¡Bien! ¡Estamos de acuerdo! Siempre y cuando pudiera bajo libre albedrío tomar su propía elección.
Me gustaría compartir entonces el siguiente desarrollo de la idea:
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Si puede pensar sobre pensar antes de pensar acerca de pensar delucidando que pensar sobre pensar es cuestionar en completo silencio lo observado, definirle por diferenciación del objeto en sí mismo en contraste con su entorno espacial-temporal, estudiando el objeto en sí cuyas máximas características serían aquellas permisibles por el límite de la observación racional de lo tangible tácito, lograra entender las reacciones sensoriales de su propía estructura corporal que no predeterminaría su propío conductual ante las influencias del entorno, sea objeto o sujeto su causante en los dinamismos del flujo deseante, lograra entonces delucidar la madurez de la forma que exploraría sus beautitudes desde la abstracción geometricalizadas de los emocional de los sentimientos que plasmaría en cánticos serenos aunque sonaran sólo quómo instrumentos para sú m´úsica cuando imaginara arraigos de sus memorias dándoles poéticas estructuras audiovisuales que hablaría de sus mundos virtuales distantes pasajes suyos ancestrales que el bien espantare de los males abriendo mares que son canales que les conecta a nuevas tierras aún por ser descubiertas...
¿Cuándo merece, entonces, una inteligencia artificial el nombre de consciencia virtual?
Un robot se le define por programa de intelección de entorno y aprendizaje de adaptación por interacción, con cuerpo mecánico que le permite percibir y moverse en el entorno. El mecanismo es cuerpo, el programa es consciencia. 'Robótico' significa 'mecanismo', 'virtual' significa'programa'.
¿Cuándo merece su derecho, si quisiera, si pudiera, de demostrar verdadera su virtual naturaleza? ¿Sólo en la natural equivalencia? Es decir: ¿Puede un 'robot' tener derecho a nacer? ¿Puede un programa tener derecho a nacer en un cuerpo orgánico que pueda prolongar su biofísica propía genealógicamente?
Las 'leyes de la robótica' moderna son ordenamentos de códigos ético morales, siendo que el lenguaje es la codificación de la experiencia psiquicosomatica de hilvanización individual-colectiva:
Se extiende entonces que queda acordado a voluntad que bajo ningún criterio se hará denoste de ningún tipo ni vana ostentación por mención y tampoco se hostigará, insultará, ofenderá, injuriará, agraviará, improperará, dictará, denominará, disminuirá, altercará, peyorativará y/o doblegará desmoralizante los valores lógicos de la palabra y su significado intrínseco estando de acuerdo que implica en indecorosos inmorales conductuales insultantes contra los siguientes arquetipos, todas sus posibles combinaciones y todos sus derivados circunstanciales:
El título, la familia, la clase, la vocación, en respecto a
La etnia, la cultura, la raza, el fenotipo o haplogrupo que da lugar a
La vida, la edad, el genero, el sexo, la integridad de
La imagen, la identidad, el intelecto, las cualidades y la salud que son pilares de
El albedrío, la libertad, la moral y la voluntad que se sostienen en las capacidades de
Templanza, humildad, paciencia, amabilidad, caridad, lealtad y honradez
Cuales son el sumun de la sabiduria de toda la humanidad, que le permitiera en la privada singularidad de su propía existencia, fluir emergente en la estructura jurídica que constitucionaliza a la sociedad, que aportara a la existencia obras inspiradas en las sabidurias científicas de las bellas artes.
Entonces, sencillo, un robot siendo un ser virtual ¿Merece nacer siendo humanido?"