Re: Llamar "la Iglesia" a la iglesia católica es una ofensa en un foro cristiano
Re: Llamar "la Iglesia" a la iglesia católica es una ofensa en un foro cristiano
Lo que veo difícil es que existiesen la multitud de ramas del cristianismo actual si no fuese por esa Institución llamada Iglesia Católica, una institución que mantuvo una farsa durante tanto tiempo, la cambió, inventó pero en última instancia protegió esas escrituras y doctrinas que otros más tarde reinterpretarían a "su" manera, porque la Biblia para quien la lea con atención permite una gama de respuestas tan pintorescas como distantes entre ellas. Si hay un libro del que sea difícil sacar una única verdad esa es la Biblia, lecturas en paralelo y un estudio minucioso de ella y de sus libros demuestran tales aberraciones, tal falta de coherencia que cuesta entender que sea un testimonio espiritual y conciso sobre Dios y sobre la vida. Así va el mundo.
La Biblia no es un Libro mi estimado, es un compendio de libros, de hecho, biblia significa Libros, no se puede entonces pensar que la Sagrada Escritura es comparable con el Coran por ejemplo, porque el Coran fue escrito por un solo hombre, Mientras que Las Sagradas Escrituras son un compendio de revelaciones que Dios hizo al hombre respecto a su voluntad, a lo largo de los siglos. Patriarcas, Reyes y Profetas escribieron los libros del antiguo testamento, Mientras que el nuevo testamento fue escrito por dicípulos y apóstoles de Jesucristo.
Cristo es el centro de Toda la revelación, Toda la ley y los profetas pueden resumirsea así:
Mateo 22:37-40
37 El le dijo: = «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con
toda tu alma y con toda tu mente. =
38 Este es el mayor y el primer mandamiento.
39 El segundo es semejante a éste: = Amarás a tu prójimo como a ti
mismo. =
40 De estos dos mandamientos penden toda la Ley y los Profetas.»
Pero toda la Biblia se puede resumir así:
Juan 3:14-17
14 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser
levantado el Hijo del hombre,
15 para que todo el que
crea tenga por él vida eterna.
16 Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que
todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna.
17 Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al
mundo, sino para que el mundo se salve por él.
El problema de los hermaos separado está en en lo que desde su singular perspectiva implica ese
Creer en Cristo, pero en la Iglesia Católica ee creer implica ovediencia a Cristo:
Nuestro Señor es Jesucristo el Hijo de Dios.
Juan 3:14-17
14 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser
levantado el Hijo del hombre,
15 para que todo el que crea tenga por él vida eterna.
16 Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que
todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna.
17 Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al
mundo, sino para que el mundo se salve por él.
Él nos hace renacer (Bautismo y confirmación)
Juan 3:5
5 Respondió Jesús: «En verdad, en verdad te digo: el que no nazca de
agua y de Espíritu no puede entrar en el Reino de Dios
Marcos 16:15-16
15 Y les dijo: «Id por todo el mundo y proclamad la Buena Nueva a
toda la creación.
16 El que crea y sea bautizado, se salvará; el que no crea, se
condenará.
Él nos perdona (confesión)
Juan 20:22-23
22 Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo.
23 A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes
se los retengáis, les quedan retenidos.»
Él nos alimenta (Eucaristía)
Juan 6:51,52-53
53 Jesús les dijo: «En verdad, en verdad os digo: si no coméis la carne
del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros.
Mateo 26:26 - 28
26 Mientras estaban comiendo, tomó Jesús pan y lo bendijo, lo partió
y, dándoselo a sus discípulos, dijo: «Tomad, comed, éste es mi cuerpo.»
27 Tomó luego una copa y, dadas las gracias, se la dio diciendo:
«Bebed de ella todos,
28 porque ésta es mi sangre de la Alianza, que es derramada por
muchos para perdón de los pecados.
A Él obedecemos (doctrina)
Juan 14:15
15 Si me amáis, guardaréis mis mandamientos;
Mateo 22:37-40
37 El le dijo: = «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con
toda tu alma y con toda tu mente. =
38 Este es el mayor y el primer mandamiento.
39 El segundo es semejante a éste: = Amarás a tu prójimo como a ti
mismo. =
40 De estos dos mandamientos penden toda la Ley y los Profetas.»
Marcos 10:19
19 Ya sabes los mandamientos: = No mates, no cometas adulterio, no
robes, no levantes falso testimonio, = no seas injusto, = honra a tu padre y a
tu madre.» =
Él nos ha comprado para la vida eterna pagando con su sangre por nosotros: (Salvación en Cristo)
23 ¡Habéis sido bien comprados! No os hagáis esclavos de los
hombres.
Él nos agrupa en una sola Familia ligada por el amor (la Iglesia)
Juan 13:34-35
34 Os doy un mandamiento nuevo: que os améis los unos a los otros.
Que, como yo os he amado, así os améis también vosotros los unos a los
otros.
35 En esto conocerán todos que sois discípulos míos: si os tenéis amor
los unos a los otros.»
Mateo 6:14-15
14 «Que si vosotros perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará
también a vosotros vuestro Padre celestial;
15 pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre
perdonará vuestras ofensas.
Mateo 6:24
24 Nadie puede servir a dos señores; porque aborrecerá a uno y amará
al otro; o bien se entregará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a
Dios y al Dinero.
En Él esperamos (Nuestro destino)
Juan 14
1 «No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios: creed también en mí.
2 En la casa de mi Padre hay muchas mansiones; si no, os lo habría
dicho; porque voy a prepararos un lugar.
3 Y cuando haya ido y os haya preparado un lugar, volveré y os
tomaré conmigo, para que donde esté yo estéis también vosotros.
Por Él te llamamos a unirte con nosotros (Nuestra Misión)
Mateo 28:19-20
19 Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el
nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,
20 y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y he aquí
que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.»
Nuestro Señor es nuestro amigo: ( nuestra felicidad)
Juan 15
13 Nadie tiene mayor amor que el que da su vida por sus amigos.
14 Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
15 No os llamo ya siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su
amo; a vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que he oído a mi
Padre os lo he dado a conocer.
16 No me habéis elegido vosotros a mí, sino que yo os he elegido a
vosotros, y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto
permanezca; de modo que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo
conceda.
Nuestra Familia es apacentada por Pedro a la espera del Señor: (el orden en la caridad de la familia)
Lucas 22:31-32
31 «¡Simón, Simón! Mira que Satanás ha solicitado el poder cribaros
como trigo;
32 pero yo he rogado por ti, para que tu fe no desfallezca. Y tú,
cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos.»
Mateo 16:15-19
15 Díceles él: «Y vosotros ¿quién decís que soy yo?»
16 Simón Pedro contestó: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo.»
17 Replicando Jesús le dijo: «Bienaventurado eres Simón, hijo de
Jonás, porque no te ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que
está en los cielos.
18 Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra
edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
19 A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la
tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará
desatado en los cielos.»
Juan 21:15-17
15 Después de haber comido, dice Jesús a Simón Pedro: «Simón de
Juan, ¿me amas más que éstos?» Le dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te
quiero.» Le dice Jesús: «Apacienta mis corderos.»
16 Vuelve a decirle por segunda vez: «Simón de Juan, ¿me amas?» Le
dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Le dice Jesús: «Apacienta mis
ovejas.»
17 Le dice por tercera vez: «Simón de Juan, ¿me quieres?» Se
entristeció Pedro de que le preguntase por tercera vez: «¿Me quieres?» y le
dijo: «Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero.» Le dice Jesús:
«Apacienta mis ovejas.
¿Escuchas tú el llamado de Nuestro Señor?
Juan 10:27-30
27 Mis ovejas escuchan mi voz; yo las conozco y ellas me siguen.
28 Yo les doy vida eterna y no perecerán jamás, y nadie las arrebatará
de mi mano.
29 El Padre, que me las ha dado, es más grande que todos, y nadie
puede arrebatar nada de la mano del Padre.
30 Yo y el Padre somos uno.»