Me despido de ustedes, me despido de vosotros.
Queridos foristas, me despido de vosotros. “¡Vete con Dios!” , dirán algunos;“para lo que has traído, bastante llevas” , dirán otros.
Y es cierto que es poco lo que he traído; solamente lo que he creído que era objetividad desde una manera de ver la vida sin el lastre (que nadie se me ofenda, que lastre también es algo bueno, y si no, que se lo pregunten a los marineros) de la religión, pero no es menos cierto que me llevo mucho. De verdad que he aprendido mucho, sobre todo he aprendido a distinguir el trigo de la cizaña y a distinguir a los sembradores de trigo de los sembradores de cizaña.
Me despido de foristas que me han hecho pensar, como ha sido Josep Catalá, (mi entrañable Catalá) cuyas palabras me calaron muy hondo; el vehemente Tobi con quien llegué a discutir en latín; Maripaz, que en más de una ocasión me ha llamado a la mesura; Bart, que ve el mundo por un agujero (o por una pantalla de internet), Modri... y otros que no quiero mencionar de los que yo esperaba algo más y me inundaron la bandeja de entrada con propaganda (aviso por si me leen: va directamente a correo no deseado)... De todos me llevo algo: abnegación, comprensión, admiración, intolerancia, inocencia... y la satisfacción de haber dado mi parecer en cada momento de lo que sinceramente opino de los temas en los que podía opinar.
Mi parecer lo he dado humildemente desde mi posición de doctor en Derecho unas veces, de licenciado en Ciencias Políticas otras, incluso desde mi diplomatura en Ciencias de la Educación (“profe, profe, ellos empezaron” ¿se acuerdan? ¿os acordáis?), y siempre, siempre, desde mi condición de hombre libre que ha hablado ora de lo que ha estudiado, ora de lo que ha vivido. Bueno, no siempre. Reconozco que en algunas ocasiones me he equivocado, se me ha corregido y lo he admitido. Errar es de hombres, rectificar es de sabios y perseverar en el error es de tontos. Otras veces ha querido alguien llevarme a su punto de vista, punto de vista mutilado porque no conoce ni la mínima parte de la realidad. Y a ese huerto ni he entrado ni he querido entrar. Ni entraré.
¿A qué viene esta milonga que estoy colocando? Solamente para hacer ver que cada uno es diferente de los demás y que, si aparentemente todos tenéis un nexo de unión, ese elemento es precisamente el que os separa. Por ejemplo, el forista que hallaba placer en llamarme insanamente racista o en llamarme “listillo megaprogre” no comprende la realidad porque solamene la ve por el agujerillo de pantalla de internet y su particular interpretación de la biblia (Bart, ¿te mortifica mucho sentirte comparado con Hitler? ¿Te has dado por aludido ante la palabra fanático? ¿Lo hacías para mortificarme?. Quien se pica, ajos mastica y donde las dan las toman. Pronto verás que esos gigantes apocalípticos solamente son molinos. Pero al buen callar llaman Sancho) ; los que se pasan la vida denostando a los contrarios (católicos-evangélicos / evangélicos-católicos) se ven separados entre sí precisamente por lo que debería de unirles.
Yo me voy; no creo que vuelva por el foro, pero nunca cierro definitivamente la puerta en ningún sitio, de hecho, aún participo de vez en cuando en foros judíos (positivamente, por supuesto, no como le gustaría a algún malpensado). Pero me parecería de pésimo gusto hacerlo sin despedirme. Despedirme diciéndoos que, definitivamente, sigo sin conocer a Dios (tal vez tampoco conozco al Hombre), pero también despedirme diciéndoos que si Dios existe (ya sé que me vais a decir que sí, que existe) estoy tranquilo porque Él sí que me conoce a mí, que ahora sé muy bien que tuvo hambre y le di de comer; tuvo sed y le di de beber; fue inmigrante sin papeles y le recogí; estuvo desnudo y le vestí; enfermo y en la cárcel y le visité, y que nunca, nunca, nunca, le miré si llevaba un turbante árabe o un solideo judío. Solamente os pido en mi despedida que, puesto que ya tenéis la Fe, tengáis también la Caridad (o si lo preferís, la Justicia) de saber tratar a vuestros semejantes como los seres humanos que son, tal vez creados del mismo barro que vosotros mismos.
Y ya de paso, quisiera pedir a todos los foristas una oración.
Quisiera pediros que rogarais por los países que sufren a causa de la guerra, la guerrilla, la revolución, la contrarrevolución, el terrorismo, el contraterrorismo, la invasión y la violencia, para que encuentren el camino de la concordia y la paz. No miréis las causas de la violencia, mirad los sufrimientos de los ciudadanos que la padecen, de los niños, de los manipulados por los poderosos y pedid a Dios que les reconcilie independientemente que sean hijos de Sem, de Cam o de Jaffet. Y ya que tanto parece preocupar en este foro, os ruego oraciones para que la sociedad farisaica y algún forista intransigente en concreto se reconcilien con homosexuales, lesbianas, travestidos, musulmanes, comunistas y rameras. A fin de cuentas, éstas últimas van a preceder a más de uno y a más de dos en el reino de los cielos. Y todos han sido hechos a imagen y semejanza de Dios. ¿O no?.
Saludos cordiales y hasta siempre.
Yelo.
Queridos foristas, me despido de vosotros. “¡Vete con Dios!” , dirán algunos;“para lo que has traído, bastante llevas” , dirán otros.
Y es cierto que es poco lo que he traído; solamente lo que he creído que era objetividad desde una manera de ver la vida sin el lastre (que nadie se me ofenda, que lastre también es algo bueno, y si no, que se lo pregunten a los marineros) de la religión, pero no es menos cierto que me llevo mucho. De verdad que he aprendido mucho, sobre todo he aprendido a distinguir el trigo de la cizaña y a distinguir a los sembradores de trigo de los sembradores de cizaña.
Me despido de foristas que me han hecho pensar, como ha sido Josep Catalá, (mi entrañable Catalá) cuyas palabras me calaron muy hondo; el vehemente Tobi con quien llegué a discutir en latín; Maripaz, que en más de una ocasión me ha llamado a la mesura; Bart, que ve el mundo por un agujero (o por una pantalla de internet), Modri... y otros que no quiero mencionar de los que yo esperaba algo más y me inundaron la bandeja de entrada con propaganda (aviso por si me leen: va directamente a correo no deseado)... De todos me llevo algo: abnegación, comprensión, admiración, intolerancia, inocencia... y la satisfacción de haber dado mi parecer en cada momento de lo que sinceramente opino de los temas en los que podía opinar.
Mi parecer lo he dado humildemente desde mi posición de doctor en Derecho unas veces, de licenciado en Ciencias Políticas otras, incluso desde mi diplomatura en Ciencias de la Educación (“profe, profe, ellos empezaron” ¿se acuerdan? ¿os acordáis?), y siempre, siempre, desde mi condición de hombre libre que ha hablado ora de lo que ha estudiado, ora de lo que ha vivido. Bueno, no siempre. Reconozco que en algunas ocasiones me he equivocado, se me ha corregido y lo he admitido. Errar es de hombres, rectificar es de sabios y perseverar en el error es de tontos. Otras veces ha querido alguien llevarme a su punto de vista, punto de vista mutilado porque no conoce ni la mínima parte de la realidad. Y a ese huerto ni he entrado ni he querido entrar. Ni entraré.
¿A qué viene esta milonga que estoy colocando? Solamente para hacer ver que cada uno es diferente de los demás y que, si aparentemente todos tenéis un nexo de unión, ese elemento es precisamente el que os separa. Por ejemplo, el forista que hallaba placer en llamarme insanamente racista o en llamarme “listillo megaprogre” no comprende la realidad porque solamene la ve por el agujerillo de pantalla de internet y su particular interpretación de la biblia (Bart, ¿te mortifica mucho sentirte comparado con Hitler? ¿Te has dado por aludido ante la palabra fanático? ¿Lo hacías para mortificarme?. Quien se pica, ajos mastica y donde las dan las toman. Pronto verás que esos gigantes apocalípticos solamente son molinos. Pero al buen callar llaman Sancho) ; los que se pasan la vida denostando a los contrarios (católicos-evangélicos / evangélicos-católicos) se ven separados entre sí precisamente por lo que debería de unirles.
Yo me voy; no creo que vuelva por el foro, pero nunca cierro definitivamente la puerta en ningún sitio, de hecho, aún participo de vez en cuando en foros judíos (positivamente, por supuesto, no como le gustaría a algún malpensado). Pero me parecería de pésimo gusto hacerlo sin despedirme. Despedirme diciéndoos que, definitivamente, sigo sin conocer a Dios (tal vez tampoco conozco al Hombre), pero también despedirme diciéndoos que si Dios existe (ya sé que me vais a decir que sí, que existe) estoy tranquilo porque Él sí que me conoce a mí, que ahora sé muy bien que tuvo hambre y le di de comer; tuvo sed y le di de beber; fue inmigrante sin papeles y le recogí; estuvo desnudo y le vestí; enfermo y en la cárcel y le visité, y que nunca, nunca, nunca, le miré si llevaba un turbante árabe o un solideo judío. Solamente os pido en mi despedida que, puesto que ya tenéis la Fe, tengáis también la Caridad (o si lo preferís, la Justicia) de saber tratar a vuestros semejantes como los seres humanos que son, tal vez creados del mismo barro que vosotros mismos.
Y ya de paso, quisiera pedir a todos los foristas una oración.
Quisiera pediros que rogarais por los países que sufren a causa de la guerra, la guerrilla, la revolución, la contrarrevolución, el terrorismo, el contraterrorismo, la invasión y la violencia, para que encuentren el camino de la concordia y la paz. No miréis las causas de la violencia, mirad los sufrimientos de los ciudadanos que la padecen, de los niños, de los manipulados por los poderosos y pedid a Dios que les reconcilie independientemente que sean hijos de Sem, de Cam o de Jaffet. Y ya que tanto parece preocupar en este foro, os ruego oraciones para que la sociedad farisaica y algún forista intransigente en concreto se reconcilien con homosexuales, lesbianas, travestidos, musulmanes, comunistas y rameras. A fin de cuentas, éstas últimas van a preceder a más de uno y a más de dos en el reino de los cielos. Y todos han sido hechos a imagen y semejanza de Dios. ¿O no?.
Saludos cordiales y hasta siempre.
Yelo.