“Una reflexión junto al Camaleón”.Salmo 139:15 (Reina Valera, 1960): 15 No fue encubierto de ti mi cuerpo, Bien que enoculto fui formado, Yentretejido en lo más profundo de la tierra.Muchas personas en este planeta no han tenido la oportunidad de gozar engran manera del amor de sus padres. Quizás la vida hogareña fue rota ofracturada desde los más tempranos recuerdos. Y si vemos el asunto desde unaóptica humana, quizás piense o pensemos que llegó en un momento inapropiado eincómodo en la vida de sus padres donde no pudo experimentar la seguridad deuna madre fiel y un Padre que instalaron fe en su corazón. Al pensar hacia losaños en que usted crecía, se da cuenta de que no tiene mucho que decir. Pero apesar de todas estas situaciones que la vida nos impone, hay esperanza, lo queno podemos hacer es escapar de ellas como todo buen cobarde hace. Debe saberque hay un Dios en los cielos que se interesa por usted, un Dios justo que le dejoun camino visto ante todos los hombres y ese camino es Cristo cuyo camino aseguir es el mejor modo de vivir. Medite hoy, tal vez haya llegado en un hogar que sufría estrechezeconómica, tal vez haya conocido quebrantamiento, heridas e inseguridad desde susprimeros días, pero jamás piense que fue un accidente, no al contrario, Diosnos tiene un plan infinito para cada uno de nosotros. Piense en las palabrasdel salmista mencionadas donde muestran que Dios, nuestro Padre Eterno valora,se alegra que un ser mortal formado desde lo oculto de un vientre y desde elmás profundo de la tierra decida someterse para siempre a su voluntad. No hay nada que le podamos dar a Dios, lo quesi podemos darle es nuestro servicio espiritual. La afectuosa dedicación de la voluntad humanaa hacer la voluntad de Jehová Dios por medio de Cristo el regalo más selectoque el hombre puede hacer a Dios; en efecto, tal consagración de la voluntad dela criatura constituye la única dádiva posible de verdadero valor que el hombrepuede hacer con Dios. . De esta manera seremos como el “el hombre de Dios del (Salmo 1), un “hombre de Dios y para con Dios por laeternidad”. Salmo 1:2–3 (Reina Valera, 1960) 2 Sino que enla ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. 3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará.
“LAMANO DE DIOS EN SU VIDA”