El gobierno federal mexicano presidido por Felipe Calderón Hinojosa ha empezado una embestida contra la libertad de expresión de los cristianos, pues, en contra de los acuerdos establecidos previamente con los representantes de las diferentes creencias religiosas, está cerrando y desmantelando radios cristianas evangélicas.
El Presidente Felipe Calderón Hinojosa ya olvidó que los cristianos evangélicos apoyaron su campaña presidencial en el 2006 y ahora no sólo no les agradece esa postura política, sino que, contrario al sentido común, al igual que Poncio Pilatos, proporciona la madera y los clavos para su crucifixión coartándoles la libertad de expresión.
Atentar contra la LIBERTAD DE EXPRESIÓN de los cristianos, o de cualquier otra creencia religiosa, también es atentar contra el ESTADO CONSTITUCIONAL LAICO MEXICANO. El gobierno mexicano FORMA PARTE del Estado Mexicano, pero se toma atribuciones que no le corresponden para favorecer al Catolicismo Romano y que México regrese a la época postcolonial, anterior a las Leyes de Reforma, cuando era un Estado Confesional Católico Romano que subyugaba la voluntad del pueblo de México para favorecer a los grupos oligárquicos.
Mi más absoluta condena a la medida fascistoide de la Secretaría de Gobernación.
La noticia http://bit.ly/repwL
El Presidente Felipe Calderón Hinojosa ya olvidó que los cristianos evangélicos apoyaron su campaña presidencial en el 2006 y ahora no sólo no les agradece esa postura política, sino que, contrario al sentido común, al igual que Poncio Pilatos, proporciona la madera y los clavos para su crucifixión coartándoles la libertad de expresión.
Atentar contra la LIBERTAD DE EXPRESIÓN de los cristianos, o de cualquier otra creencia religiosa, también es atentar contra el ESTADO CONSTITUCIONAL LAICO MEXICANO. El gobierno mexicano FORMA PARTE del Estado Mexicano, pero se toma atribuciones que no le corresponden para favorecer al Catolicismo Romano y que México regrese a la época postcolonial, anterior a las Leyes de Reforma, cuando era un Estado Confesional Católico Romano que subyugaba la voluntad del pueblo de México para favorecer a los grupos oligárquicos.
Mi más absoluta condena a la medida fascistoide de la Secretaría de Gobernación.
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