Las huellas de Dios en mi vida han sido claras y constantes, incluso en los momentos más oscuros y desafiantes. Durante 30 años enfrenté las batallas que acompañan a una vida con diabetes tipo 1, las complicaciones médicas, y las luchas emocionales que parecía que nunca iban a terminar. Pero a pesar de todo, el Señor siempre estuvo presente, fortaleciendo mi espíritu y recordándome que mi vida tenía un propósito mayor.
Dios no solo me dio las fuerzas para seguir adelante, sino que también abrió las puertas para que pudiera compartir mi historia a través de un libro. Este proyecto no es solo un relato de las pruebas y los desafíos, sino un testimonio del amor inquebrantable de Dios y Su capacidad para transformar el dolor en propósito.
En Isaías 41:10, Dios nos dice: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.” Y esta promesa fue mi ancla. Cuando sentí que el peso de mi condición me superaba, Él estuvo allí para levantarme, para recordarme que incluso en la debilidad, Su poder se perfecciona.
Cada paso de mi camino ha estado guiado por Su gracia. Desde los días en que enfrenté la desesperanza hasta los momentos en que experimenté la sanidad física y emocional, he visto Su mano obrando en mi vida de maneras que no siempre entendí en el momento, pero que ahora reconozco como milagros. En 2 Corintios 12:9, el apóstol Pablo nos dice: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad.” Estas palabras me dieron consuelo y valentía cuando más lo necesitaba.
Escribir este libro no ha sido fácil. Revivir los momentos difíciles, poner en palabras los años de dolor, y abrir mi corazón al mundo requirió una fortaleza que solo Dios podía darme. Pero lo hice, porque creo que mi historia puede ser un faro de esperanza para otros, una prueba de que Dios nunca nos abandona, sin importar cuán difícil sea el camino.
Salmos 34:18 dice: “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu.” Esta verdad es mi fundamento. Incluso cuando me sentí abandonada, Él estuvo cerca, renovando mi fe y mostrándome que el sufrimiento nunca es en vano. Ahora sé que todo lo que pasé tiene un propósito: glorificar a Dios y ayudar a otros.
Con este testimonio, mi oración es que quienes lo lean encuentren consuelo en el amor de Dios, esperanza en Su fidelidad y fuerza en Su gracia. Mi vida es un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, Dios tiene un plan perfecto. Y ese plan incluye amor, redención, y un futuro lleno de esperanza.
Como dice en Jeremías 29:11: “Porque yo sé los planes que tengo para vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.” Este verso es mi declaración de fe. Es la promesa de que, con Dios, no hay batalla que no podamos enfrentar ni propósito que no podamos cumplir.
Doy gracias a Dios por cada día que me ha dado, por las personas que ha puesto en mi camino, y por la oportunidad de compartir Su gloria con el mundo. Que este testimonio sea un reflejo de Su amor y una invitación a confiar en Él, porque Su plan siempre es mejor de lo que podemos imaginar.
En las fotos que ustedes van a ver, podrán ver mi vida antes y después de este milagro. Cada imagen refleja no solo los desafíos que he enfrentado, sino también el poder transformador de Dios en mi vida.
Si deseas escuchar mi testimonio, te invito a que envíes un correo a [email protected], para así poder enviarte un enlace de nuestras reuniones a través de Google meets. Nos reunimos los martes y jueves a las 7:30 p.m. (hora EST, Miami), donde estudiamos la Biblia y compartimos nuestros logros, desafíos, retos y victorias en y con el Señor.
Además, los domingos contamos con diferentes ancianos en el Señor que nos traen una enseñanza nueva. Al final de cada reunión, cada uno comparte cómo ese mensaje nos habló de manera personal, permitiéndonos crecer juntos en la fe y en el entendimiento de Su Palabra.
Te invito a acompañarnos en estos días. Sé parte de este espacio lleno de amor, esperanza, y crecimiento espiritual. ¡Será una bendición compartir contigo!
https://transplant.jacksonhealth.or...rom-diabetes-pancreatitis-and-kidney-failure/
Dios no solo me dio las fuerzas para seguir adelante, sino que también abrió las puertas para que pudiera compartir mi historia a través de un libro. Este proyecto no es solo un relato de las pruebas y los desafíos, sino un testimonio del amor inquebrantable de Dios y Su capacidad para transformar el dolor en propósito.
En Isaías 41:10, Dios nos dice: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.” Y esta promesa fue mi ancla. Cuando sentí que el peso de mi condición me superaba, Él estuvo allí para levantarme, para recordarme que incluso en la debilidad, Su poder se perfecciona.
Cada paso de mi camino ha estado guiado por Su gracia. Desde los días en que enfrenté la desesperanza hasta los momentos en que experimenté la sanidad física y emocional, he visto Su mano obrando en mi vida de maneras que no siempre entendí en el momento, pero que ahora reconozco como milagros. En 2 Corintios 12:9, el apóstol Pablo nos dice: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad.” Estas palabras me dieron consuelo y valentía cuando más lo necesitaba.
Escribir este libro no ha sido fácil. Revivir los momentos difíciles, poner en palabras los años de dolor, y abrir mi corazón al mundo requirió una fortaleza que solo Dios podía darme. Pero lo hice, porque creo que mi historia puede ser un faro de esperanza para otros, una prueba de que Dios nunca nos abandona, sin importar cuán difícil sea el camino.
Salmos 34:18 dice: “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu.” Esta verdad es mi fundamento. Incluso cuando me sentí abandonada, Él estuvo cerca, renovando mi fe y mostrándome que el sufrimiento nunca es en vano. Ahora sé que todo lo que pasé tiene un propósito: glorificar a Dios y ayudar a otros.
Con este testimonio, mi oración es que quienes lo lean encuentren consuelo en el amor de Dios, esperanza en Su fidelidad y fuerza en Su gracia. Mi vida es un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, Dios tiene un plan perfecto. Y ese plan incluye amor, redención, y un futuro lleno de esperanza.
Como dice en Jeremías 29:11: “Porque yo sé los planes que tengo para vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.” Este verso es mi declaración de fe. Es la promesa de que, con Dios, no hay batalla que no podamos enfrentar ni propósito que no podamos cumplir.
Doy gracias a Dios por cada día que me ha dado, por las personas que ha puesto en mi camino, y por la oportunidad de compartir Su gloria con el mundo. Que este testimonio sea un reflejo de Su amor y una invitación a confiar en Él, porque Su plan siempre es mejor de lo que podemos imaginar.
En las fotos que ustedes van a ver, podrán ver mi vida antes y después de este milagro. Cada imagen refleja no solo los desafíos que he enfrentado, sino también el poder transformador de Dios en mi vida.
Si deseas escuchar mi testimonio, te invito a que envíes un correo a [email protected], para así poder enviarte un enlace de nuestras reuniones a través de Google meets. Nos reunimos los martes y jueves a las 7:30 p.m. (hora EST, Miami), donde estudiamos la Biblia y compartimos nuestros logros, desafíos, retos y victorias en y con el Señor.
Además, los domingos contamos con diferentes ancianos en el Señor que nos traen una enseñanza nueva. Al final de cada reunión, cada uno comparte cómo ese mensaje nos habló de manera personal, permitiéndonos crecer juntos en la fe y en el entendimiento de Su Palabra.
Te invito a acompañarnos en estos días. Sé parte de este espacio lleno de amor, esperanza, y crecimiento espiritual. ¡Será una bendición compartir contigo!
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