¿Quiénes son los seres vivientes de cuatro caras? "Mencionados en Ezequiel"
- Autor 1juanamor
- Fecha de inicio
Simplemente son cuatro seres vivientes que habitan el cielo, la biblia no dice más.
Las caras se ha dado identificarlos con los 4 evangelios.
Las caras se ha dado identificarlos con los 4 evangelios.
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Efectivamente. Los 4 evangelios/evangelistas esa es la interpretación tradicional.
Juan el águila que por su clarividencia que ve más allá proféticamente. El único que vuela en el espíritu revelando algo de las profundidades de Dios.
Mateo el rostro humano su evangelio empieza con genealogías y apego a la ley de la Torá.
Lucas el toro que representa el ente sacrificial más usual, Lucas empieza su evangelio con el sacrificio de Zacarías el grato sacerdote del Señor.
Marcos es el león que empieza con Juan Bautista voz de uno que clama en el desierto, el león ruge en el desierto y declara su dominio dónde nadie más puede hacerlo.
El cristiano tiene 4 rostros.
Es el león que declara dominio dónde nadie más se atreve, clama por justicia dónde todos callan.
Es águila que conoce los secretos de lo Alto y ve todo desde una perspectiva superior.
Es el toro apegado al sacrificio, al esfuerzo, a la constancia hasta al final, a entregar su propia vida como grato sacrificio si fuera necesario.
Y finalmente tiene un rostro humano que también llora y tiene sangre en las venas, no ajeno a los sufrimientos del prójimo y cumplidor cabal de toda ley justa humana y divina.
Juan el águila que por su clarividencia que ve más allá proféticamente. El único que vuela en el espíritu revelando algo de las profundidades de Dios.
Mateo el rostro humano su evangelio empieza con genealogías y apego a la ley de la Torá.
Lucas el toro que representa el ente sacrificial más usual, Lucas empieza su evangelio con el sacrificio de Zacarías el grato sacerdote del Señor.
Marcos es el león que empieza con Juan Bautista voz de uno que clama en el desierto, el león ruge en el desierto y declara su dominio dónde nadie más puede hacerlo.
El cristiano tiene 4 rostros.
Es el león que declara dominio dónde nadie más se atreve, clama por justicia dónde todos callan.
Es águila que conoce los secretos de lo Alto y ve todo desde una perspectiva superior.
Es el toro apegado al sacrificio, al esfuerzo, a la constancia hasta al final, a entregar su propia vida como grato sacrificio si fuera necesario.
Y finalmente tiene un rostro humano que también llora y tiene sangre en las venas, no ajeno a los sufrimientos del prójimo y cumplidor cabal de toda ley justa humana y divina.