Era un día como cualquier otro, con sus afanes diarios, al terminar el día, mi sensibilidad de mujer quizás, me hizo sentír la necesidad de escuchar palabras de cariño, de sentirme reconfortada y amada, ese día había tenido una diferencia con mi esposo (quien todavía no es bautizado, pero ya aceptó a Cristo y el Señor está tocando su vida), así que se enfrascó en sus cosas y yo busqué satisfacer mi necesidad, humanamente busqué en internet "poemas de amor", pero la página ofrecía libros para comprar y no daba ningún poema, quedé igual, busque una página con el nombre "amor", se desplegó una página pornográfica, dije "Señor que es esto?", en fin, la cerré y me fuí a acostar, en la madrugada me despertó un sueño, en el veía involucrados a mis padres, oré por ellos y me dispuse a retomar el sueño, pero en mi corazón sentí el deseo de hacer la siguiente pregunta: ¿Señor, me amas?, y claramente con voz audible escuche en mi oído un susurro: "TE AMOOO...", me sobresalté, pero en seguida comprendí que lo que yo estuve necesitando todo el día no lo busqué en la fuente del amor que es Dios, empezé a llorar y le dí gracias al Señor por su amor y por llenar en mi corazón el vacío que sentía y le pedí perdón por no haberme refugiado en El, ¡¡ALABADO SEA DIOS!! 