Probervios de gran bendición en tiempos de tiniebla.

Raul Fierro

Raul Fierro
15 Julio 1999
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discipulos.mforos.com
Proverbios de gran bendición.

Cuando los justos dominan, el pueblo se alegra;
Mas cuando domina el impío, el pueblo gime.

Conoce el justo la causa de los pobres;
Mas el impío no entiende sabiduría.

Los hombres escarnecedores, ponen la ciudad en llamas;
Mas los sabios apartan la ira.

Si el hombre sabio contendiere con el necio,
que se enoje o que se ría, no tendrá reposo.

El necio da rienda suelta a toda su ira,
Mas el sabio al fin la sosiega.

Si un gobernante atiende la palabra mentirosa,
Todos sus servidores serán impíos.

Cuando los impíos son muchos, mucha es la transgresión;
Mas los justos verán la ruina de ellos.

Sin profecía el pueblo se desenfrena.

Toda palabra de Dios es limpia;
El es escudo a los que en el esperan.
 
Mas proverbios.

Mas proverbios.

23 Abominación son a Jehová las pesas falsas,
Y la balanza falsa no es buena.

26 El rey sabio avienta a los impíos,
26 El rey sabio avienta a los impíos,

2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión;
Pero su fin es muerte.

7 El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta;
El que reprende al impío, se atrae mancha.
No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca;
Corrige al sabio, y te amará.

8 El sabio de corazón recibirá los mandamientos;
Y el necio de labios será castigado.

14 Los sabios guardan la sabiduría;
Mas la boca del necio es calamidad cercana.



20 Plata escogida es la lengua del justo;
Mas el corazón de los impíos es como nada.

21 Los labios del justo apacientan a muchos,
Mas los necios mueren por falta de entendimiento.

32 Los labios del justo saben hablar lo que agrada;
32 Los labios del justo saben hablar lo que agrada;
 
Otros Probervios

Otros Probervios

Un saludo Raul:

Otros probervios que han sido de bendicion a mi vida.

Lo que el impio teme, eso le vendra; pero a los justos les sera dado lo que desean.

El que carece de entendimiento menosprecia a su projimo; mas el hombre prudente calla.

El que confia en sus riquezas caera, mas los justos reverdeceran como ramas.

La blanda respuesta quita la ira, mas la palabra aspera hace subir el furor.

El corazon del justo piensa para responder; mas la boca de los impios derrama malas cosas.

El oido que escuha las amonestaciones de la vida, entre los sabios morara.

Encomineda a Jehova tus obras, y tus pensamientos seran afirmados.

El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; y amigo hay mas unido que un hermano.

Torre fuerte es el nombre de Jehova; a El correra el justo, y sera levantado.

Hay camino que parece derecho al hombre: pero su fin es camino de muerte.

La gloria de los jovenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez.

Como el agua fria al alma sedienta, asi son las buenas nuevas de lejanas tierras.

Alabate el extraño, y no tu propia boca; el ajeno, y no los labios tuyos.

No entres apresuradamente en pleito, no sea que no sepas que hacer al fin, despues que tu pojimo te haya avergonzado.

No digas; como me hizo, asi le hare; dare el pago al hombre sugun su obra.

No te afanes por hacerte rico; se prudente, y desiste.

Escucha el consejo, y recibe la correccion, para que seas sabio en tu vejez.

En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia.

El animo del hombre soportara su enfermedad; mas ¡quien soportara el animo angustiado?.

Perdona Raul y los que lean que se me olvido colocar la cita.

Bendiciones.
 
PAZ!


31:1 Palabras del rey Lemuel; la profecía con que le enseñó su madre.
31:2 ¿Qué, hijo mío? ¿y qué, hijo de mi vientre?
¿Y qué, hijo de mis deseos?
31:3 No des a las mujeres tu fuerza,
Ni tus caminos a lo que destruye a los reyes.
31:4 No es de los reyes, oh Lemuel, no es de los reyes beber vino,
Ni de los príncipes la sidra;
31:5 No sea que bebiendo olviden la ley,
Y perviertan el derecho de todos los afligidos.
31:6 Dad la sidra al desfallecido,
Y el vino a los de amargado ánimo.
31:7 Beban, y olvídense de su necesidad,
Y de su miseria no se acuerden más.
31:8 Abre tu boca por el mudo
En el juicio de todos los desvalidos.

Saludos

El peregrino
31:9 Abre tu boca, juzga con justicia,
Y defiende la causa del pobre y del menesteroso.
Elogio de la mujer virtuosa
31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará?
Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas.
31:11 El corazón de su marido está en ella confiado,
Y no carecerá de ganancias.
31:12 Le da ella bien y no mal
Todos los días de su vida.
31:13 Busca lana y lino,
Y con voluntad trabaja con sus manos.
31:14 Es como nave de mercader;
Trae su pan de lejos.
31:15 Se levanta aun de noche
Y da comida a su familia
Y ración a sus criadas.
31:16 Considera la heredad, y la compra,
Y planta viña del fruto de sus manos.
31:17 Ciñe de fuerza sus lomos,
Y esfuerza sus brazos.
31:18 Ve que van bien sus negocios;
Su lámpara no se apaga de noche.
31:19 Aplica su mano al huso,
Y sus manos a la rueca.
31:20 Alarga su mano al pobre,
Y extiende sus manos al menesteroso.
31:21 No tiene temor de la nieve por su familia,
Porque toda su familia está vestida de ropas dobles.
31:22 Ella se hace tapices;
De lino fino y púrpura es su vestido.
31:23 Su marido es conocido en las puertas,
Cuando se sienta con los ancianos de la tierra.
31:24 Hace telas, y vende,
Y da cintas al mercader.
31:25 Fuerza y honor son su vestidura;
Y se ríe de lo por venir.
31:26 Abre su boca con sabiduría,
Y la ley de clemencia está en su lengua.
31:27 Considera los caminos de su casa,
Y no come el pan de balde.
31:28 Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada;
Y su marido también la alaba:
31:29 Muchas mujeres hicieron el bien;
Mas tú sobrepasas a todas.
31:30 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura;
La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada.
31:31 Dadle del fruto de sus manos,
Y alábenla en las puertas sus hechos.