Hermanos en Cristo y El Espíritu de Su Palabra
"...Y os ruego hermanos, que miréis los que causan disensiones y escándalos contra la doctrina que vosotros habéis aprendido; y apartaos de ellos.
Porque los tales no sirven al Señor nuestro Jesucristo, sino á sus vientres; y con suaves palabras y bendiciones engañan los corazones de los simples.
Porque vuestra obediencia ha venido á ser notoria á todos; así que me gozo de vosotros; mas quiero que seáis sabios en el bien, y simples en el mal..." (Rom. 16:17)
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De la misma forma como la obediencia de los primeros cristianos se destacó, siendo notoria a todos en el mundo antiguo y principalmente en el religioso, se destaca ahora en el mundo moderno y sin lugar a dudas en lo modernamente religioso y pervertido.
La profundidad de la exhortación del apóstol Pablo a los creyentes de la Roma antigua, es tan actual que cualquier cristiano sujeto al Espíritu de la Palabra de Dios, no debe olvidarla, además saber y entender que no solo es observado por Nuestro Señor Jesucristo en los cielos, sino que también por los que se dicen religiosos aquí en la tierra, los que practican doctrinas perversas y que se deleitan en el espíritu que inspira a los propagadores de un "evangelio" perverso.
Hermanos en Cristo y El Espíritu de Su Palabra es bueno considerar y no olvidar, que quien conoce y tiene por cierta la Sana Doctrina dada a conocer al hombre a través del Espíritu de la Palabra de Dios y consumada en el Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo, tiene una tremenda responsabilidad, pues todos los ojos de la creación sea esta visible o invisible, están sobre ellos y como creemos y sabemos algunos nos apoyan incondicionalmente y los otros pretenden devorarnos a como de lugar.
¡¡Permaneced firmes y sabed que si perseveráis cosas peores vendrán sobre vosotros y no os alarméis, porque antes estas cosas fueron hechas a vuestro Maestro y Él Mismo os dejó clara advertencia, no prestéis vuestros oídos a los pervertidores, no sea cosa que el espíritu que los anima os fascine y tengáis parte con ellos¡¡
¡Que el Señor en su Gracia nos preserve y nos libre de los devoradores que predican perversión¡
En Cristo
Rogelio
"...Y os ruego hermanos, que miréis los que causan disensiones y escándalos contra la doctrina que vosotros habéis aprendido; y apartaos de ellos.
Porque los tales no sirven al Señor nuestro Jesucristo, sino á sus vientres; y con suaves palabras y bendiciones engañan los corazones de los simples.
Porque vuestra obediencia ha venido á ser notoria á todos; así que me gozo de vosotros; mas quiero que seáis sabios en el bien, y simples en el mal..." (Rom. 16:17)
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De la misma forma como la obediencia de los primeros cristianos se destacó, siendo notoria a todos en el mundo antiguo y principalmente en el religioso, se destaca ahora en el mundo moderno y sin lugar a dudas en lo modernamente religioso y pervertido.
La profundidad de la exhortación del apóstol Pablo a los creyentes de la Roma antigua, es tan actual que cualquier cristiano sujeto al Espíritu de la Palabra de Dios, no debe olvidarla, además saber y entender que no solo es observado por Nuestro Señor Jesucristo en los cielos, sino que también por los que se dicen religiosos aquí en la tierra, los que practican doctrinas perversas y que se deleitan en el espíritu que inspira a los propagadores de un "evangelio" perverso.
Hermanos en Cristo y El Espíritu de Su Palabra es bueno considerar y no olvidar, que quien conoce y tiene por cierta la Sana Doctrina dada a conocer al hombre a través del Espíritu de la Palabra de Dios y consumada en el Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo, tiene una tremenda responsabilidad, pues todos los ojos de la creación sea esta visible o invisible, están sobre ellos y como creemos y sabemos algunos nos apoyan incondicionalmente y los otros pretenden devorarnos a como de lugar.
¡¡Permaneced firmes y sabed que si perseveráis cosas peores vendrán sobre vosotros y no os alarméis, porque antes estas cosas fueron hechas a vuestro Maestro y Él Mismo os dejó clara advertencia, no prestéis vuestros oídos a los pervertidores, no sea cosa que el espíritu que los anima os fascine y tengáis parte con ellos¡¡
¡Que el Señor en su Gracia nos preserve y nos libre de los devoradores que predican perversión¡
En Cristo
Rogelio
