Una cosa es orar por humildad, y otra muy distinta es vivirla. Nuestro deseo de ser humilde puede llevarnos hacer obras de servicios, pero hay que tener cuidado, porque esto se puede convertir en orgullo en poco tiempo.
Entonces, ¿Cóomo podemos saber si somos verdaderamente humildes?....No podemos saberlo!!!!!. Pero cuándo para servir a los demás es para nosotros como una segunda naturaleza, estamos tratando de alcanzar el ideal que Jesus estableció en Mateo 23. Despuès de señalar que los escribas y friseos siempre estaban buscando poder y posición dijo:<<El que se humilla será enaltecido>>.
Cuándo servir a los demás sale de adentro ahcia afuera, como un verdadero acto de compasión, crecemos en humildad. Pero no lo sabremos. Lo estaremos haciendo naturalmente. De eso se trata la verdadera humildad----
Entonces, ¿Cóomo podemos saber si somos verdaderamente humildes?....No podemos saberlo!!!!!. Pero cuándo para servir a los demás es para nosotros como una segunda naturaleza, estamos tratando de alcanzar el ideal que Jesus estableció en Mateo 23. Despuès de señalar que los escribas y friseos siempre estaban buscando poder y posición dijo:<<El que se humilla será enaltecido>>.
Cuándo servir a los demás sale de adentro ahcia afuera, como un verdadero acto de compasión, crecemos en humildad. Pero no lo sabremos. Lo estaremos haciendo naturalmente. De eso se trata la verdadera humildad----