Aunque etimológicamente “Biblia” hace referencia no a un libro solo, sino una “colección” de
libros, pero en esencia se trata de una sola obra: la inspiración de Dios.
Volviendo al título, ¿a qué me refiero con que siempre está abierto?
A mí entender, cuando uno lee un pasaje en la Biblia, más que cerrar cuestiones y ponerles un sello,
lo que en realidad sucede es que surge un mecanismo disparador que estimula la reflexión.
Estamos practicamente todos de acuerdo en el hecho de que la Biblia es enteramente inspirada por
Dios 2 Timoteo 3:16 (¿por qué “es” y no “fue”?)... pero entonces ¿cómo se explica que hayan
tantos desacuerdos entre las distintas interpretaciones, erigiéndose así barreras que impiden que las
personas se lleven bien? Concretamente, hay continuos ataques (afortunadamente verbales en su
mayoría) mutuos entre distintas denominaciones, que paradojicamente refieren sus argumentos a la
misma fuente: La Biblia. Enotnces, ¿quién tiene razón?
La Biblia es para todos, y gracias a Dios hoy contamos con la posibilidad de acceder a las Escrituras
a través de los diversos idiomas, de manera mucho mas fácil, algo que en la antigüedad estaba
reservado solo a un grupo selecto. ¿Qué mensaje esperamos encontrar cuando leemos la Biblia?
¿alguno que confirme que tenemos razón sobre un aspecto, o estaremos preparados para recibir un
mensaje que nos lance al desafío, a la reflexión, a inquietarnos, a movernos y seguir buscando
respuestas? La Biblia tiene respuestas, pero no solo respuestas; también plantea interrogantes que
nos llevan a reflexionar Hebreos 4:12. Es que también la Biblia denuncia injusticias cometidas por
los hombres al alejarse del propósito de Dios; por eso muchas veces su lectura es incómoda. Jesús
vino a tener una actitud que confirmaba a la Palabra Juan 1:1. Él también denunciaba las injusticias,
vino a estar del lado del oprimido y predicaba la buena noticia del amor de Dios; y ésto, a los
poderosos y gente que actuaba desconociendo a Dios, les resultaba incómodo y por eso “lo sacaron
del medio” Isaías 8:14-15.
Así como yo lo entiendo, la reflexión se dispara con la lectura de la Biblia, y no al revés. Es por eso
que entiendo a la Palabra de Dios como un elemento para el acercamiento de las personas entre sí y
hacia Dios 1 Jn 2.5; 1 Jn 4.12. Mayormente acudimos a las Escrituras en momentos de angustia, en
búsqueda de paz para el alma, pero ésa no es la única función de la Palabra de Dios; creo que
debemos entender una cosa: la Biblia no mantiene prisionera a nuestra fe, sino que mas bien
impulsa su crecimiento, le da libertad para su fortalecimiento, como la libertad que se le da al niño
para que juegue al aire libre y se fortalezca interactuando con la naturaleza.
Para concluir, creo que debemos dejar la Biblia abierta para atender sus consejos, escuchar sus
reprimendas, comprender su mensaje y su contexto para adaptarlo a nuestra situación.. Por eso
planteo la cuestión, y como se suele decir “la dejo picando” para que otros opinen.
Que tengan paz y bendiciones en Cristo.
libros, pero en esencia se trata de una sola obra: la inspiración de Dios.
Volviendo al título, ¿a qué me refiero con que siempre está abierto?
A mí entender, cuando uno lee un pasaje en la Biblia, más que cerrar cuestiones y ponerles un sello,
lo que en realidad sucede es que surge un mecanismo disparador que estimula la reflexión.
Estamos practicamente todos de acuerdo en el hecho de que la Biblia es enteramente inspirada por
Dios 2 Timoteo 3:16 (¿por qué “es” y no “fue”?)... pero entonces ¿cómo se explica que hayan
tantos desacuerdos entre las distintas interpretaciones, erigiéndose así barreras que impiden que las
personas se lleven bien? Concretamente, hay continuos ataques (afortunadamente verbales en su
mayoría) mutuos entre distintas denominaciones, que paradojicamente refieren sus argumentos a la
misma fuente: La Biblia. Enotnces, ¿quién tiene razón?
La Biblia es para todos, y gracias a Dios hoy contamos con la posibilidad de acceder a las Escrituras
a través de los diversos idiomas, de manera mucho mas fácil, algo que en la antigüedad estaba
reservado solo a un grupo selecto. ¿Qué mensaje esperamos encontrar cuando leemos la Biblia?
¿alguno que confirme que tenemos razón sobre un aspecto, o estaremos preparados para recibir un
mensaje que nos lance al desafío, a la reflexión, a inquietarnos, a movernos y seguir buscando
respuestas? La Biblia tiene respuestas, pero no solo respuestas; también plantea interrogantes que
nos llevan a reflexionar Hebreos 4:12. Es que también la Biblia denuncia injusticias cometidas por
los hombres al alejarse del propósito de Dios; por eso muchas veces su lectura es incómoda. Jesús
vino a tener una actitud que confirmaba a la Palabra Juan 1:1. Él también denunciaba las injusticias,
vino a estar del lado del oprimido y predicaba la buena noticia del amor de Dios; y ésto, a los
poderosos y gente que actuaba desconociendo a Dios, les resultaba incómodo y por eso “lo sacaron
del medio” Isaías 8:14-15.
Así como yo lo entiendo, la reflexión se dispara con la lectura de la Biblia, y no al revés. Es por eso
que entiendo a la Palabra de Dios como un elemento para el acercamiento de las personas entre sí y
hacia Dios 1 Jn 2.5; 1 Jn 4.12. Mayormente acudimos a las Escrituras en momentos de angustia, en
búsqueda de paz para el alma, pero ésa no es la única función de la Palabra de Dios; creo que
debemos entender una cosa: la Biblia no mantiene prisionera a nuestra fe, sino que mas bien
impulsa su crecimiento, le da libertad para su fortalecimiento, como la libertad que se le da al niño
para que juegue al aire libre y se fortalezca interactuando con la naturaleza.
Para concluir, creo que debemos dejar la Biblia abierta para atender sus consejos, escuchar sus
reprimendas, comprender su mensaje y su contexto para adaptarlo a nuestra situación.. Por eso
planteo la cuestión, y como se suele decir “la dejo picando” para que otros opinen.
Que tengan paz y bendiciones en Cristo.