Bueno, apreciados compañeros, continuamos hablando de la inspiración de la Biblia como palabra de Dios. Comenté anteriormente que hay varios elementos que se combinan para hacer de la Biblia algo muy especial. Citaré varios de ellos: La Biblia fue escrita por unos 40 escritores diferentes en un periodo de unos 1610 años aproximadamente. Por lo que muchos de esos escritores no se conocían entre sí, sin embargo escribieron un tema común a lo largo de su contenido. Aunque muchos alegan que hay contradicciones en la Biblia no obstante cuando uno analiza con más detenimiento el contexto y tiene en cuenta algunos factores esenciales llega a la conclusión de que esas aparentes contradicciones no eran tales. La mayoría de las veces los escritores Bíblicos afirmaban que lo que escribían no provenía de ellos (2 Pedro 1:21) ( (Apocalipsis 21:6), (Habacuc 2:2).
¿Podemos confiar en los escritores de la Biblia?, por supuesto. Muchos de esos escritores mencionaban sus propios errores, sus debilidades, los pecados de su propio pueblo etc… Muchos de ellos fueron perseguidos por dar testimonio de Dios y hasta torturados y ejecutados en muchos casos pero no se amilanaron ni retrajeron de hacer la voluntad de Dios. También escribieron profecías que ningún ser humano puede predecir con éxito, solo Dios está exento de cometer errores. Por ejemplo, sobre Jesús se escribieron más de 300 profecías y todas se cumplieron. La Biblia contiene de hecho más de 1500 profecías, muchas ya han ocurrido, otras se están cumpliendo hoy y otras están por llegar. Retomando las profecías que se cumplieron en Jesús, para los escépticos, esas profecías no se escribieron después de su cumplimiento sino mucho antes y sino lean por favor (Mateo 2:3-6). Pero para aquellos que todavía dudan les mencionaré una profecía extraordinaria que todos pueden comprobar con sus propios ojos su cumplimiento actual, se encuentra en Isaías 13:19,20. Ahí en esencia se dice que Babilonia sería destruida y nunca más sería habitada.
Para aproximadamente el siglo II d.C. Babilonia se convirtió en un yermo desolado. Pero lo curioso del caso es que cerca del año 1978,79 Saddam Hussein intentó idear un macroproyecto que consistía en levantar de nuevo sobre las antiguas ruinas de Babilonia una nueva ciudad y hacerla habitable de nuevo. Pero ¿qué sucedió?, bueno algo sorprendente, Irak le declaró la guerra a Irán en 1980 guerra que duró 8 años por el control de la frontera y diferencias ideológicas que dejarían más de un millón de muertos, por lo que obviamente el proyecto se paralizó. Una vez acabada la guerra, se inició de nuevo ese proyecto pero poco después en enero de 1991 Irak (donde se encuentra la antigua Babilonia) fue invadida por las tropas norteamericanas y lógicamente de nuevo se paralizaron las obras. Pero si todavía había algún halo de esperanza de levantar de nuevo una “nueva Babilonia” este se desvaneció definitivamente en 2003 cuando el presidente del país y principal impulsor del proyecto Saddam Hussein fue apresado y ejecutado por el ejército norteamericano lo que selló para siempre esa idea pomposa puesto que como todos sabemos la actual Irak está destrozada y lo que menos importa ahora a la población e incluso a sus gobernantes es pensar en ese proyecto fallido, eso no es prioritario y posiblemente se deseche para siempre esa idea fastuosa y carísima que en la actuales circunstancias ni siquiera aflora en las mentes iraquies.
Es decir los hombres han intentando sin saberlo ni seguramente proponérselo lograr algo que podría haber hecho fracasar la profecía de la Biblia si finalmente se hubiera levantado sobre las antiguas ruinas de Babilonia una nueva ciudad habitable. Pero la profecía no fracasó, permanece intacta, inalterable lo que demuestra el poder infinito de Dios y que nadie puede impedir su cumplimiento. Bien, otro día mencionaré más detalles asombrosos que contiene la Biblia y que la ponen por encima de cualquier otro libro, pero eso será en otro “capítulo”.
Saludos.
¿Podemos confiar en los escritores de la Biblia?, por supuesto. Muchos de esos escritores mencionaban sus propios errores, sus debilidades, los pecados de su propio pueblo etc… Muchos de ellos fueron perseguidos por dar testimonio de Dios y hasta torturados y ejecutados en muchos casos pero no se amilanaron ni retrajeron de hacer la voluntad de Dios. También escribieron profecías que ningún ser humano puede predecir con éxito, solo Dios está exento de cometer errores. Por ejemplo, sobre Jesús se escribieron más de 300 profecías y todas se cumplieron. La Biblia contiene de hecho más de 1500 profecías, muchas ya han ocurrido, otras se están cumpliendo hoy y otras están por llegar. Retomando las profecías que se cumplieron en Jesús, para los escépticos, esas profecías no se escribieron después de su cumplimiento sino mucho antes y sino lean por favor (Mateo 2:3-6). Pero para aquellos que todavía dudan les mencionaré una profecía extraordinaria que todos pueden comprobar con sus propios ojos su cumplimiento actual, se encuentra en Isaías 13:19,20. Ahí en esencia se dice que Babilonia sería destruida y nunca más sería habitada.
Para aproximadamente el siglo II d.C. Babilonia se convirtió en un yermo desolado. Pero lo curioso del caso es que cerca del año 1978,79 Saddam Hussein intentó idear un macroproyecto que consistía en levantar de nuevo sobre las antiguas ruinas de Babilonia una nueva ciudad y hacerla habitable de nuevo. Pero ¿qué sucedió?, bueno algo sorprendente, Irak le declaró la guerra a Irán en 1980 guerra que duró 8 años por el control de la frontera y diferencias ideológicas que dejarían más de un millón de muertos, por lo que obviamente el proyecto se paralizó. Una vez acabada la guerra, se inició de nuevo ese proyecto pero poco después en enero de 1991 Irak (donde se encuentra la antigua Babilonia) fue invadida por las tropas norteamericanas y lógicamente de nuevo se paralizaron las obras. Pero si todavía había algún halo de esperanza de levantar de nuevo una “nueva Babilonia” este se desvaneció definitivamente en 2003 cuando el presidente del país y principal impulsor del proyecto Saddam Hussein fue apresado y ejecutado por el ejército norteamericano lo que selló para siempre esa idea pomposa puesto que como todos sabemos la actual Irak está destrozada y lo que menos importa ahora a la población e incluso a sus gobernantes es pensar en ese proyecto fallido, eso no es prioritario y posiblemente se deseche para siempre esa idea fastuosa y carísima que en la actuales circunstancias ni siquiera aflora en las mentes iraquies.
Es decir los hombres han intentando sin saberlo ni seguramente proponérselo lograr algo que podría haber hecho fracasar la profecía de la Biblia si finalmente se hubiera levantado sobre las antiguas ruinas de Babilonia una nueva ciudad habitable. Pero la profecía no fracasó, permanece intacta, inalterable lo que demuestra el poder infinito de Dios y que nadie puede impedir su cumplimiento. Bien, otro día mencionaré más detalles asombrosos que contiene la Biblia y que la ponen por encima de cualquier otro libro, pero eso será en otro “capítulo”.
Saludos.