Ya sea su palabra final o no, vale la pena aclarar
Ya sea su palabra final o no, vale la pena aclarar
Originalmente enviado por: Rob73
El tema de la Homosexualidad y la Biblia... creo que esta bien claro... todos piensan que es pecado, esta prohibido por Jehova, asi como esta establecido en Levitico... de la misma manera que esta prohibido usar ropas de dos fibras diferentes, o tener dos tipos de plantas diferentes en nuestro jardin.
Querido Rob:
Ante todo quiero que sepas que no me anima ninguna hostilidad contra los homosexuales; creo firmemente que la oferta de salvación se extiende a todos los pecadores y no excluye a nadie que sinceramente se arrepiente y acepta a Jesucristo.
Dicho esto, debo añadir que, por tus palabras, no creo que tengas claro en absoluto el "tema de la homosexualidad y la Biblia".
1. Es cierto que está prohibido en Levítico, pero no es una falta comparable a emplear lana y lino, la cual simplemente se proscribe (Deuteronomio 22:11) con la inmoralidad sexual que, en el caso de incesto y homosexualidad, se llama
abominación y se penaba con la muerte (Levítico 18).
2. Igualmente importante es que la proscripción de prácticas homosexuales se reitera explícitamente en el Nuevo Testamento, por lo cual indubitablemente se aplica a los miembros de la Iglesia de Cristo: Romanos 1:26-27; 1 Corintios 6:9; 1 Timoteo 1:10.
En conclusión, no es "de la misma manera". La impureza sexual, que incluye la homosexualidad entre otras prácticas prohibidas como incesto o adulterio, es un pecado grave.
Yo no voy a ir a decir a un gay, CAMBIA DE VIDA O SINO NO VAS A SER SALVO, ya que si esa palabra no viene de Dios al corazon del gay, el no va a cambiar. Si el acepta a Cristo, y Dios no pone conviccion de pecado en su vida, y el sigue siendo bendecido por Dios, pues bien, es un trato de Dios con el gay.
Yo creo que no solamente a los homosexuales, sino a todos los inconversos, debemos proclamarles la nueva vida en Cristo Jesús. El Señor murió no sólo para salvarnos de la pena por el pecado, sino para extirpar el pecado de nuestras vidas: 1 Corintios 6:9-12 dice que los creyentes eran inmorales, idólatras, adúlteros, afeminados, etc., pero fueron santificados. Lo mismo se nos advierte en Gálatas 5:16-25, donde se contrasta el andar por el Espíritu con las obras de la carne. Aceptar a Cristo implica ineludiblemente andar como él anduvo, en santidad. Quien acepta a Cristo acepta su enseñanza y la obedece: Mateo 7: 15-27; Juan 15:14.
Por lo que dice parece que Dios estuviera obligado a hablar
directamente al corazón del homosexual, como si el creyente que predica no pudiese enseñarle con claridad lo que la Palabra de Dios enseña, o como si esta Palabra viva y eficaz careciera de poder. Nosotros somos los embajadores de Dios para la reconciliación de todos, y tenemos la obligación de entregar el mensaje con amor y mansedumbre. Desde luego, luego de que haya tenido la oportunidad de oír, la obra de convicción pertenece al Espíritu de Dios. Pero este hecho no justifica que nos callemos lo que sabemos y resulta vital en el caso en cuestión.
Usted dice: "Si el acepta a Cristo, y Dios no pone conviccion de pecado en su vida, y el sigue siendo bendecido por Dios, pues bien, es un trato de Dios con el gay".
La Biblia dice que todo el que recibe a Cristo recibe su Espíritu (Romanos 8) que nos convence de pecado. De modo que si un homosexual no es redargüido de pecado, de justicia y de juicio cabe dudar si realmente se arrepintió y aceptó a Cristo. Decir que es un asunto de Dios, dejando abierta la posibilidad de que Dios bendiga lo que su Palabra llama "abominación", es una barbaridad.
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Como dije, trabajo en un ministerio para recuperacion de gente gay, y comprobe por mi mismo que mientras la palabra de Dios y la conviccion de pecado no entran en el corazon del individuo, este no cambia ni por mas DISCIPULADO PERSONALIZADO que se le haga.
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Me pregunto qué clase de recuperación se propone su ministerio. Digo esto respetuosamente y no lo tome a mal, pero si no hay convicción de pecado tampoco hay una conversión genuina. Una cosa es que un homosexual convertido a Jesucristo experimente luchas y sufrimiento por su tendencia. Muy otra cosa es que su pecado pueda serle indiferente a Dios.
Sin duda que el discipulado no puede reemplazar la genuina conversión, pero ésta debe ser precedida por una exposición clara de las exigencias del Evangelio. Y si no hay conversión, vano es el discipulado.
Si yo obligo por mi cuenta, o por lo que yo interpreto de lo que dice la Biblia, a un gay a que cambie de vida para ser salvo, entonces estoy actuando en contra de la Gracia de Dios, Es Dios quien tiene que tratar al individuo, no yo, ni ningun pastor de la iglesia.
¿¿¿Cómo lo va a obligar???
En EE.UU. tienen un dicho, "usted puede llevar a un caballo al abrevadero, pero no puede forzarlo a beber". Igualmente, la conversión es un fenómeno
sobrenatural obrado por el Espíritu Santo en el corazón del hombre. Nuestra tarea consiste en humildemente exponer lo que sabemos que es verdad, no en forzar a nadie a aceptarla aún si ello fuera posible.
Insisto en que se limita el accionar de Dios cuando se pretende que Él
deba actuar por una suerte de revelación especial, cuando Su santa voluntad está expuesta en la Palabra que nos ha dado.
Esto me recuerda la historia del creyente que, ante una inundación, estaba persuadido de que Dios lo iba a salvar. Así que permaneció en su casa cuando los bomberos se ofrecieron a llevarlo a un lugar seguro. Al subir las aguas se subió al techo de su casa a esperar que Dios lo salvase. Unos hombres que pasaron en un bote le dijeron que subiera, pero se rehusó porque Dios lo iba a salvar. Cuando estaba con el agua a la cintura, se aproximó un helicóptero de Defensa Civil para rescatarlo, pero por tercera vez rechazó la ayuda.
Finalmente se ahogó. Al llegar al cielo, le reprochó a Dios el no haberlo rescatado. El Señor le respondió:
"Hijo mío, te envié primero los bomberos; luego un bote; y finalmente un helicóptero. ¿Es mi culpa que hayas rechazado obstinadamente toda mi ayuda?"
Dios ya ha hablado y su voluntad para nosotros está expresa en las Escrituras. Es insensato esperar otra revelación particular para hacerle caso.
Además, la persona que se convierte (homosexual o no) no debe "cambiar para ser salvo". En todo caso,
su cambio es una evidencia de que es efectivamente salvo, mientras que la obstinación en el pecado indica lo contrario.
Cristo tuvo un trato muy especial con los pecadores, los amo y los trato mejor que a nadie. En ningun momento les puso condiciones para ser perdonados... y gano millones de almas y lo sigue haciendo hoy en dia.
No, ninguna condición especial para
arrepentirse y creer. Y luego les decía, "
no peques más".
Además, precisamente porque amó a los pecadores hasta llegar a morir por ellos, el Señor fue en extremo claro sobre el horror de la perdición. Nadie en la Biblia habló más de la condenación eterna que Jesús de Nazareth. Y no, como dicen algunos, para sembrar "terror". Advertir del peligro muy real de una eternidad sin Dios es por cierto una obra de amor.
Es triste ver como en nuestras iglesias de hoy dia, si un travesti entra al templo para escuchar la palabra de Dios, la gente de las congregaciones lo hacen sentir como bicho raro... Cuando deberian amarlo y hacer que llegue al Señor... ya el Señor se ocupara de el en su tiempo y a su modo... no queramos hacer la obra del Señor...
Una cosa es que debemos amarlo, y otra cosa es que lo veamos como un bicho raro, ya que no he visto aún ningún travesti que no se vea así.
Lo que debe hacerse es predicarle el Evangelio:
Arrepiéntete y cree en el Señor Jesucristo. Si lo hace, por cierto que el Señor hará la obra. Pero no hablar claro (con respeto y mansedumbre) es endilgarle al Señor una tarea que Él nos encomendó a nosotros.
Lo del abuso espiritual yo lo interprete de esa manera, mas que querer justificar si esta bien o no... si es pecado o no... Aparte, como dijo Cristo... Quien este libre de pecado tire la primera piedra.
Esto lo dijo Cristo a una muchedumbre ansiosa por lapidar a una adúltera. No implica que no debamos ejercer discernimiento espiritual y decir las cosas con claridad.
El abuso espiritual existe en algunas congregaciones, pero lo que el Dr. Truluck llama tal cosa, y también "terrorismo religioso", es nada más ni nada menos que decirle a los homosexuales que deben arrepentirse de su pecado. Por mi parte, abuso es ocultar la verdad y decir "paz, paz" cuando no la hay, engañando a los homosexuales con la falsa creencia de que Dios ha de bendecir su vida sexual desordenada.
Si Dios esta usando al Dr. Truluck para que gente gay llegue al evangelio, lo lea y lo entienda, y sea una via para que El trate personalmente con cada individuo... pues quien soy yo para hablar contra el que esta sirviendo a Dios, ya sea lo este haciendo bien o mal (segun algunos). Para mi es un medio para que los gays se sientan de nuevo atraidos a Dios. Los caminos de Dios son realmente raros... en mi caso el uso unos misioneros mormones para que yo me acerque a El... Y benditos sean los Mormones por eso!
Bien, los hermanos de José le entregaron y Dios transformó el mal que ellos anhelaban en un gran bien; Judas entregó al Señor y entonces Jesús murió en la cruz y nos trajo la salvación. Eso no torna buena la acción de los hermanos, ni en bendito a Judas.
La página del Dr. Truluck es una apología de la sexualidad desviada y un intento de hacerla lícita para los creyentes en Cristo.
Gloria a Dios si un homosexual se convierte a Dios leyendo esa página. Sin embargo, yo tengo muy serias dudas de que esto pueda ocurrir, porque (como ocurre con el mormonismo) , el Dr. Truluck predica un
falso evangelio según el cual la homosexualidad, bisexualidad o transexualidad no son abominaciones al Señor ni obstáculos para la santidad; en otras palabras, que se puede agradar a Dios en todos estos casos.
Como esto es claramente falso, quienes crean acercarse a Dios en estas condiciones en realidad se estarán alejando de Él.
Bendiciones en Cristo,
Jetonius
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y el amor al estilo Cristo, es la mejor herramienta para predicar.
