´Sordos y "Mudos"

6 Marzo 2005
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Ayer analicé el auténtico significado de los "milagros" que Jesús hacía con los "ciegos", hoy, podríamos continuar contemplando esos "milagros" que conseguía con los "mudos" y los "sordos"
Como os he comentado con anterioridad dentro de las páginas de la Biblia no hay espacio para palabras sin importancia, nunca son casuales ni poco meditadas. Todas ellas, sin excepción, poseen un alto contenido Simbólico.

Las "Enfermedades" que aparecen en las Escrituras no son aquellas dolencias que nosotros entenderíamos como tales. Las "Enfermedades" Simbolizan a esa Ignorancia que solo la Sabiduría puede "curar".

"Al contrario la Sabiduría libró de los
dolores a los que la respetaban
."

Sabiduría 10,9

Es evidente que es mucho más fácil, sencillo, y, por supuesto, mucho más apetecible, continuar con la creencia que estamos hablando de hechos reales, es decir, de curaciones "milagrosas", que afrontar la verdadera realidad del doble (y auténtico) sentido de las Escrituras.
Y es que en la Biblia, los "Sordos" y los "Mudos", tampoco son lo que puede parecer en un principio.
Fijaros que claro y alto habla el Libro de Sabiduría...

"Porqué la Sabiduría abrió la boca a los mudos."

Sabiduría 10,21

Pero eso no es todo. Analicemos un interesante pasaje de Marcos y entenderemos el verdadero significado de los "Sordos".

"Quién tiene buenos oídos, entiéndalo."

Marcos 4,23

Fijaros como sin lugar alguno para la duda, el "Sordo" es todo aquel que es incapaz, precisamente, de entender lo que aquí estamos explicando: la doble intencionalidad de las Escrituras. De aquí el porqué de la expresión: "el que tenga buenos oídos, que lo entienda". Dicho ahora sin Simbolismos: el que tenga capacidad para entenderlo, que lo entienda.
He aquí otro ejemplo que ayudará a comprender lo reseñado.

"Pues os aseguro que muchos profetas, y reyes desearon
ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; como también
oír las cosas que vosotros oís, y no las oyeron
."

Lucas10,24

Hay que procurar abrir bien los ojos y intentar comprender todas estas alegorías que tratamos pues, si nos quedamos en su sentido superficial estaremos despreciando el universo de Sabiduría que en realidad es la Biblia.

Buenos días a todos.