Publicado en Forum Libertas
Mª Victoria Giménez
Prohíben a 5 sacerdotes con sotana entrar en centros públicos franceses
Los casos, que se conocieron este jueves, son los primeros que afectan directamente a la Iglesia católica desde que la ley de símbolos religiosos entró en vigor el 2 de septiembre
La Ley de Símbolos Religiosos, en vigor desde el pasado 2 de septiembre para la escuela pública de Francia, ha tenido ya sus primeras consecuencias para la Iglesia católica. Este jueves 7 de octubre, se conoció la existencia de 5 casos de sacerdotes a los que se ha prohibido entrar en centros educativos porque llevaban sotana. Al ser considerada esta prenda “signo religioso ostensible”, los responsables de esos colegios consideran que “está prohibida”. Una vez más, Francia ofrece al mundo una muestra de chantaje e intolerancia. Si en vez de ser un sacerdote que acude a la escuela a hacer su trabajo, es un butanero o un fontanero con su uniforme, ¿se le habría prohibido la entrada?
La normativa, aprobada en febrero por la Asamblea Nacional francesa, convierte las escuelas públicas en “santuarios” del laicismo excluyente, unos edificios donde no se acepta todo lo que responda a convicciones religiosas con la excusa de que ocupan un lugar del Estado y, por tanto, un “espacio laico”. Pero esos símbolos (pañuelo, cruz, burka, kippa...) no están en las paredes o en las puertas de los centros, sino en los cuerpos de las personas.
Mª Victoria Giménez
Prohíben a 5 sacerdotes con sotana entrar en centros públicos franceses
Los casos, que se conocieron este jueves, son los primeros que afectan directamente a la Iglesia católica desde que la ley de símbolos religiosos entró en vigor el 2 de septiembre
La Ley de Símbolos Religiosos, en vigor desde el pasado 2 de septiembre para la escuela pública de Francia, ha tenido ya sus primeras consecuencias para la Iglesia católica. Este jueves 7 de octubre, se conoció la existencia de 5 casos de sacerdotes a los que se ha prohibido entrar en centros educativos porque llevaban sotana. Al ser considerada esta prenda “signo religioso ostensible”, los responsables de esos colegios consideran que “está prohibida”. Una vez más, Francia ofrece al mundo una muestra de chantaje e intolerancia. Si en vez de ser un sacerdote que acude a la escuela a hacer su trabajo, es un butanero o un fontanero con su uniforme, ¿se le habría prohibido la entrada?
La normativa, aprobada en febrero por la Asamblea Nacional francesa, convierte las escuelas públicas en “santuarios” del laicismo excluyente, unos edificios donde no se acepta todo lo que responda a convicciones religiosas con la excusa de que ocupan un lugar del Estado y, por tanto, un “espacio laico”. Pero esos símbolos (pañuelo, cruz, burka, kippa...) no están en las paredes o en las puertas de los centros, sino en los cuerpos de las personas.
