Unas clases de religión no será la solución estimada Lucía, la solución es que cada uno se arrepienta de sus malas acciones, reconozcan sus culpas y si usted es creyente y su esposo, entonces le imponen las manos para que reciban el Espíritu Santo y así sus vidas serán transformadas y se perdonarán mutuamente, pero es cuestión de fe y de paciencia para que Dios toque los corazones.Hola, tengo dos hijos y simplemente no se llevan bien. Las clases de religión podrían ayudar?