Buenos días.
Dos preguntas para los amigos católicos del Foro:
#1 ¿Pueden ustedes decir "amén" a estas expresiones del papa Pío XII?
(Tomado de "Ad caeli reginam", parte IV, Constitución apostólica de S.S. Pío XII sobre la realeza de María, 11 de octubre de 1954)
#2 ¿Pueden ustedes decir "amén" a estas expresiones de S. Luis de Montfort? Si la respuesta fuera negativa, me gustaría saber si consideran que el texto es herético.
Tomado de: "Tratado de la verdadera
devoción a la santísima virgen" por San Luis María Grignon de Montfort.
Muchas gracias.
Dos preguntas para los amigos católicos del Foro:
#1 ¿Pueden ustedes decir "amén" a estas expresiones del papa Pío XII?
Procuren, pues, todos acercarse ahora con mayor confianza que antes, todos
cuantos recurren al trono de la gracia y de la misericordia de nuestra Reina y Madre,
para pedir socorro en la adversidad, luz en las tinieblas, consuelo en el dolor y en el
llanto, y, lo que más interesa, procuren liberarse de la esclavitud del pecado, a fin
de poder presentar un homenaje insustituible, saturado de encendida devoción filial,
al cetro real de tan grande Madre.
(Tomado de "Ad caeli reginam", parte IV, Constitución apostólica de S.S. Pío XII sobre la realeza de María, 11 de octubre de 1954)
#2 ¿Pueden ustedes decir "amén" a estas expresiones de S. Luis de Montfort? Si la respuesta fuera negativa, me gustaría saber si consideran que el texto es herético.
Una de las razones porque son tan pocas las almas que llegan a la medida de la plenitud de Cristo, es porque María, que ahora como siempre, es la Madre de Cristo y la esposa fecunda del Espíritu Santo, no está bastante formada en los corazones. Quien desea tener el fruto maduro y bien formado, debe tener al árbol que lo produce. Quien desea tener el fruto de la vida, Jesucristo, debe tener el árbol de la vida, que es María. Quien desea tener en sí la operación del Espíritu Santo, debe tener a su esposa fiel e inseparable, la divina María, que le hace fértil y fecundo. Así lejos de que de la divina María, toda transformada en Dios, nazca un obstáculo a los perfectos para llegar a la unión con Dios, no ha habido hasta ahora, ni habrá jamás, criatura que nos ayude más eficazmente a esta grande obra, ya sea por las gracias que a este efecto nos alcance, pues como dice un santo, nadie se llena del pensamiento de Dios sino por Ella.
Tomado de: "Tratado de la verdadera
devoción a la santísima virgen" por San Luis María Grignon de Montfort.
Muchas gracias.