Hola!
Hace unos 800 años, mas o menos, la inquisición por parte de la jerarquía eclesiastica ( y seguramente de forma oculta, la gubernamental) se embarcó en una cruzada de persecuciones contra los individuos o colectivos que por algún motivo, suponían una amenaza para ellos. Quemaban libros de conocimiento científico para que no fueran accesibles al pueblo, por ser contrarios a sus creencias, evangelios apocrifos, personas...las señalaban como "brujas o brujos" o "poseídas" o "adoradoras del demonio" a sabiendas de que, lo único que había en ellas, era su pensamiento crítico, su poca facilitad para la manipulación, su confianza en lasterapias alternativas de curación, y su criterio personal independiente del sistema religioso de aquella epoca. En tanto, ponían en contra de esas personas a toda una sociedad, para mas tortura si cabe, a través de....EL MIEDO. Manipulando a la población para que creyeran realmente que esas personas eran sus enemigos, cuando en realidad eran las autoridades el verdadero peligro...¿Os suena de algo?
Yo creo realmente que la religión de aquella época, es la ciencia del ahora, puesto que están demostrando que siguen la misma técnica de engaño y manipulación con la población, que realizaban entonces, para desacerse del peligro que pueda desenmarcararles, pero con la denominada " ciencia" que en realidad son postulados, algunos verdaderos, otros falsos impuestos por pura conveniencia y sin ningún tipo de rigor científico a veces, y sin ninguna intención de que constituya ningún "bien para la humanidad". La ciencia de la época de Platón, que vinculaba además del materialismo, la filosofía y la energía del alma, ha dado paso a una ciencia mecanicista casi robótica, por tanto sesgada, porque la una necesita a la otra, para llegar a un conocimiento holistico sobre la vida y nuestro cuerpo. El sistema educativo, incluso en las universidades, tiene la única misión de adoctrinar a las masas, hasta el punto del aburrimiento. Lo sé por propia experiencia.
Solo queda la esperanza de que nos demos cuenta de los errores que cometimos en el pasado, accediendo voluntariamente a nuestra manipulación, y despertemos de esta pesadilla.
Hace unos 800 años, mas o menos, la inquisición por parte de la jerarquía eclesiastica ( y seguramente de forma oculta, la gubernamental) se embarcó en una cruzada de persecuciones contra los individuos o colectivos que por algún motivo, suponían una amenaza para ellos. Quemaban libros de conocimiento científico para que no fueran accesibles al pueblo, por ser contrarios a sus creencias, evangelios apocrifos, personas...las señalaban como "brujas o brujos" o "poseídas" o "adoradoras del demonio" a sabiendas de que, lo único que había en ellas, era su pensamiento crítico, su poca facilitad para la manipulación, su confianza en lasterapias alternativas de curación, y su criterio personal independiente del sistema religioso de aquella epoca. En tanto, ponían en contra de esas personas a toda una sociedad, para mas tortura si cabe, a través de....EL MIEDO. Manipulando a la población para que creyeran realmente que esas personas eran sus enemigos, cuando en realidad eran las autoridades el verdadero peligro...¿Os suena de algo?
Yo creo realmente que la religión de aquella época, es la ciencia del ahora, puesto que están demostrando que siguen la misma técnica de engaño y manipulación con la población, que realizaban entonces, para desacerse del peligro que pueda desenmarcararles, pero con la denominada " ciencia" que en realidad son postulados, algunos verdaderos, otros falsos impuestos por pura conveniencia y sin ningún tipo de rigor científico a veces, y sin ninguna intención de que constituya ningún "bien para la humanidad". La ciencia de la época de Platón, que vinculaba además del materialismo, la filosofía y la energía del alma, ha dado paso a una ciencia mecanicista casi robótica, por tanto sesgada, porque la una necesita a la otra, para llegar a un conocimiento holistico sobre la vida y nuestro cuerpo. El sistema educativo, incluso en las universidades, tiene la única misión de adoctrinar a las masas, hasta el punto del aburrimiento. Lo sé por propia experiencia.
Solo queda la esperanza de que nos demos cuenta de los errores que cometimos en el pasado, accediendo voluntariamente a nuestra manipulación, y despertemos de esta pesadilla.