Vénganse Benditos y Váyanse Malditos. Mateo 25

Sterling

Miembro senior
20 Septiembre 2023
809
57
El juicio de las naciones

Mateo 25: 31 al 46 Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria,
y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartarálos unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.

Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.

Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.
Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis;
estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.
Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber?
¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos?
¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?
Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.
Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.
Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;
fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.
Entonces también ellos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo, o en la cárcel, y no te servimos?
Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis.
E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

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La fe sin obras está muerta y cuando venga lo perfecto lo que es en parte se acabará, dice la Biblia y hoy es el día.

¿Pero por qué bendito o en su defecto maldito?

Dios es bendito o el hombre también es bendito porque se tiene un hijo, se cuenta con una descendencia.
Y maldito porque igual el mal tiene sus hijos.
 
Entonces el Rey dirá a los de su derecha:
Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.

En Efesios 1:4, leemos algo que ocurrió en la eternidad pasada: "[Dios] nos escogió en él [Cristo]antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él". Este es un pasaje asombroso, con su énfasis en la elección de Dios -antes de que el mundo fuera creado- de aquellos que se convertirían en creyentes. Antes de que Dios creara algo, al menos tres cosas ya eran ciertas: Dios vio a la humanidad perdida y necesitada de un Salvador; el Salvador eterno estaba presente; y se habían planeado los detalles de la obra de redención. En todo esto, Dios tenía en mente nuestra transformación a la santidad (ver también 2 Timoteo 1:9).

¿Esto fue en parte el mundo fundado? De ser así, ¿cómo explicarlo?
El reino de Dios y ser ciudadanos de los cielos. La apostasía que llega a un nivel mundial, el pasar de la señales en el sol, la luna y las estrellas indicando el cumplimiento del tiempo. La eclosión de distintas criaturas debido al fenómeno del eclipse en el mes de abril pasado.

Y una vez que ocurrieran algunas cosa previas tales como:

No tener pecados para lograr santificarse.
Los pecados siguen en los miembros, entendidos estos como en todos los demás creyentes.
O en mis dedos de las manos, que vez tras vez les hago ver su falta de fe, sus visibles manchas, apóstatas necedades y una falta de valentía para irse a servirle al "otro lado".

Y será porque muchos hermanos desde antes que la fundación ocurriera ya sabían vivir vidas santas y temerosas. Vidas entregadas al servicio de sus iglesias en la comundidad. Y no versados en asuntos de teología, pero sí todos con la clase de fe que compartimos en el evangelismo.


Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

Y así, el que hermano que lea esto hágame el favor de orar por mi y el ministerio.
 
Y respondiendo el Rey, les dirá:
De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.


Oren por mi que yo oraré por vosotros
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