LA VERDAD EN CUANTO AL "RAPTO SECRETO" Y AL MILENIO
"ERA intrigante, sumamente intrigante. Yo estaba enseñando mi clase de Filosofía de la Religión cuando de repente tres de mis estudiantes ¡desaparecieron! iSencillamente desaparecieron! Encuentro que su desaparición es muy difícil de explicar".
"Allí estaba yo, manejando en una supercarretera, y de improviso se produjo un pandemonio... Los automóviles se dirigían en todas direcciones ... y ninguno de ellos tenía conductor. iEra una escena espeluznante! ¡Era como si hubiéramos sido invadidos desde fuera del espacio!"
Estos dos párrafos pueden leerse en la página 136 de un libro escrito por Hal Lindsey, titulado La agonía del gran planeta Tierra, del cual se vendieron más de cuatro millones en inglés en pocos años. Ese capitulo en particular trata del "rapto" secreto. La verdad es que este tema se ha puesto de moda más que nunca, y está causando verdadera conmoción en ciertos círculos. No sólo escritores novelescos que fantasean publican trabajos al respecto, sino que la teoría se predica desde muchos púlpitos y se enseña en más de una publicación que parece ser seria.
Según ella, un día de éstos, de manera inesperada, se producirá un "rapto" secreto, en el cual instantáneamente todos los verdaderos cristianos serán arrebatados y trasladados al cielo. El mundo se verá envuelto entonces, durante siete años, en un verdadero caos. Aparecerá un personaje tiránico que se erigirá en el Anticristo, proclamándose como el dios encarnado, y que gobernará con mano de hierro teniendo su asiento en Jerusalén. Resolverá el problema del Medio Oriente en forma radical en base a su autoridad, y será respetado y obedecido por todos con mezcla de miedo y arrobamiento. 144.000 judíos aceptarán a Jesús como el Mesías, pero el Anticristo iniciará una sangrienta persecución contra ellos. La tierra se precipitará en la hecatombe de la tercera guerra mundial, Armagedón. Pero en medio de la confusión y el cataclismo ocurrirá -siete años después del rapto- la segunda venida de Cristo.
Este suceso empezará, según la misma doctrina, un milenio de paz y prosperidad, durante el cual los judíos iniciarán un movimiento de evangelización mundial, y los inconversos tendrán una nueva oportunidad de salvarse.
Ante una doctrina que goza de tanta popularidad, es justo preguntarse dónde tuvo ella su origen, qué soporte tiene, y cuál es el veredicto de la Palabra de Dios al respecto. Porque este tema, así como toda otra inquietud de índole religiosa, puede tener una sola respuesta, por parte de una sola autoridad: la voz clara y precisa de la Palabra divina contenida en las Sagradas Escrituras.
¿Dónde se originó la teoría del rapto secreto y de un milenio de paz sobre la tierra anterior a la segunda venida de Cristo?
Ella es totalmente desconocida por la Biblia, y en su forma actual tuvo su comienzo a fines de la década de 1820. Por esa fecha, un religioso llamado Eduardo lrving organizó en Inglaterra un nuevo movimiento que denominó la Iglesia Católica Apostólica. Ese grupo practicaba el hablar en lenguas extrañas como una actividad habitual. Fue en una de esas sesiones donde se recibió un "mensaje", como procedente del Espíritu Santo, que presentaba la idea del arrebatamiento secreto y el milenio. La Biblia, en cambio, presenta un cuadro completamente distinto.
¿Cómo y cuándo se realizará el arrebatamiento de los hijos de Dios según la Biblia?
San Pablo escribe: "Os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor" (1 Tesalonicenses 4: 15- 17).
Notemos, en este pasaje inspirado, los siguientes hechos:
1. El arrebatamiento en las nubes ocurrirá en ocasión de la venida de Cristo y no siete años antes.
2. Será un suceso acompañado por la voz de arcángel del Señor. No será secreto, sino mundial y público, y además todo ojo humano lo observará. (Véase, además, Mateo 24: 27; Apocalipsis 1: 7.)
¿Cuándo y cómo acontecerá el milenio, según la Biblia?
La expresión "mil años" está mencionada seis veces en Apocalipsis 20: 2-7. En el centro de ese pasaje, el versículo 6 destaca los dos acontecimientos que señalarán el comienzo y el fin de los mil años: "Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años". Si los que se levantan en la primera resurrección empiezan a reinar mil años con Cristo, es evidente que el punto de partida del milenio es la primera resurrección, que se realiza en ocasión de la segunda venida de Jesús (1 Tesalonicenses 4: 16).
Además, si hay una primera resurrección, es evidente que también hay una segunda. ¿Cuándo se producirá ésta? La Biblia responde: "Los otros muertos (los que no durmieron en Jesús) no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años" (Apocalipsis 20: 5).
Ahora bien, si cada uno de los que se levantan en la primera resurrección es "bienaventurado y santo" (o sea un hijo de Dios), se sigue que "los otros muertos" que "no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años" no serán bienaventurados ni santos, es decir, son los impíos.
Hay dos resurrecciones en la Biblia: (1) "la resurrección de los justos" (Lucas 14:14), y (2) "la resurrección de condenación" (Juan 5: 28, 29). Y los mil años están limitados por estas dos resurrecciones: la primera en la ocasión en que Cristo venga por segunda vez, y la segunda cuando ocurra el juicio ejecutivo, o sea la destrucción de los que no estén preparados para la vida eterna.
Pero ese milenio los hijos de Dios no lo pasarán sobre la tierra, en una era de bonanza y bienestar, sino en el cielo, mientras la tierra está desordenada y vacía de vida humana. Por otra parte, según la Biblia no habrá una segunda oportunidad para salvarse después de la muerte y luego de la segunda venida de Cristo (Hebreos 9: 27).
Resumiendo, pues, lo que con toda claridad enseñan las Escrituras, diremos que cuando Cristo venga por segunda vez, es decir al comienzo del milenio, ocurren los siguientes sucesos:
1. Resucitan los que durmieron en Jesús. 1 Tesalonicenses 4: 16.
2. Los justos vivos son transformados. 1 Corintios 15: 51, 52.
3. Los impíos que estén vivos serán destruidos. 2 Tesalonicenses 2: 7, 8; Apocalipsis 19: 21.
4. Satanás es atado por una cadena de circunstancias, pues no habrá en la tierra nadie a quien engañar. Apocalipsis 20: 2.
Durante el milenio:
1. Los redimidos reinan con Cristo mil años en el cielo. Apocalipsis 20: 4;1 Corintios 6: 2, 3.
2. La tierra está desolada y vacía. Jeremías 4: 23-27.
Al final del milenio:
1. Baja del cielo la Nueva Jerusalén. Apocalipsis 21: 2.
2. Cristo desciende sobre el monte de los Olivos. Zacarías 14: 4; 5.
3. Los impíos son resucitados para recibir su castigo. Apocalipsis 20: 5; Juan 5: 28, 29.
4. Los inconversos son final rnente destruidos en el juicio final. Apocalipsis 20: 9-15.
5. Surgen una tierra nueva y un cielo nuevo. Apocalipsis 21:1.
He ahí la verdad bíblica, y por ende la única autorizada, respecto de este discutido pero interesante tema de los mil años y el rapto secreto. He ahí el desenlace feliz de la larga historia de pecado y dolor en este mundo. El cuadro culmina con la eliminación del mal y de los malos que no hayan aceptado el proceso restaurador de Dios.
La Biblia no habla de un sufrimiento perpetuo -concepto contrario a un Dios de amor y bondad- sino de una misericordiosa eliminación del mal para siempre. Y entonces la escena culmina con el grandioso amanecer en una tierra donde ya no habrá noche, donde la juventud es perenne, donde la salud es perfecta, donde la felicidad es ilimitada, y donde los seres humanos, redimidos por la vida perfecta y la muerte expiatoria de Cristo, vivirán en una eternidad sin término. Este es el plan de Dios para Ud., amigo lector, si tan sólo está dispuesto a poner su voluntad de acuerdo con la suya y a someter su vida a la dirección divina; si está dispuesto a aceptar al Señor Jesús como su Salvador y como el Señor de su existencia.
[email protected]
"ERA intrigante, sumamente intrigante. Yo estaba enseñando mi clase de Filosofía de la Religión cuando de repente tres de mis estudiantes ¡desaparecieron! iSencillamente desaparecieron! Encuentro que su desaparición es muy difícil de explicar".
"Allí estaba yo, manejando en una supercarretera, y de improviso se produjo un pandemonio... Los automóviles se dirigían en todas direcciones ... y ninguno de ellos tenía conductor. iEra una escena espeluznante! ¡Era como si hubiéramos sido invadidos desde fuera del espacio!"
Estos dos párrafos pueden leerse en la página 136 de un libro escrito por Hal Lindsey, titulado La agonía del gran planeta Tierra, del cual se vendieron más de cuatro millones en inglés en pocos años. Ese capitulo en particular trata del "rapto" secreto. La verdad es que este tema se ha puesto de moda más que nunca, y está causando verdadera conmoción en ciertos círculos. No sólo escritores novelescos que fantasean publican trabajos al respecto, sino que la teoría se predica desde muchos púlpitos y se enseña en más de una publicación que parece ser seria.
Según ella, un día de éstos, de manera inesperada, se producirá un "rapto" secreto, en el cual instantáneamente todos los verdaderos cristianos serán arrebatados y trasladados al cielo. El mundo se verá envuelto entonces, durante siete años, en un verdadero caos. Aparecerá un personaje tiránico que se erigirá en el Anticristo, proclamándose como el dios encarnado, y que gobernará con mano de hierro teniendo su asiento en Jerusalén. Resolverá el problema del Medio Oriente en forma radical en base a su autoridad, y será respetado y obedecido por todos con mezcla de miedo y arrobamiento. 144.000 judíos aceptarán a Jesús como el Mesías, pero el Anticristo iniciará una sangrienta persecución contra ellos. La tierra se precipitará en la hecatombe de la tercera guerra mundial, Armagedón. Pero en medio de la confusión y el cataclismo ocurrirá -siete años después del rapto- la segunda venida de Cristo.
Este suceso empezará, según la misma doctrina, un milenio de paz y prosperidad, durante el cual los judíos iniciarán un movimiento de evangelización mundial, y los inconversos tendrán una nueva oportunidad de salvarse.
Ante una doctrina que goza de tanta popularidad, es justo preguntarse dónde tuvo ella su origen, qué soporte tiene, y cuál es el veredicto de la Palabra de Dios al respecto. Porque este tema, así como toda otra inquietud de índole religiosa, puede tener una sola respuesta, por parte de una sola autoridad: la voz clara y precisa de la Palabra divina contenida en las Sagradas Escrituras.
¿Dónde se originó la teoría del rapto secreto y de un milenio de paz sobre la tierra anterior a la segunda venida de Cristo?
Ella es totalmente desconocida por la Biblia, y en su forma actual tuvo su comienzo a fines de la década de 1820. Por esa fecha, un religioso llamado Eduardo lrving organizó en Inglaterra un nuevo movimiento que denominó la Iglesia Católica Apostólica. Ese grupo practicaba el hablar en lenguas extrañas como una actividad habitual. Fue en una de esas sesiones donde se recibió un "mensaje", como procedente del Espíritu Santo, que presentaba la idea del arrebatamiento secreto y el milenio. La Biblia, en cambio, presenta un cuadro completamente distinto.
¿Cómo y cuándo se realizará el arrebatamiento de los hijos de Dios según la Biblia?
San Pablo escribe: "Os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor" (1 Tesalonicenses 4: 15- 17).
Notemos, en este pasaje inspirado, los siguientes hechos:
1. El arrebatamiento en las nubes ocurrirá en ocasión de la venida de Cristo y no siete años antes.
2. Será un suceso acompañado por la voz de arcángel del Señor. No será secreto, sino mundial y público, y además todo ojo humano lo observará. (Véase, además, Mateo 24: 27; Apocalipsis 1: 7.)
¿Cuándo y cómo acontecerá el milenio, según la Biblia?
La expresión "mil años" está mencionada seis veces en Apocalipsis 20: 2-7. En el centro de ese pasaje, el versículo 6 destaca los dos acontecimientos que señalarán el comienzo y el fin de los mil años: "Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años". Si los que se levantan en la primera resurrección empiezan a reinar mil años con Cristo, es evidente que el punto de partida del milenio es la primera resurrección, que se realiza en ocasión de la segunda venida de Jesús (1 Tesalonicenses 4: 16).
Además, si hay una primera resurrección, es evidente que también hay una segunda. ¿Cuándo se producirá ésta? La Biblia responde: "Los otros muertos (los que no durmieron en Jesús) no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años" (Apocalipsis 20: 5).
Ahora bien, si cada uno de los que se levantan en la primera resurrección es "bienaventurado y santo" (o sea un hijo de Dios), se sigue que "los otros muertos" que "no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años" no serán bienaventurados ni santos, es decir, son los impíos.
Hay dos resurrecciones en la Biblia: (1) "la resurrección de los justos" (Lucas 14:14), y (2) "la resurrección de condenación" (Juan 5: 28, 29). Y los mil años están limitados por estas dos resurrecciones: la primera en la ocasión en que Cristo venga por segunda vez, y la segunda cuando ocurra el juicio ejecutivo, o sea la destrucción de los que no estén preparados para la vida eterna.
Pero ese milenio los hijos de Dios no lo pasarán sobre la tierra, en una era de bonanza y bienestar, sino en el cielo, mientras la tierra está desordenada y vacía de vida humana. Por otra parte, según la Biblia no habrá una segunda oportunidad para salvarse después de la muerte y luego de la segunda venida de Cristo (Hebreos 9: 27).
Resumiendo, pues, lo que con toda claridad enseñan las Escrituras, diremos que cuando Cristo venga por segunda vez, es decir al comienzo del milenio, ocurren los siguientes sucesos:
1. Resucitan los que durmieron en Jesús. 1 Tesalonicenses 4: 16.
2. Los justos vivos son transformados. 1 Corintios 15: 51, 52.
3. Los impíos que estén vivos serán destruidos. 2 Tesalonicenses 2: 7, 8; Apocalipsis 19: 21.
4. Satanás es atado por una cadena de circunstancias, pues no habrá en la tierra nadie a quien engañar. Apocalipsis 20: 2.
Durante el milenio:
1. Los redimidos reinan con Cristo mil años en el cielo. Apocalipsis 20: 4;1 Corintios 6: 2, 3.
2. La tierra está desolada y vacía. Jeremías 4: 23-27.
Al final del milenio:
1. Baja del cielo la Nueva Jerusalén. Apocalipsis 21: 2.
2. Cristo desciende sobre el monte de los Olivos. Zacarías 14: 4; 5.
3. Los impíos son resucitados para recibir su castigo. Apocalipsis 20: 5; Juan 5: 28, 29.
4. Los inconversos son final rnente destruidos en el juicio final. Apocalipsis 20: 9-15.
5. Surgen una tierra nueva y un cielo nuevo. Apocalipsis 21:1.
He ahí la verdad bíblica, y por ende la única autorizada, respecto de este discutido pero interesante tema de los mil años y el rapto secreto. He ahí el desenlace feliz de la larga historia de pecado y dolor en este mundo. El cuadro culmina con la eliminación del mal y de los malos que no hayan aceptado el proceso restaurador de Dios.
La Biblia no habla de un sufrimiento perpetuo -concepto contrario a un Dios de amor y bondad- sino de una misericordiosa eliminación del mal para siempre. Y entonces la escena culmina con el grandioso amanecer en una tierra donde ya no habrá noche, donde la juventud es perenne, donde la salud es perfecta, donde la felicidad es ilimitada, y donde los seres humanos, redimidos por la vida perfecta y la muerte expiatoria de Cristo, vivirán en una eternidad sin término. Este es el plan de Dios para Ud., amigo lector, si tan sólo está dispuesto a poner su voluntad de acuerdo con la suya y a someter su vida a la dirección divina; si está dispuesto a aceptar al Señor Jesús como su Salvador y como el Señor de su existencia.
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