[font=Arial, Helvetica, sans-serif]
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[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Es tarea de los humildes intercesores estar apostados como vigías a las puertas de la iglesia. Es responsabilidad de ellos hacer sonar la alarma cuando descubren a alguien que podría hacer daño a las ovejas. Por consiguiente, es vital que cada iglesia tenga un fuerte ministerio de intercesión, con el fin de evitar que el espíritu de Jezabel lleve a cabo su destructiva obra.
¿Cómo puede discernir un pastor quiénes son los verdaderos vigías? [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]En un episodio de la serie “Viaje a las Estrellas: Abismo Espacial 9”, titulada “El Paraíso perdido”, unos extraterrestres llamados metamorfos comienzan a infiltrarse en puestos clave de la flota. Estos extraterrestres habían adoptado formas humanas y tomado la apariencia de miembros confiables de la Federación. Su propósito era crear confusión y miedo en la Tierra.
Así como los metamorfos enviaron a sus agentes a sabotear la Federación, Satanás envía sus propias fuerzas de tinieblas para destruir la obra de la Iglesia. Estos agentes demoníacos pueden adoptar nuestra apariencia y hablar nuestro mismo idioma, pero son leales a otro reino.
Así como la Federación tuvo que aprender a discernir la presencia de los metamorfos, el cuerpo de Cristo debe aprender a identificar a los que están bajo la influencia de un espíritu de Jezabel. [/font]
[/font]De la misma manera, los verdaderos vigías pueden ser reconocidos por lo que tienen adentro. Hay varias formas en que se hace evidente su espíritu. Una forma es por medio de sus palabras. Jesús dijo: “Porque de la abundancia del corazón habla la boca. El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas” (Mateo 12:34-35).
Si existen tendencias jezabélicas en el corazón de un intercesor, serán reveladas, en última instancia, por sus palabras o por sus acciones. Muchas veces ellos siembran anarquía o división en una iglesia.
Pero un verdadero vigía no utiliza su posición para desafiar y desmerecer la autoridad pastoral. Por el contrario, el intercesor, humildemente, levanta al pastor pues ora por él. Además, el verdadero vigía de oración no busca autoridad para sí, sino ora por los que están en autoridad.
Otra manera en que puede identificarse a un verdadero vigía es por el fruto de su espíritu.
La Biblia define claramente cuál es el fruto del Espíritu: “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley” (Gálatas 5:22-23).
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Debemos observar para ver y conocer a los que trabajan entre nosotros. No podemos conocerlos solo de manera superficial, sino debemos conocerlos profundamente: lo que creen, lo que escuchan y lo que dicen cuando oran. [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]“O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol” (Mateo 12:33).
Un verdadero vigía se somete a la autoridad, mientras que alguien que está bajo la influencia de un espíritu de Jezabel usurpa la autoridad. En el mejor de los casos, el vigía que está sometido al Espíritu Santo tiene la misma actitud que David cuando servía a Saúl: una actitud de dominio propio y respeto por la autoridad elegida por Dios:
“Guárdeme Jehová de extender mi mano contra el ungido de Jehová” (1 Samuel 26:11a). [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Finalmente, la diferencia más obvia entre un verdadero vigía y una persona que está bajo la influencia de un espíritu de Jezabel, es la motivación, la fuerza que motiva sus acciones.
Un verdadero vigía está motivado por el amor en todo lo que hace. Al escribir su estudio sobre el amor, Pablo le ofreció a la iglesia de Corinto la siguiente pauta para distinguir a los obreros verdaderos de los falsos en el evangelio: “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta” (1 Corintios 13:4-7). [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Nuestro desafío en la actualidad
¿Cómo responderemos? ¿Reconoceremos y confrontaremos esta voz falsa y destructiva? ¿Solucionaremos los problemas propios que pueden cegarnos o motivarnos a reaccionar de manera exagerada?
Los pastores deben levantarse para liderar como Jesucristo, la brillante estrella de la mañana cuyo fulgor supera el de cualquier otro testimonio profético, y que destruye las obras del maligno.
El pastor y la iglesia que desean obedecer a Dios en este sentido recibirán un campo más amplio de autoridad. [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif][/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Recuerde: “Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará” (Deuteronomio 31:6).[/font]
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BENDICIONES
Profeta_Gio
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]JEZABEL EN LAS IGLESIAS[/font]
Es labor de los intercesores, vigilar el rebaño bajo la Uncion del Espiritu Santo
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[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Es tarea de los humildes intercesores estar apostados como vigías a las puertas de la iglesia. Es responsabilidad de ellos hacer sonar la alarma cuando descubren a alguien que podría hacer daño a las ovejas. Por consiguiente, es vital que cada iglesia tenga un fuerte ministerio de intercesión, con el fin de evitar que el espíritu de Jezabel lleve a cabo su destructiva obra.
¿Cómo puede discernir un pastor quiénes son los verdaderos vigías? [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]En un episodio de la serie “Viaje a las Estrellas: Abismo Espacial 9”, titulada “El Paraíso perdido”, unos extraterrestres llamados metamorfos comienzan a infiltrarse en puestos clave de la flota. Estos extraterrestres habían adoptado formas humanas y tomado la apariencia de miembros confiables de la Federación. Su propósito era crear confusión y miedo en la Tierra.
Así como los metamorfos enviaron a sus agentes a sabotear la Federación, Satanás envía sus propias fuerzas de tinieblas para destruir la obra de la Iglesia. Estos agentes demoníacos pueden adoptar nuestra apariencia y hablar nuestro mismo idioma, pero son leales a otro reino.
Así como la Federación tuvo que aprender a discernir la presencia de los metamorfos, el cuerpo de Cristo debe aprender a identificar a los que están bajo la influencia de un espíritu de Jezabel. [/font]
[/font]De la misma manera, los verdaderos vigías pueden ser reconocidos por lo que tienen adentro. Hay varias formas en que se hace evidente su espíritu. Una forma es por medio de sus palabras. Jesús dijo: “Porque de la abundancia del corazón habla la boca. El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas” (Mateo 12:34-35).
Si existen tendencias jezabélicas en el corazón de un intercesor, serán reveladas, en última instancia, por sus palabras o por sus acciones. Muchas veces ellos siembran anarquía o división en una iglesia.
Pero un verdadero vigía no utiliza su posición para desafiar y desmerecer la autoridad pastoral. Por el contrario, el intercesor, humildemente, levanta al pastor pues ora por él. Además, el verdadero vigía de oración no busca autoridad para sí, sino ora por los que están en autoridad.
Otra manera en que puede identificarse a un verdadero vigía es por el fruto de su espíritu.
La Biblia define claramente cuál es el fruto del Espíritu: “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley” (Gálatas 5:22-23).
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Debemos observar para ver y conocer a los que trabajan entre nosotros. No podemos conocerlos solo de manera superficial, sino debemos conocerlos profundamente: lo que creen, lo que escuchan y lo que dicen cuando oran. [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]“O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol” (Mateo 12:33).
Un verdadero vigía se somete a la autoridad, mientras que alguien que está bajo la influencia de un espíritu de Jezabel usurpa la autoridad. En el mejor de los casos, el vigía que está sometido al Espíritu Santo tiene la misma actitud que David cuando servía a Saúl: una actitud de dominio propio y respeto por la autoridad elegida por Dios:
“Guárdeme Jehová de extender mi mano contra el ungido de Jehová” (1 Samuel 26:11a). [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Finalmente, la diferencia más obvia entre un verdadero vigía y una persona que está bajo la influencia de un espíritu de Jezabel, es la motivación, la fuerza que motiva sus acciones.
Un verdadero vigía está motivado por el amor en todo lo que hace. Al escribir su estudio sobre el amor, Pablo le ofreció a la iglesia de Corinto la siguiente pauta para distinguir a los obreros verdaderos de los falsos en el evangelio: “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta” (1 Corintios 13:4-7). [/font]
[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Nuestro desafío en la actualidad
¿Cómo responderemos? ¿Reconoceremos y confrontaremos esta voz falsa y destructiva? ¿Solucionaremos los problemas propios que pueden cegarnos o motivarnos a reaccionar de manera exagerada?
Los pastores deben levantarse para liderar como Jesucristo, la brillante estrella de la mañana cuyo fulgor supera el de cualquier otro testimonio profético, y que destruye las obras del maligno.
El pastor y la iglesia que desean obedecer a Dios en este sentido recibirán un campo más amplio de autoridad. [/font]
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[font=Arial, Helvetica, sans-serif]Recuerde: “Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará” (Deuteronomio 31:6).[/font]
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BENDICIONES
Profeta_Gio