Martín Lutero pretendía UNA SOLA IGLESIA VISIBLE?

18 Junio 2001
709
0
Quisiera que tanto luteranos (si es que hay alguno en el foro) como no luteranos me contesten: ¿Lutero tenía la intención de que exista UNA SOLA Iglesia visible y católica (es decir universal)? ¿todas las denominaciones –iglesias reformadas- parten de Calvino?


Les transcribo un artículo por el cual se llegan a algunas conclusiones a saber:

1 – La reforma de la Iglesia fue iniciada por Lutero, quien tenía como fín reformar la Iglesia, que ésta siga siendo UNA y no la división protestante que hay ahora con miles de sectas y denominaciones.
2 – Las diferentes sectas y denominaciones protestantes comenzaron a partir de Calvino. Digamos que, según el pastor luterano que escribe la nota, las iglesias reformadas (aún las de doctrina arminiana) parten todas del tronco Calvino, aunque quedan pocas que practiquen el calvinismo puro ( doctrina de la predestinación etc).
3 – Según el artículo, (aclaro NO LO ESTOY AFIRMANDO YO) la iglesia luterana es la iglesia VISIBLE de Cristo, mientras que la iglesia INVISIBLE está conformada por todos los creyentes lavados por la sangre de Cristo independientemente de la denominación.
A propósito de esto último, quisiera que alguien me indique algún versículo bíblico que haga referencia a ésta diferencia: IGLESIA VISIBLE- IGLESIA INVISIBLE.

No afirmo ni niego lo que dice el texto, simplemente lo transcribo y quisiera que los conocedores de la historia de la Reforma lo rebatan o lo confirmen.

Pasemos al texto:




La Reforma Luterana fue seguida por otros hombres en otros países. En Francia y luego Suiza, Juan Calvino fue su principal conductor y referente. El Calvinismo se caracteriza por su racionalismo. Negó las doctrinas bíblicas del Perdón Universal de Dios, rechazó la doctrina Escritural de la Presencia Real de Cristo en la Santa Comunión, exageró paroxísticamente la doctrina de la Elección de Gracia o predestinación, y reinstaló la idea romana del Papado en la “teocracia”, es decir, la Iglesia involucrada con las cuestiones del Estado, por medio de los Consistorios o Consejos Calvinistas, integrados por jefes religiosos y políticos. Las iglesias o comuniones calvinistas son llamadas Iglesias Reformadas. Se han dividido en innumerables denominaciones y originado varias sectas que vieron la luz desde los primeros días, consolidando sus doctrinas en el siglo XIX, ya en los Estados Unidos. Sin embargo, todos estos incontables grupos han perdido las doctrinas originales del Calvinismo, e integran ahora un movimiento con distintos matices que llamamos el Evangelicalismo, cuya expresión se observa en el fraude “ecuménico” del Consejo Mundial de Iglesias. El ecumenismo o unionismo es un movimiento en falso, porque busca “unirse en el desacuerdo”, mientras que Dios llama a unirse cuando hay perfecta identidad en doctrina y práctica. Dios no se agrada de iglesias equivocadas, solamente las tolera, y esto a causa de los verdaderos Cristianos que hay en ellas, y pese a ellas. Hay verdaderos Cristianos en iglesias falsas, en cuanto hay en ellas Palabra de Dios y Sacramentos, y Dios obra objetivamente por esta Palabra y Sacramentos (especialmente el Bautismo).

La Reforma Luterana no llegó a cumplir cabalmente con su vocación
(obviamente esta fue la voluntad de Dios; y la Reforma continúa) en aquellos tiempos por dos hechos objetivos: a) La terrible y sangrienta persecución de la “Santa Inquisición” de la iglesia romana, inspirada en el jesuita Ignacio de Loyola, que recién pudo ser detenida a comienzos del siglo XIX (aunque sigue viviendo bajo el nuevo nombre de “Congregación para la defensa de la fe”), que llevó al martirio y muerte a cientos de miles de fieles evangélicos. En España, por ejemplo, la Inquisición exterminó bárbaramente a la Iglesia Luterana, que tenía dos Congregaciones, en Sevilla y Valladolid, iniciadas por sacerdotes y algunas monjas y laicos que redescubrieron el Evangelio del Nuevo Testamento. 2) El Calvinismo y la Iglesia Reformada, que deformaron los principios fundacionales de la Reforma y la malograron”.

En mi caso personal, por la misericordia de Dios, luego de conocer distintas denominaciones, hallé la Fe Cristiana ortodoxa, es decir, pura en doctrina y práctica, en la Iglesia Evangélica Luterana, donde aparece en forma visible la Iglesia de Cristo, es decir, la Comunión de los santos (o creyentes). Ya ve un primer concepto: la Iglesia Cristiana no es una entidad u organización EXTERNA, ni se confunde con ella. Es invisible, está escondida al mundo y la carne. Dios tiene hijos aún en iglesias erróneas o heterodoxas (a pesar de esas iglesias), en cuanto han retenido la Palabra y los Sacramentos, aún cuando no la prediquen ni los usen de acuerdo a la institución de Cristo. Y estas iglesias siguen siendo iglesias sólo por los verdaderos creyentes que hay en ellas y a quienes sólo Dios conoce, y que confiesan que son salvos solamente por Gracia, a través de la fe sola.

Pero esta Iglesia Invisible aparece en iglesias locales que tienen las “Marcas” (latín: Notae) de la Iglesia: la Palabra y los Sacramentos. En tanto la Iglesia Evangélica Luterana muestre estas Marcas, puede decirse de ella que es la verdadera iglesia visible de Cristo sobre la tierra. Los Luteranos sabemos que tenemos la iglesia del Señor Jesucristo y los Apóstoles, la misma de los padres de la iglesia, de Agustín, la de los Concilios de Nicea y Calcedonia: la iglesia católica, es decir, la que se extiende por toda la tierra y que existió y existe en todo tiempo, se reencontró en la Reforma Luterana de vuelta en el hogar.

Cuando decimos católicos, decimos que la Reforma Luterana, que reencontró y colocó el Evangelio Eterno (Apocalipsis 14: 6; Apocalipsis 10; Daniel 12, 1-3), no negó que la Iglesia, aún en las tinieblas espirituales del Anticristo romano, llena de errores y herejías, perdido el Evangelio, adulterados los sacramentos, seguía estando allí. Como lo dice la Escritura, el Anticristo “se sienta en el templo de Dios” (2 Tes. 2); la iglesia sigue estando allí en tanto la Palabra sigue estando allí, y por lo tanto el Señor puede obrar fe salvadora en algunos, que serán su Iglesia escondida dentro de la iglesia falsa. “Cristo reina aún en medio de Sus enemigos”. La mejor prueba de esto es que el mismo Lutero y los Reformadores fueron hijos de Dios que surgieron de en medio del romanismo.

Somos católicos porque nuestra es la Palabra de Cristo y los Apóstoles, defendida por los Concilios de Nicea y Calcedonia, y nuestra Cristología es la de la pura iglesia de Cristo preservada por Cirilo de Alejandría y Juan de Damasco, de la cual se han apartado y han negado tanto los papistas como los Reformados. Un excelente complemento puede leerse
en el documento de Herman Sasse editado en nuestro sitio web: “El legado de Lutero a la Cristiandad”.


Una recta definición de la Iglesia Evangélica Luterana, es que ella es una en la que se predica el puro Evangelio y se administran los Sacramentos de acuerdo a la institución de Cristo, y donde, junto a sinceros creyentes, también pueden existir hipócritas y farsantes. La Iglesia, como se ha dicho, no puede verse, pero puede ser discernida por medio de las Marcas, los Medios de Gracia.

Otra vez: más allá de cierta opinión corriente, “las iglesias reformadas” no incluyen a los Luteranos, sino que se refieren a las congregaciones y cuerpos eclesiásticos de origen Calvinista. A los Calvinistas se los conoce como Reformados.

Lamentablemente, la Reforma fue malograda por el Calvinismo (y diezmada por la “Santa” Inquisición), con su racionalismo, su negación del alcance universal de la Satisfacción Vicaria de Cristo, su rechazo de la Presencia Real de Cristo en el Sacramento del Altar. Tal como lo advirtió el Dr. Lutero, los errores de los Reformados darían como resultado nuevas e interminables divisiones entre ellos. Hoy por hoy, el calvinismo “clásico” ha prácticamente desaparecido, pero su rama arminiana (por Jacobo Arminio, un teólogo holandés que rechazó las doctrinas básicas de Calvino y que pese a haber sido condenado por el Sínodo de Dort terminó triunfando: sus enseñanzas se difundieron desde el siglo XIX por el ministerio Metodista de los Wesley) sobrevive en distintas denominaciones contemporáneas. El fruto de todo esto se conoce en teología contemporánea como Evangelicalismo, y abarca a las distintas denominaciones “evangélicas”, que lentamente pierden su anterior identidad a manos de los fanáticos carismáticos y neo-pentecostales -un movimiento con raíces católico romanas-, y doctrinas socialistas y seculares.

Lamentablemente, la Iglesia Luterana también pasa por una grave crisis. Como el Antiguo Israel cuando el ministerio de Cristo, nuestro pueblo y su dirigencia se hallan en la apostasía. Una grave crisis de identidad, la dimisión de nuestras Confesiones Luteranas (que incluyen los antiguos Credos Apostólico, Niceno y Atanasiano, la Confesión de Augsburgo, etc.), y, principalmente, la gravísima renuncia al artículo central y principal de la Iglesia de Cristo, la justificación por la fe sola (perdido el cual, dice Lutero, la Iglesia no sólo no queda en pie sino que se derrumba y quedan solamente ruinas), diagnostican que los sínodos y cuerpos mayores que llevan el nombre “Luterano” están corruptos en mayor o menor medida. Con pena vemos como estos “Luteranos” marchan junto a otros y Roma por un camino que llamamos unionismo, disfrazado por la palabra “ecumenismo”, que es una falsedad, porque Dios no quiere una unidad meramente externa, un “acuerdo en el desacuerdo”, sino que la Palabra habla de unidad cuando existe total acuerdo en doctrina y práctica.

Finalmente, gloso que, asimismo, según la Sagrada Escritura, la Iglesia, en el sentido “visible” es toda Congregación de los santos, que llama a un Pastor u Obispo o Presbítero (son sinónimos) para ejercer en nombre de esta iglesia, a quien Cristo ha dado las Llaves del Reino de los Cielos, para ejercer en nombre de todos estas Llaves (las que Cristo, el dueño del Ministerio de la Palabra, ha dado a la Iglesia), el perdón de pecados, la Palabra, y los Sacramentos. Estas Congregaciones pueden (o no) unirse con otras de la misma fe y práctica y formar Sínodos, Federaciones, “Diócesis” o distritos; pero estos cuerpos federativos son coordinadores y consultivos, y no autoritativos en el sentido de coerción. La Iglesia Local es soberana, por medio de la Asamblea de los creyentes que en ella se congrega, presidida espiritualmente por el Pastor u Obispo, que actuará siempre en, con y desde la Palabra de Dios; la Palabra de Dios, Dios mismo en Su Palabra, es el único Señor de esta casa y Él la gobierna con esta Palabra y por medio de ella, de modo que todos los habitantes de esa casa saben que están bien gobernados y que todo lo que hacen es lo que Dios desea que hagan.

Enrique Ivaldi
Trinidad 2002

X
 
Estimada Panchita:


Lutero lo unico que quería era una purificación en el seno de la iglesia catolicorromana, cuya corrupción había alcanzado limites insospechados con la venta de indulgencias.


Fue la misma iglesia catolicorromana la que rechazó reformarse desde la raiz y se produjo una nueva ruptura, como la que ya se había producido con los ortodoxos allá sobre el año 1000.


La Iglesia de Cristo, es visible, en tanto que está conformada por aquellos que hemos sido redimidos por la sangre de Jesucristo y hechos hijos de Dios por adopción, no por poluntad de carne ni sangre, sino de Dios; también es visible porque cada vez que dos o tres estamos reunidos en el Nombre del Señor, Él está en medio nuestro. Ahora bien, es "invisible" en tanto que está formada por los creyentes de todos los siglos, y porque esa unidad es espiritual, pues somos uno en Cristo, y aunque fisicamente no estemos juntos, o tengamos algunas diferencias doctrinales no esenciales para la salvación, estamos unidos por el amor que Dios ha derramado en nuestros corazones.


La escisión que hay en el cristianismo, es el producto del pecado del orgullo espiritual, de pretender tener la verdad, y de imponerla a la fuerza; todo aquel que no piense como el líder o el consejo rector, queda automáticamente fuera (los primeros en hacer esa división son los propios católicos).


Como vemos, es un error MUY GRAVE querer ser los dueños absolutos de la verdad, en vez de arrodillarnos, orar y dejar que sea el Espíritu el que nos una, sin imposiciones, sin reglas, sin forzar, sin interpretaciones torcidas.


En estos foros, es fácil ver como hay hermanos que "imponen" y pretenden ser los "dueños absolutos de la verdad", discutiendo y debatiendo posturas irreconciliables, en temas secundarios, mientras hay necesidad de una exposición clara del "consejo de Dios para la salvación de las almas". :(
 
Hola Panchita de nuevo

Creo que debemos desarrollar temas más reales y actuales. Si nos tiramos por el lado doctrinal, será una historia sin fin. Mira, que algunos, le gusta el tema doctrinal , y por eso se sienten................
 
El logo de Paz todavía no me convence.l Manos cruzadas??????
Pero, cuando la persona se vá contra sus ideas, le pone toda su artillería. Más encima, le pone los monitos. (Reflejo de inmadurez)
 
Originalmente enviado por: Froimovich
El logo de Paz todavía no me convence.l Manos cruzadas??????
Pero, cuando la persona se vá contra sus ideas, le pone toda su artillería. Más encima, le pone los monitos. (Reflejo de inmadurez)



Mi "logo" no está para convencerte, sino que expresa la actitud de mi corazón, que es unir las manos en actitud de oración ante Dios.


Si yo soy inmadura, para el Señor lo soy, y TODO LO HAGO PARA SU GLORIA.


¿Ha venido usted a edificar o a atacarme?
 
Panchita, creo que Maripaz de ha mostrado la realidad cristiana "partiendo" de la reforma luterana.

Yo voy a añadirle algo fundamental:
Cuando Jesús le dijo a Pedro que él, Cristo, edificaría su iglesia le dió a él, a Pedro, (y a nosotros tambien) la clave de la historia futura del cristianismo. Dicha clave es que la Iglesia de Cristo está en CONSTANTE EDIFICACIÓN Eso de la Iglesia UNA es el producto de cambiar EDIFICARE POR FUNDARE Observarás que son muchos los católicos que cambian el término edificaré por fundaré.
No hay tantos miles de sectas y denominaciones. Las que hay realmente son las que Cristo está edificando. Constantemente se estan depurando aquellas doctrinas que nos vienen del romanismo y que los primeros reformadores no supieron pulir puesto que lo que pretendian era REFORMAR y lo que desea el Espíritu de Cristo es edificar. Es aquello del vino nuevo en odres nuevos y arrojar los odres viejos por inservibles.
Cada denominación evangélica enfatiza una doctrina que se enseña en el Nuevo Testamento. Ejemplo: los pentecostales y carismáticos enfatizan los dones del Espíritu y si bien en algunos casos caen en abusos (el abuso no debe eliminar el uso) su doctrina es válida. Los bautistas enfatizan el bautismo por inmersión doctrina tambien claramente enseñada y practicada tanto en el Nuevo Testamento como por la práctica que se alargó como mínimo hasta los siglos XI y XII. Las Iglesias de los Hermanos enfatizan la necesidad de un prebisterio en el orden eclesial, cosa tambien enseñada en el N. T. y practicada en las iglesias primitivas. Unas y otras denominaciones compartimos muchas de estas cosas a pesar de que unas enfatizan más unos aspectos que otros. Pero lo cierto es que Cristo está en todas y mediante su Espíritu sigue edificando a su iglesia hasta que llegue el día en que esta edificación estará culminada y entonces presentará al Padre su obra perfectamente acabada y completa.
A esto el lo llamó las Bodas del Cordero.

Las acusaciones de divisiones solo está en la mente de aquellos que pretenden cambiar FUNDAR por EDIFICAR.

Espero haberte ayudado a entenderlo correctamente.
 
Gracias por sus aportes.

De todos modos, y pese a lo que ustedes dicen, me pregunto si en realidad Lutero tenía la intención de dividir la iglesia en mil pedazos; yo estoy segura que no. Su intención en realidad era UNA sola iglesia (católica, en el sentido de universal). Su verdadera intención era reformar la iglesia de Roma, cosa que el orgullo papal le impidió hacer, eliminando las prácticas paganas como la veneración de imágenes, además de limpiarla de corrupción (indulgencias y demás) y volviendo al cristianismo primitivo.

Yo estoy comenzando a pensar sino hubiese sido mejor que quede una sola reforma y no "reformas de reformas" que dieron lugar a mas y mas iglesias e iglesias que derivan de otras y así sucesivamente...no era esa la intención de la reforma protestante :no: . Es mas, creo que Lutero si se levanta de la tumba y vé la apostasía de las actuales iglesias se vuelve a enterrar...

Yo me pregunto:
1) ¿Es bueno que cualquiera con un poco de carisma se autodenomine pastor, alquile un local y funde una nueva iglesia?
2) ¿Hasta donde sabemos que una doctrina es válida o herética?, ustedes me van a decir "lo sabemos basándonos en la Palabra de Dios" pero basándose en una misma Palabra algunos dicen "tal doctrina es cristiana" y otros dicen "tal doctrina es herética"...y ambos se basan en la Palabra de Dios!!!.
3) ¿Cómo podemos distinguir una secta de una iglesia?, antes se consideraba que -dentro del cristianismo- sectas eran aquellas que negaban las doctrinas básicas (trinidad, divinidad de Cristo etc). Resulta que ahora me vengo a enterar que algunas iglesias, pese a conservar esas doctrinas cristianas básicas son consideradas sectas por otros grupos cristianos...

Todo eso me hace pensar que sería conveniente que exista una unidad doctrinal dentro del protestantismo.
 
Originalmente enviado por: Panchita.
Gracias por sus aportes.

De todos modos, y pese a lo que ustedes dicen, me pregunto si en realidad Lutero tenía la intención de dividir la iglesia en mil pedazos; yo estoy segura que no. Su intención en realidad era UNA sola iglesia (católica, en el sentido de universal). Su verdadera intención era reformar la iglesia de Roma, cosa que el orgullo papal le impidió hacer, eliminando las prácticas paganas como la veneración de imágenes, además de limpiarla de corrupción (indulgencias y demás) y volviendo al cristianismo primitivo.

Yo estoy comenzando a pensar sino hubiese sido mejor que quede una sola reforma y no "reformas de reformas" que dieron lugar a mas y mas iglesias e iglesias que derivan de otras y así sucesivamente...no era esa la intención de la reforma protestante :no: . Es mas, creo que Lutero si se levanta de la tumba y vé la apostasía de las actuales iglesias se vuelve a enterrar...

Yo me pregunto:
1) ¿Es bueno que cualquiera con un poco de carisma se autodenomine pastor, alquile un local y funde una nueva iglesia?
2) ¿Hasta donde sabemos que una doctrina es válida o herética?, ustedes me van a decir "lo sabemos basándonos en la Palabra de Dios" pero basándose en una misma Palabra algunos dicen "tal doctrina es cristiana" y otros dicen "tal doctrina es herética"...y ambos se basan en la Palabra de Dios!!!.
3) ¿Cómo podemos distinguir una secta de una iglesia?, antes se consideraba que -dentro del cristianismo- sectas eran aquellas que negaban las doctrinas básicas (trinidad, divinidad de Cristo etc). Resulta que ahora me vengo a enterar que algunas iglesias, pese a conservar esas doctrinas cristianas básicas son consideradas sectas por otros grupos cristianos...

Todo eso me hace pensar que sería conveniente que exista una unidad doctrinal dentro del protestantismo.



Panchita:

La unidad doctrinal ES IMPOSIBLE, incluso en el catolicismo; pues una cosa es la imposición, y otra las opiniones personales.

Incluso en el cristianismo primitivo se dieron esas diferencias, a pesar de tener la historia reciente y fresca.

El problema está cuando los hombres quieren añadir a la Palabra de Dios, o quieren quitarle.

De todos modos, sabemos que hay cosas "no reveladas" y otras no fáciles de entender, pero ahí es donde hemos de escuchar las palabras de Pablo:

Porque es preciso que entre vosotros haya disensiones, para que se hagan manifiestos entre vosotros los que son aprobados. (1 Cor 11:19)

Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.
Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros.
(Gal 5:22-26)
 
Así, que, tú, Panchita, lo que deseas o lo que te parece adecuado es la uniformidad Bien, es tu forma de pensar y que todos sean tambien de un mismo pensar.
Como bien dice Maripaz eso no existe ni siquiera entre los católicos. Millares de ellos estan rechazando este ser de un mismo pensar guiado y promovido por el Vaticano con su papa y curia.
Si lees con atención todo el Nuevo Testamento te darás cuenta que no hay un solo texto que abone eso de un mismo pensar. Lo que si enseña Pablo es que seamos de un MISMO SENTIR y eso es una apelación al amor que debe presidir primordialmente en todo cristiano. Para mi no hay diferencias en el amor entre los creyentes de diversas denominaciones. Todos formamos el Cuerpo de Cristo y todos le aceptamos por Cabeza de nuestras iglesias. Esta es la auténtica UNIDAD y no las falsas uniformidades de aquellos que dejan de ser iglesias para convertirse en Instituciones. Cristo edifica iglesias y no funda instirtuciones.
Así, pues, no es ni debe ser aquello que a ti te pueda gustar sino lo que le gusta a Cristo.
Te voy a hacer una reflexión. La fe es un riesgo, es como una salto en el vacio, y los hay que no desean correr este riesgo. Prefieren el ser arropados por una dogmática que les cubra de todo riesgo, pero no olvidemos lo que Jesús dijo a sus discípulos:
"Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan. Mat- 11:12
Ve tomando nota, Panchita
 
Panchita . Un mismo " pensar " y acruar , solo lo vemos presente en dictaduras totalitarias y en religiones dirigidas por iluminados , pero es solo una falsa apariencias .

No confundas una condiciòn robòtica y no humana libre . Con un mismo sentir , o reconocer la perfecta palabra y soberanìa de Dios .

Ni siquiera madre e hijo , cuando disfrutan de libertad , estaran de acuerdo en todo . .

Jamàs entenderè como alguien puede confundir la libertad de los hijos de Dios , con un descuartizamiento de la iglesia .

Lutero fuè solo un catòlico reformador .
 
Panchita:



La "idea" de esa "aparente unidad" es solo el embrión del gran monstruo que logrará que todos piensen igual : el "anticristo".


Solo el Espíritu Santo, solo el Poder de Dios y Su Amor, es capaz de unir con lazos irrompibles, lazos espirituales a los que pertenecemos a la gran familia de Dios, esa es la unidad en el Espíritu, la que produce Dios, NO EL HOMBRE
 
Estimados Tobi, Maripaz y Elisa:

Gracias por sus aportes.

Me han sido de mucha edificación.

Dios los bendiga grandiosamente.


:beso: :beso: :beso:
 
sALUDOS PANCHITA

sALUDOS PANCHITA

Hola Panchita, me alegro de poder leerte.

No es mi ánimo polemizar, no es edificante, ni difamar ó calumniar a nadie; sólo me atrevo a sugerirte, en mi ignorancia, que estudies profúndamente y medites bajo oración en el siguiente texto y en su contexto de la carta a los Efesios:



Efesios 4:1-6 ( Nueva Versión Internacional (NVI))


1 Por eso yo, que estoy preso por la causa del Señor, les ruego que vivan de una manera digna del llamamiento que han recibido,
2 siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor.
3 Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz.
4 Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también fueron llamados a una sola esperanza;
5 un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo;
6 un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos y por medio de todos y en todos.





Hasta cuando Dios lo permita.

APELES.