UNA MESA EN EL DESIERTO
Watchman Nee
Vosotros, que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe. 1 Pedro 1:5.
Hay una condición ligada al poder guardador de Dios. Somos guardados mediante la fe. Si no confiamos en El, no puede guardarnos. Para experimentar la seguridad de su cuidado, debemos creer de todo corazón en sus promesas. Si entretenemos dudas de nuestra seguridad frente a la tentación, ¿no estamos desacreditando su capacidad para guardarnos? No somos nosotros los que tenemos que hacer frente a las argucias de Satanás. Al despertar cada mañana deberíamos decirle: “Te agradezco por guardarme en el día de ayer. No sé qué tentaciones me pueden acaecer hoy, ni cómo las venceré, pero confío nuevamente en que tú me guardarás”. Apóyate totalmente en El, el Dios de poder. Entonces no importa que tan imprevistos sean los dardos de fuego del enemigo, algo maravilloso los rechaza. Es el escudo de nuestra fe.
Watchman Nee
Vosotros, que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe. 1 Pedro 1:5.
Hay una condición ligada al poder guardador de Dios. Somos guardados mediante la fe. Si no confiamos en El, no puede guardarnos. Para experimentar la seguridad de su cuidado, debemos creer de todo corazón en sus promesas. Si entretenemos dudas de nuestra seguridad frente a la tentación, ¿no estamos desacreditando su capacidad para guardarnos? No somos nosotros los que tenemos que hacer frente a las argucias de Satanás. Al despertar cada mañana deberíamos decirle: “Te agradezco por guardarme en el día de ayer. No sé qué tentaciones me pueden acaecer hoy, ni cómo las venceré, pero confío nuevamente en que tú me guardarás”. Apóyate totalmente en El, el Dios de poder. Entonces no importa que tan imprevistos sean los dardos de fuego del enemigo, algo maravilloso los rechaza. Es el escudo de nuestra fe.