Hijos de un matrimonio anterior de José[editar]
Para defender el dogma de la virginidad de María, madre de Jesús, antes y después del parto,32 surgió desde fecha relativamente temprana en los autores cristianos la idea de que los «hermanos de Jesús» mencionados en el Nuevo Testamento eran en realidad hijos de un matrimonio anterior de José de Nazaret. Eran, por tanto, hijos biológicos de José, pero no de María, quien habría permanecido virgen hasta su muerte. Desde el punto de vista cristiano, ya que Jesús no fue en realidad hijo biológico de José, sino solo de María, estos hermanos lo habrían sido solo desde el punto de vista legal, como hijos de José, pero no tendrían ningún vínculo de parentesco real con Jesús. Epifanio de Salamis en su obra Panarion menciona que José fue padre de Santiago y de sus tres hermanos (José, Simeón, Judá) y dos hermanas (una Salomé y una María)33 o (una Salomé y una Ana)34 con Santiago siendo el hermano mayor. Santiago y sus hermanos no eran hijos de María, sino hijos de José de un matrimonio anterior. Después de la muerte de la primera esposa de José, muchos años después, cuando tenía ochenta años, "tomó a María (madre de Jesús)". Según Epifanio, las Escrituras los llaman "hermanos del Señor" para confundir a sus oponentes.3536La idea, sin embargo, es bastante más antigua. Se remonta al menos al siglo II. Está presente ya en un evangelio apócrifo conocido como Protoevangelio de Santiago, en el que se defiende la virginidad de María, antes y después del parto y afirma que José era viudo, con hijos, en el momento en que María le fue confiada a su cuidado.37 También se encuentra en otros evangelios apócrifos del siglo II, como el Evangelio de la infancia de Tomás. Orígenes menciona un Evangelio de Pedro (no está claro si se trata del mismo Evangelio de Pedro del que han llegado hasta nosotros algunos fragmentos), según el cual «los hermanos de Jesús serían los hijos de José, nacidos de una primera mujer que él habría tenido antes de María».38
El libro apócrifo La Historia de José el Carpintero, escrito en el siglo V y enmarcado como una biografía de José dictada por Jesús, describe cómo José tuvo una esposa antes de María con la que tuvo seis vástagos, cuatro hijos y dos hijas. Los nombres de los hijos eran Judas, Justo, Santiago y Simón, y los de las hijas eran Asia y Lidia. Según ese relato, los llamados hermanos de Jesús serían hijos de José de un matrimonio anterior.39
La Enciclopedia Católica, citando los textos contenidos en los libros apócrifos, escribe que José tuvo seis hijos (2 mujeres y 4 hombres) con un matrimonio anterior a María, quien al quedar viudo desposaría a María:
El Evangelio del pseudo-Mateo, que probablemente fue escrito en el siglo VII, establece que los hermanos de Jesús fueron hijos de un matrimonio anterior de José.Cuando contaba con cuarenta años de edad, José desposó a una mujer llamada Melcha o Escha para algunos, Salomé para otros, con quien convivió cuarenta y nueve años y con quien tuvo seis chicos, dos hijas y cuatro hijos, el menor de los cuales fue Santiago (el Menor, llamado “el hermano del Señor”). Un año después de la muerte de su esposa, cuando los sacerdotes anunciaron por toda la Judea que ellos deseaban encontrar en la tribu de Judá algún hombre respetable para desposar a María, de entonces doce a catorce años de edad, José, quien ya tenía en dicho momento noventa años, fue a Jerusalén entre los candidatos, un milagro manifestó la elección de José realizada por Dios, y dos años después la Anunciación tuvo lugar.40
Esta es la posición tradicional en las iglesias orientales, y especialmente en la Iglesia ortodoxa. Desde el punto de vista filológico, es una interpretación posible, ya que, ciertamente, el término griego para «hermano» podía significar también «medio hermano», es decir, persona que, con respecto a la otra, tiene solo un progenitor común. En Marcos, y correspondientes, se usa el término para hacer referencia a dos medio hermanos, Antipas y Filipo, que solo tenían un progenitor en común, el rey Herodes I el Grande.José comenzó a hablar con timidez, diciendo: Soy un hombre viejo, y tengo hijos; ¿Por qué me entregan esta jovencita, que es más joven que mis nietos? (...) Y en cierto día, José llamó a su hijo primogénito, Santiago, y lo envió al huerto a recoger verduras (...) Y José, que había venido a una fiesta con sus hijos, Santiago, José, Judas, y Simeón y sus dos hijas, también asistía Jesús, con María, su madre, junto con su hermana María de Cleofás.41
Primos de Jesús[editar]
La interpretación de que los hermanos de Jesús citados en el Nuevo Testamento son en realidad sus primos es bastante tardía. Su principal defensor fue, ya en el siglo IV, San Jerónimo, en su obra Adversus Helvidium (Contra Helvidio),42 que tiene una intención apologética: se trata de refutar la opinión de un autor llamado Helvidio, quien citando a Tertuliano, afirma que los hermanos de Jesús eran hijos biológicos de José y de María. Jerónimo responde que Tertuliano "no pertenece a la Iglesia". Junto con Helvidio, esta enseñanza fue rechazada por Tertuliano y Joviniano, pero defendida por Ambrosio de Milán y Agustín de Hipona.43 Jerónimo centra su argumentación en el uso que del término adelphos se hace en la primera traducción al griego de la Septuaginta, aduciendo varios ejemplos en que el término adelphos se utiliza para designar relaciones entre tío y sobrino (Abraham y Lot; Jacob y Labán en Génesis), o entre primos (1 Crónicas). Este último es el único caso, en toda la Biblia, en que el término se utiliza, fuera de toda duda, para expresar una relación entre primos.44 Está claro, en cualquier caso, que no es usual, aunque tampoco ausente el empleo de la palabra adelphos con el significado de primo en la traducción griega del Antiguo Testamento,45 por lo que esta interpretación, común hasta hoy en medios católicos,46 resulta improbable para algunos estudiosos contemporáneos, entre los que se encuentra John P. Meier.47484950Jerónimo también argumentó que estos adelphos eran hijos de la hermana de María, María de Cleofás.1251 El Diccionario Oxford de la Iglesia Cristiana menciona que un erudito moderno, a quien no identifica, ha propuesto que estos adelphos eran hijos de Cleofás (el hermano de José según Hegesipo) y de María, la esposa de Cleofás (no necesariamente refiriéndose a la hermana de la madre de Jesús).12
Según un fragmento atribuido a la obra Exposición de los Dichos del Señor del Padre Apostólico Papías de Hierápolis, quien vivió alrededor del año 70-163 d.C., "María la esposa de Cleofás o Alfeo" sería la madre de Santiago el Justo, Simón, Judas (identificado como Judas el Apóstol) y José.52 El teólogo anglicano J.B. Lightfoot descartaría la evidencia de Papías como espuria, ya que la cita pertenecía en realidad a su homónimo Papías de Lombardía, procedente de su Elementarium Doctrinae Rudimentum, del siglo XI.53
Esta es la posición históricamente predominante en la tradición católica y cuenta con algunos defensores en la actualidad,545518 entre los que se cuentan los especialistas que integran la Escuela bíblica y arqueológica francesa de Jerusalén.56
Ausencia de los hermanos de Jesús[editar]
Hay algunos eventos en las Escrituras donde no se muestran los hermanos o hermanas de Jesús, por ejemplo, cuando Jesús se perdió en el templo y durante su crucifixión. Esto se argumenta para apoyar la opinión de que los "hermanos" de Jesús no son hermanos de sangre, aunque algunos lo rechazan.[cita requerida]Lucas 2: 41–51 informa de la visita de María, José y Jesús al templo de Jerusalén cuando Jesús tenía 12 años, pero no menciona a ningún hermano. Robert Eisenman cree que Lucas trató de minimizar la importancia de la familia de Jesús por cualquier medio posible, eliminando a Santiago y los hermanos de Jesús del registro del Evangelio.57 Karl Keating argumenta que María y José se apresuraron sin dudarlo a regresar directamente a Jerusalén cuando se dieron cuenta de que Jesús estaba perdido, lo que seguramente habrían pensado dos veces antes de hacerlo si hubiera otros niños (hermanos de Jesús) que cuidar.58
El Evangelio de Juan registra los dichos de Jesús en la cruz, es decir, el par de mandatos "Mujer, ahí tienes a tu hijo". y "¡Ahí tienes a tu madre!" (Juan 19: 26-27), luego dice "y desde aquella hora el discípulo la recibió en su propia casa". Desde la época de los Padres de la Iglesia, esta afirmación se ha utilizado para razonar que después de la muerte de Jesús no hubo otros hijos biológicos que cuidaran de María, y que tuvo que ser confiada al discípulo Juan.596061 Constantine Zalalas argumenta que habría sido contra la costumbre judía que Jesús entregara a su madre al cuidado del discípulo si María tuviese otros hijos vivos, porque el hijo mayor siempre asume la responsabilidad de su madre.62 Karl Keating dice: "Es difícil imaginar por qué Jesús hubiera desatendido los lazos familiares y hubiera hecho esta provisión para su Madre si estos cuatro [Santiago, José, Simón, Judas] fueran también sus hijos".58 El papa Juan Pablo II también dice el mandato "¡He ahí a tu hijo!" fue la encomienda del discípulo a María para llenar el vacío maternal dejado por la muerte de su único hijo en la cruz.63