Es amando a Dios y a nuestros semejantes como nuestro cristianismo tendra efectividad y estara enmarcado en los propositos eternos de Dios.
El cristianismo no consiste en aislarse en la cima de una montaña para vivir solitarios en ella y experimentar sensaciones sobrenaturales; no consiste en meterse en una burbuja aislante sin entrar en contacto con nadie. No.
El cristianismo consiste en IR donde esta el necesitado, el pobre, el enfermo, el pecador.
Dios no quiere cristianos islas que se las pasen encerrados SOLAMENTE leyendo la Biblia o encerrados en sus templos sin tener contacto con las demas personas.
Dios no quiere ermitaños. Eso es egoismo.
No cometamos el mismo error de Pedro cuando le pidio al Señor Jesus que se quedaran todo el tiempo contemplando la vision de la transfiguracion.
Ahora bien.
No se trata tampoco de caer en un activismo absoluto, pues entonces caeriamos en el otro extremo.
Jesus nos ha enviado al mundo, pero a la vez nos ordena guardarnos de sus costumbres; para ello nos pide tener un tiempo a solas con el para que nos nutramos de sus Palabras y de su Espiritu, y asi podamos salir cada dia al mundo para ser SAL y LUZ en medio de el, pues hemos sido llamados a ser sus embajadores en el medio que nos rodea.
Jose Alfredo Lievano
[email protected]
San Salvador, El Salvador, C.A.
Viernes 27 de agosto 2004.
El cristianismo no consiste en aislarse en la cima de una montaña para vivir solitarios en ella y experimentar sensaciones sobrenaturales; no consiste en meterse en una burbuja aislante sin entrar en contacto con nadie. No.
El cristianismo consiste en IR donde esta el necesitado, el pobre, el enfermo, el pecador.
Dios no quiere cristianos islas que se las pasen encerrados SOLAMENTE leyendo la Biblia o encerrados en sus templos sin tener contacto con las demas personas.
Dios no quiere ermitaños. Eso es egoismo.
No cometamos el mismo error de Pedro cuando le pidio al Señor Jesus que se quedaran todo el tiempo contemplando la vision de la transfiguracion.
Ahora bien.
No se trata tampoco de caer en un activismo absoluto, pues entonces caeriamos en el otro extremo.
Jesus nos ha enviado al mundo, pero a la vez nos ordena guardarnos de sus costumbres; para ello nos pide tener un tiempo a solas con el para que nos nutramos de sus Palabras y de su Espiritu, y asi podamos salir cada dia al mundo para ser SAL y LUZ en medio de el, pues hemos sido llamados a ser sus embajadores en el medio que nos rodea.
Jose Alfredo Lievano
[email protected]
San Salvador, El Salvador, C.A.
Viernes 27 de agosto 2004.