Seguramente que la predicación más importante del evangelio; fue para los gentiles.
El asunto es que la predicación del evangelio partió desde los judíos. Todo en su tiempo. La Palabra de Dios enseña que el evangelio por excelencia está dirigido a los gentiles, obviamente sin dejar de considerar a los judíos. Es decir, el evangelio se estableció para toda la humanidad, compuesta mayoritariamente por gentiles.
Esta es la profecía: "A Abraham fueron hechas las promesas (En ti serán benditas TODAS las naciones de la tierra), y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como de muchos; sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo"
Que la predicación partió con los judíos no hay dudas; y que Jesús anunció que se predicaría a los gentiles; no es menos cierto: "También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también me conviene traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor" (Juan 10:16)
También lo deja claro, con la mujer siro-fenisa. Cuando Jesús predicaba su evangelio, se le acercó esta mujer y le pidió ayuda; el error de ésta mujer, fue hacerlo considerando a Jesús como "Hijo de David", lo cual a ella no le correspondía porque ella no era judía, y Jesús como "Hijo de David" era solo para los judíos. "Y he aquí una mujer Cananea, que había salido de aquellos términos, clamaba, diciéndole: Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí; mi hija es malamente atormentada del demonio" (Mateo 15:22)
Esto explica el porqué Jesús no le respondió palabra alguna.
Luego ante la insistencia de la mujer; los discípulos le dicen a Jesús que la despache (que le conteste o cumple su petición): "Mas él no le respondió palabra. Entonces llegándose sus discípulos, le rogaron, diciendo: Despáchala, pues da voces tras nosotros " (vers.23
Ella, como "Hijo de David, no tenía ningún derecho sobre Jesús. ....Y responde a sus discípulos ( no a la mujer), que ella no tenía derecho a ser atendida por él: "Y él respondiendo, dijo: No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel" (vers.24)
Y fue entonces que la mujer se acercó a él, y le pidió su ayuda; pero ahora en forma diferente: "Entonces ella vino, y le adoró, diciendo: Señor socórreme" Aquella mujer, ahora clamó a Jesús solo como "Señor", y no como "Hijo de David", Jesús, como Señor, es Señor de toda la humanidad (gentiles) ... y entonces si podía atender a aquella mujer; sin dejar de hacerle notar, que en su ministerio era enviado solo a Israel, quienes eran dignos del "pan entero", "No es bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos" (vers.26) El pan era para los hijos (judíos).
Entonces la mujer respondió que aún los perrillos (los de fuera, no los hijos) comen de las migajas que caen de la mesa de sus señores... Esto claramente era una muestra de LA FE de aquella mujer, y a través de la fe, ella podía acceder al Dios de los judíos y por tanto al Señor. Jesús destacó LA FE de la mujer, y por esa fe, le respondió.
Como vemos, los gentiles estaban considerados por Jesús, Él lo hizo notar en muchas oportunidades, como las que relato; y en ningún caso, "prohibió" predicar a los gentiles.
El asunto es que la predicación del evangelio partió desde los judíos. Todo en su tiempo. La Palabra de Dios enseña que el evangelio por excelencia está dirigido a los gentiles, obviamente sin dejar de considerar a los judíos. Es decir, el evangelio se estableció para toda la humanidad, compuesta mayoritariamente por gentiles.
Esta es la profecía: "A Abraham fueron hechas las promesas (En ti serán benditas TODAS las naciones de la tierra), y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como de muchos; sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo"
Que la predicación partió con los judíos no hay dudas; y que Jesús anunció que se predicaría a los gentiles; no es menos cierto: "También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también me conviene traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor" (Juan 10:16)
También lo deja claro, con la mujer siro-fenisa. Cuando Jesús predicaba su evangelio, se le acercó esta mujer y le pidió ayuda; el error de ésta mujer, fue hacerlo considerando a Jesús como "Hijo de David", lo cual a ella no le correspondía porque ella no era judía, y Jesús como "Hijo de David" era solo para los judíos. "Y he aquí una mujer Cananea, que había salido de aquellos términos, clamaba, diciéndole: Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí; mi hija es malamente atormentada del demonio" (Mateo 15:22)
Esto explica el porqué Jesús no le respondió palabra alguna.
Luego ante la insistencia de la mujer; los discípulos le dicen a Jesús que la despache (que le conteste o cumple su petición): "Mas él no le respondió palabra. Entonces llegándose sus discípulos, le rogaron, diciendo: Despáchala, pues da voces tras nosotros " (vers.23
Ella, como "Hijo de David, no tenía ningún derecho sobre Jesús. ....Y responde a sus discípulos ( no a la mujer), que ella no tenía derecho a ser atendida por él: "Y él respondiendo, dijo: No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel" (vers.24)
Y fue entonces que la mujer se acercó a él, y le pidió su ayuda; pero ahora en forma diferente: "Entonces ella vino, y le adoró, diciendo: Señor socórreme" Aquella mujer, ahora clamó a Jesús solo como "Señor", y no como "Hijo de David", Jesús, como Señor, es Señor de toda la humanidad (gentiles) ... y entonces si podía atender a aquella mujer; sin dejar de hacerle notar, que en su ministerio era enviado solo a Israel, quienes eran dignos del "pan entero", "No es bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos" (vers.26) El pan era para los hijos (judíos).
Entonces la mujer respondió que aún los perrillos (los de fuera, no los hijos) comen de las migajas que caen de la mesa de sus señores... Esto claramente era una muestra de LA FE de aquella mujer, y a través de la fe, ella podía acceder al Dios de los judíos y por tanto al Señor. Jesús destacó LA FE de la mujer, y por esa fe, le respondió.
Como vemos, los gentiles estaban considerados por Jesús, Él lo hizo notar en muchas oportunidades, como las que relato; y en ningún caso, "prohibió" predicar a los gentiles.
