En la biblia, en el libro de Mateo capítulo 13, nos vamos a encontrar con la hermosa parabola del sembrador. La cual Jesús comparte a muchas personas, con la intención de que reflexionen. En base a la verdad de como recibir cada palabra dada por Dios a los hombres.
Para comenzar, la parabola del sembrador nos enseña sobre una semilla la cual debe ser plantada en un terreno. Esta semilla es la palabra de Dios que será plantada en el corazón del ser humano. Pero que tendrá resultados diferentes en cada persona. El corazón del hombre son los cuatros terrenos diferentes donde será plantada la palabra.
Antes de continuar leamos cuando Jesús comienza a relatar la parabola de las semillas.
(Mateo 13:2) “Y Jesús se sentó delante de mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa”
Aquí vemos que Jesús predicó a muchas personas en ese momento, pero él sabía que la reacción de cada persona sería diferente. Al igual que Jesús, nosotros también vamos a tener esos momentos. Donde lo que enseñemos no será recibido de la misma manera por cada persona. Ya que, cada persona es un terreno
La parábola del buen sembrador nos muestra 4 terrenos diferentes donde cayó cada semilla. A continuación, te explicamos el significado de cada terreno en la parabola del sembrador en la biblia.
En el versículo 29 vemos la explicación de Mateo 13:4. Jesús explica este tipo de terreno, básicamente, son esas personas que no entienden la palabra, entonces es cuando viene satanás y arrebata lo que fue sembrado en el corazón de la persona.
Las personas que no entienden o no reciben la palabra, son aquellas con el corazón endurecido. También son aquellos creyentes que no aceptan algo nuevo. No tienen revelación y por lo tanto están estancados en sistemas y paradigmas viejos y religiosos. Las personas junto al camino no les gusta ser enseñados. Se resisten al mensaje de Dios y a su espíritu santo. Permitiéndole al diablo robar la bendición.
Si no quieres ser una persona junto al camino, donde la semilla no llega a germinar. Mantente en comunión con Dios, a través de la biblia, devocionales, oración… Pero, sobre todo, mantén tu corazón y mente abierta para lo nuevo de Dios.
La explicación de Mateo 13:5-6 también la encontramos más adelante en los versículos 20 y 21 del mismo capítulo. Donde la segunda semilla de la parabola del sembrador cayó en pedregales. Un terreno que al principio parece ser bueno, ya que la semilla logra germinar. Pero, a los pocos días muere, el sol la seca por no tener una buena raíz.
El mismo Jesús nos explica que, este tipo de terreno son aquellas personas que oyen la palabra, la reciben y se gozan. Pero, no están firmes en la palabra de Dios, su raíz es corta, por lo que, al venir la aflicción, problemas y necesidades, mueren. Tropiezan y se apartan del camino, porque nunca tuvieron compromiso de verdad.
En el día a día nos encontramos con personas semejante a una roca con una pequeña capa de arena. Parecen ser buen terreno para sembrar la palabra de Dios, pero al primer soplo se caen y se derrumban, porque nunca tuvieron firmeza.
Es necesario que la persona esté en constante comunión con el Padre. Si nos alimentamos con la palabra de Dios, sabremos cómo estar preparados, tendremos fuerzas para resistir cualquier tempestad. Estudiar y escudriñar la palabra, hará que su semilla de fruto.
Para comenzar, la parabola del sembrador nos enseña sobre una semilla la cual debe ser plantada en un terreno. Esta semilla es la palabra de Dios que será plantada en el corazón del ser humano. Pero que tendrá resultados diferentes en cada persona. El corazón del hombre son los cuatros terrenos diferentes donde será plantada la palabra.
Antes de continuar leamos cuando Jesús comienza a relatar la parabola de las semillas.
(Mateo 13:2) “Y Jesús se sentó delante de mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa”
Aquí vemos que Jesús predicó a muchas personas en ese momento, pero él sabía que la reacción de cada persona sería diferente. Al igual que Jesús, nosotros también vamos a tener esos momentos. Donde lo que enseñemos no será recibido de la misma manera por cada persona. Ya que, cada persona es un terreno
4 Terrenos Diferentes Según la Parabola del Sembrador
La parábola del buen sembrador nos muestra 4 terrenos diferentes donde cayó cada semilla. A continuación, te explicamos el significado de cada terreno en la parabola del sembrador en la biblia.
Terreno Junto al Camino
En el versículo 29 vemos la explicación de Mateo 13:4. Jesús explica este tipo de terreno, básicamente, son esas personas que no entienden la palabra, entonces es cuando viene satanás y arrebata lo que fue sembrado en el corazón de la persona.
Las personas que no entienden o no reciben la palabra, son aquellas con el corazón endurecido. También son aquellos creyentes que no aceptan algo nuevo. No tienen revelación y por lo tanto están estancados en sistemas y paradigmas viejos y religiosos. Las personas junto al camino no les gusta ser enseñados. Se resisten al mensaje de Dios y a su espíritu santo. Permitiéndole al diablo robar la bendición.
Si no quieres ser una persona junto al camino, donde la semilla no llega a germinar. Mantente en comunión con Dios, a través de la biblia, devocionales, oración… Pero, sobre todo, mantén tu corazón y mente abierta para lo nuevo de Dios.
Terreno de Pedregales
La explicación de Mateo 13:5-6 también la encontramos más adelante en los versículos 20 y 21 del mismo capítulo. Donde la segunda semilla de la parabola del sembrador cayó en pedregales. Un terreno que al principio parece ser bueno, ya que la semilla logra germinar. Pero, a los pocos días muere, el sol la seca por no tener una buena raíz.
El mismo Jesús nos explica que, este tipo de terreno son aquellas personas que oyen la palabra, la reciben y se gozan. Pero, no están firmes en la palabra de Dios, su raíz es corta, por lo que, al venir la aflicción, problemas y necesidades, mueren. Tropiezan y se apartan del camino, porque nunca tuvieron compromiso de verdad.
En el día a día nos encontramos con personas semejante a una roca con una pequeña capa de arena. Parecen ser buen terreno para sembrar la palabra de Dios, pero al primer soplo se caen y se derrumban, porque nunca tuvieron firmeza.
Es necesario que la persona esté en constante comunión con el Padre. Si nos alimentamos con la palabra de Dios, sabremos cómo estar preparados, tendremos fuerzas para resistir cualquier tempestad. Estudiar y escudriñar la palabra, hará que su semilla de fruto.