Hay diferentes ópticas, algunos hablan de éxtasis en el cielo y gloria en la tierra, unción derramada como aceite sobre nuestros pueblos, frase que ya he escuchado muchas veces, nos dicen que triunfamos, que millones se convierten que la humanidad se esta arrodillando a los pies de Cristo.
Desde que conocí al Señor, peculiarmente en medio de lo que algunos han llamado un mover de Dios, escuche que la iglesia en mi país crecía a raudales, que era arrollador el avance de la iglesia evangélica en el cono sur, y yo saltaba y me llenaba de jubilo, con tan gran noticia.
Un trabajo del seminario, me llevo al instituto nacional de estadísticas, mi corazón se partió, mientras nosotros celebrábamos el gran triunfo, y estallábamos en éxtasis multicolores el índice de suicidios aumentaba, las marchas de aquella época rebosantes de estandartes cantaban nuestra victoria, crecíamos, pero nuestros alegres dichos no coincidían con los índices de alcoholismo y drogadicción que aumentaban, cada vez mas abortos, decían que ganábamos y las cifras nos mostraban lo contrario.
Una predicadora estado unidense famosa decía haber visto volar la paloma del espíritu santo hacia el sur del mundo, específicamente a Sudamérica, otro famosisimo pastor profetizaba que chile seria la columna vertebral del avivamiento en América latina, otro de los muy famosos predicadores estado unidense nos profetizo en el 96 que en los últimos 4 años antes del 2000 se convertiría mas gente que en toda la historia de nuestra iglesia, cosa que no sucedió.
Otro nos decía que el 23 mayo del 96 (o del 97 no recuerdo bien) seria derramada una unción de poder, un manto profético sobre mi nación y con el nacimiento de un bebe, que nacería ese día nacería la unción profética sobre mis tierras.
Otro nos dijo que nuestra iglesia crecería como nunca, y llegaríamos a lugares que no imaginamos ese mismo año.
Todos estos predicadores son famosos, muy famosos.
Mientras esto ocurría, aumentaba el maltrato infantil, la delincuencia, y cada vez era más fácil comprar droga en cualquier parte, incluso se llego ha hablar del supermercado de la droga, una bruja por la tv nos decía si la selección clasificaría o no al mundial.
Los pastores que siguieron este mover, festejaban, y festejaban, se compraban iglesias de 3 millones de dólares, mientras algunos miembros de su iglesia se morían de hambre por culpa de la crisis asiática, pero no se queje porque hay que vivir en la alabanza y no en la quejabanza decían.
Si he visto gente bendecida han sido los pastores que han adoptado estos moveres, sus familias, algunos de sus más cercanos, mientras el pueblo sufría por la crisis económica ellos prosperaban.
¿Ese es el avivamiento que me hablan?
He visto a cientos, a miles levantar sus manos para pasar a recibir la bendición del Señor, y como pasaron también se fueron.
La predicación se ha modernizado, ya ni se habla de arrepentimiento, ni de conversión, solo de bendición.
Pareciera que la Biblia, estuviese errada o incompleta, porque con las nuevas revelaciones que se manejan, todo indica aquello.
Que anacrónico se sentiría el apóstol Pablo en nuestro contemporáneo evangelio, su predicación sacrificada, estaría casi fuera de lugar ya que las "nuevas revelaciones" nos indican que la forma de ganar gente es cantando o marchando.
Pobre Juan tal vez nunca lo hubieran exiliado, o su ministerio hubiese sido mucho más exitoso si hubiera sabido que la cosa funciona mejor con estandartes y danzando.
Pero hay una gran diferencia, esos viejos hombres, humildes y gallardos con la predica del evangelio trastornaron al mundo entero, y en menos de 60 años se convirtió mas de la mitad del mundo conocido de esa época.
Sin estandartes, sin cosas extrañas, solo con la simpleza que da el poder del evangelio de Jesucristo muerto y resucitado.
Pero en nuestros controvertidos tiempos, nuestra peculiar iglesia si trastorna algo es a ella misma, porque mientras algunos de sus miembros se festejan y agazapan en sus celebraciones, el mundo entero sé esta perdiendo.
Ahora, en estos momentos, en que la historia nos apremia, debemos ser lo suficientemente humildes de reconocer que hemos fracasado, no cumplimos con nuestra labor, no somos ni la luz ni la sal que estamos llamados a ser.
El mundo, corre desesperado buscando en que creer, mientras escribo estas letras, y mientras tú las lees alguien esta muriendo sin Cristo, alguien sé esta suicidando, ha alguna mujer se la están violando.
Somos nosotros los llamados a trastornar a este mundo, con la luz de Cristo, no con subterfugios extraños ni con modas pasajeras.
¿Quién ira si no vamos nosotros?
Pero antes tenemos que reconocer, nuestra falta, reconocer nuestra bajeza, reconocer que a pesar de muchas de las cosas que hagamos o queramos hacer necesitamos de su Espíritu Santo.
Necesitamos un milagro.
Un milagro que nos cambie.
El mundo no nos necesita ver danzar, para que crea.
El mundo necesita hombres que sean cartas abiertas del amor de Cristo, que muestren en sus vidas la verdad del evangelio, ahora mas que nunca, necesitamos personas irreprensibles, llenas del poder de Dios, personas que muestren al mundo que el evangelio en que hemos creído es cierto, y los que lo demostraran debemos ser nosotros.
Millones de personas en el mundo blasfeman el nombre de Jesucristo por culpa de esos pastores que se han enriquecido a costa del evangelio, y que solo buscan lo suyo propio.
¿Y nosotros que haremos?
Ahora mas que nunca, necesitamos gente se atreva a romper la barrera, se atreva a bogar mar adentro, el mundo esta cansado de charlatanes y de pantomima, la gente necesita que le hablen la palabra de Dios.
Necesitamos un cambio, en nuestras vidas.
Necesitamos parecernos a Jesucristo, andar como él anduvo.
Necesitamos poder de Dios, para que sean sanados los enfermos de SIDA, para que los ciegos vean, para que los cojos salten, no para que algunos se rían, y los sociólogos expliquen nuestras manifestaciones como histeria colectiva.
Estamos en una disyuntiva, tenemos que decidir.
Los niños juegan, a la guerra pero nunca matan a nadie.
Los niños juegan al papa y a la mama, pero nunca tienen hijos.
Los niños juegan a ser banqueros pero nunca se enriquecen.
Los niños juegan, los niños solamente juegan.
¿Hemos de seguir solo jugando?
MaRco
Desde que conocí al Señor, peculiarmente en medio de lo que algunos han llamado un mover de Dios, escuche que la iglesia en mi país crecía a raudales, que era arrollador el avance de la iglesia evangélica en el cono sur, y yo saltaba y me llenaba de jubilo, con tan gran noticia.
Un trabajo del seminario, me llevo al instituto nacional de estadísticas, mi corazón se partió, mientras nosotros celebrábamos el gran triunfo, y estallábamos en éxtasis multicolores el índice de suicidios aumentaba, las marchas de aquella época rebosantes de estandartes cantaban nuestra victoria, crecíamos, pero nuestros alegres dichos no coincidían con los índices de alcoholismo y drogadicción que aumentaban, cada vez mas abortos, decían que ganábamos y las cifras nos mostraban lo contrario.
Una predicadora estado unidense famosa decía haber visto volar la paloma del espíritu santo hacia el sur del mundo, específicamente a Sudamérica, otro famosisimo pastor profetizaba que chile seria la columna vertebral del avivamiento en América latina, otro de los muy famosos predicadores estado unidense nos profetizo en el 96 que en los últimos 4 años antes del 2000 se convertiría mas gente que en toda la historia de nuestra iglesia, cosa que no sucedió.
Otro nos decía que el 23 mayo del 96 (o del 97 no recuerdo bien) seria derramada una unción de poder, un manto profético sobre mi nación y con el nacimiento de un bebe, que nacería ese día nacería la unción profética sobre mis tierras.
Otro nos dijo que nuestra iglesia crecería como nunca, y llegaríamos a lugares que no imaginamos ese mismo año.
Todos estos predicadores son famosos, muy famosos.
Mientras esto ocurría, aumentaba el maltrato infantil, la delincuencia, y cada vez era más fácil comprar droga en cualquier parte, incluso se llego ha hablar del supermercado de la droga, una bruja por la tv nos decía si la selección clasificaría o no al mundial.
Los pastores que siguieron este mover, festejaban, y festejaban, se compraban iglesias de 3 millones de dólares, mientras algunos miembros de su iglesia se morían de hambre por culpa de la crisis asiática, pero no se queje porque hay que vivir en la alabanza y no en la quejabanza decían.
Si he visto gente bendecida han sido los pastores que han adoptado estos moveres, sus familias, algunos de sus más cercanos, mientras el pueblo sufría por la crisis económica ellos prosperaban.
¿Ese es el avivamiento que me hablan?
He visto a cientos, a miles levantar sus manos para pasar a recibir la bendición del Señor, y como pasaron también se fueron.
La predicación se ha modernizado, ya ni se habla de arrepentimiento, ni de conversión, solo de bendición.
Pareciera que la Biblia, estuviese errada o incompleta, porque con las nuevas revelaciones que se manejan, todo indica aquello.
Que anacrónico se sentiría el apóstol Pablo en nuestro contemporáneo evangelio, su predicación sacrificada, estaría casi fuera de lugar ya que las "nuevas revelaciones" nos indican que la forma de ganar gente es cantando o marchando.
Pobre Juan tal vez nunca lo hubieran exiliado, o su ministerio hubiese sido mucho más exitoso si hubiera sabido que la cosa funciona mejor con estandartes y danzando.
Pero hay una gran diferencia, esos viejos hombres, humildes y gallardos con la predica del evangelio trastornaron al mundo entero, y en menos de 60 años se convirtió mas de la mitad del mundo conocido de esa época.
Sin estandartes, sin cosas extrañas, solo con la simpleza que da el poder del evangelio de Jesucristo muerto y resucitado.
Pero en nuestros controvertidos tiempos, nuestra peculiar iglesia si trastorna algo es a ella misma, porque mientras algunos de sus miembros se festejan y agazapan en sus celebraciones, el mundo entero sé esta perdiendo.
Ahora, en estos momentos, en que la historia nos apremia, debemos ser lo suficientemente humildes de reconocer que hemos fracasado, no cumplimos con nuestra labor, no somos ni la luz ni la sal que estamos llamados a ser.
El mundo, corre desesperado buscando en que creer, mientras escribo estas letras, y mientras tú las lees alguien esta muriendo sin Cristo, alguien sé esta suicidando, ha alguna mujer se la están violando.
Somos nosotros los llamados a trastornar a este mundo, con la luz de Cristo, no con subterfugios extraños ni con modas pasajeras.
¿Quién ira si no vamos nosotros?
Pero antes tenemos que reconocer, nuestra falta, reconocer nuestra bajeza, reconocer que a pesar de muchas de las cosas que hagamos o queramos hacer necesitamos de su Espíritu Santo.
Necesitamos un milagro.
Un milagro que nos cambie.
El mundo no nos necesita ver danzar, para que crea.
El mundo necesita hombres que sean cartas abiertas del amor de Cristo, que muestren en sus vidas la verdad del evangelio, ahora mas que nunca, necesitamos personas irreprensibles, llenas del poder de Dios, personas que muestren al mundo que el evangelio en que hemos creído es cierto, y los que lo demostraran debemos ser nosotros.
Millones de personas en el mundo blasfeman el nombre de Jesucristo por culpa de esos pastores que se han enriquecido a costa del evangelio, y que solo buscan lo suyo propio.
¿Y nosotros que haremos?
Ahora mas que nunca, necesitamos gente se atreva a romper la barrera, se atreva a bogar mar adentro, el mundo esta cansado de charlatanes y de pantomima, la gente necesita que le hablen la palabra de Dios.
Necesitamos un cambio, en nuestras vidas.
Necesitamos parecernos a Jesucristo, andar como él anduvo.
Necesitamos poder de Dios, para que sean sanados los enfermos de SIDA, para que los ciegos vean, para que los cojos salten, no para que algunos se rían, y los sociólogos expliquen nuestras manifestaciones como histeria colectiva.
Estamos en una disyuntiva, tenemos que decidir.
Los niños juegan, a la guerra pero nunca matan a nadie.
Los niños juegan al papa y a la mama, pero nunca tienen hijos.
Los niños juegan a ser banqueros pero nunca se enriquecen.
Los niños juegan, los niños solamente juegan.
¿Hemos de seguir solo jugando?
MaRco