍSO
Después de poner fin a la maldad, nuestro Creador se encargará de cumplir su propósito eterno para la humanidad y la Tierra. ¿Cómo será la vida entonces?
Paz y seguridad duraderas. “Los mansos mismos poseerán la tierra, y verdaderamente hallarán su deleite exquisito en la abundancia de paz” (Salmo 37:11).
Alimentos saludables y en abundancia. “Llegará a haber abundancia de grano en la tierra; en la cima de las montañas habrá sobreabundancia” (Salmo 72:16).
Hogares dignos y trabajo gratificante. “Edificarán casas, y las ocuparán; y ciertamente plantarán viñas y comerán su fruto. [...] La obra de sus propias manos mis escogidos usarán a grado cabal” (Isaías 65:21, 22).
¿Le gustaría vivir en un mundo así? Pues, pronto, todo esto será una realidad.
ACABAR CON LA ENFERMEDAD Y LA MUERTE
Hoy en día, todos enfermamos y morimos, pero no será así por mucho tiempo. Pronto, gracias al sacrificio de Jesús, Jehová hará que “todo el que ejerce fe en él no sea destruido, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16). ¿Cómo será la vida entonces?
Desaparecerán las enfermedades. “Ningún residente dirá: ‘Estoy enfermo’. La gente que more en la tierra constará de los que habrán sido perdonados por su error” (Isaías 33:24).
La muerte no existirá más. “Se tragará a la muerte para siempre, y el Señor Soberano Jehová ciertamente limpiará las lágrimas de todo rostro” (Isaías 25:8).
La humanidad vivirá para siempre. “El don que Dios da es vida eterna por Cristo Jesús nuestro Señor” (Romanos 6:23).
Dios pondrá fin a la maldad eliminando la causa. La Biblia identifica esa causa al decir: “El mundo entero yace en el poder del inicuo” (1 Juan 5:19). El “inicuo” es Satanás, el mismo a quien Jesús llamó “el gobernante de este mundo” (Juan 12:31). La influencia del Diablo es la raíz de los problemas que afectan a la humanidad. ¿Qué hará Dios al respecto?
Pronto, Jehová usará a su Hijo para destruir “al que tiene el medio para causar la muerte, es decir, al Diablo” (Hebreos 2:14; 1 Juan 3:8). De hecho, la Biblia muestra que el Diablo sabe que le queda “un corto espacio de tiempo” para ser destruido (Revelación 12:12). Dios también destruirá a las personas malas (Salmo 37:9; Proverbios 2:22).
CONVERTIR LA TIERRA EN UN PARAÍSO
Después de poner fin a la maldad, nuestro Creador se encargará de cumplir su propósito eterno para la humanidad y la Tierra. ¿Cómo será la vida entonces?
Paz y seguridad duraderas. “Los mansos mismos poseerán la tierra, y verdaderamente hallarán su deleite exquisito en la abundancia de paz” (Salmo 37:11).
Alimentos saludables y en abundancia. “Llegará a haber abundancia de grano en la tierra; en la cima de las montañas habrá sobreabundancia” (Salmo 72:16).
Hogares dignos y trabajo gratificante. “Edificarán casas, y las ocuparán; y ciertamente plantarán viñas y comerán su fruto. [...] La obra de sus propias manos mis escogidos usarán a grado cabal” (Isaías 65:21, 22).
¿Le gustaría vivir en un mundo así? Pues, pronto, todo esto será una realidad.
ACABAR CON LA ENFERMEDAD Y LA MUERTE
Hoy en día, todos enfermamos y morimos, pero no será así por mucho tiempo. Pronto, gracias al sacrificio de Jesús, Jehová hará que “todo el que ejerce fe en él no sea destruido, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16). ¿Cómo será la vida entonces?
Desaparecerán las enfermedades. “Ningún residente dirá: ‘Estoy enfermo’. La gente que more en la tierra constará de los que habrán sido perdonados por su error” (Isaías 33:24).
La muerte no existirá más. “Se tragará a la muerte para siempre, y el Señor Soberano Jehová ciertamente limpiará las lágrimas de todo rostro” (Isaías 25:8).
La humanidad vivirá para siempre. “El don que Dios da es vida eterna por Cristo Jesús nuestro Señor” (Romanos 6:23).