Las 70 Semanas explicadas en La Biblia. Sexta Parte.
Las 70 Semanas explicadas en La Biblia. Sexta Parte.
Aquí estoy otra véz compartiendo otro poco de la profecía de las 2,300 Tardes y Mañanas. Dios me los bendiga y nos siga llenando de amor y del Espíritu Santo a sus santos escogidos y fieles. La semana final, la que encierra las 70 semanas para el pueblo de Daniel y su santa ciudad; leamos bien esto de nuevo:
Daniel 9:24-27. "Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y expiar la iniquidad, para traer la justicia perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos.
Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas y sesenta y dos semanas; se volverá a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos. Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no por sí; y el pueblo de un príncipe que ha de venir destruirá la ciudad y el santuario; y su fin será con inundación, y hasta el fin de la guerra durarán las devastaciones.
Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el desolador, hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame sobre el desolador."
La profecía determina períodos, cómputos, Cristo le ordenó a Gabriel enseñar a Daniel la visión en el capítulo 8. Gabriel la enseña a Daniel en el capítulo 9. Ya no se oye a Cristo ordenando a Gabriel en el capítulo 9. La orden se la dio en el 8.
La visión está dirigida primeramente a los judíos, su santuario y su ciudad, todo lo que tenían que hacer para no ser cortados de acuerdo a las parábolas de Jesús y lo dicho por los profetas y Pablo en Romanos 11. Dios no ha desechado a los judíos, ellos serán finalmente restaurados, pero el mensaje y la promesa ya no quedaba solamente para ellos, esto lo explicaré mejor en otro epígrafe.
Quien hace cesar el sacrificio y la ofrenda
La profecía de los 2,300 días se inicia con el cómputo del 9, dado a los judíos, porque no está separada una cosa de la otra; se da una cifra en el capítulo 8, se explica esa cifra en el capítulo 9.
Jesús es el único que hizo "cesar" el sacrificio y la ofrenda. Su muerte en la cruz hizo todo una realidad. Me dicen aquí contradiciendo que la desolación y la consumación yo no las menciono para evitar aplicar la profecía a "el desolador" en el tiempo del fin. Estos son los que creen en la doctrina del rapto secreto y aplican entre lagunas hacia el futuro, las 70 semanas y la semana final. (7 años de tribulación.) También esto explicaré después en otro epígrafe.
Mi respuesta es que también se menciona "el pueblo de un príncipe que ha de venir" o sea, los romanos enviados por el César, quienes destruyeron la ciudad en el año 70 DC., pero solo se mencionan ambo acontecimientos como el desenlace de la profecía, no como parte del cómputo, pues la destrucción ocurre unos 40 años después de la muerte de Cristo y no abarcan los 490 días aunque fuera su crucificción en el año 39 DC.
De igual manera, la desolación final de la tierra por el anticristo no está mencionada como parte del cómputo; sino como el desenlace de lo que se iniciara en el tiempo de Jesús. La profecía no declara el fin del mundo, sino la purificación del Santuario al final de los 2,300 días, "al fin de la ira" , "en el tiempo del fin" como dice Daniel 8. Esta es mi respuesta a los que declaran que el decreto inicial dado por Ciro es "la salida" de la orden:
Primero, si el cómputo se iniciara con el decreto de Ciro, (el decreto fue originado por él alrededor del 538 AC.,) no podemos llegar ni al tiempo del bautismo, ni al de la crucificción de Jesús, porque entonces, Jesús habría muerto mucho antes de que Poncio Pilato fuera gobernador de Judea; Cristo habría aparecido unos 50 años antes de que Pilato gobernara Judea, en otro tiempo distinto al que la historia plena y ampliamente marca su encuentro con Jesús y no solamente su encuentro, sino que ya era gobernador cuando Juan el bautista comenzó su ministerio. (Lucas 3:1-3.)
La historia registrada por Flavio Josefo y Tácito declaran que Poncio Pilato existió; hay excavaciones que lo comprueban y está registrado en los anales de Roma que fue gobernador entre el año 26 DC., al 36 DC.,
El cómputo mesiánico a partir del decreto de Ciro como "la salida de la orden" para llegar hasta el Mesías, no abarcaría con Ciro hasta Su bautismo y Su muerte en la cruz. En cambio, si abarca muy bien con el decreto final de Artajerjes. Recordemos que se enseña que Cristo es "cortado", la misma palabra que se usa para decir que fue quitada su vida, tal como lo dice Isaías 53:8 y Daniel 9:26.
Segundo, una vez hecho este cómputo, dice que a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda, todo lo cual se aplica no a un rey pagano del pasado, ni a un anticristo del futuro, sino a Aquel que es El sacrificio y la ofrenda simbolizada en el santuario de Dios en el Antiguo Pacto. Solamente Cristo podía hacer cesar la figura del santuario y sólo El puede confirmar el Pacto con ese sacrificio vivo. Una cosa va ligada a la otra. Hacer cesar el sacrificio y la ofrenda conocida por Daniel, con Su muerte en la cruz que es conocida por nosotros, los que vivimos en el tiempo del fin, es algo puesto no para gente del pasado, sino para los que estamos estudiando en este tiempo la profecía, tiempo cuando el libro de Daniel se abriría para ser entendido por nosotros.
Aunque el santuario fuera profanado mil veces con mil cerdos del pasado, nadie puede hacer cesar el sacrificio y la ofrenda sino solamente Jesús, quien es el centro de la profecía y es el centro de ella en todo tiempo.
Por eso el ángel vuelve a decir del mismo Mesías que ya anunció, que éste confirma el pacto con muchos. Ahora pregunto: ¿Hace cesar el sacrificio y la ofrenda un príncipe pagano y después también un príncipe pagano confirma el pacto a muchos? ¡Claro que no! Ya lo dije, Cristo es el Ungido (Mesías) en su bautismo (como lo dice también Pedro en Hechos 10:37-38) entonces, tres años y medio (a la mitad de la semana) o sea, en la tercera pascua de su ministerio, hizo cesar el sacrificio y la ofrenda y así se cumplió la Escritura: "se quitará la vida al Mesías, mas no por sí" y es El mismo quien primero ungido, segundo muerto, haciendo cesar el rito del santuario, entonces tercero confirmando el pacto a "muchos" con su resurección, o sea, trayendo a nosotros los gentiles, de todas las naciones, el pacto de la promesa dada a Abrahán, por medio de estas tres cosas.
Solamente Jesús podía hacer cumplir lo que Dios juró a Abrahán en Su Descendiente que es El, por eso, cuando el carnero estaba enredado entre las ramas, fue tomado en lugar del hijo de Abrahán. ¡Por eso la visión inicia con un carnero en Daniel 8! Por la promesa, Cristo se ungió, murió y resucitó para confirmar el Pacto en su ministerio. Estas 3 cosas: Ungimiento (Mesías), quitársele la vida, mas no por sí (muerte en la cruz para expiar nuestros pecados, no los suyos, pues nunca pecó) y confirmar el pacto (resucitar para cumplir la promesa de la vida eterna) son las que se mencionan con el Señor, no con otro personaje. (1 Juan 2:25.)
Hablar del santuario sin mencionar a Cristo, y en vez de mencionar lo a El, mencionar a un rey pagano del pasado o a un anticristo tomando este papel en el futuro distante, pasando por alto el cómputo en la salida de la orden y la mención de la destrucción del templo que ocurrió en el año 70 DC., es tener muy corta la vista y muy grande los prejuicios. Es muy claro todo esto, vuelve a leer si no lo entendiste.
En el próximo epígrafe seguimos con la explicación, espero que la lean y que contesten en base a mis primera respuestas, no evadiendo los puntos o los epígrafes con otras preguntas o con silencio cuando les conviene. Les probaré poco a poco, a mi tiempo no como ustedes lo quieren, sino como el Espíritu me lo indique, cada punto, aun el sencillo punto del Otoño del 457 AC., aquí ya les probé que Cristo tuvo que venir en el cómputo a partir de Artajerjes y no de Ciro ni Darío. Dios me los bendiga.