Este tema es para mostrar la diferencia entre el cuerpo y el alma de una prsona renacida por el Espiritu de Dios. Cuando Dios creó al ser humano, el lo creó en cuerpo, alma y espiritu de aliento.
1 Tesalonicenses 5:23 (RV1909)
Y el Dios de paz os santifique en todo; para que vuestro espíritu y alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
Cuando el hombre pecó, murió ese mismo día, pero no en su cuerpo sinó en su alma.
Ezequiel 18:4 (RV1909)
He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá.
Ahora, es cierto que a veces la Bibila habla del alma de uno para identificar con su vida, pero no todas las veces. Igualmente Dios hace esto con la palabra ¨espiritu¨. A veces se refiere al Espiritu Santo y a veces se refiere al aliento de vida. Entonces es nuestro deber a escudriñar la Biblia cada vez que nos enfrentamos con cada palabra en cuestión.
En el momento de salvación el alma muerta es renacido por la palabra de Dios y resucita de la muerte a la vida eterna. Y esta alma renacida jamás nunca puede morir porque jamás nunca puede pecar. Esto es lo que es la vida eterna y lo que la Biblia se refiere a la primera resurrección al cual la segunda muerte no tiene poder.
En el momento de la salvación de cada elegido de Dios, el alma viene vivo ahora se hubica en un cuerpo todavía maldito por el pecado. Esto significa que el alma quiere obedecer a Dios en todo, pero el cuerpo nó. El cuerpo quiere obedecer al pecado todavía porque todavía no ha sido redimido.
Entonces para probar que el alma es el que renace y nunca mas peca, Dios nos provee escrituras para tomar en cuenta con lo que creemos ser verdad.
1 Juan 3:9 (RV1909)
Cualquiera que es nacido de Dios, no hace pecado, porque su simiente está en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
Dios, en su sabiduría y para encubrír la verdad, escribió este pasaje para que se lea de dos formas cuando dice ¨y no puede pecar¨. Algunos len que esto dice que no debe pecar pero si puede, y algunos leen esto que dice que no es posible que peque más. Y la segunda forma de leerlo es la correcta. El que es nacido de Dios no es nacido en cuerpo, sino en alma. Y la Biblia dice que no hacemos pecado (en nuestra alma) porque la simiente de Dios está en nosotros, y por eso, no podemos pecar, es decir, es imposible pecar. Esto significa que la simiente por cual fuimos renacido, es simiente incorrumpible. Esto es gran diferencia de la simiente del ser humano cual sí fue corrumpible.
1 Pedro 1:23 (RV1909)
Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios, que vive y permanece para siempre.
Entonces, el cuerpo de un hijo verdadero de Dios todavía puede pecar porque todavía esta corrumpido por el pecado.
1 Juan 1:8 (RV1909)
Si dijéremos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y no hay verdad en nosotros.
Eclesiastés 7:20 (RV1909)
Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga bien y nunca peque.
Entonces, es importante entender la diferencia entre el cuerpo y el alma del hijo de Dios. El alma renacido es perfecto y justo porque es nacido de la simiente incorrumpible de la palabra de Dios permanece para siempre. Y el cuerpo pecaminoso que todavbía no ha sido redimido. Y esto causa una batalla entre el alma que honra y obedece a Dios y el cuerpo que quiere pecar. Y es por eso que Dios describe a sus hijos redimidos como perfectos y rectos y justos, aun siendo pecadores en sus cuerpos. Es porque cuando Dios mira y describe a sus hijos redimidos, el mira a su corazón, es decir, el mira a su condición espiritual.
Génesis 6:9 (RV1909)
Estas son las generaciones de Noé: Noé, varón justo, perfecto fué en sus generaciones; con Dios caminó Noé.
Génesis 25:27 (RV1909)
Y crecieron los niños, y Esaú fué diestro en la caza, hombre del campo: Jacob empero era varónquieto perfecto, que habitaba en tiendas.
Job 1:1 (RV1909)
HUBO un varón en tierra de Hus, llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, y temeroso de Dios, y apartado del mal.
1 Tesalonicenses 5:23 (RV1909)
Y el Dios de paz os santifique en todo; para que vuestro espíritu y alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
Cuando el hombre pecó, murió ese mismo día, pero no en su cuerpo sinó en su alma.
Ezequiel 18:4 (RV1909)
He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá.
Ahora, es cierto que a veces la Bibila habla del alma de uno para identificar con su vida, pero no todas las veces. Igualmente Dios hace esto con la palabra ¨espiritu¨. A veces se refiere al Espiritu Santo y a veces se refiere al aliento de vida. Entonces es nuestro deber a escudriñar la Biblia cada vez que nos enfrentamos con cada palabra en cuestión.
En el momento de salvación el alma muerta es renacido por la palabra de Dios y resucita de la muerte a la vida eterna. Y esta alma renacida jamás nunca puede morir porque jamás nunca puede pecar. Esto es lo que es la vida eterna y lo que la Biblia se refiere a la primera resurrección al cual la segunda muerte no tiene poder.
En el momento de la salvación de cada elegido de Dios, el alma viene vivo ahora se hubica en un cuerpo todavía maldito por el pecado. Esto significa que el alma quiere obedecer a Dios en todo, pero el cuerpo nó. El cuerpo quiere obedecer al pecado todavía porque todavía no ha sido redimido.
Entonces para probar que el alma es el que renace y nunca mas peca, Dios nos provee escrituras para tomar en cuenta con lo que creemos ser verdad.
1 Juan 3:9 (RV1909)
Cualquiera que es nacido de Dios, no hace pecado, porque su simiente está en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
Dios, en su sabiduría y para encubrír la verdad, escribió este pasaje para que se lea de dos formas cuando dice ¨y no puede pecar¨. Algunos len que esto dice que no debe pecar pero si puede, y algunos leen esto que dice que no es posible que peque más. Y la segunda forma de leerlo es la correcta. El que es nacido de Dios no es nacido en cuerpo, sino en alma. Y la Biblia dice que no hacemos pecado (en nuestra alma) porque la simiente de Dios está en nosotros, y por eso, no podemos pecar, es decir, es imposible pecar. Esto significa que la simiente por cual fuimos renacido, es simiente incorrumpible. Esto es gran diferencia de la simiente del ser humano cual sí fue corrumpible.
1 Pedro 1:23 (RV1909)
Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios, que vive y permanece para siempre.
Entonces, el cuerpo de un hijo verdadero de Dios todavía puede pecar porque todavía esta corrumpido por el pecado.
1 Juan 1:8 (RV1909)
Si dijéremos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y no hay verdad en nosotros.
Eclesiastés 7:20 (RV1909)
Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga bien y nunca peque.
Entonces, es importante entender la diferencia entre el cuerpo y el alma del hijo de Dios. El alma renacido es perfecto y justo porque es nacido de la simiente incorrumpible de la palabra de Dios permanece para siempre. Y el cuerpo pecaminoso que todavbía no ha sido redimido. Y esto causa una batalla entre el alma que honra y obedece a Dios y el cuerpo que quiere pecar. Y es por eso que Dios describe a sus hijos redimidos como perfectos y rectos y justos, aun siendo pecadores en sus cuerpos. Es porque cuando Dios mira y describe a sus hijos redimidos, el mira a su corazón, es decir, el mira a su condición espiritual.
Génesis 6:9 (RV1909)
Estas son las generaciones de Noé: Noé, varón justo, perfecto fué en sus generaciones; con Dios caminó Noé.
Génesis 25:27 (RV1909)
Y crecieron los niños, y Esaú fué diestro en la caza, hombre del campo: Jacob empero era varón
Job 1:1 (RV1909)
HUBO un varón en tierra de Hus, llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, y temeroso de Dios, y apartado del mal.