Bendiciones a todos.
Mi nombre es Bernie tengo 25 años y les quiero contar mi historia, un testimonio de la grandeza de nuestro señor, que todo lo puede, hasta en los casos mas extremos como el mío.
Al nacer fui abandonado y me recogió una pareja muy pobre que no podían tener hijos, los primeros años fueron buenos pero mi padre adoptivo empezó a tomar licor y las cosas se pusieron feas, me insultaba y me golpeaba y por eso tome la decisión de huir a los 11 años.
Las calles se convirtieron en mi nuevo hogar y las drogas en mi compañía inseparable, dormía en cartones y comía de la basura. Pronto me fui rodeando de ciertas personas que se hacían llamar mis amigos, me alimentaron y me dieron un lugar donde dormir por las noches pero su supuesta amistad tenia un precio muy alto y cual decidí pagar.
Pronto me llevaron a lugares extraños con personas aun mas extrañas, ruinas, cementerios, hospitales abandonados, iglesias abandonadas... En esos lugares solían realizar ciertos rituales como la lectura de textos religiosos al revés, consagración y dedicación de sangre animal (gatos o gallinas negras), pan hecho con excremento de cabra, elegida para el sacrificio o para surtir de elementos al culto, orina del mismo animal a modo de bendición, tanto en el cuerpo de los asistentes como en el altar, en fin una misa negra en toda la regla.
Todo fue muy rápido y en un abrir y cerrar de ojos ya era un miembro activo de una secta satánica y las cosas que hice por aquellos tiempos están grabada a fuego en mi mente como ridiculizar la ceremonia religiosa cristiana, profanar la hostia consagrada pisoteándola, mezclándola con drogas o siendo parte de actos sexuales, orgías todo el tiempo y era común que me practicara la sodomía, generalmente me drogaba para esto, comer excremento y tomar orina de humanos, sacrificio de animales y todo tipo de blasfemia como destruir cruces, quemar Biblia y escupir crucifijos y otra cosas que me las reservo.
No tarde mucho en tocar fondo, despertaba desnudo en cementerios con el cuerpo cubierto de sangre y sin poder recordar nada, empecé a robar para poder conseguir mas droga y cuando no había me drogaba con lo que fuera, alcohol de farmacia, pegamento y demás basura.
Me llene de enfermedades sexuales ya que durante las orgías no usaba protección. El día que me entere fue el mismo día que decidí terminar con mi vida pero fue un intento fallido, el cual me llevo a al hospital y una vez recuperado a la cárcel porque ya era un fugitivo.
En la cárcel las cosas fuero duras, fui victima de agresiones y abusos sexuales y de nuevo intente suicidarme y de nuevo no tuve éxito. En esa ocasión mientras estaba en coma algo cambio en mi, no se como explicarlo pero tuve sueños muy extraños y una sensación de felicidad me embargaba, nunca había sentido eso, soñaba con el cielo, con Dios, con Jesús.
Cuando desperté me entere que una señora estuvo todo el tiempo a mi lado leyendo la palabra del señor, no le di mayor importación y así paso una semana hasta que me entere que ella estaba por ahí y la mande a llamar, no sabia porque pero una fuerza muy superior a mi quería saber mas. Ella fue con migo y estuvimos charlado un rato de cosas triviales, me regalo una Biblia y se despido.
Al día siguiente tome la Biblia para ojearla de manera burlona pero algo tomo mi atención así que me puse a leer. Al cabo de un rato volví a tener esa sensación, sentí como un fuego dentro de mi y de nuevo esa sensación de paz, fue algo muy fuerte y en ese momento me caí de rodillas y llorando a pedir perdón al señor, lo vi todo muy claro, a pesar de mis pecados el señor siempre estuvo a mi lado protegiéndome porque el me tenia un propósito.
Hoy soy una persona nueva, dedicado a las cosas de señor y dispuesto enmendar las cosas
aun me falta mucho por aprender porque fui criados por personas ateas y solo conocí al señor hace pocos años
y bien, esa la historia de como el poder de dios me saco del mismo infierno
saludos y que el señor los bendiga.
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Mi nombre es Bernie tengo 25 años y les quiero contar mi historia, un testimonio de la grandeza de nuestro señor, que todo lo puede, hasta en los casos mas extremos como el mío.
Al nacer fui abandonado y me recogió una pareja muy pobre que no podían tener hijos, los primeros años fueron buenos pero mi padre adoptivo empezó a tomar licor y las cosas se pusieron feas, me insultaba y me golpeaba y por eso tome la decisión de huir a los 11 años.
Las calles se convirtieron en mi nuevo hogar y las drogas en mi compañía inseparable, dormía en cartones y comía de la basura. Pronto me fui rodeando de ciertas personas que se hacían llamar mis amigos, me alimentaron y me dieron un lugar donde dormir por las noches pero su supuesta amistad tenia un precio muy alto y cual decidí pagar.
Pronto me llevaron a lugares extraños con personas aun mas extrañas, ruinas, cementerios, hospitales abandonados, iglesias abandonadas... En esos lugares solían realizar ciertos rituales como la lectura de textos religiosos al revés, consagración y dedicación de sangre animal (gatos o gallinas negras), pan hecho con excremento de cabra, elegida para el sacrificio o para surtir de elementos al culto, orina del mismo animal a modo de bendición, tanto en el cuerpo de los asistentes como en el altar, en fin una misa negra en toda la regla.
Todo fue muy rápido y en un abrir y cerrar de ojos ya era un miembro activo de una secta satánica y las cosas que hice por aquellos tiempos están grabada a fuego en mi mente como ridiculizar la ceremonia religiosa cristiana, profanar la hostia consagrada pisoteándola, mezclándola con drogas o siendo parte de actos sexuales, orgías todo el tiempo y era común que me practicara la sodomía, generalmente me drogaba para esto, comer excremento y tomar orina de humanos, sacrificio de animales y todo tipo de blasfemia como destruir cruces, quemar Biblia y escupir crucifijos y otra cosas que me las reservo.
No tarde mucho en tocar fondo, despertaba desnudo en cementerios con el cuerpo cubierto de sangre y sin poder recordar nada, empecé a robar para poder conseguir mas droga y cuando no había me drogaba con lo que fuera, alcohol de farmacia, pegamento y demás basura.
Me llene de enfermedades sexuales ya que durante las orgías no usaba protección. El día que me entere fue el mismo día que decidí terminar con mi vida pero fue un intento fallido, el cual me llevo a al hospital y una vez recuperado a la cárcel porque ya era un fugitivo.
En la cárcel las cosas fuero duras, fui victima de agresiones y abusos sexuales y de nuevo intente suicidarme y de nuevo no tuve éxito. En esa ocasión mientras estaba en coma algo cambio en mi, no se como explicarlo pero tuve sueños muy extraños y una sensación de felicidad me embargaba, nunca había sentido eso, soñaba con el cielo, con Dios, con Jesús.
Cuando desperté me entere que una señora estuvo todo el tiempo a mi lado leyendo la palabra del señor, no le di mayor importación y así paso una semana hasta que me entere que ella estaba por ahí y la mande a llamar, no sabia porque pero una fuerza muy superior a mi quería saber mas. Ella fue con migo y estuvimos charlado un rato de cosas triviales, me regalo una Biblia y se despido.
Al día siguiente tome la Biblia para ojearla de manera burlona pero algo tomo mi atención así que me puse a leer. Al cabo de un rato volví a tener esa sensación, sentí como un fuego dentro de mi y de nuevo esa sensación de paz, fue algo muy fuerte y en ese momento me caí de rodillas y llorando a pedir perdón al señor, lo vi todo muy claro, a pesar de mis pecados el señor siempre estuvo a mi lado protegiéndome porque el me tenia un propósito.
Hoy soy una persona nueva, dedicado a las cosas de señor y dispuesto enmendar las cosas
aun me falta mucho por aprender porque fui criados por personas ateas y solo conocí al señor hace pocos años
y bien, esa la historia de como el poder de dios me saco del mismo infierno
saludos y que el señor los bendiga.
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